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AARON POV
Estaba fascinado con la familia de Valentina. Al menos sus familiares femeninos que son los que pude conocer bien en un principio. La madre de Val es todo lo que me imaginé. Una persona estricta y cerrada ante muchas ideas pero que claramente, ama con todo corazón a su hija y quiere lo mejor para ella. No fue la mas feliz con el tema de que yo fuera el novio, falso por supuesto, pero al final terminó siendo muy amable conmigo, como todas sus tías y primas. En especial su abuela, creo que es una persona de lo mas linda.

Estar en México me aterraba demasiado, mas porque yo no conocía. Pero tengo que admitir que estoy encantado... en especial con Valentina. Si de por si yo ya estaba de lo mas fascinado con ella, ahora creo que mas. Si es que eso es posible. Tiene el corazón mas enorme de todos, y no puedo entender como todos en su vida, me refiero a su familia, son tan duros con ella. No lo merece, es todo un ángel y se desvive por su familia. Incluyendo a su hermana. Valentina es perfecta y me alegra decir que es mi amiga.

Tomé asiento en la mesa donde Poncho me trajo. Estábamos en el sótano de la casa creo, si no me equivoco. En fin, todos los tíos y el padre de Val se encontraban apenas sirviéndose de tomar a lo lejos mientras Poncho preparaba las cartas.

- oye y dime ¿cuanto tiempo llevan tu y Valentina saliendo? - este dice, sin siquiera voltear a verme. Estaba muy enfocado en sus cartas y claro, su ego no se lo permitía.

- una semana. - no podía mentir con aquello, toda mi información se encontraba en internet, y se que el lo sabía. Tan solo está esperando que me equivoque en alguna mentira y me exponga a los demás. No lo iba a permitir.

- pero que enamorado debes estar. O quizás solo quizás, Valentina fue tu escape para dejar a tu esposa. - voltea a verme de inmediato. - claramente se que estuviste casado por años.

- si, tienes que saberlo, soy una celebridad. - ¿suelo presumir aquello? No. ¿Disfrutó hacerlo con tal de molestar a este idiota? Por supuesto que si. - ¿qué más investigaste sobre mi en los diez minutos que tardaste en el baño?

- tus películas... que claro, no conozco ninguna de ellas porque deben ser de lo mas ordinarias y obsoletas, nadie aquí las conoce, te lo aseguro.

- Valentina las conoce todas, con eso me basta.

- algo quieres. - hace una pausa y se dedica a mirarme pero con un enojo tan evidente que ni el mismo encontraba cómo controlar. Yo empiezo a tomar mis siete cartas como tiene que ser y sonrío victorioso. - oh vamos ¿por qué saldrías con ella? Eres famoso, podrías tener a cualquier mujer en el mundo. Pero escogiste a la mujer que tenía que ser mía.

- te lo diré una vez, antes de que su padre se acerque porque odiaría ver que te escuché decir cosas como esas. - suspiré hondo. - nadie tiene dueño, Poncho. No tienes ningún derecho sobre ella y vamos, no porque así estableciste que lo querías, es que tiene que pasar.

- solo digo que está en estos momentos emocionada de estar contigo solo porque eres su puerta a tener trabajo. Es lo que ella quiere. Su más grande sueño es ser maquillista en una película, tú eres tan solo su acceso. Ni siquiera le importa tener una pareja... seas tú o sea yo. Eso lo sabes ¿no? Debes conocerla bien.

- la conozco bien. - dije y vi como ya todos vienen para acá para jugar, incluyendo a su padre. - y puede que eso fue real en algún momento, pero ya no lo es. Es feliz, muy feliz en una relación. Somos felices juntos y... - al darme cuenta de que era verdad, de lo feliz que me hacía, no pude evitar sonreír. - creo que nunca había tan feliz como ahora que estoy a su lado.

- buen uso de palabras para el momento en el que yo llegara. - dice su padre mientras se sienta a un lado mío y sonrío nervioso, Poncho en cambio, tan solo me mira molesto. - ¿y bien? ¿Vamos a jugar?

- por supuesto. - contesté y entregué las cartas a los demás. - ¿cual quieren jugar?

- apostemos. - dice Poncho interrumpiéndome. - eres un actor, debes tener mucho dinero. Apuesta una grande cantidad, si es que te animas, claro.

- ¿eso quieren? - pregunté viendo a todos en la mesa y la mayoría asiente, pero el padre de Val no dice nada y tan solo me mira esperando a que tome una decisión. - de acuerdo, no tengo problema con ello.

- ¿qué pasa si pierdes el dinero? - el padre de Val me comenta y es la primera vez que me dirige la palabra directamente. - no creo que estés para arriesgarlo solo por tu ego.

- no es mi ego, es solo que... ¿vamos a jugar, no? Siempre se apuesta. - levanté ambos hombros. - a menos de que ustedes no quieran.

- yo por mi si. - dice alguno de los que yo creo que es un tío y ríe emocionado. - Aaron, tú me agradas mucho. Ya quiero que seas parte de la familia.

- ¿parte de la familia? Primero se tendrían que casar, lo cual dudo. - el señor ríe y voltea a ver a Poncho.- de todas maneras, el plan era que siempre fuera este muchacho parte de la familia.

- pero si Valentina no lo quiere. - dice ese mismo tío y me alegraba que fuera el único que estaba pensando razonablemente aquí. - y se ve que se gustan mucho.

- ¿qué? ¿Apoco te ves casado con mi hija? - este me pregunta y todas las miradas se centran en mi.

- en una semana. - agrega Poncho para hacerse el gracioso y todo mundo se ríe por igual.

- si. - dije sin siquiera pensarlo. De verdad. Admito que no lo pensé. Y me siento mal, claro que me siento mal porque tengo novia. Tengo una novia y esa no es Valentina. Es Raquel, la cual quiero y demasiado. Ha sido mi mejor amiga por años y mi fuente de alegría cuando todo siempre estaba mal. Pero es tan diferente con Val. Mi sonrisa se borra en el momento que me doy cuenta de que estoy haciendo ; me siento mal.

- ya lo veremos. - Poncho dice y empieza el juego.

...

VALENTINA POV
- ¿podemos hablar? - le dije a Abril, ella se encontraba en la sala de estar, tan solo acomodando de los cojines que nuestros primos movieron todos y la seguí por el lugar para por fin tener esta conversación a solas.

- creo que ya estamos hablando, Valentina. - esta me dice con esa maldita risa cínica y le arrebate de la mano el cojín para que me viera. - pero que infantil eres.

- ¿yo? ¿Dices que yo soy la infantil? Yo no pasé toda la cena tratando de hacerte ver mal. Dime ¿qué fue eso? Nunca habías sido así.

- ¿así como?

- ¿realmente quieres que lo diga? - ella levanta ambos hombros, como si no le importara que estuviera por decir. - como una completa idiota.

- lo dice la chica que trajo a su novio de solo una semana a conocer a su familia. ¿Quien es la idiota aquí?

- ni puedo creer que digas eso cuando ¡gracias a ti es que Aaron está aquí! Literalmente lo obligaste, Abril. Dijiste que si esto era tan serio como el lo prometía, tenía que venir. - me cubrí el rostro de lo desesperada. - no puedo creerlo, de verdad eres todo un dolor de cabeza.

- es que yo no entiendo, Val. Yo no puedo entender como el se divorció y de la nada decidió que su mundo entero ibas a ser tu. Esa no es la vida que tú quieres... tú odias Inglaterra, odias todo eso. Y aparte ¿ser madrastra? No, Val. Basta, esto fue un error.

- ¿solamente por que lo dices tú? Abril, tú no eres la única que puede tener una vida fuera de aquí. Tu no eres la única con sueños... con aspiraciones... ¡con ambiciones! Y creo que siempre ha sido ese tu problema. Que piensas que eres la única pero te recuerdo que somos hermanas y que tuvimos las mismas oportunidades de seguir adelante, de mejorar nuestras vidas. Las mismas.

- es que no puede ser lo mismo cuando yo me desviví, Valentina. Yo no dormía con tal de estudiar medicina y de por fin un día decir que era medico. - la miré con plena seriedad al ver lo triste que estaba de decir aquello. Como sus ojos lloraban con tristeza, como ella deseaba que yo pudiera entenderla y dejara mi enojo de lado. - ¿sabes lo mucho que yo deseaba un "estoy orgulloso de ti" de papá? De una manera inexplicable, por algo estudié medicina.

- Abril, no le debes nada a nadie. En el mejor de los casos... ambas tenemos lo que tenemos actualmente por nuestras parejas. Tu vives allá y tienes ese empleo ahí por Tom y... yo tengo un nuevo trabajo por Aaron y...

- ¡por Dios, Valentina! Lo que tienes es gracias a mi, no a Aaron. - la miré con el ceño fruncido al ver como gritaba como toda una desesperada. - yo fui quién tenía invitó a vivir en Inglaterra, no el. Gracias a mi lo conociste.

Le puse los ojos en blanco.

- me da tanta risa como todo lo quieres hacer sobre ti, es increíble. Es imposible como...

- Tom tiene una amante. - dice de golpe y ante la sorpresa, no hayo que decir. La miro tan solo a los ojos y ella no lo tolera. Se sienta y se cubre el rostro mientras empieza a llorar un mar. - esa es la razón por la cual no vino, creo que nos vamos a divorciar.

- ¿Tom el esposo politico perfecto es infiel? - me senté a un lado suyo y la miré esperando una respuesta pero no dice nada, solo sigue llorando y me doy cuenta de que quizás no fui la mas sutil. - lo lamento tanto, Abril.

- no podía seguir con esa farsa de que mi vida es perfecta, Val. - por fin me mira. - pero tampoco quiero que mis padres se enteren. Al menos en un principio, ahora... - suspira hondo. - inclusive ahora estoy pensando en regresarme a México.

- Abril. - la interrumpí. - de verdad lamento en serio que estes pasando por esto. No lo mereces, de todas las personas en el mundo, si es que realmente alguien merece eso, lo cual no.. - pone los ojos en blanco. - tu no lo mereces. - se limpia la nariz ya que ya estaba chorreando moco. - Tom siempre ha sido un idiota, si eso sirve de algo. Nunca me agradó.

- lamento haber sido muy dura durante la cena contigo. Solo... solo estaba muy celosa de ver que tu te habías convertido en la estrella esta noche.

- ¿yo? ¿De verdad dices aquello? - me reí. - Abril, mis papás odian a Aaron. No soy la estrella de nada ni en ningún lado, esa eres tu. Sigues siendo tu ¿no lo entiendes? No necesitas a Tom para brillar. Tu solita... eres la mejor. ¡Eres doctora! Eres hermosa, eres muy agradable... eres muy inteligente.

- fui una idiota contigo, lo siento ¿okay? Solo quiero... dejar eso bien en claro. - asiento con la cabeza y la termino abrazando. - se ve que ustedes dos se quieren en serio. No veo como el aceptaría hacer tantas cosas por ti como venir hacia acá solo porque tú se lo pediste y... - se ríe. - inclusive, el pasar tiempo con papá a solas. A mi me aterra la idea. No me imagino el.

- tan solo espero que no lo haya matado ni nada por el estilo. - dije para a nivelar los aires aquí y me separe para verla.

- no mentí, cuando dije que me encantaría venirme de nuevo a Mexico. Inglaterra es fabuloso pero era fabuloso una vez que Tom entró en mi vida. Yo no tengo nada para mi allá, esa vida que amo y que he trabajado mucho por tener, ya no se siente tan... perfecta.

- ¿y tiene que serlo? ¿Realmente es necesario hacer tu vida de una película donde todo es bonito y genial? Quiero decir, si te quieres quedar en Londres, es porque realmente te gusta. Es porque te hace feliz y... - hice una pausa ante ello, al darme cuenta de lo que pasaba. - pero tú quieres eso. Y te duele saber que ahora no podrás tenerlo.

- no trabajé tan duro para nada. Esa vida yo me la gané y quisiera seguir en ella. Pero por otra parte, si deseo... esto. - sonríe y voltea a ver de la casa. - estar aquí me hace extrañar demasiado. Deberíamos regresarnos. Juntas.

- yo... - negué con la cabeza. - no me regresaría, Abril.

- tu odias Inglaterra.

- lo odiaba. Pero ahora... de verdad no veo porque dejar el lugar. Tengo por fin un trabajo que es el de mis sueños. Por fin tengo amigas... mi mejor amiga es Florence Pugh. - reí. - Amanda, la hermana de Aaron, ella es fabulosa. - sonreí de tan solo recordarla. - ¡sus hijos! Son las criaturas mas preciosas que he conocido y de verdad Abril... si los conocieras bien... - sonreí. - Aaron es el mejor de todos. Es fácil mi persona favorita en el mundo. No me veo pasando mas rato sin el en mi vida. Es tan atento, y muy divertido. Me hace reír como nadie. Me escucha y... es de las pocas personas que no me hace sentir mal cuando le comento algo que amo mucho. Es mas, lo apoya. Van a pasar su primer Halloween sus hijos solo porque sabe que me encanta. Hemos visto películas de miedo y... - sonreí. - adoro simplemente el hecho de que este aquí.

- estás terriblemente enamorada de el ¿lo sabes, cierto? - y no se que tan segura me encontraba de decirle la verdad a mi hermana sobre nuestra relación falsa. Ella acababa de abrirse conmigo y fue honesta y yo seguía mintiéndole en la cara. Pero la cosa aquí es que, no le estaba mintiendo del todo. Creo que me he enamorado de Aaron por completo. Si, siempre me ha gustado y lo he encontrado lindo y todo aquello. Pero ahora... ahora no quiero que se vaya de mi vida de nuevo.

- creo que si lo estoy. Estoy perdidamente enamorada de el.- sonreí al darme cuenta de ello y me puse de pie de inmediato. - debería ir a buscarlo. El juego de cartas acaba pronto y... tenemos que ir a dormirnos. Iré a buscarlo.

- yo iré a dormirme de una vez. - por igual se pone de pie y me da un abrazo para despedirse.- por favor, evita hacer cosas con tu novio porque recuerda que nuestras habitaciones están lado a lado y no quiero escucharlos...

- no va a pasar. - dije de inmediato. - tranquila, no tienes nada de que preocuparte. - ella ríe y se esta por subir las escaleras cuando la detengo. - oye um... cualquier cosa, de verdad, puedes hablarlo conmigo.

- Gracias Val.

- y... - se detiene de nuevo cuando hablo. - si sirve de algo, siempre pensé que Tom era un idiota. Y no huele para nada bien. Te has librado de ese pequeño problema.

- si... no huele nada bien. - ella ríe pero se que aun le sigue doliendo. No le queda mas que subirse y tratar de olvidar el problema por la noche.

Ahora que aun tengo el tiempo suficiente como para pensar bien las cosas y analizar mis sentimientos, pude pensar en todo lo que Aaron significa para mi. Lo mucho que lo quiero... viendo como es conmigo desde siempre. Con lo del trabajo, con como siempre vio por mi respecto a lo sucedido con Michael y ahora conn mi familia. Fue un amor... todos lo amaron, al menos si mis tías y mi abuela. Y sin mencionar como todas mis primas se enamoraron de el pero ese no es el tema aquí. El tema aquí es que yo no podía dejar de sonreír al pensar en el y como deseaba verlo y decirle como me siento realmente.

Salí de la casa buscándolo, ya que vi que ya todos estaban saliendo por la entrada para ya irse, tíos y de mas. Seguí buscando por todo el jardín en busca de el y escucho su voz, así que sigo avanzando hasta alcanzarlo.

- yo también te extraño mucho. - me detuve de inmediato al escucharlo hablar por teléfono. - si... Raquel, ya quiero verte de nuevo. - logro ver como sonríe. - estamos pasándola muy bien aquí y um... regresaremos a buen momento para la película, lo prometo. - se hace una pausa. - yo también te quiero mucho. - ouch. Mi corazón olvidaba que Aaron ahora estaba tratando de ser feliz con alguien mas. Que horrible. Me voltee para regresarme y que no viera que escuché su conversación pero fue muy tarde. -  hey, hola..

- hola. - dije nerviosa y algo incomoda. - um... ¿cómo te fue? ¿Te quedaste sin dinero?

- te deberá sorprender pero... he ganado. - sonreí emocionada por el y este igual, se veía feliz. Claro, porque acababa de hablar con su novia. Pequeño detalle. - tu familia es increíble. Batallé mucho en hablar bien con tu padre pero fue cuestión de tiempo para que nos lleváramos bien. Me dijo que me despertara temprano para ir a correr con el y he aceptado. Oh, y me dijo que después fuéramos tu y yo a un ¿"tianguis"? ¿Qué es eso?

- es... um... - en verdad me era muy difícil hablar con el como si nada, después de tal descubrimiento de sentimientos. - vamos a descansar, qe tienes que levantarte temprano.

- espera. - me toma de la mano para detenerme. - ¿te encuentras bien? Te noto algo rara. ¿Pasó algo?

- nada en lo absoluto. - le fingí una sonrisa y entramos a la casa.

NOTA: OIGAN PERDÓN POR TARDAR MIL, MAÑANA ACTUALIZO DE NUEVO