Chapter O9
Jungkook se removió incomodo en su cama, los rayos de sol iluminaban su cara logrando que despierte, miro alrededor y se sintió incomodo cuando quedo acostado sobre su espalda, sintió un pequeño dolor, y recordó sus lastimadas alas. Se levantó y quedo sentado mirando lo que estaba a través de la ventana, podía ver el paramo, se sintió nostálgico.
De pequeño siempre soñó ir ahí su madre le dijo que irían algún día, le contó sobre las bellas flores que levantaban sus cabezas al llegar la primavera, sobre las criaturas que vivían ahí, y como las pequeñas hadas jugaban entre ellas con diminutas y risueñas risas.
Se recordó como su madre le contó que el agua ahí era cristalina y brillante, como todo era un color verde hermoso, recordó que le dijo que cuando ella era una niña las criaturas que vivían en el lago jugaban con ella, le contó sobre como se ensució con lodo al jugar.
El de niño cuando veía el paramo de lejos desde esta misma ventana veía un área verde con colores difusos adornándolo, no dudo las palabras de su madre pues desde lejos se veía mágico.
Pero ahora cada día lo veía sin vida, los brillantes y vivases colores no estaban, en su lugar un apagado color marchito se veía. Recordó que su mamá lucho por los seres que habitaban el lugar, que dio su vida para que la soberbia del rey no les quitase su hogar a todas esas singulares criaturas, pero para el ser humano lo diferente es malo si es algo que no comprenden entonces es malo, se negaron a ver la belleza que el y su madre veían en ese pequeño hábitat.
Al caer muerta su madre los soldados invadieron el lugar, destruyendo todo a su camino las criaturas del paramo no eran indefensas pero no pudieron dar lucha contra las armas del hombre.
Jungkook se dijo a si mismo que cuando matara al rey Stephan obligaría a que le cedan el dominio del paramo a él, obligaría a que suelten a las criaturas que estaban encerradas en algún lugar del palacio real.
Oh el rey Stephan, Jungkook se puso de mal humor al recordar que ayer fracaso en su cometido, suspiro y se levantó de su cama, se sintió mareado por un momento agarró su cabeza tratando de ganar equilibrio, según él en cualquier momento estaría con la cara contra el piso.
Bajo las escaleras desearía usar su magia pero se sintió demasiado débil.
Vio a Diaval en el pequeño cuarto donde preparaban la comida, que también era el cuarto dónde comían.
— Buenos días — saludó al cambia-formas y se desplomó en una silla apreciando el rico olor a pan saliendo del horno.
— Buen día como te sientes humm — Diaval puso un plato en la mesa, y en el plato puso unos cuantos racimos de uvas y dos manzanas
— No muy bien, la cabeza se me quiere salir del cráneo — mientras hablaba se metió unas cuantas uvas en la boca — y el dolor empeora cada vez que pienso en el desgraciado de Stephan — suspiro y miró al techo pausando su hablar por unos momentos — se siente peor saber que ese principito haya sido quién me interrumpió
— Igual ibas a estar débil, todo el estrés más tu cuerpo no listo para recibir ese tanto de magia fue un problema, por cierto como se sienten tus alas... aún tienen heridas? — Diaval sacó los panes del horno y los dejó en la mesa de madera grande dónde preparaban comida.
— No ya no tienen heridas y solo duelen un poquito — Jungkook hizo un pequeño gesto con las manos como si estuviera sosteniendo algo diminuto, Diaval sonrió un poco. Agarró una manzana y le dio un mordisco hablando con la boca llena.
— Por cierto el cetro lo dejé en la sala principal en la vitrina dónde antes solía estar, ve por eso te ayudará a sentirte mejor, peero primero come el pan o se enfriará.
Jungkook lo miró con una diminuta sonrisa y asintió fue por un plato y corto una rebanada de pan y se sentó a comerla.
Después de comer se dirigió donde su cetro sintiéndose mejor apenas lo tocó.
Pero quería hacer algo mejor.
Salió afuera, sintió el viento helar su cara, pero se sentía bien, se alzó volando, sus pies a unos dos metros sobre la tierra.
Luego voló, se sintió vivo cuando volaba encima de el frondoso bosque, su cara dibujo una sonrisa.
Pasó una media hora, hasta que descendió en un lugar despejado del bosque, se sentó en el pasto respirando con largas bocanadas de aire. Miró las florecillas que crecían y las toco acariciando sus pétalos delicadamente, las flores respondieron a su tacto abriendo sus pétalos en toda su gloria. El hada soltó una pequeña risilla, mirando contento como las flores surgieron a su alrededor.
Ahora quería descansar, mañana de preocuparía en como matar a Stephan, tampoco se olvidó del príncipe rubio el también pagaría sus acciones, no lo mataría pero haría algo, luego lo pensaría.
Se tensó al recordar las palabras que el rubio le susurró, sintió calor en su cara. Recordó las duras facciones del príncipe como su melena rubia estaba cubierta en sudor. Contuvo su respiración un momento y se obligo a najar de las nubes.
Desde cuándo pensaba en lindos príncipes rubios?
Capítulo medio relleno porKhE si
en c0nClusión
Aprecien la nueva portada porque esa mierda me tomó toda una tarde en hacer, me sentí re profesional haciéndolo kjnkjasdnaks
chAu incluyo lo del paramo porque se me vino una escena taekook en ese lugar y pues para poder escribirla el lugar tiene que existir clAr0 quE Sí
Mañana tengo examen de Matemática * c SuimCidA*
Y no puede ser que este googleando a media noche "que comían en épocas medievales"
también ví imagenes de cocinas de esos tiempos pondría una pero me da flojera descargarla :D
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