once: ¿justos o no?
NO SE OLVIDEN DE VOTAR Y/O COMENTAR xoxo
CAPITULO ONCE: ¿JUSTOS O NO?
—— SI ALGO NOS PASA, SERA TU CULPA.
Suspiró y se giró a observarla, detrás de ella, Grover la seguía con desconfianza.
—— Nada malo va a pasar. —— aseguró.
Los dos lo observaron incrédulos. No le creían ni una palabra.
—— Si sobrevives y yo no, juro que mi alma te perseguirá y no tendrás un segundo de paz todo lo que reste de tu mediocre vida. —— juró la rubia cruzándose de brazos.
—— No sería muy distinto a lo que es ahora.
Lo miró de mala gana y él le regalo una pequeña sonrisa.
Siguió caminando con ellos detrás, al llegar al comedor, una mesa grande se encontraba repleta de cosas dulces haciendo a su estómago rugir.
—— Deben tener hambre. —— se escuchó a la lejanía. —— Deje algunos bocadillos mientras preparó algo más nutritivo.
Se observaron entre los tres.
—— ¿creen que sea seguro?. —— preguntó.
—— Percy, no voy a mentir, tengo mucha hambre y estoy listo para correr el riesgo. —— contestó Grover y Maliah asintió.
—— Al menos moriremos felices ¿no?
—— Deja de bromear con la muerte, Maliah.
—— ¿quién dice que estoy bromeando?
La observó con una mueca hasta que dirigió la mirada hacia Annabeth, haciendo que la rubia se volteara rápidamente.
—— Gracias por venir. —— pronunció y notó la incomodidad en su mirada.
—— No es lo mismo para mí que para ustedes. —— contestó.
—— ¿por qué?
—— ¿te preocupa que te guarde rencor por ser hija de Atenea?. —— preguntó Medusa entrando a la habitación haciendo que corrieran la mirada rápidamente hacia un lado.
—— No te preocupes, no somos nuestros padres después de todo. —— prosiguió mientras la escuchaba servir algo. —— Quizá tengamos más cosas en común de lo que crees. Por favor, siéntense y coman.
Observó a Maliah, quien asintió con la cabeza y los tres se sentaron, menos Annabeth que los observaba con fastidio desde la punta.
—— Entonces.... —— habló llamando su atención. —— Si no eres un monstruo ¿qué eres?
—— Una sobreviviente.
—— Debes ser algo más que eso. —— murmuró pasandole la azúcar a Maliah. —— Hay una furia afuera que parece tenerte terror.
—— Porque sabe lo que pienso de ella. —— contestó suavemente. —— No me gustan los hostigadores, cuando uno aparece en mi puerta termina ahí por mucho tiempo. El regalo que me dieron los dioses es que nadie me puede volver a intimidar.
—— Lo que mi madre le hizo no fue un regalo, fue una maldición. —— dijo Annabeth rápidamente y pudo escuchar a la rubia suspirar pesadamente a su lado.
—— Eres leal a tu madre.
—— Si. —— contestó la morena con molestia.
—— Como no tienes una idea. —— murmuró Maliah, pero pudo notar el pequeño reproche en su voz.
La observó con el ceño fruncido.
—— ¿la apoyas?. —— volvió interrogarla mientras Annabeth fruncía el ceño.
—— Siempre.
—— ¿la amas?
—— Claro que si.
—— Y yo tambien la amaba. También la amaba. —— admitió, pero pudo notar el pequeño tono de resentimiento. —— ¿conoces la historia de cómo llegué a ser así?
—— Yo si. —— dijeron Maliah y Grover al mismo tiempo.
—— ¿si?. —— preguntó intrigada.
Annabeth los observo a ambos seriamente.
—— ¿lo hago?. —— preguntó Grover confundido.
—— Mamá me la contó. —— dijo la ojiverde. —— Es trágica. Ella te amaba.
La observó fijamente y pudo notar como una oleada de tristeza inundaba su rostro. Frunció el ceño nuevamente.
—— Atenea era todo para mí. —— explicó Medusa suavemente. —— La amaba, la alababa, le hacía ofrendas...nunca respondió.
—— No me sorprende. —— la escuchó susurrar con molestia y notó la mala mirada que Annabeth le lanzó.
—— No era como tu, cariño, yo era tú. —— continuó contando. —— La hubiera adorado toda mi vida en silencio. Pero un día, vino otro Dios y rompió ese silencio...
—— Poseidón. —— concluyó Maliah. —— Él te quería, o al menos eso pensabas, pero...
El silencio no tardó en aparecer, la observó con confusión, pero ella no lo observaba.
—— Si... —— murmuró Meduda casi en un susurro. —— Senti él me observaba de una forma que nadie lo había hecho antes. Pero luego Atenea declaró que yo la había ofendido y que debía castigarme. No a él....a mi.
El tono decepcionante llamó su atención, sacándole por completo el apetito, pero al observar a la ojiverde, se dio cuenta que no era el único que se sentía igual.
—— Decidio que ya no podría ser vista por quien viviera para contar la historia.—— finalizó.
—— Eso no fue lo que sucedió. —— objeto Annabeth rápidamente.
El silencio no tardó en aparecer.
—— ¿quién te lo dijo? ¿tu madre?. —— preguntó Maliah observándola.
—— Mi madre es justa, siempre. —— contestó la morena cruzándose de brazos.
—— Si, lo es, todos los dioses lo son ¿no es así?.
—— Maliah. —— murmuró Grover casi suplicante.
—— No, cállate. —— mandó con molestia. —— Tu madre te invento un cuento y tu te lo creiste.
—— Mi madre no es una mentirosa, ella si lo es y tu estás cayendo en sus mentiras —— contraatacó la morena con enojo.
—— No es así, solo quieres creer eso para no perder la imagen perfecta que tienes de tu mami —— acusó y ella frunció el ceño.
—— Maliah detente. —— habló Percy mientras observaba como la morena enfurecía ante sus palabras.
—— ¿detenerme?
—— Estas siendo cruel con Annabeth.
—— ¿yo estoy siendo cruel?, ¿te recuerdo quién fue quien la que nos llevó directo a Clarisse? ¡si! ¡ella! Y nunca pidió una disculpa por eso. Casi nos mata.
—— Ella no iba a matarlos. ——aseguró rápidamente.
—— ¿cómo lo sabes? oh cierto, es que ibas a salir al rescate antes de que eso sucediera ¿no es así?
—— Maliah. —— volvió a nombrarla con molestia y ella lo observó.
—— ¿qué?
—— Deja de comportarte así.
—— ¿así? ¿asi como, Percy?
—— Estas siendo malvada, Annabeth tiene su opinión y tu tienes la tuya, eso está bien, no hay razón para discutir.
—— ¿está bien? Que su opinión sea distinta no significa que este bien y es increíble que piense de esa forma después de todo lo que pasó.
—— No puedes castigarla por apreciar a su madre, Maliah, que tu no aprecies al tuyo no es su culpa. —— habló y ella lo observó rápidamente, casi sin creerse lo que había dicho.
Grover lo observó fijamente con los ojos grandes.
—— ¿estás bromeando?. —— preguntó casi ofendida.
—— Estas hablando a base del odio y te estas dejando llevar por eso, tal vez si dejaras de cegarte a ti misma pensarías igual que ella.
—— ¿crees que Annabeth tiene razón? ¿qué los dioses son justos?
—— Tal vez.
Esa no era la respuesta que esperaba. Ella estaba molesta, lo sabía.
—— ¿tal vez? Tu eres quien más debería de estar de acuerdo conmigo.
—— ¿por qué crees eso?. —— preguntó frunciendo el ceño.
—— Por tu padre. —— contestó rápidamente.
—— Chicos. —— interrumpió Grover.
—— No Grover, déjala. —— pidió para luego volver a observarla. —— ¿por qué hablas de mi padre?
—— Hace un tiempo ni siquiera sabias quien era tu padre ni lo que eras realmente, pero aquí estás ¿y por qué?. —— preguntó.
—— Mi padre necesita mi ayuda, es por eso que estoy aquí, en cuanto hable con él...
—— Tendrás suerte si es que llegas a hablar con él ¿sabes? Nunca he tenido un padre, pero estoy segura de que cuando uno ama a alguien realmente no lo abandona de la forma en la que los dioses abandonan a sus hijos.
La observó en silencio, podía notar la furia en su mirada, Grover se paró y le susurró algo al oído, pero ella parecía no oírlo.
—— No hay excusas para ser un buen padre, ninguna y créeme, el tuyo está muy lejos de ser uno bueno ¿o acaso crees que te reclamo por qué te quiere? Si así fuera, estaría aquí, ayudándote ¿pero dónde está?. —— pregunto, pero no respondió. —— No aquí claramente. Abre los ojos, si crees que hizo lo que hizo porque le importas, entonces estás equivocado, él te quiere para para salvar su trasero porque un padre que quiere a su hijo no lo pone en peligro como el tuyo lo está haciendo.
El silencio se apodero del lugar, Maliah lo observaba con un odio que nunca antes había visto antes.
—— Esa es la realidad, es la realidad de todos los semidioses, no te reclamo porque te cree especial o te ame con su vida, te guste o no, solo te quiere para conseguir algo, si tu mueres en esta misión, no marcaras nada en él. Eres un hijo más, no tienes importancia ni valor en su vida, todos los Dioses son iguales, dime ¿te siguen pareciendo justos?
Percy 3. Maliah +100.
Grover lo observo con pena, pero su mirada solo se encontraba en Maliah, quien no mostraba ninguna pizca de arrepentimiento por sus palabras, manteniendo su postura recta, pero en su mirada había una mezcla de furia y decepción absoluta.
¿tan cruel había sido Zeus para lograr que ella pensara así?
—— Algo se está quemando. —— habló Medusa interrumpiendo el silencio. —— ¿me ayudarías? Creo que el almuerzo ya está listo.
Observó a Maliah una última vez antes de abandonar la habitación, pero Maliah no lo observaba y en cambio, se puso de pie dirigiéndose a la puerta principal.
Algo en su interior se removió al verla. No era una pelea más y lo sabía. Esta vez ambos se habían dañado mutuamente.
Y eso no se sentía bien.
HOLAAAA !!!
iba a publicar este cap ayer, pero estaba muy cansada y me dormi, hoy estuve con muchos temas y recién pude sentarme a publicarlo, en fin, aquí se los traje.
también quiero agradecerles por los 2k de votos, estoy sin palabras, no tiene idea de cuanto los aprecio <3
¿cómo están? ¿cómo arrancaron la semana? yo con mucho calor y sueño.
¿opiniones, algo?
recuerden que tengo un canal de difusión en WhatsApp sobre este fic, ando enviando los links y pido una disculpa si no respondo rápido, wattpad esta andando medio mal y no me avisa nada.
en fin, cuídense mucho y nos leemos en el próximo capitulo, muaaa.
- tina 💌
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro