Sam

—Y que harás esta tarde.—Me preguntó Tucker cuando ibamos caminando hacia la salida de la escuela.

—No lo sé, la vida es tan aburrida y tan poco interesante.—Dije aburrida.

Volteé a ver a mi alrededor en muesta de aburrimiento y ví a Fenton junto a Valerie. Otra chica que tampoco me agradaba del todo.

—Oye Tuck, no sabía que esa popular hablaba con Fenton— musité ya que se me hacía algo curioso verlos a ambos hablar de incógnita. Nunca había visto a Fenton hablar con alguien más, menos con una chica popular.

—Yo tampoco sabía, que raro...— mencionó. Entonces a mi querido Ticket se le ocurrió una maravillosa idea—. Oye Sam, ¿que tal si vamos a jugar videojuegos con ellos dos?— Me dijo tratando de no señalarlos.

—¿Estas loco Tuck? En primera, son raros y ni si quiera sabía que se hablaban, en segunda, ni si quiera nos hablamos— puntualicé en un tono molesta.

—Pero es Valerie, si convivo más con ella tal vez agrade y acepte salir conmigo— El chico suplicó para que aceptara.

Rodé los ojos y miré a los chicos que hablaban de manera incognita.

—Hazlo por tu mejor amigo— susurró.

Volví a mirar a Tucker y asentí.

—Esta bien, pero con una condición, aleja a ese raro de mí, ¿ok?

—Ok— Se giró y fué hasta donde estaban Fenton y Valerie, yo lo seguí. Cuando llegamos a donde estaban Tucker comenzó a hablar.

Mi amigo si que era bueno presentándose o tal vez Valerie estaba siendo amable con nosotros porque no nos pidió largarnos, pero en cambio de repente cambió su tono y expresión.

—Ustedes saben que hablo con Fenton... ¿Que se traen ustedes?— mencionó.

—Oh, calma, ¿no diremos nada a nadie? Solo queríamos invitarlos a jugar videojuegos o a ver una película...nosotros cuatro— dijo Tuck.

—¿Eh?— Se quedó sorprendida la morena— ¿Por qué saldríamos con ustedes?

—Valerie, solo queremos llevarnos bien—. Esta vez hablé yo con mi tono de un poco molesta.

—…¿En que lugar?—La chica se atrevió a decir luego, tal vez se sintió mal por pensar mal de nuestras intenciones.

—En casa de Sam, por supuesto.—Tucker se adelantó a decir. Queria negar pero Valerie siguió hablando.

—Tu que dices Danny.—Se dirigió al chico Fenton.

—Eh, no estoy seguro. Veré si tengo esta tarde libre— susurró el joven ojiazul.

—Esta bien, iremos— terminó por decir.

Ya luego le dí mi dirección a ambos y acordamos la hora en que nos veríamos.
Cuando ya se habían ido decidí reclamarle a Tucker pero este ni me escuchó por que estaba enbobado con Valerie, y ahora tenía que ver a ese marginado en mi casa y tener que ser amable con ellos dos. Luego los dos nos fuimos por nuestra parte.

Danny

En cuanto dejé mis cosas en mi habitación tomé mi teléfono y llamé a Valerie.

"Danny, hola"

"Hola Val, me preguntaba si en verdad ibas a ir con la gótica y su amigo"

"No lo se Danny, son fracasados, ¿En serio quieres ir con ellos?"

"Pues...no iré si tu no vas"

"Eh yo...no lo decido bien aún"

La llamada fué interrumpida debido a un ruido en el laboratorio de mis padres.

—¡Esta listo Maddie, esta arma cazafantasmas atrapará a cualquier fantasma y los destruirá! También detecta fantasmas cercas.—Mi padre entusiasmado por su nueva arma cazafantasma me hizo cambiar de opinión.

"Valerie, iré." Y colgué la llamada.

Sam

—¡Ya te dije que no vendrán Tuck!—Le grité pues parecia un desesperado esperandolos al pié de la puerta.

—Vamos, si vendrán.—Volteó a verme.

—De acuerdo, vendrán, pero no los esperes al pié de la puerta que se ve raro. Mejor vallamos al sotano a buscar alguna pelicula.

—Si claro, tu gran sotano que no es sotano si no una gran sala de cine.—Imitó un tono de voz irritante.

—Ahg como digas.

Ibamos bajando al sotano cuando alguien llamó la puerta. Tucker quería ir a abrir pero le dije que yo iria por que esa era mi casa. Fuí a abrir la puerta y a la unica persona que ví fue a Fenton.

—Eh. hola— dijo nervioso.

—H-hola Fenton, pasa— me sentí nerviosa también, tan solo porque debía desde ese momento intentar ser amable con él.

El chico asintió y pasó, fuimos hasta el sotano en donde quedó maravillado por el lugar. Pero yo aún tenia una duda, donde estaba Valerie.

—Oye Fenton, ¿donde está Valerie?—Pregunté.

—No lo sé, de seguro se perdió por allí buscando la casa de una gotica y no de una ricachona como tú.—Sentí como si se hubiera burlado de mí.

Estaba a punto de hablar cuando el sonido de un telefono me impidió. Era el telefono de Fenton. Este contestó y después de un "no te preocupes, ya voy" se fué.

—Y ahora por...—Interrumpí a Tucker.

—¡No lo sé y no me preguntes, ya deberias saberlo, no me agradan y a ellos tampoco les agradamos!

Le grité y solo se quedó callado.