Jimin siempre fue seguro de sí mismo, no tenía dudas respecto a cuanto Jungkook lo amaba, se sentia confiado.

Pero entonces Jungkook habia conocido a Will, un chico de intercambio que venía desde Australia al cual ahora Jungkook estaba ayudando a familiarizarse con la universidad y con la ciudad. Caminaban a casa despues de clases, Will pasaba por él todas las mañanas pues sus clases iniciaban una hora antes a las de Jimin.

Ahora Jimin se encontraba esperando afuera de la facultad de Jungkook, acordaron ir a casa juntos. Pero los minutos pasaban y Jungkook no salia. Fue entonces que el celular de Jimin comenzó sonar.

-Hola, amor -Jungkook hizo una pausa mientras le indicaba a alguien más el nombre de un libro. -Cariño, tengo que quedarme para terminar unos proyectos, nos dejaron varios para mañana nuevamente. Estaré en la biblioteca

-Entiendo, uhm... ¿Quieres algo de comer? Puedo traerte.

-Oh no, amor, Will fue a la cafetería por algo -soltó una risita y Jimin apretó un poco el celular en su oreja.

-Cuando termines ¿puedo pasar por tí?

-Por supuesto. ¡Oh! Will volvió, te amo, nos vemos mas tarde.

-Te amo más -dijo antes de colgar.

Jimin permaneció unos momentos ahí. Él confiaba en Jungkook, asi que pensando en eso, volvió a casa.

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Jungkook estiró su cuerpo y bostezó. Después de algunas horas por fin habian terminado, asi que él y Will se dirigian a la salida.

-¿Irás a casa solo? -preguntó Will mirándolo.

-No, Jimin vendrá por mí -sonrió y Will trató de hacer lo mismo.

-Ya veo. Parece que son bastante unidos.

-Obvio. Fuimos mejores amigos por muchos años antes de ser novios, Jimin es mi alma gemela.

-¿No es... Aburrido?

-¿jimin? Claro que no.

-No él, si no que estar tantos años con la misma persona, no conoces nada nuevo.

-¿Y por qué deberia querer algo nuevo?

-A veces se necesita cambiar de ambiente.

-Jimin es todo lo que necesito.

Will suspiró. Estar con Jungkook era escucharle mencionar a Jimin en cada oportunidad que veía. Y le parecía tierno, pero ahora mismo no quería hablar sobre Jimin.

-Okay, guapo ¿Qué te parece si vienes a mi casa? -Will se giró a él tomándolo rápidamente de la cintura y acercandolo a él. Jungkook lo miró confundido. -Podrías ver que probar algo nuevo no es malo y Jimin no tiene que saberlo.

Will se acercó, pero entonces Jungkook fue más rápido y lo alejó al mismo tiempo que le golpeaba la cara con el puño de la mano. Will lo miró acariciando la zona afectada con su mano.

-Amo a Jimin, si yo quisiera probar algo nuevo o cambiar de ambiente lo haría con él -de pronto Jungkook parecía enojado y Will se limitaba a mirarlo. -Si seguiremos conviviendo no vuelvas a hacer estas cosas o entonces no te hablaré más porque no quiero tener problemas con Jimin o que se sienta inseguro a causa tuya.

Jungkook bajó los últimos escalones y salió de la facultad. Will suspiró, sin duda Jungkook le gustaba, pero por lo visto Jimin ya tenia más que solo el amor incondicional de Jungkook asegurado.

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-¿Estás bien? Has estado callado -habló Jimin y Jungkook lo miró. Ambos caminaban por las calles que los conducían a su hogar, el sol estaba por meterse.

-Es sobre Will -lo miró y Jimin entrelazó su mano con la de Jungkook. -Me propuso ir a su casa e intentar algo nuevo.

-¡¿Qué?! -Jimin se giró a verlo. -Ese idiota.

-Obviamente le dije que no y que no vuelva a hacer algo así.

-Desde un inicio no me daba buena impresión ¿Qué le sucede? ¿Qué no ve que tienes novio?

Jungkook sonrió mirandolo y le tomó el rostro entre sus manos.

-Le dejé muy en claro que no necesito nada ni a nadie más que a tí.

Jimin colocó sus manos sobre las de Jungkook y lo miró.

-En algún momento tuve miedo de que Will pudiera comenzar a gustarte -dijo y Jungkook lo miró. -Sí, tal vez es una tonteria, pero no podia controlar ese pensamiento.

-Lo entiendo, me pasó con Kai

-Yo no te cambiaría por nadie, kookie.

-Lo sé y lo mismo va para tí -ambos se miraron, Jungkook le sonrió. -Eres al único que necesito.

-Quédate a mi lado siempre.

-Es una promesa.

Jimin sonrió ampliamente tomándolo de la cintura mientras ambos seguian su camino. Quizás la vida les pondría pruebas, pero siempre que estuvieran juntos podrian con todo.