La hora del almuerzo llegó e Izuku fue por el suyo para después ir a una mesa alejada en el comedor, no es que fuera antisocial ni nada simplemente quería comer tranquilo y eso era algo difícil de conseguir en un lugar lleno de adolescentes con hormonas al 120% y lo decía con respecto a cierto enano con cabello de uva que estaba comiéndose con la mirada a todas las chicas en la cafetería.

Que desagradable.

Él pecoso no era ajeno al sexo opuesto, ni al suyo propio por supuesto podía decir cuándo alguien era agraciado con buenos genes y si a eso se sumaba una buena actitud dicha persona sería alguien muy agradable de conocer.

Nessa era el ejemplo perfecto de esto.

Pero eso no significaba que estaría viendo a cualquiera que se le hiciera agradable el mismo duda aún cuál es su relación actual con su mejor amigo y no está seguro de querer llevarla más lejos de lo que está.

No está en posición para una relación amorosa, simplemente no tiene la capacidad para intentar querer a alguien cuando sabe que en cualquier momento simplemente olvidaría cualquier recuerdo que formara con dicha persona.

Claro si alguien alguna vez le pedía salir, no tenía motivo para rechazarlo sin saber el verdadero motivo detrás de esto.

No era un antisocial si alguien quería ser su amigo no tendría problemas con esto y si ese amigo quería salir con él a pasar el rato tampoco negaría la solicitud.

A pesar de todo seguía siendo un adolescente,quería tener amigos, disfrutar de su juventud y formar vínculos que valieran la pena proteger.

Una parte traidora de su cabeza le decía que solo hacía esto para cuando olvidara a todos en su vida secreta, la parte visible no se quedará sola y tuviera verdaderos amigos en los que apoyarse para comenzar de nuevo.

Ya tenía a Nessa y él sabia que una vez olvidara todo ella no lo dejaría solo, tal vez era un poco egoísta hacer vínculos por esa razón pero....

Era humano después de todo.

Tanto para bien como para mal los deseos egoístas de la humanidad es lo que les ha permitido llegar tan lejos y seguir viviendo.

Después de todo la humanidad incluso vivió incluso cuando los dioses dejaron el plano terrenal y se perdieron en él caos.

Los humanos eran frágiles pero también eran los más fuertes.

Para bien o para mal ciertamente.

Sus pensamientos se detuvieron cuando un par de personas se sentaron en su mesa, dejó de ver su almuerzo para ver a quienes se sentaron en su lugar.

Eran varios de su curso de negocio e incluso algunos de apoyo, los dos grupos se veían incómodos entre sí al no saber la razón del por que el otro estaba sentado, bueno todos menos una pelirosa que él pecoso identificó como Mei Hatsume una de los miembros más excéntricos de su clase de apoyo.

No es que el fuera mucho mejor.

—Entonces....— Una peli verde de negocios rompió el silencio incómodo e Izuku siguió a partir de ahí.

—Para ahorrar problemas diré que estoy viendo clases tanto de negocios como de apoyo y si, si es posible hacer eso no está contra las reglas simplemente ahí que tomar ambos exámenes, mi nombre es Izuku Tempest es un placer conocerlos espero que nos llevemos bien.

Todos se quedaron en silencio un momento antes de que alguien se encogiera de hombros y todos asintieran.

—Eres más abierto de lo que pensé sin ofender— Fue la perezosa voz de una chica de cabello rosa pálido que estaba jugando con una consola portátil.

—Chiaki Nanami por cierto un gusto—

—Ninguno tomado, un placer conocerte Nanami-san—

—Yo soy Chichiro Fujisaki un placer también— Comentó tímidamente una chica de cabello castaño y ojos verdes.

—Igualmente Fujisaki-kun— Habló ignorando la sorpresa de la persona frente a él por sus palabras.

—Cualquiera que haga lo que tu hiciste necesita que le dé un apretón mano Kazuichi Souda— Se presento y todos en negocio arquearon una ceja por lo que debería haber dicho mientras en apoyo sonrieron levemente ante el recuerdo y luego se estremecieron pensando qué no querían ser esos robots jamás.

—Soy Hifumi Yamada un placer Tempest-sama— Se inclinó otra de las personas también hablándoles con el mismo sufijo.

—Friki— Fue el pensamiento instantáneo de todos menos el peliverde que no sabía que era un Friki y al parecer no quería saberlo todavía.

—Igualmente—

Comentó cansadamente hacía el hombre.

—Soy Lissete Mineta y si es un nombre extranjero— Comentó otra joven de aspecto cansado sus ojeras eran visible pero nadie comentó sobre eso.

El peliverde arqueó una ceja ante todas las presentaciones, al parecer los miembros del curso de apoyo se había presentado antes, internamente se cuestionó si esto era coincidencia o una pequeña broma del universo.

Ahora seguían los miembros de negocios.

—Soy Sonia Nevermind un gusto conocerlos— Habló la joven con su acento siendo notado por la mayoría.

Nadie comentó pero Izuku preguntaría luego por su procedencia.

Despues de Sonia fue una pelimorada con una mirada indiferente en su rostro pero él pecoso lo sabía mejor esa chica estaba analizando a todos los presentes buscando algo, que le llamara la atención por lo que pudo deducir que al menos tenía habilidades analíticas muy altas.

—Kyoko Kirigiri— Fue lo único que digo y algunos se preguntaron que hacía aquí no parecía la persona más sociable.

Tal vez no pudo encontrar una mesa, era una posibilidad pero lo dudaba.

—Yo soy Shirone Togami un placer— la chica que habló mostraba cierta elegancia con sus palabras.

Una persona de clase alta, fue la conclusión de Izuku.

Por último fue una peli verde con el cabello verde pastoso todo en vez del esmeralda que poseía el peliverde y su hermana recién descubierta.

—Natural Harmonia Gropius mis padres no son muy buenos con los nombres llámenme N— Comentó tímidamente la joven aunque vio que algunos hicieron una mueca de simpatía.

No era el único con malos padres al parecer.

Bueno al menos él no tenía que tratar con ellos.

Lo vendieron al parecer o esa la conclusión que tenía con la información que sus muy dañadas memorias le brindaban.

—Es un placer conocerlos a todos— Comentó mientras escaneaba la mesa dando un pequeño asentimiento a todos los presentes.

Después de eso su rostro se volvió más inexpresivo aunque mantuvo una pisca de curiosidad fingida en su rostro, para que todos la notaran.

Las personas en esta mesa eran más agudas que los adolescentes normales nada que peligroso menos en Kirigiri que tenía sus ojos más alerta estudiando todo de él y sinceramente esperaba que no lo hiciera costumbre.

No quería tener que estar alerta todo el tiempo mientras estaba a su alrededor.

—¿Debo preguntar por qué están aquí? No es que me ofenda ni nada— Agregó como la última parte como un comentario posterior para evitar cualquier ofensa contra sus compañeros.

Un poco de cortesía a veces no había daño.

—Bueno, es difícil no querer conocer al súper hombre— Bromeo Souda mientras sonreía con un poco de picardía.

—Es decir viniste al examen de apoyo y derribaste alrededor de 100 robots luego en las pruebas físicas nos superaste a todos y para rematar ahora nos enteramos que también estás en el curso dé negocios, que falta ¿Entrar en el curso de héroes?— Termino ganando uno o dos asentimientos en la mesa, lo que provoco un pequeño escalofrío en el peliverde.

—Sabes que si nos graduamos del curso de apoyo también seremos héroes ¿cierto?— Eso ganó algunas miradas de sorpresa —Si bien estaremos orientados a la construcción y no veremos ni un tercio de las clases heroicas del curso de héroes aún obtendremos una licencia de héroe, lo que en teoría nos permite afirmar como uno, no es que la mayoría lo haga ya que casi siempre nos orientamos a los equipos de soporte y los graduados no suelen ejerce la profesión completa. Power Loader es uno de los pocos que se me ocurre que sea un héroe completo a pesar de estar orientado al soporte— Izuku dejó la pelota para que todos en la mesa asimilaran sus palabras mientras él seguía comiendo su almuerzo.

—Eso es aterrador— Murmuró Fujisaki su expresión delatando sus pensamientos —No te preocupes, no estamos obligados a ser héroes una vez nos graduemos es una mera formalidad de UA para hacer ver que sus miembros de apoyo son superiores a los de otras preparatorias excepto tal vez los de I-Island pero ellos son otro nivel— Eso calmo al chico mientras daba una mirada de agradecimiento al brócoli.

—Entonces también hiciste una gran impresión en el examen de negocio al parecer— Nanami comentó ganándose risitas de los miembros de negocios y algunos asentimientos.

—Tempest-san— Comenzó Shirone antes de pensar detenidamente sus palabras y continuar —Destrozo completamente a tres heroínas exitosas y luego uso sus cualidades más superficiales para mostrar que una estudiante del curso de héroes en teoría sería igual de comercializable— Todos la vieron un momento mientras él mismo pensamiento se extendía por la mesa.

—Que directa—

—Bueno pase así con el primer lugar así que supongo que mi estrategia fue exitosa o a los profesores les pareció lo suficientemente válido por supuesto al momento de hacer un negocio real lo que hice en el examen solo me conduciría al fracaso a menos, bueno en la mayoría de casos— Izuku comentó y los miembros de negocio asintieron.

A nadie le gusta que hablen mal de los héroes.

Bueno a menos que comentan un error lo suficientemente grande como para explotar su imagen desde un punto de e vista negativo.

—Tengo una duda—

Kirigiri comentó viendo al peliverde con su máscara inexpresiva a la que todos se dieron cuenta que debería empezar a acostumbrarse.

—Te escuchó— Fue la simple respuesta del joven.

—¿Cual es tu quirk?—

Todos la vieron un momento antes de que una interrogante apareciera en el rostro de los presentes.

—De que hablas su quirk es obvio una mejora de fuerza ¿No viste el examen práctico Kirigiri-sama?— Yamada cuestionó con una mirada confundida.

—Ese no es mi quirk— Izuku comentó con aburrimiento.

Ganándose una mirada de sorpresa de los presentes.

—Tal vez un efecto pasivo de este pero hasta donde se es pura fuerza física, mi quirk en si no es algo que le guste divulgar principalmente por que no lo uso mucho y solo despertó hace dos años, por lo que en el registro sigo siendo sin peculiaridades— Izuku comentó su mente habiendo recordado que él apellido de la chica de cabello lavanda.

Pertenecía a una familia de detective famosa, no para el público si no para las autoridades de todo el mundo, obviamente ella habría investigado a todos los aspirantes y después de su demostración de fuerza en la prueba sería mejor usar una cuartada que había preparado cuando finalmente usara su poder en el festival deportivo, usarla antes ayudaría a eliminar cualquier sospecha de la mujer y las autoridades de la UA sobre él.

—¿Espera tu poder despertó tan tarde?— Nanami preguntó un poco asombrada.

—Si, un día simplemente apareció pero ya había pasado la mayoría de mi vida sin un poder y una vez despertó era extraño, no es que mi quirk sea la octava maravilla del mundo o algo así simplemente—El peliverde suspiro con cansancio antes de sonreír de forma amarga con una expresión resignada en su rostro.

—La vida para las personas sin peculiaridades no es muy buena—

Mineta comentó viendo a Izuku con respeto silencioso haciendo que todos hiciera un mueca ante eso aún más los que sabían que las personas sin peculiaridades se suicidaban comúnmente en su adolescencia.

Las cosas fueron tan malas que él porcentaje de personas sin quirk bajo del 20% al 1% las personas nacían cada vez más con quirk y las que no lo hacían no
vivían mucho eso sin contar las purgas de las personas que no nacieron con uno hace 30 años.

Fue una masacre en que miles si no millones de quirkless murieron disminuyendo aún más la población de sin peculiaridades.

La vida definitivamente no era amable para las personas sin poderes.

La sonrisa del peliverde era claramente amarga, sus ojos estaban perdidos en la distancia mientras el mismo se cuestionaba sobre su poder, no estaba seguro de si su poder era natural o había sido obra de un experimento su cuerpo aún recordaba los dolores fantasmales a pesar de que él no recordaba la mayoría de las cosas que le hicieron o le obligaron a hacer aún tenía destellos.

No eran bonitos.

Kirigiri al ver esto hizo una mueca interna, había sobrepasado sus límites, arruinando el estado de ánimo de la mesa e invadido la privacidad emocional de uno de sus compañeros.

—Lo siento, no debí mencionarlo—

Habló su voz un poco más baja de lo que era originalmente para demostrar su arrepentimiento.

—No importa— él pecoso comentó después de un largo suspiro, se había quitado a la joven de encima al menos por un tiempo.

Eso era una victoria.

La campaña sonó poco después indicando el final del receso.

Fue un primer día interesante.

Final del capítulo.