Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 8: El trato

LADO B: JAMIE

Después del stream, decidimos ir a un bar a unas pocas calles del estudio para celebrar el crecimiento explosivo de nuestros seguidores. Las chicas estaban locas con nosotros, y no era difícil entender por qué. En este mundo, el primer paso para ser una estrella es tener una buena cara. ¿Había espacio para alguien no agraciado? En la actualidad, no.

Benicio, sin embargo, seguía siendo un caso aparte. Todo el tiempo se negaba a exponerse ante el público. "Solo soy un guitarrista", decía, subestimando sus propios privilegios. Pero con la noticia de que estaríamos en Alternox, era hora de hacer ruido.

—Siguen subiendo —comenté, revisando las notificaciones en mi teléfono. Los seguidores se multiplicaban en nuestras cuentas personales y las de la banda—. Deberías leer los mensajes, les gustaste a todos.

Benny bebía una cerveza en silencio, la guitarra colgada en su espalda como un escudo. Fleur reía a carcajadas con sus compañeros del programa, y cuando ellos se alejaron, él me habló.

—Emma fue despedida de su trabajo —dijo, y me quedé boquiabierto—. ¿Sabes de algo para ayudarla?

Mi día no podía mejorar más. La suerte estaba de mi lado. Esa mañana había registrado sus canciones a mi nombre, un movimiento que no podía justificar del todo, salvo por los beneficios que sabía que traería. Pero si Emma necesitaba ayuda, esto abría la puerta a un plan perfecto. Solo me había adelantado unos pasos.

—Tengo un empleo para ella —dije con confianza.

—¿Qué? ¿En serio? —preguntó Benny, sorprendido.

—Estoy dejando mi puesto en Deadrops —respondí con naturalidad—. Seguiré con las ilustraciones, pero necesito alguien que se encargue de las ventas online.

Por primera vez en el día, Benny sonrió de verdad.

—Gracias, amigo —dijo, relajado—. No le digas a Fleur que te pedí esto. Vic ha estado demasiado sola estos días, y Emma le hace bien. No quiero que termine aislada.

—Eres un buen hermano —le dije, dándole una palmada en el hombro—, pero también deberías disfrutar más. ¡Vamos a tocar en Alternox con Billy Mason!

—Todavía no lo creo —admitió Benny, frotándose el rostro—. Todo está pasando demasiado rápido.

—Trabajamos por esto durante dos años. Es hora de disfrutar los frutos.



Al día siguiente, Emma me miraba con incredulidad. Nos habíamos reunido en el patio central de su edificio, bajo la sombra de unos árboles escuálidos.

—Jamie, esto es el triple de lo que me pagaban en el mercado —dijo, su rostro pálido por la sorpresa—. No puedo aceptarlo.

—Es lo justo —respondí con seriedad—. Nadie tiene derecho a explotarte. Deberías haberlos denunciado.

Ella sonrió, esquivando mi mirada.

—¿De qué se trata el trabajo?

—Ventas online y control de stock. La oficina está en el centro, son cinco días a la semana por la mañana.

—¿Solo por la mañana?

Sabía que esa pregunta venía.

—Por la tarde, necesito que me ayudes a componer canciones —dije, dejando caer la bomba con una sonrisa.

Sus ojos brillaron y sus mejillas se tiñeron de rojo. Sabía que no podría negarse.

—No soy tan buena... —murmuró, incómoda.

—Eres buena —afirmé con solidez—. El sueldo es por el trabajo en Deadrops. Lo de componer es como un favor entre amigos.

Emma suspiró, rendida.

—Lo intentaré.

Eso era todo lo que necesitaba. La abracé con fuerza, notando cómo su cuerpo de carne blanda se tensaba antes de relajarse. Sabía que debía tener cuidado. Emma podría interpretar mi amabilidad de formas equivocadas, pero tenía claro cómo mantener las cosas bajo control.



Esa tarde, me invitó a su casa para explicarle mejor el trabajo. El departamento estaba en un edificio viejo y mal mantenido, con muros que suplicaban una mano de pintura. Su madre, Cleo, nos recibió antes de irse al trabajo. Era una mujer joven, más parecida a una hermana mayor que a una madre, usaba el cabello negro recogido y a diferencia de Emma su piel era un tono más oscuro.

Una vez solos, Emma preparó algo para tomar mientras yo curioseaba el lugar. Su habitación llamó mi atención, con esas luces navideñas parpadeando en el espejo. Todo en ella era un reflejo de su personalidad.

El ambiente olía a una mezcla dulce de miel, vainilla y limón, a lo mejor de su jabón o suavizante. Su cama, pequeña y cubierta con un edredón rosado, estaba rodeada de libros y cuadernos llenos de letras de canciones. En un rincón, su escritorio rebosaba con lápices, hojas desordenadas y una computadora portátil cubierta de pegatinas.

Las paredes, pintadas de un color suave y neutro, estaban llenas de vida. Estanterías repletas de libros se alzaban junto al escritorio, algunos alineados con precisión, otros apilados de forma irregular.

Aunque el espacio era limitado, Emma lo había llenado con su esencia, podía entender lo inspirador que era estar allí. Era como una cápsula de protección mágica, sin embargo, algo allí estaba fuera de lugar, desencajando con toda la estética romántica.

—No puede ser... —murmuré, levantándola con cuidado.

—¡Jamie! —exclamó Emma desde la puerta, nerviosa.

—Es la guitarra de Billy Mason —dije, seguro.

—¡Es una réplica! —respondió rápido, quitándomela de las manos—. Es de mi madre. Tiene valor sentimental.

Pero yo sabía que no era una réplica. Esa guitarra era única.

—¿Cleo conoció a Billy? —pregunté, sintiendo que estaba cerca de algo grande.

Emma negó sacudiendo su cabeza, evitando mi mirada.

—No... no lo conoció —balbuceó, cambiando de tema—. ¿Me explicas lo del software de stock?

Pero su nerviosismo la traicionaba. Esa guitarra escondía una historia, y no descansaría hasta descubrirla. Por ahora, tendría que jugar mis cartas con cuidado. Emma era mi llave para abrir muchas puertas, y esta era solo la primera.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro