Jungkook.

Acababa de pasar el trapo en el suelo, me dolía bastante la cintura tanto como para casi estar viendo estrellitas, y anteriormente había estado limpiando el baño y la cocina.

En otras palabras, limpié la casa entera.

Mi hermano mayor, Taehyung, salió de su habitación. Por alguna razón miré sus tenis, eran los mismos con los que más temprano había entrado a la casa, tragué saliva. Antes le pedí, amablemente, que se colocara otros o que los limpiara, pues la suela tenía tierra seca y en partes restos de barro.

No me atreví a decirle nada cuando cruzamos miradas, no quería pelear.

-Taehyung hyung, ¿a donde irás ahora?-el se volteó a verme con una ceja alzada, para luego rodar los ojos.

Esos lindos ojos claros que tiene.

-No te debería interesar eso, rata de alcantarilla.

Me ha llamado de tal forma desde que tengo memoria, pero nunca me importó su desprecio.

Yo le tengo mucho cariño.

-Me dejará de interesar cuando sepa que tus grandiosos amigos no te dejarán tirado por ahí-y es que eso había pasado un par de veces ya, salían todos juntos y a mi querido hermanito lo dejaban solo una vez que se había tomado varios litros de alcohol y no sabía lo que hacía.

Esos, a mi parecer, no son amigos. Un amigo te quiere, te cuida y te respeta. Y ellos por poco y lo venden a un traficante de órganos.

Ahora el turno de rodar los ojos fue suyo-. Voy a la casa de Choi MinHo. No me llames a menos que se te haya prendido fuego la cocina-y sin esperar a que yo protestara por lo último dicho, con una sonrisa burlona, se fué, cerrando de un portazo.

Muy a mi pesar, confío en que Choi lo cuidará.

Soy un desastre a la hora de cocinar, eso es cierto. Desde que solo somos nosotros dos aprendí por mis propios métodos como cocinar al menos lo básico, cosa que él ni siquiera intentó hacer, a pesar de que Taehyung prefiera gastar dinero con el delivery.

Porque mi comida es fea, o eso dice él.

Suspiré, viendo todo el suelo sucio otra vez. Ya no volvería a limpiarlo, no señor, me moriría de dolor a penas si lo intentara. Además, no valía la pena hacerlo si Taehyung regresaba a la casa con los tenis sucios.

Tenía pensado no hacer nada lo que resta de la tarde al acabar con la limpieza, así que caminé hasta el refrigerador, abrí una caja de leche y me serví un vaso. Bien fria. Era la última caja.

-Tendré que ir al súper más tarde por más leche-hice una mueca, pues tenía flojera pero si yo no lo hacía, no iría nadie por mi.

Extraño a mamá y a papá, los extraño tanto.

Luego de haber guardado otra vez la caja en su lugar, fuí hasta el sofá de la sala y me senté allí. Bueno, hablando en serio, me tiré como una morsa en el viejo sofá haciéndolo crujir.

En cualquier momento esta cosa se parte al medio.

Prendí el tele, y el primer canal que apareció, era de noticias.
Cambié de canal, puesto que quería ver que había en los otros programas, pero hasta en paka-paka (un programa infantil) estaban pasando noticias y no me quedó de otra que dejarlo allí. Se me hacía verdaderamente raro.

«Noticia de último momento: Mil muertes misteriosas que resultaron no serlo.

En el día de la fecha se registraron un total de mil muertes entre adultos y jovenes, donde también médicos y enfermeras perdieron la vida, pero extrañamente al cabo de una hora, recobraron la habilidad de caminar, mover sus cuatro extremidades y principalmente sus mandíbulas.

Según la directora del hospital nacional de Busan, dichas personas presentaron manchas rojas y moradas en distintas partes del cuerpo alrededor de un día antes de sufrir la "transformación".

También se sabe que sólo basta que una... cosa de esas te muerda, una hora a tiempo de reloj, y serás parte de ellos. La-»

Y ahí recordé que tenemos Netflix Premium. Supuse que sólo decían eso para que el canal ganara más rating y que luego saldrían a decir que era todo una mentira y bla, bla, bla. Lo de siempre, pues ya había pasado una vez, y seguramente era lo mismo.

-La casa de papel o Triple frontera-susurré para mi mismo, dudaba entre ver una película o empezar una serie. En lo particular no solía ver series, las películas me atraían más por alguna razón.

Vacilé bastante rato hasta terminar dándole play a la película, y dejando la serie para verla con mi mejor amigo otro día.

Y hablando de él, ¿qué estará haciendo el desgraciado que no ha contestado mis mensajes desde hace días?

•.•.•

Me desperté a causa de gritos. Me restregué los ojos con el dorso de la mano derecha y solté un bostezo, para segundos luego reincorporarme y ver que película había dejado puesta cuando me dormí y cuál era el motivo de tan despavoridos alaridos.

Grande fue mi sorpresa cuando leí que en la pantalla del tele decía: "Ha ocurrido un error. Reinténtelo más tarde" indicando así que no había buena señal de Internet.

Tragué grueso, por que ahora que estaba más despierto, me di cuenta de que esos gritos estaban muy cerca de mi casa.

Con rapidez puse el cable otra vez, para ver las noticias. Confieso que estaba asustado, las manos me temblaban de una manera que había olvidado.

«Busan: descontrol total en las calles.

En las últimas dos horas todo ha empeorado. La gente corre por las calles buscando escapar de esos que hasta hace unas horas fueron personas normales.

Las autoridades están investigando que es lo que está ocurriendo y por qué, pero hasta el momento no se sabe con exactitud la razón de este brote "psicótico" o de extrema locura.

Por lo que se sabe, Busan es el único lugar donde esto está pasando por el momento.

Se recomienda no salir de sus casas, y mantenerse a resguardo hasta que el estado tome alguna medida.

¡Protejan a sus seres queridos!"

Seres queridos.

Y yo no podía pensar en nadie más como un ser querido.

-¡Taehyung hyung!