Renji caminaba de un lado a otro en la oficina central de la Sexta División mientras el mensaje se desvanecía lentamente. Se mordía el labio con tanta fuerza que sangraba abiertamente, pero no reaccionó a la sangre ni al dolor mientras seguía caminando. ¿Cómo se suponía que iba a inventar una mentira creíble sobre cómo desapareció Rukia? Se pasó la mano por la cola de caballo destrozada y tiró de sus mechones sueltos. "¡JODER!", maldijo mientras se detenía y se encorvaba.

Se agachó y se quedó mirando sus pies enfundados en calcetines mientras intentaba no ponerse gris por el estrés de haber inventado esa mentira. Estaba a punto de empezar a balancearse en el sitio cuando la puerta se abrió detrás de él.

—Abarai —dijo la voz tranquila de su marido, pero Renji no reaccionó. Byakuya no estaba acostumbrado a que el pelirrojo lo ignorara. Se acercó y se paró detrás de él y lo llamó suavemente.

Renji se puso de pie y se dio la vuelta, con los ojos desorbitados y el pelo despeinado; Byakuya parpadeó ante el estado de su marido antes de soltar un pequeño resoplido y extender la mano, pasar el pulgar sobre la sangre y limpiarla antes de empezar a recomponer con delicadeza a su marido. Una vez que su ropa estuvo arreglada, lo guió hasta el sofá y lo obligó a sentarse antes de ocupar su lugar detrás de él y empezar a cepillarle el pelo.

"Adiós"

"Silencio", dijo Byakuya mientras continuaba cepillándose el cabello y lentamente lo levantó a su lugar normal. "A menos que quieras informarme por qué te ves tan mal, entonces no quiero escucharlo".

Renji cerró los ojos y dejó que su cabeza cayera ligeramente hacia atrás antes de que una sonrisa se dibujara en sus labios. "Amo tus manos en mi cabello- ay" Renji miró detrás de él a Byakuya quien lo estaba mirando, Renji suspiró y se dio la vuelta y dejó que Byakuya continuara cepillando su cabello y comenzara a trenzarlo.

"Está muerta" habló finalmente Renji después de unos momentos en silencio, las manos en su cabello se detuvieron por un segundo antes de continuar con su trabajo. "Acabo de recibir la notificación... ¿cómo se supone que le mentiré al Sou-taichou que Ruika está muerta?" Renji se frotó la cara antes de mirar hacia atrás cuando terminó la trenza, frunció el ceño cuando vio que su esposo lo estaba mirando con esa mirada de 'descúbrelo' en su rostro antes de arquear una ceja, Renji gimió y se arrojó dramáticamente sobre la pierna de Byakuya.

"Eres inteligente" afirmó Byakuya después de una larga pausa y colocó su mano en su mejilla "Ichigo no te habría dado una tarea tan exigente si no pensara que no podrías manejarla" Le recordó mientras se inclinaba y besaba su frente antes de levantarse y dar una leve sonrisa cuando Renji se cayó.

"Ahora ponte de pie y defiende a tu rey", dijo Byakuya antes de desaparecer, dejando a Renji sentado en el suelo con una mirada determinada en su rostro.

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 Joshirō Ukitake suspiró mientras bajaba su taza de té, levantando ligeramente la cabeza para sentir la brisa que entraba por las puertas abiertas de su oficina, con el ceño fruncido en su rostro mientras volvía a llevar la taza a sus labios.

"Tu cara se va a quedar pegada así" vino una voz profunda desde debajo de su taza, Joshirō no pudo evitar la sonrisa antes de mover la taza lo suficiente para mirar al hombre que estaba usando su regazo como reposacabezas, el rostro del hombre estaba cubierto por su habitual sombrero de paja.

"¿Cómo sabes cómo es mi cara cuando no puedes verla?" respondió Joshirō mientras arqueaba una fina ceja negra, su amor por el hombre en su regazo siempre opacaba cualquier enojo real que pudiera sentir hacia él.

"Porque te conozco, Joshirō" Shunsui Kyōraku se estiró, se quitó el sombrero y le guiñó un ojo antes de sentarse un poco, lo suficiente para agarrar la taza y tomar un largo trago antes de volver a recostarse, justo cuando iba a volver a ponerse el sombrero sobre la cara, tarareó antes de suspirar "Parece que tendremos compañía"

"De hecho" asintió Joshirō mientras volvía su atención hacia la derecha "Me pregunto qué necesita Abarai... bueno, Kuchiki ahora".

No pasó mucho tiempo antes de que Renji se acercara a los dos capitanes y se arrodillara ante ellos. Shunsui soltó un pequeño resoplido antes de volver a colocarse el sombrero en la cara y permitir que Joshirō tomara el control. El capitán de cabello blanco sonrió cálidamente antes de asentir. "Hola Renji-kun, ¿qué podemos hacer por ti?"

Renji se tomó un momento para recomponerse antes de levantarse y mirar a Joshiro a la cara "¿Estás con él o contra él?"

Joshrio frunció el ceño ante la extraña pregunta e inclinó ligeramente la cabeza "Lo siento, no entiendo" Joshiro dejó su taza y usó su mano derecha ahora libre para agarrar la mano de Shunsui, el otro ya estaba en guardia cuando Renji se puso de pie.

"Es una pregunta simple, Ukitake-Taichou", repitió Renji sin perder el ritmo. "No puedo continuar con esta convocatoria hasta que lo sepa, y esta es una convocatoria que deberíamos tener".

"¡Lo siento!" declaró Renji una hora después mientras se inclinaba hacia delante y golpeaba su cabeza contra la mesa, el capitán mayor lo miró con sorpresa antes de que Joshirō se riera levemente, pero eso solo lo envió a otro ataque de tos; agarró la manga de Shunsui y se encorvó, Renji saltó para tratar de ayudar solo para sentarse lentamente cuando le hicieron un gesto con un guiño.

—Está bien. Sólo dale un segundo —Shunsui le sonrió antes de volver su atención a Joshirō, una vez que el otro controló su respiración tomó suavemente la copa que le ofrecían—. Ahora bien, ¿qué era esta convocatoria que era tan importante?

"Rukia Kuchiki está muerta"

Ambos capitanes se congelaron y dirigieron su atención a Renji, su rostro era neutral pero tenía seriedad entretejida en él, la habitación estaba en silencio antes de que sonara un profundo suspiro que vino de Joshirō.

"Temí que por eso estuvieras aquí. ¿Ese Clan Kuchiki finalmente decidió matarla?"

"No"

Shunsui frunció el ceño mientras se inclinaba ligeramente hacia delante. "Entonces, ¿cómo...?"

"Rukia secuestró al hijo de Ichigo", continuó Renji incluso cuando Joshirō jadeó y parecía desconsolado, amaba tanto a los niños "-y ese fue solo el punto de inflexión" Renji mantuvo la cabeza en alto y los miró a ambos a los ojos antes de continuar "El punto es que Ichigo la tomó y la mató, ahora tengo que encontrar una manera de decirle a Yamamoto que su comadreja está muerta"

Joshirō asintió antes de comenzar a toser nuevamente, desestimó la mirada preocupada de Renji antes de centrar su atención cuando FukuTaichou habló nuevamente.

"Él puede curarte, ¿lo sabes?"

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Renji caminaba con la espalda recta y los hombros cuadrados, tal como los Kuchiki pensaban que era él, respiraba profundamente mientras sentía la creciente presión de los otros Capitanes, lentamente se acercaba a las puertas de la sala de reuniones, donde debería estar nervioso todo lo que sentía era calma y rabia.

Empujando las puertas para abrirlas antes de ser presentado, continuó su caminata, cada paso se hacía pesado pero lo empujó mientras se paraba frente al Sou-Taichiou; Renji sintió una rabia creciente hacia el hombre que se suponía que debía cuidarlos y, sin embargo, voluntariamente tiró a Ichigo, incluso años después, odiaba al hombre que una vez admiró.

"Abarai-FukuTaichou-"

"Kuchiki, señor", lo interrumpió Renji mientras lo miraba fijamente. "Hace tres años que estoy casado con un miembro del clan Kuchiki. Soy un Kuchiki y me llamarán así".

Yamamto lo fulminó con la mirada antes de corregirse " Kuchiki -FukuTaichou, ya que estás antes que yo, asumiré que Rukia Kuchiki está de nuevo en manos del Clan Kuchiki". No había ninguna pregunta en sus palabras, hizo una declaración que contenía amenazas.

"No" dijo Renji mientras sentía un escalofrío recorrer su espalda, sabía que Ichigo estaba mirando, no sabía cómo estaba pero solo sabía que estaba "Rukia Kuchiki está muerta"

Los sonidos de jadeos resonaron mientras todos miraban a Joshirō, quien bajó la cabeza, lo que significaba que había perdido otro Fuku-Taichou. El sonido de Yamamto golpeando su espada contra el suelo silenció a todos y volvió su atención hacia él; ¡Yamamoto no podía creer lo bien que le estaba yendo esto! ¡Ahora realmente podía acabar con ese bastardo, era peor que Aizen! "Rukia Kuchiki ha sido asesinada por Ichigo Kuro-"

—¡No lo fue! —Renji alzó la voz y interrumpió a Yamamoto mientras avanzaba—. Yo maté a Rukia Kuchiki.