Applejack al encontrar la puerta y ver que estaba con llave, decidió ir con su abuela para saber sobre la puerta, la cual, le extrañó mucho que estuviera, y no creía que alguno de sus familiares la hubiera puesto durante la remodelación y construcción de la Granja.

Applejack: A dónde conduce esa puerta?
Abuela Smith: A ningún lado.
Applejack: Pero... tiene que llevar a alguna parte.
Abuela Smith: (niega con la cabeza)

Applejack fue al marco de la puerta de la cocina donde guardaban muchas llaves, ahí, encontró la más vieja al parecer, y, la más grande de todas las llaves.
La abuela Smith le abrió la puerta a Applejack, y m ahí, la abuela tenía toda la razón.

La puerta no conducía a ninguna parte, estaba cubierta de ladrillos, nada más.
Applejack miró a su abuela, como si esperara una explicación al respecto de eso.

Abuela Smith: Cuando en esta casa había solo una vivienda, la puerta sí llevaba a algún lugar, pero cuando dividieron la casa en pisos, decidieron tapizarla con ladrillos. Al otro lado hay un piso vacío, en el extremo opuesto de la casa, que está en venta.

Cerró la puerta sin ponerle llave y dejó la llave en su sitio.

Applejack: No la has cerrado con llave.
Abuela Smith: Y para qué  iba a hacerlo? No vas a ningún lado.

Applejack no dijo nada al respecto.
Más tarde, llegando la noche, la lluvia seguía cayendo.
Las gotas de lluvia tamborileaba sobre las ventanas de la casa.
Big Mack preparó la cena para su Abuela, Applejack, Applebloom y Winona.
A Applejack no le gustó para nada la cena que preparó su hermano mayor, ya que...
Esta era la primera vez que su hermano preparaba algo...
Asqueroso... cosa que fue algo raro para Applejack, ya que su hermano sabía cocinar, no mucho pero lo hacía, y no preparaba así de horrible para nada.
Y... lo peor de todo, era que Big Mak desde hace un tiempo empezó a cocinar horrible ahora...

Applejack: Big Mack... has vuelto a hacer una de tus recetas?
Big Mack: Es un guiso de patatas y zanahorias aderezadas con tomate y queso gruyer fundido.

Applejack suspiró. Luego se dirigió al refrigerador y sacó una manzana roja fresca.

Applejack: Sabes muy bien que no me gustan esas recetas hermano.
Big Mack: Si la probaras, a lo mejor te gustaría.

Applejack solo negó con la cabeza por eso.
Aquella noche Applejack permaneció mucho tiempo despierta.
Había dejado de llover, pero cuando la rubia estaba a punto de dormir, percibió algo, un ruido algo extraño.
Applejack se incorporó, escuchando aún el ruido.
La pony terrestre salió de la cama y miró hacia el vestíbulo, aunque ahí no vio nada raro, pero de todas formas fue a ver.
De las habitaciones que pasaba Applejack, salían unos ronquidos profundos y unos murmullos soñolientos e irregulares.
Por un momento, Applejack pensó que quizás solo había oído esos ruidos en sueño.
Pero justo en ese momento, ese pensamiento fue totalmente descartado, cuando miró algo moverse.
Había una figura difusa que se deslizó rápidamente por el oscuro vestíbulo.
Applejack confío en que no se tratara de algo horrible, como una araña grande o algo parecido.
La figura negra entró en el salón, y Applejack la siguió con cierta inquietud.
La habitación estaba en penumbra, la única luz que había del vestíbulo, y Applejack, de pie en la puerta, proyectaba una gran aombra dedorme sobre la alfombra del salón...

Parecía una potranca delgada y gigantesca...

Applejack no sabía si encender o no las luces cuando miró que la figura negra salía lentamente debajo del sofá.
Se detuvo y después atravesó la alfombra en silencio hasta llegar al último rincón de la sala.
En esa esquina, no habían muebles...

Applejack encendió la luz, pero... en el rincón no había nada, sólo la vieja puerta que daba a la pared de ladrillos.
La pony naranja estaba segura de que su Abuela la había cerrado, y, sin embargo, parecía entornada, un poquito abierta.
Applejack se acercó y miró hacia el interior...

No había nada..... únicamente una pared de ladrilloa rojos.....

Por tanto, Applejack cerró la puerta de madera, apagó la luz y se fue a la cama.
Esa noche, Applejack soñó con figuras negras que se deslizaban de un sitio a otro, esquivando la luz, para reunirse bajo la luna. Figuritas negras con ojos rojos y dientes afilados amarillos.
Figuritas que empezaron a cantar:

Somos pequeñas pero somos muchas
Somos muchas y somos pequeñas
Estábamos aquí antes de que llegaras
Seguiremos aquí cuando te caigas.

Las voces eran agudas y formaban un rumor levemente quejumbroso, cosa que a Applejack la pusieron muy nerviosa.
Luego Applejack soñó con anuncios, y más tarde dejó se soñar.