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Tamako suspiro mientras ponía la mesa y noto que como ya era costumbre su hijo aún no se despertaba—Doraemon puedes ir a despertarlo por mi—pidió mirando al robot niñera quien asintió.
Doraemon suspiro mientras se acercaba al futon de Nobita y empezó a moverlo—Nobita, Nobita despierta que se te hace tarde—Nobita se levantó para sorpresa de Doraemon.
Nobita se estiró un poco—ya estoy despierto Shizuka…—murmuró ganándose una mirada plana del robot niñera.
—Shizuka…de que hablas—dijo Doraemon ignorando la mirada sorprendida de Nobita—despierta de una buena vez que se te hace tarde—
Nobita gateo hacia Doraemon y lo jalo de los cachetes sin creerse que estaba aquí—pero…como te fuiste cuando termine el bachillerato—
Doraemon lo miró como si le hubiese salido una segunda cabeza—no he ido a ningún lado, y tu ni siquiera terminas el primer año de bachillerato—
Nobita miró el calendario antes de voltear a verse el cuerpo—‘tengo 15 años…pero como’—pensó mientras se levantaba y empezaba a caminar en círculos ante la mirada exasperada de Doraemon—dime Doraemon hay algún modo de que alguien del futuro envíe sus recuerdos a su yo pasado—dijo a modo de pregunta mientras se vestía esperando con toda el alma una respuesta afirmativa del gato azul.
Doraemon lo pensó un poco antes de asentir—hay un modo…—dijo alegrando a Nobita ya que al parecer lo que vivió no fue un sueño—pero es ilegal debido al echo de que puede causar daño cerebral—
Nobita tomo su maletín—quiero contarte algo y espero que me creas—dijo antes de contarle lo que había sucedido.
Doraemon metió la mano en su bolsillo y sacó el maletín de doctor—si lo que dices es cierto habrá que hacerte un chequeo—unos segundos más tarde el maletín dio el diagnostico
<diagnóstico: estrés, y una carga neuronal anormal
Tratamiento: descanso>
Nobita al ver el resultado negó—no puedo quedarme aquí, yo necesito ver a Shizuka—murmuró mientras se disponía salir.
—sabes…—dijo Doraemon deteniéndolo—El echo de que tus recuerdos hayan regresado no significa que los de ella también—el gato agrego diciendo lo que más temía Nobita que sucediera.
Nobita negó—eso no quita el echo de que necesito verla—con eso dicho bajo a desayunar para posteriormente irse al colegio.
🌸
Mientras caminaba con su mirada la buscaba hasta que la vio arrimada a una de las paredes al parecer esperándolo, cuando llegó a ella ambos se miraron por lo que parecía ser una eternidad preguntándose que deberían decirse.
Nobita la miró deseoso de abrazarla pero se detuvo si ella no tenía los recuerdos lo único que lograría haciéndolo sería asustarla y que se aleje de él, tal vez si le decía algo que solamente sus yos adultos sabían…los recuerdos de su luna de miel llegaron a su mente—recuerdas la cabaña de tejado rojo rodeada de girasoles…—murmuró esperando ver la reacción de Shizuka misma que se mostró sorprendida.
—un hermoso riachuelo se encontraba detrás dijiste que pescarías nuestra cena pero resbalaste y caíste en el…nunca había estado tan asustada en mi vida—dijo Shizuka haciendo sonreír al joven azabache que no perdió tiempo y la abrazo como si fuese a desaparecer.
—siempre me gusto sentir tu preocupación por mi…me hace sentir amado—murmuró separándose un poco de Shizuka misma que coloco una mano en las mejillas del joven y lo miró con ternura—cuando estuve seco caminamos por el sendero que atravesaba los girasoles…aún recuerdo tu vestido de una pieza blanco y tu sobrero de paja te veías tan bella y radiante como un girasol—
Shizuka lo jalo hacia un lugar algo apartado en donde nadie pudiera verlos y lo beso—no puedo expresar lo feliz que me siento de que tu también estés aquí…—dijo cuando rompió el beso—pero que fue lo que pasó—
Nobita negó —no lose…pero ya se lo he contado a Doraemon si hay algo de lo que preocuparnos estoy seguro que el nos lo dirá—Shizuka asintió —ahora que te parece si vamos al colegio ahora tenemos 15 y si llegamos tarde nuestros padres se molestaran—Shizuka asintió con una risilla
🌸
Ambos llagaron con las justas al salón, al entrar todos los vieron raro en primera Nobita no había llegado tarde y en segunda Shizuka no suele llegar con el tiempo justo, tal vez Nobita la detuvo pensaron antes de reírse mentalmente era imposible que Shizuka permitiera que el caso perdido de Nobita la retuviera.
Nobita los ignoro como siempre mientras se dirigía a su asiento deseoso de que las clases ya terminen, cuando llegó la hora del almuerzo recordó lo mucho que había cambiado todo desde que entraron a bachillerato, Gigante ahora era una especie de promesa en el béisbol lo que lo había convertido en alguien soberbio, Suneo era muy popular aunque dicho estatus únicamente lo tenía por que gente interesada se la pasa siguiéndolo y en cuanto a su esposa bueno era obvio lo que sucedería una vez ella alcanzo la pubertad se volvió muy hermosa y atrajo la atención de casi todo la población masculina incluyendo sus amigos los cuales si ya de por sí cuando era niño lo golpeaban, humillaban o dejaban fuera, ahora lo hacían aún más.
Shizuka llevó su silla y sentó en el otro extremo de su mesa—espero que no te moleste que te acompañe—dijo con una sonrisa mientras ponía su bento en la mesa.
Nobita sonrió mientras negaba con la cabeza—para nada…comer contigo siempre alegra mi día—Shizuka descanso su mejilla en su mano mientras veía al azabache con un tenue sonrojo—cuando las clases terminen quieres que hagamos los deberes juntos…cuando terminemos podemos ir al centro al divertirnos—
Shizuka asintió con una sonrisa—me parece perfecto—dijo, sin notar como todos en el salón los miraban unos con sorpresa otros con celos.
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