[004 ;; 나를 사랑한 적 없잖아✱]
N/A: En la canción de abajo, hay como dos partes, que en realidad es una misma. (He cambiado la frase ''me abandonaste y jamás volviste'' de lugar para que tuviese sentido, como si JungKook lo estuviese diciendo.) Puse sus nombres después de cada estrofa, como si fuesen las palabras que tienen para decirse entre ellos. No sé si lo entienden (?) de todas formas, abajo se puede ver, y sobretodo en la traducción. Debo decir, que la parte en coreano no está copiada y pegada en absoluto, de hecho, está escrita por mí desde mi propio pc, lo cual no es tan fácil porque no son las mismas teclas que en español. (Ejemplo: ㅐ 'ae' está en la letra O)
LA QUE HE LIADO YO SOLITA PARA EXPLICARME, MADRE MÍA
no me odien, las amo ♥ muak muak
-----
『아무도 없는 길가에, 나 홀로 그대를; 기다리고 있어. 너 없인 하루도, 살 수 없었을 것 같던. 죽을 것만 같던 기억... 그 시간 속에 갇혀 지쳤나 봐. Love me. 나 그대가 버려둔 지나간 추억에 갇혀. Lonely. 왜 나를 두고 떠났어? 멋데로 돌아오지 마. [JeongGuk]
기억해? 나를 사랑한 적 없잖아. 기억해! 원할 거라 착각하치 마, 너 뗌에 자쳐서, 난 살 수가 없어. 나를 사랑한 적 없잖아. 기억해? 진심이 뭔자도 모르잖아. 기억해? 네 말은 언제나 다 거짓말. [TaeHyung]』
(No hay nadie que este a mi lado, estoy solo; esperándote. No importan los dias, no puedo vivir si no estas conmigo. Siento que voy a morir recordando... Esos momentos, en que solo te veia a ti. Ámame. Estoy atrapado en los ultimos recuerdos de cuando me dejaste. Solo. ¿Por qué te fuiste y me dejaste? Me abandonaste y jamas volviste. [JeongGuk]
¿Recuerdas? Tú nunca me amaste. ¡Recuerdas! No quiero confundirme más. Estoy cansado de ti, no puedo vivir tranquilo. Tú nunca me amaste. ¿Recuerdas? ni siquiera estás seguro de tus palabras. ¿Recuerdas? Todo el tiempo sólo estuviste mintiendo. [TaeHyung] ) — Remember, 9Muses.
__________
Los rayos de sol matutinos pegaban directamente en su rostro, ocasionando un despertar involuntario. Gruñó mientras parpadeaba, y luego bostezó. Hacía frío. Tenía todas las mantas sobre su cuerpo, pero aún así, él notaba el ambiente (normalmente cálido) congelándose a su alrededor. Pronto (y cuando palpó el lugar a su lado en la cama), pudo encontrar la razón.
TaeHyung no estaba junto a él.
Sus ojos se abrieron con confusión. Generalmente, era él quién solía despertarse antes que el castaño. Sobretodo si era fin de semana, porque era el momento de TaeHyung para descansar, y de JeongGuk para consentir a su bebé con un desayuno lleno de carbohidratos.
"¿Tae?" llamó. Su voz sonando ronca por el recién despertar. Esperó oír la suave voz de su novio desde la cocina, el baño, o cualquier otra parte de la casa en la que pudiese estar, sin embargo eso nunca ocurrió.
Frunció el ceño, una graciosa arruguita apareciendo en mitad de su frente, denotando la confusión del pelinegro. Se levantó, tocando el frio suelo con sus pies descalzos. Se quejó en voz baja por la temperatura en el ambiente, a comparación de su cuerpo cálido gracias a las sábanas que lo cubrían anteriormente. Estiró los músculos y algunos de sus huesos crujieron ante tal acción.
Caminó fuera de la habitación hasta la cocina, en busca de TaeHyung. Pensó que podía hallarlo allí, pero no fue así.
La cocina también estaba vacía.
"TaeHyung, bebé, ¿Dónde estás?" su voz resonó por toda la casa, pero ningún ruido más se escuchó.
Entrecerró los ojos. Tae no estaba en casa, podía adivinarlo. Pero entonces, ¿dónde narices estaba? Se paseó por la cocina, buscando alguna evidencia de su novio. ¿Quizás él le había dejado una notita o algo?
Defintivamente, estaba en lo cierto. En la nevera, debajo de un imán que la sobrina de TaeHyung les había regalado por Navidad, había un folio escrito. Y era la letra de TaeHyung. JeongGuk lo tomó entre sus manos, leyendo.
«Lo siento, JeongGuk...
Desearía que esto nunca hubiese pasado. Preferiría un millón de veces no haberme dado cuenta de tu traición. Nunca ver que me mentiste, me decepcionaste, me heriste, pero sobretodo... me fuiste infiel.
Sé que soy un cobarde por desaparecer mientras tú duermes, pero no me culpes por esto, simplemente estoy demasiado herido como para siquiera enfrentarte.
Lo siento por no ser suficiente. Lo siento por amarte, pero sobretodo, lo siento por haber sido lo suficientemente estúpido como para creer que cada noche volverías arrepintiéndote.
No me busques, JeongGuk, no vas a encontrarme.
Espero que ella te ame como yo lo hice, y que la trates mejor de lo que me trataste a mí.
Esto se terminó.
Sé feliz, Gukkie.
Adiós, para siempre.
Te amó, te ama, y te amará como un estúpido, Kim TaeHyung.
Posdata: Tal vez las promesas que hicimos nunca debieron de ser dichas... sobretodo si uno de nosotros no iba a cumplirlas.»
La cartá cayó de sus manos luego de ser leída. Sus ojos permanecían a punto de salirse de las cuencas, y su boca semiabierta era incapaz de producir algún sonido. Había un terrible nudo que se formó en su garganta, que le dificultaba incluso el poder respirar.
Se apoyó en la isla de la cocina, sus rodillas temblando y los ojos picando por las lágrimas. ¿TaeHyung se había ido? ¿Lo dejó?
La primera lágrima se deslizó por su mejilla. Esto debe de ser una mala broma, se dijo a sí mismo. TaeHyung debe de haberse escondido en algún lugar.
Lo más rápido que pudo (que sus temblorosas extremidades inferiores le permitieron, en realidad) se dirigió a la habitación compartida. Abrió los cajones y el armario, dándose cuenta de que no había más ropa que la suya.
Era cierto. Se había ido.
Tomó su teléfono de la cómoda, y junto a su teléfono, pudo ver el anillo de TaeHyung.
Las promesas... A eso se refería.
Marcó el número del castaño.
''El número al que usted llama, está apagado, o fuera de cobertura. Si desea dejar un men-" Su móvil fue lanzado furiosamente al suelo, la pantalla quebrándose contra el mismo.
El dolor invadió su cuerpo, y seguidamente de eso, su puño impactó contra la pared.
Primer puñetazo.
TaeHyung lo había dejado.
Segundo puñetazo. Sintió sus nudillos rasgarse, pero no le importaba.
TaeHyung se había marchado.
Tercer puñetazo. Su mano dolía, estaba sangrando. Pero su corazón estaba demolido.
Todo se acabó.
Cuarto puñetazo.
Él lo perdió.
Quinto puñetazo.
Él era el único culpable.
[...]
JeongGuk miró a los ojos de YuJeong, y en lugar de ver el rostro de la chica (como se supone que debería de pasar), él vio directamente a TaeHyung en su lugar. Sus ojos grandes y almendrados, brillando con intensidad. Ese bonito color castaño que siempre lo había cautivado. Sus finas facciones, pómulos delgados pero bonitos, nariz perfectamente tallada y un adorable lunar en la punta. Sus labios eran de color rosa por naturalidad, gruesos y terriblemente apetecibles.
No era la primera vez que el rostro de TaeHyung aparecía en mitad de una cita con YuJeong, pero cada vez que ocurría, la sensación de malestar invadía su pecho por completo.
Pero ésta vez era diferente. Porque cuando todo terminase, y volviese a su casa de madrugada, TaeHyung ya no lo estaría esperando en la cama, como siempre.
Porque ésta vez, era demasiado tarde, y TaeHyung se había ido.
"¿Todo bien?" YuJeong notó la mueca en su rostro y tomó su mano, apretándola suavemente entre sus dedos.
JeongGuk no vio a la muchacha, en su lugar, volvió a ver el rostro calmado de TaeHyung mirándole directamente, mientras que era él quién tomaba su mano. Al igual que cuando YuJeong le sonrió, no pudo verla, sólo a TaeHyung.
Sus largas pestañas, la forma en la que sus ojitos desaparecían cuando sonreía. Su sonrisa. Era la única curva en el mundo que JeongGuk conocía, podía calmar y apaciguar todos sus problemas con tan sólo verla.
Y era consciente, él estaba haciéndola desaparecer. Poco a poco, TaeHyung dejaba de sonreírle como solía hacer. Sus ojos seguían brillando cada vez que lo miraban, pero la gran mayoría de veces, lo sabía, él estaba tratando de conteniendo las lágrimas.
"Gukkie" Ella susurró. Ésta vez si pudo oírla, pero su ceño se frunció. ¿Cuándo había empezado a llamarle así? Sólo TaeHyung podía referirse a él de ese modo, porque había sido la persona en lograr que ese estúpido sobrenombre no le pareciese repulsivo.
Pero TaeHyung no era quién se encontraba bajo su cuerpo. TaeHyung no era quién acariciaba su mejilla en estos momentos, aunque su mente lo estuviese traicionando. TaeHyung tampoco era quién hacía todo lo posible para intentar besar sus labios,
Porque probablemente, TaeHyung se encontraba solo en algún lugar, llorando una noche más, sabiendo lo que pasaba entre las sábanas de esa chica.
La imagen de su novio (o bueno, ex) llorando hizo que JeongGuk se colocase recto de repente. YuJeong le miró con confusión en su mirada, y él se levantó.
"Lo siento" musitó, tomando su camiseta del suelo y colocándosela. "No puedo hacerlo"
"¿Algo va mal?" Yu preguntó, sus cejas yendo directamente hacia abajo.
"Sí, joder, sí" JeongGuk suspiró, pasándose una mano furiosamente por el pelo hasta desordenarlo. "No puedo seguir haciendo esto, YuJeong"
"¿Qué cosa?" la mujer se sentó en la cama. Aún la confusión pintaba su rostro, pero más o menos sabía a lo que él se estaba refiriendo.
"Esto que tenemos, no puedo dejar que siga pasando." Él se acercó a Yu, agachándose sobre sus rodillas y tomando sus manos. Suspiró, y la miró fijamente a los ojos. Ella tenía los suyos aguados, pero era consciente de que alguna vez debería pasar. "Eres preciosa, inteligente e increíble. Pero no eres TaeHyung, y sé que suena estúpido después de toda la mierda que he hecho, pero yo amo a TaeHyung, y nada ni nadie va a cambiar eso."
"P-pero... Gukkie, él... él te dejó" murmuró, las lágrimas empapando sus mejillas.
"Lo sé, sé que él me dejó. Pero me dejó por mi culpa, porque no supe valorarlo, y cuando comencé a hacerlo, ya era demasiado tarde. Pero... eso no quita que TaeHyung sea la persona más importante en mi vida, que lo ame. Que él me haya dejado no significa que deje de ser lo mejor que me ha pasado"
JeongGuk formó una línea con sus labios, intentando consolarse a sí mismo. Sentía las lágrimas formándose en las esquinas de sus ojos, pero se centró en limpiar las que caían por las mejillas de YuJeong.
"Yo... y-yo te amo, JeongGuk"
El azabache suspiró una vez más. "Sé eso, pero no puedo corresponderte, y tú mereces a alguien mejor que un imbécil enamorado de la persona a la que le rompió el corazón."
[...]
Había pasado un mes. Un mes desde que abandonó su hogar y todos los recuerdos que albergaban. Un mes desde que dejó a JeongGuk con una nota.
Y su corazón no mejoraba en absoluto.
Él sabía que era mejor estar lejos del azabache, pero aún así no podía evitar que las traviesas lágrimas empapasen sus mejillas cada vez que recordaba los —buenos— momentos con Jeon. Y no era un secreto, que muchas veces había querido mandar su orgullo herido a la mierda y correr de vuelta a los brazos que le esperaban.
Eran las doce de la noche, y el ramen instantáneo se había acabado en la casa donde se estaba hospedando (particularmente, era el pequeño apartamento de uno de sus mejores amigos de la facultad, Kim JinHwan.
(El chico era bastante amable, lo había acogido sin ningún problema e incluso le había puesto una manta encima cuando se quedó dormido luego de dormir por horas. Era de baja estatura, con el cabello rubio cenizo, una bonita sonrisa y un adorable lunar en forma de corazón bajo su ojo. TaeHyung sin duda estaba bastante agradecido de tener amigos comprensivos en su entorno).
Así que por eso mismo se encontraba envuelto en una enorme chaqueta de color verde militar, tres tallas más grande de la propia y una gran bufanda negra rodeando su cuello, caminando en los pasillos principales del supermercado veinticuatro horas que quedaba a dos calles del apartamento. Mientras que su pequeño compañero dormía tranquilamente, ya que había sido TaeHyung quién se terminó el último vasito de ramen con verduras.
Rebuscó entre los estantes, finalmente encontrando la gran variedad de ramen instantáneo en la balda más cercana al suelo. Tomó cuatro vasos de fideos, dos de pollo y otros dos con verduras. De camino a la caja, estuvo a punto de impactar contra un cuerpo un poco más pequeño que el suyo.
Se disculpó con la muchachita, y cuando vio su rostro para entregarle una pequeña sonrisa de disculpa, su cuerpo se congeló.
Nam YuJeong.
La chica parpadeó, igual de asombrada que él, e incluso avergonzada.
"Y-yo..."
"Lo lamento, ¿no te hiciste daño, cierto?" cuando negó, TaeHyung rápidamente volvió a emprender su camino.
"¡Espera!" escuchó la voz detrás suya, un deje de desesperación palpable. Se giró, mirando a la chica con la que su novio tantas veces había dormido. "Por favor, hay algo que quiero-necesito, decirte"
TaeHyung hizo una mueca, apretando los vasitos en su mano. "Realmente no tengo un gran interés en hablar de esto... contigo. Lo lamento pero, no eres la primera persona con la que quisiera hablar ahora mismo. No después de... ya sabes." Se mordisqueó el labio, dándole una rápida mirada. "Sólo hazlo feliz, ¿de acuerdo?"
Estuvo a punto de girarse, pero ella volvió a hablar de nuevo. "Es imposible"
Su ceja se alzó. "¿Disculpa?"
"No puedo hacerle feliz" mencionó nuevamente, una triste sonrisa surcando en su rostro. "No soy tú"
"Yo... no entiendo" Tae admitió.
"Realmente pensé que en algún momento, él podría amarme... ¿sabes?" ella no borró la sonrisa en ningún momento, cada vez se hacía más triste el brillo en su mirada. "Pero me di cuenta que eso no era posible... Mi cabello no es corto, mi nariz no es perfecta, mi sonrisa no es cuadrada, mis ojos no son grandes. Mi nombre no es Kim TaeHyung. No podría conseguirlo incluso si lo intentase, porque por mucho que quisiese, yo no soy tú. Él (a pesar de el inmenso error que ha cometido), te ama con todo su estúpido corazón. Sólo a ti, TaeHyung."
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro