capítulo 14
ZION
Escucho ruidos detrás de mí. Me volteo, intentando ver si hay alguien más aquí. Del otro lado de la sala sólo existe la oscuridad. Noto movimientos lentos y elegantes. Camina con una calma aterradora. Una figura masculina deja de esconderse en las sombras y viene a mi posición.
Lo reconozco enseguida. Trago saliva. Es entonces cuando entiendo que todo estaba planeado para que yo viniera al museo. Aquellas personas en el parque... Fue para llamar mi atención. Y yo había caído directo en la trampa. ¿Cómo pude no sospechar?
Fue un poco estúpido de mi parte.
—Por fin nos encontramos cara a cara, Zion Shepherd.
La voz se escucha distorsionada. Usa algo para que sea imposible reconocer su voz. Me fijo en su vestimenta. Está vestido de negro completamente, su rostro está oculto bajo un pasamontañas con dos pedazos de tela negra que impide ver sus ojos, no tiene un agujero en la parte de la boca. Es imposible reconocerlo por la cara. Lleva guantes de cuero. Es inteligente, nunca lo atraparían al no ser que él quiera ser atrapado.
—¿Qué tienes en mi contra? —pregunté, dando pasos hacia atrás.
Estaba realmente asustado. Tener a The Black Cat frente a mí con todo en mi contra es algo para lo que no me preparé. Confiaba en mis guardias y ellos me traicionaron.
Esto es muy malo.
—¿En tu contra? No es eso lo que deberías preguntar —explicó.
—Entonces, ¿qué?
—Tú eres mi pase para obtener lo que quiero.
—¿Es dinero? Puedo darte mucho si es lo que quieres —murmuré en un intento de escapar de esto.
—Lo sé, por eso vendrás conmigo.
Comenzó a sacar algo de un bolsillo de su pantalón. Me puse a la defensiva y me preparé para cualquier cosa que viniera. Se abalanzó sobre mí y noté que es muy ligero, sin embargo, yo soy más fuerte que él. Hubo forcejeo por un par de minutos, sacó un pañuelo humedecido con una sustancia extraña.
Un fuerte golpe de su puño estampado en mi nariz me hizo soltar un quejido y dar unos pasos hacia atrás. Estoy sangrando y duele como el demonio.
—No te resistas, Zion —dijo con una calma inquietante mientras se acercaba de nuevo—. Esto será más fácil si simplemente te dejas llevar.
Tengo que hacer algo, no puedo simplemente dejar que me lleve.
A pesar de mi miedo, la rabia comenzó a burbujear dentro de mí. No podía dejar que me atrapara. Luché con todas mis fuerzas, lanzando un golpe hacia su mandíbula. Pero, él lo esquivó con un giro rápido y antes de que pudiera reaccionar sentí su mano en mi muñeca.
Me retorcí, intentando liberarme, pero su agarre era firme. La oscuridad a nuestro alrededor parecía cerrarse, y el sonido de mi respiración se volvió ensordecedor. En un instante, me empujó hacia atrás, haciéndome chocar contra una de las vitrinas del museo. El cristal crujió, y el eco resonó en la sala vacía.
—Eres más fuerte de lo que pensaba —murmuró—. Pero eso no cambiará el resultado.
De repente, acercó a mi cara el pañuelo humedecido. El olor era penetrante, una mezcla extraña de químicos que me hizo sentir mareado. Intenté apartarme, pero él fue más rápido. Me cubrió la boca y la nariz con el cuadrado de tela, y sentí cómo la sustancia penetraba en mis pulmones.
Maldita sea.
El mundo comenzó a girar a mi alrededor. Mis piernas flaquearon y la visión se me nubló. La desesperación se transformó en pánico mientras luchaba por respirar, aunque era inútil.
Mi cuerpo se dejó caer, y en un último intento por resistir, intenté golpearlo nuevamente, sin embargo, mis movimientos eran torpes y pesados. The Black Cat mantuvo su agarre firme mientras yo luchaba contra el abrazo de la inconsciencia.
—Dulces sueños, Zion —susurró mientras mi visión se desvanecía por completo.
Y entonces todo se volvió negro.
La última imagen que retuve fue la de su figura oscura, erguida y triunfante sobre mí, como un cazador que había atrapado a su presa.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro