Idiota, idiota, idiota...

Así se sentía Jisoo. Se estaba preguntando una y otra vez como es que se le pudo pasar por la cabeza venir a confesarle a Lin que le gusta.

¿En qué cabeza cabe?

—Él es Taehyung... —dijo Lisa casi en un susurro al ver a Jisoo tener una lucha interna— Mi vecino y amigo...

—¿Ella es tu novia? —preguntó Taehyung escaneando a Jisoo con la mirada— Estoy seguro de que la he visto en el club al que voy de vez en cuando.

—Nosotros no...

—Sí, somos novios —interrumpió Jisoo con rapidez— ¿Verdad, caramelito?

—Eh... —Lisa se sintió confundida. Se suponía que solo eran novios de mentira— Sí...

—Un gusto, soy Kim Taehyung ¿Y usted? —se presentó haciendo una reverencia.

—Jisoo —respondió sin más colocando las manos en su cintura— El gusto es mío.

—Bien... creo que debería irme —Taehyung tomó una bolsa de frituras y caminó hasta la puerta— Con permiso... Me dio mucho gusto conocerla señorita y... Te veré luego Lin —se despidió.

Lisa siguió a Taehyung con la mirada hasta verlo desaparecer por la puerta, después dirigió su mirada a Jisoo quien mantenía la mandíbula tensa.

—Estás... ¿Estás molesta? —preguntó casi en un susurro.

—¿Por qué debería estarlo? —Jisoo se dio media vuelta y comenzó a caminar hasta donde hace unos momentos se encontraban Lin y Taehyung. Hizo una mueca al ver la bolsa de frituras y sodas que estaban sobre la mesita del centro— No puedes comer estas porquerías.

—¿Porquerías? —preguntó Lisa con el ceño fruncido— Solo son un par de frituras, nada más... ¿Estás segura que no estás molesta?

—¡Sí, maldición! —Jisoo levantó la voz haciendo a Lisa retroceder unos pasos— Tú me haces enojar, joder.

—¿Yo? ¿Pero yo que hice?

—Y todavía lo niegas, cínico — Jisoo caminó alrededor de la sala como si estuviese pensando en que decir— Responde algo, ¿ese tal Taehyung te gusta?

—¡¿Qué?! —Lisa abrió sus ojos con completa sorpresa. Taehyung no era feo, pero no era su tipo, además desde ayer se volvieron buenos amigos— Por supuesto que no... ¿Qué te hace pensar eso?

—¿Qué estaban haciendo antes de que yo llegara? —cuestionó.

—Eh... Nosotros veíamos un drama...

—¿Un drama? —Jisoo respiró hondo y se pasó la mano por el cabello— Más gay no pueden ser.

—Taehyung no es gay —contestó Lisa enseguida— Te estás haciendo ideas equivocadas, él solo es un buen amigo, lo juro... Lo conocí ayer, estuvimos viendo dramas hasta tarde junto con Chaeyoung —añadió.

—Vale, no me importa, solo te prohíbo esa relación.

—¿Perdón?

—Ya lo oíste, dijo que me conoce del club, no voy a arriesgarme a que difunda que lo nuestro es una farsa y todo se vaya al carajo —contestó Jisoo con cierto enojo en su voz— Si quieres conservar su "amistad" entonces más te vale que él piense que de verdad estamos saliendo.

—P-pero...

—¡Pero nada! —Jisoo sacó unas gafas de sol de su bolso y se dispuso a caminar hasta la salida— Me voy.

—Ah no, tú no te vas hasta que me digas por qué estás molesta —Lisa la detuvo del brazo antes de que pudiera seguir avanzando— Responde Jisoo, ¿qué te hizo enojar tanto? ¿Acaso de verdad estás celosa? ¿yo te gusto? Dime —Jisoo se tensó sin pronunciar palabra alguna— El que calla, otorga...

—Pero que tontería estás diciendo Lin —Jisoo se soltó de su agarre bruscamente— Te he repetido hasta el cansancio que los hombres no me van, los odio y tú no eres la excepción.

—No parecías odiarme cuando estabas sentada sobre mi devorándome la boca —murmuró Lisa sintiendo un escalofrío recorrer su cuerpo. Sabía que estaba pisando terreno peligroso, pero ya no había vuelta atrás— Parecía que te gustaba.

—He estudiado actuación querido, eso no fue real, eso fue actuado... —respondió Jisoo dispuesta a salir de ahí cuanto antes— Ahora si me disculpas, tengo cosas que hacer.

—Un momento Jisoo —Lisa se interpuso al frente impidiéndole el paso— Ya que me has prohibido tener un romance con Taehyung... —se acercó peligrosamente a ella— Al menos cumple tus obligaciones como novia falsa.

—¿A qué te refieres? —preguntó sintiendo como Lin envolvía su brazos sobre su cintura— A-aléjate...

—¿Por qué? —Lisa la pegó a su cuerpo sintiendo a Jisoo estremecer— ¿Por qué quieres que me aleje?

—I-idiota... —musitó Jisoo sintiendo sus piernas flaquear ante la cercanía de Lin— Suéltame ya...

—Lo haré, pero antes... —Lisa capturó el labio inferior de Jisoo sobre los suyos.

—No... —Jisoo la empujó con sus manos— No hagas eso... —Lisa ignoró sus súplicas y la acercó posando una mano en su cintura y otra tras su cabeza.

—No puedes venir a mi departamento y prohibirme liarme a alguien a quien ya le había echado el ojo —mintió Lisa descaradamente— Soy un hombre Jisoo y tengo mis necesidades —Lisa la apretó de la cintura sintiendo a Jisoo temblar— Ya que no puedo estar con nadie más, entonces tendrás que ayudarme a satisfacerme.

—Y-yo... nunca dije que no podías estar con nadie más —murmuró Jisoo sintiendo su corazón latir con frenesí— Suéltame ahora mismo... Te lo ordeno.

—¡Tú no me mandas! —la retó Lisa— En estos momentos mando yo —Lisa volvió a besarla con ímpetu moviendo su cabeza a un lado para profundizar el beso. Se sentía enloquecer, su corazón latía como un loco, el aroma de Jisoo la embriagaba por completo y le nublaba los sentidos.

¿Qué me está pasando?

Los besos nunca se habían sentido tan bien, Lisa jamás había deseado tanto unos labios como los de Jisoo y eso la aterraba.

Comenzó a ralentizar el beso hasta que sintió una fuerte mordida en su labio inferior.

—¡Mierda...! —Lisa se alejó y llevó su mano a su boca notando un color rojizo en la punta de sus dedos— ¡¿Qué demonios te pasa?! ¡Estás loca!

—¿Qué? ¿No te gustó? —preguntó Jisoo con malicia limpiando la comisura de su boca con sus dedos— Eso es solo para que aprendas a que la única que manda soy yo.

—Loca... —murmuró Lisa reprimiendo una lágrima debido al ardor en su labio— Estás loca...

—Loca pero no de tu manicomio, bebé —Jisoo le guiñó el ojo con burla y caminó hasta la puerta— Nos vemos después caramelito... —hizo una pausa antes de salir— Ah y ponte algo de hielo ahí o te quedará una horrible marca, y no queremos eso ¿Verdad?

—¡Largo de aquí! —gritó Lisa con los puños cerrados y comenzó a dar fuertes pisadas luego de que Jisoo se marchara— Mierda, mierda, mierda... —se tiró al piso y comenzó a rodar como si de una niña se tratase— ¡Duele! ¿Pero quién demonios me manda a besarla? ¿Por qué lo hice? ¡¿Por qué?!

[💫]

—¿Te ha gustado como quedó? —preguntó Roseanne envolviendo los brazos alrededor de Jennie— A mí me ha encantado, se ve maravilloso...

—No puedo creer que yo haya sido participe de este dibujo tan bello...

—Eres genial Jennie, lo has hecho fenomenal —murmuró Roseanne con sinceridad— Me dijiste que no sabías nada de pintura ni de dibujo... Comienzo a pensar que me mentiste.

—Te juro que nunca antes había sostenido una brocha de pintura sobre mis manos —contestó Jennie maravillada observando nuevamente el mural— Me ha encantado Chaeyoung, gracias...

—¿Por qué me das las gracias? —preguntó Roseanne dejando que Jennie se diera vuelta para poder mirarla— No he hecho nada...

—Sí lo has hecho... —Jennie reunió el valor suficiente para tomar las manos de Chaeyoung— Gracias a ti he descubierto algo nuevo que me gusta hacer.

—Pero antes ya me habías dicho que tú querías hacer esto...

—Sí, pero nunca lo hubiera hecho si no me hubieses traído hasta aquí —confesó con las mejillas sonrojadas— Ahora tengo otro hobby aparte de la lectura.

—A mí me encanta leer...

—¿Lo dices en serio? —preguntó Jennie con los ojos brillantes.

No puedes ser más perfecto...

—Sí, me encanta leer y escribir también —agregó Roseanne mostrando su encantadora sonrisa— Tienes que recomendarme libros nuevos para leer y si gustas yo también puedo recomendarte algunos...

—Me encantaría —contestó Jennie inmediatamente— Mis amigas no son mucho de leer, siempre he querido tener a alguien con quien compartir acerca de mis libros...

—Yo creo que ya has encontrado a ese alguien —Roseanne acarició la mejilla de Jennie con dulzura— Jennie... sé que te conozco desde ayer y que tal vez esto pueda sonarte a una locura pero... Me gustas.

—Chaeng...

—No digas nada, sé perfectamente que esto va muy rápido... Pero yo suelo ser muy sincero cuando se trata de mis sentimientos —Roseanne posicionó sus temblorosas manos sobre la cintura de Jennie— Me interesas, quiero que sepas que voy a esforzarme cada día por que tú me aceptes en tu vida como algo más que un amigo...

—Yo... No sé qué decir —titubeó Jennie con las mejillas coloradas— Tengo mucha vergüenza en este momento... —intentó bajar la mirada pero Chaeyoung la tomó de la barbilla con suavidad.

—No bajes la mirada, linda... Mírame —Roseanne se sintió el ser más miserable del mundo por engañar a Jennie de esa forma... Pero no tenía opción, no la tenía— Me gustas porque eres una chica con muchas cualidades, con aspiraciones de salir adelante, eres amante de la lectura, pintas fenomenal y por si fuera poco eres tan bonita...

—No soy bonita...

—Lo eres Jennie, ante mis ojos eres la chica más hermosa que mis ojos hayan visto...

Y no mentía.

—Chaeng... No me digas esas cosas, me pones muy nerviosa —Jennie se abrazó de Chaeyoung para poder ocultar su rostro— Si de confesiones se trata... Yo también quiero decirte que eres el primer chico desde hace mucho tiempo que me hace sentir especial...

—Tú también me haces sentir especial —Roseanne la abrazó más fuerte contra su pecho— Muy especial...

—Parece como un sueño —Jennie se despegó lentamente de Chaeyoung para depositar un beso en su mejilla— Quiero conocerte más...

—Nos conoceremos todo lo que tú quieras —Roseanne besó las dos manos de Jennie— Tus manos son tan suaves...

—Las tuyas también lo son... —Jennie les prestó atención a las manos de Chaeyoung y luego a su rostro— Eres... Eres muy lindo. Seguramente debes traer a muchas chicas tras tuyo.

—No lo creo —contestó Roseanne con una sonrisa ladina— Pero tú si tienes a varios tras de ti, comenzando por tu guardaespaldas...

—¿Quién? ¿Jinhwan? —Jennie soltó una carcajada— Él y yo somos buenos amigos, nada más.

—A mí no me ha parecido eso, cuando llegué a tu casa los vi tan juntos que por un momento pensé que tú y él... —Roseanne hizo un mohín— Ya sabes, que ustedes tienen un romance como en las novelas... He leído varias historias en donde los guardaespaldas se enamoran de...

—Entre Jinhwan y yo solo hay una bonita amistad, ¿me crees? —preguntó Jennie con la mirada fija en Chaeyoung— Jinhwan no me gusta de esa forma...

— ¿Y yo? —Roseanne se acercó peligrosamente hasta rozar su nariz con la de Jennie— ¿Te gusto aunque sea un poquito?

— Tal vez —murmuró Jennie dando media vuelta para huir de Chaeyoung— Me ha encantado pasar la tarde contigo, también me gustaron los tulipanes que me regalaste, están preciosos —cambió de tema.

—Me alegra que te hayan gustado —Roseanne sonrió con orgullo— Por cierto... Me gustaría ir al cine contigo, no sé si realmente acostumbres ir a esos lugares, pero he visto una película en cartelera que ésta muy buena y... Me encantaría que me acompañes. Si quieres... Si no, no hay problema.

—¡Por supuesto que quiero Chaeyoung! Tengo años de no ir al cine —mencionó Jennie con emoción— Recuerdo que la última vez que fui fue con mi hermana Jisoo.

—Se me hace ocurrido una idea...

—¿De qué se trata? —preguntó Jennie con curiosidad.

—Una cita doble. Tú, yo... tu hermana Jisoo y mi hermano Lin ¿qué dices?

—Me parece una idea estupenda —asintió Jennie con la cabeza— Tú le avisas a tu hermano y yo le aviso a Jisoo, ¿te parece?

—Me parece perfecto —contestó Roseanne.

[💫]

—¿Tiene algún problema señorita? —preguntó Dae Sung al ver la mirada perdida de Jisoo en el asiento trasero.

—No es de tu incumbencia —respondió Jisoo tajante— Tú solo limítate a cumplir con tus obligaciones, que para eso te pagan.

—Solo trato de ser amable, no entiendo porque me trata así —contestó Dae con molestia— Y para su información, eso es lo que estoy haciendo, me pagan por velar por su seguridad.

—Como sea, solo guarda silencio y sigue conduciendo —Jisoo sacó su teléfono para buscar en que entretenerse.

—Cuando salimos de su casa estaba realmente feliz y cuando salió de ese departamento se veía... ¿Mal? ¿Decaída?

—No es algo que te interese.

—Puede contarme...

—Eres mi guardaespaldas no mi maldito psicólogo —bramó Jisoo con la poca paciencia que le quedaba — No me lleves a casa, cambio de planes, llévame a casa de Tzuyu.

—¿Otra fiesta? —preguntó Dae mirando de reojo por el espejo retrovisor la cara de enfado de Jisoo — Bien... a casa de la señorita Tzuyu será.

En lo que restaba de camino Jisoo prefirió colocarse sus auriculares para evitar tener que oír los estúpidos comentarios de su guardaespaldas.

Al llegar fue recibida por la empleada de servicio de la casa de Tzuyu quien le otorgó el paso a hasta su habitación. Necesitaba con urgencia hablar con alguien acerca de sus sentimientos, es por ello que en el camino le envió un mensaje a Jisoo para que se reunieran en la casa de Tzuyu.

—Tzuyu... —Jisoo abrió la puerta sin permiso encontrándose con la imagen de Tzuyu durmiendo plácidamente con una caja de galletas sobre su regazo— No sé porque no me sorprende...

—¿Mmmh..? —Tzuyu murmuró dándose vuelta en la cama derramando sus galletas.

—Que desastre...

—¡Ya estoy aquí! —gritó Seulgi entrando en la habitación — ¡Oh Dios!

—¡¿Eh?! —Tzuyu despertó asustada viendo a sus dos amigas observarla— ¿Q-qué hacen aquí? ¿Quién las dejó pasar?

—Nosotras no necesitamos permiso para entrar —comentó Seulgi sentándose sobre la orilla de la cama— Vine porque Jisoo me llamó y aquí estoy, ¿qué sucede?

—Sí... ¿Qué sucede Jisoo? Acabo de dejarte en tu casa hace aproximadamente dos horas y ya estás aquí de vuelta —dijo Tzuyu sacudiéndose el regazo lleno de galletas— ¿Qué pasa?

—Chicas... —Jisoo suspiró pesadamente peinando su cabello hacia atrás— Bien, no sé cómo decirles, es que estoy confundida...

—¿Tú entiendes? Porque yo no entiendo —susurró Seulgi dirigiéndose a Tzuyu quién negó con la cabeza— A ver, sé más clara, por favor.

—Creo que me gusta alguien —confesó Jisoo apretando sus ojos sintiendo sus mejillas sonrojarse— Me gusta alguien... —afirmó.

—¿Quién es ella? —preguntó Tzuyu con curiosidad. Jisoo no era del tipo de chica que confiesa sentirse atraída por alguien— Habla... Me tienes en ascuas.

—Déjame adivinar... ¿Joy? —preguntó Seulgi— ¿Yerin? ¿Yuqi? ¿Elkie? ¿No? Me rindo...

—No es una mujer —agregó Jisoo con la mirada baja.

—¿Cómo? —Tzuyu se puso de pie y caminó hasta quedar frente a Jisoo— A ti te gusta un... ¿Un chico?

—Qué barbaridad —dijo Jisoo cubriéndose la boca con sorpresa— Esto sí que es nuevo, creí nos habías repetido hasta el cansancio que los hombres no eran para ti... Supongo que al final tu padre tuvo razón y solo se trataba de una etapa...

—¡No! No es una etapa... —chilló Jisoo corriendo a lanzarse a la cama de Tzuyu— Los hombres no me gustan, es solo que.... Con él es diferente, no sé.

—¿Quién es? ¿A caso es el chico con el que estabas molesta porque inventó el rumor de que ustedes salían? —preguntó Tzuyu— Si no es él, ¿entonces quién?

—Park Lin... —murmuró Jisoo con la cara hundida en la almohada.

—¿Park Lin? No he oído nunca de él —comentó Jisoo— ¿Al menos es guapo?

—Es jodidamente lindo —confesó Jisoo dejando al descubierto su cara— Es mi novio...

—¡¿Qué?! —gritaron sus dos amigas a la par.

—Park Lin es mi novio —repitió— Mi novio de mentiras...

—¿Desde cuándo? ¿Por qué no me habías contado? ¿A caso esa era la razón por la que te pasaste de copas ayer? —Tzuyu la inundó con preguntas que Jisoo no sabía cómo responder— ¿Por qué es tu novio de mentiras? No entiendo, explícame...

—No hay mucho que explicar... Yo necesitaba un novio falso para que mi padre dejara de molestar y él también necesitaba de una novia falsa para ocultar las apariencias.

—¿Ocultar las apariencias? —preguntó Jisoo con confusión.

—Lin es gay.

—Increíble Jisoo, nunca te enamoras de un chico y ahora que lo haces... Resulta que él chico es gay —se burló Tzuyu tratando de reprimir su risa— Eso si es tener mala suerte.

—Nunca dije que estuviera enamorada...

—El primer pasó es la negación —dijo Seulgi— Y Tzuyu, deja de burlarte de ella, no es gracioso, tan solo mírala... Está sufriendo por un amor no correspondido.

—No estoy sufriendo —murmuró Jisoo— Solo estoy confundida...

—Quiero conocerlo, Jisoo, llévame a verlo, por favor... —suplicó Tzuyu— Quizás él pueda curar mi problema de lesbianismo así como lo hizo contigo —bromeó ganándose un golpe de parte de Jisoo— Ouch... Que agresiva eres.

—No les estoy contando todo esto para que se burlen de mi —dijo evidentemente molesta— Solo quería desahogarme, es todo. Olviden el tema, ya se me pasará.

—Lo que dije sobre conocer a Lin era cierto... —comentó Tzuyu con timidez— Solo quiero verlo, tengo curiosidad, ¿Tú no, Seulgi?

—Sí la tengo —confesó Seulgi— Pero si Jisoo no se siente preparada, entonces debes comprenderla.

—Al fin un comentario sensato —agradeció Jisoo sintiendo su móvil vibrar mostrando un mensaje de Jennie.

Jennie

Jisoo, no hagas planes para hoy en la noche, tengo algo preparado para nosotras.
[5:04pm]