Dulce melodía
-Entonces, está decidido, se hará una nueva canción para M's- aquella sentencia la había hecho Eri tras una larga conversación entre todas.
Ciertamente no era como si ese día fuese especial, al menos para siete de las nueve miembros, entonces ¿Qué pasaba con las dos restantes? Esas eran la escritora y la compositora de M's, Sonoda Umi y Nishikino Maki respectivamente, pues el hecho de tener que quedarse con la otra ya les incomodaba bastante desde hace un tiempo atrás, ¿La razón? Un sentimiento, un sentimiento que tanto la pelirroja de primero como la peli azul de segundo sabían que era enteramente correspondido por la otra, dad esta situación su convivencia se volvía incomoda pues ambas chicas pensaban que si se comportaban distantes y algo frías con la otra, no serían tan obvias y sus sentimientos no saldrían a flote como ellas no querían, pues volviendo al principio, no sabían que sus sentimientos eran mutuos a pesar de todo.
-Perfecto, entonces está decidido, se lo encargamos Maki-chan, Umi-chan- decía la líder a aquel par que tras la mención de sus nombres se sobresaltaron un poco.
-Esto es un fastidio, ¿Por qué nos obligan a quedarnos juntas después de la escuela para hacer una estúpida canción nueva?- la pelirroja era la primera en quejarse, no es que le molestara quedarse con Umi, de hecho era todo lo contrario, lo que no quería era ponerse nerviosa como de costumbre y tartamudear, pues la peli azul lo notaria.
-Es verdad ¿Por qué no lo podemos hacer como de costumbre? Cada quien en la comodidad de su casa, y cuando esté lista unirla- esta vez se quejó Umi con la líder, Honoka, que sonreía rascándose la mejilla ante las quejas de ambas compositoras.
-Bueno…. A decir verdad ni yo misma se el por qué se tomó la decisión así- contestaba despreocupadamente la oji azul causando que su amiga Umi se irritara.
-…Honoka…..- hablo la peli azul con voz realmente seria que le dio un mal presentimiento a la castaña, esta pronto se escudó a espaldas de Eri que miraba divertida la muy común escena.
-tranquila Umi-chan, No culpes a Honoka, todas estamos involucradas en la decisión- se acercó la confiable amiga peli gris de ese par a calmar a Umi, pues era la única que podía apaciguar a ese furioso mar.
-pero… Kotori…..- trato de protestar una vez más la peli azul, pero la sonrisa de súplica de Kotori la hizo ceder como siempre.
-Hazle caso a Kotori-chan, Umi-chan, todas preferimos que las cosas fueran así, aunque si desean culpar a alguien, puedes culparme a mí, yo fui la de la idea- la mayor del grupo por fin se animaba a hablar tras ver la cómica escena de hace un momento, tanto Umi, como Maki se sobresaltaron ante el pensamiento de saber que la de aquella "fabulosa" idea había sido nada más y nada menos que Nozomi.
-¿Por qué proponer algo así Nozomi? Es bastante molesto quedarme después de la escuela para componer una canción- se quejaba ahora Maki con la peli morada que mantenía siempre aquella sonrisa amigable en su rostro.
-Bueno, creí que sería una buena manera de convivir y de trabajar mejor, ya sabes, Umi-chan siempre suele estar con Honoka-chan y Kotori-chan, convive muy bien con Ericchi y conmigo también, además de que suele tener conversaciones a menudo con Rin-chan, Hanayo-chan y Nico-chan, ahí entra el problema en que a pesar de ser compañeras de composición, Umi-chan últimamente casi nunca interactúa con Maki-chan, y en el caso de nuestra pequeña Tsundere, Nico-chan suele llevarse la mayoría de su tiempo peleando con ella, es demasiado apegada a Rin-chan y Hanayo-chan, también conversas a menudo con el resto y volvemos al mismo punto, Umi-chan queda fuera del alcance, por eso se me ocurrió que sería buena idea que cada miembro conviva más entre si y empezando por ustedes que son un equipo sumamente necesario que casi no convive como debería- explicaba Nozomi a ambas chicas y al grupo en general que solo miraba a que venía la idea de Nozomi de hacer quedar a Maki y a Umi a componer una canción.
Por su parte, las afectadas se encontraban con cierto nerviosismo cada una, y a su vez luchando consigo mismas para que el ligero rubor en sus mejillas no las delatara ante la situación y la peli morada frente a ellas, porque seguro recibirían una burla por parte de esta.
-Es verdad, pero….. Esto es un poco…..- trato de hablar Maki de nueva cuenta, mas sin embargo Nozomi poso uno de sus dedos sobre sus labios silenciándola y sonriéndole más ampliamente.
-Sin quejas Maki-chan…. Ya está decidido- agrego Nozomi con voz cantaría y la pelirroja resignándose, suspiro.
-Buen, entonces, es hora de volver a clases, si llego tarde otra vez me suspenderán- hablaba Nico saliendo dándose la vuelta entrando de vuelta al edificio escolar, pues el grupo se encontraba en el techo.
-Típico de ella- dijo Hanayo mirando la dirección a la que se había ido la pelinegra.
-Aunque nosotras también deberíamos volver Kayo-chin, nos toca gimnasia y tenemos que cambiarnos y llegar pronto para tener los mejores lugares- decía Rin tomando la mano de la castaña de ojos grises y sonriendo como siempre tan enérgica lo hacía.
-E…Espera Rin-chan…. ¡Ve más despacio!- se quejaba de vuelta Hanayo siendo arrastrada por su mejor amiga de la mano y entrando también al edificio.
Maki miro a sus dos compañeras irse y solo dejo escapar un suspiro más antes volver su vista a las mayores con cierta molestia pero trato de no demostrarla, aunque le incomodara, Nozomi tenía su punto y tenía razón.
-Yo debo volver también, así que adiós- se despedía de las demás y comenzaba a caminar en dirección a la puerta para entrar al edificio también, esto sin antes volver a voltear, pero esta vez específicamente a Umi con un ligero rubor en sus mejillas. – T…Te veo en el salón de música cuando terminen las clases…. U...Umi- diciendo esto último, cerró la puerta tras de sí dejando a las mayores en el lugar.
-Maki-chan parece algo nerviosa ¿segura que es buena idea Nozomi?- preguntaba la rubia a su amiga en un cercano susurro.
-Por supuesto, confía en mí- respondió Nozomi con una gran sonrisa y se giró para mirar a las demás. –Es hora de que volvamos también- finalizo la conversación retirándose del lugar.
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Umi se encontraba pensativa ¿Cuándo había sucedido que se había enamorado de Maki? La pelirroja era poco flexible, gruñona y correcta, eran parecidas en muchos aspectos y la incógnita entraba a que a Umi no le paso nunca por la cabeza enamorarse de alguien tan parecida a ella.
-¿Umi-chan?- la llamo Honoka con cierta voz preocupada lo que hizo reaccionar de inmediato a la morena.
-¿Honoka?... no te distraigas, presta atención a la clase- susurraba Umi mirando de reojo a la castaña que solo rio con sarcasmo.
-Umi-chan…. La clase acaba de terminar, tenemos una hora libre- decía aquello a Umi que se ruborizo ante su descuido y miro el piso.
-ah…. Lo lamento entonces, bueno….. iré a comprar algo para beber- decía Umi poniéndose de pie, lista para irse pero esta vez Kotori la retuvo.
-Umi-chan no te ves muy bien, estuviste toda la clase perdida y eso es muy raro en ti- hablaba Kotori preocupada por la peli azul que se sintió mal por preocupar a sus amigas.
-No es nada grave… solo…. Son tonterías mias…. So…solo eso- decía Umi algo avergonzada al recordar el por que de su distracción.
-Bueno, si no es nada grave puedes confiar en nosotras- hablaba Kotori con la Peli azul que solo se ruborizo ante la simple idea.
-¡Que….que no tengo nada ma…malo! Además…. Eso es muy…ve…ver…vergonzoso….- decía con completa dificultad la morena, esa actitud dejo más que claro lo que sucedía a Umi, algo romántico la afectaba.
Unos segundos realmente incomodos invadieron el ambiente entre las tres chicas, las no involucradas se miraban repentinamente para después a mirar a la peli azul que se encontraba mirando el piso nerviosa y jugando con sus propios dedos.
-Acaso….. Estas así porque tú y Maki-chan…- trato de decir Honoka pero Umi la irrumpió de inmediato con su rostro completamente ruborizado.
-¡No!... No es eso…. ¿Cómo te atreves a decir que estoy enamorada de Maki?...- dijo aquello descuidadamente y aun denotando su evidente nerviosismo aún más.
Kotori y Honoka se miraron con sorpresa para después soltar una risita que desconcertó a Umi, realmente no sabía que le causaba tanta gracia a sus amigas.
-Umi-chan, yo nunca dije que estuvieras enamorada de Maki-chan, simplemente iba a preguntarte si tú y Maki-chan estaban disgustadas por algo, pero…. Tu dijiste eso después….- decía Honoka riendo y Umi se quedó en shock.
-No…. Puede…. Ser….- dijo Umi entre su extrema sorpresa al darse cuenta de que ella sola se había delatado.
-Así que…. ¿Maki-chan eh? Umi-chan tiene buen gusto….- esto último lo dijo Kotori con una traviesa sonrisa en sus labios haciendo que la morena se avergonzara aún más, si era posible, y con sus manos cubrió su rostro.
-¡No puedo creer que lo dije! ¿Qué voy a hacer, Maki es más que obvio que no me nota y ahora está obligada a pasar el resto de la tarde conmigo, lo peor de todo es que, de lo nerviosa que este no poder escribir absolutamente nada- decía Umi a sus dos amigas que se sobresaltaron ante la explosiva acción de la escritora.
-Umi-chan, cálmate- decía Kotori dándole un pequeño abrazo a Umi que solo recargo su rostro contra su hombro.
-Si tanto te preocupa, creo que sería bueno que le dijeras cómo te sientes a Maki-chan, tal vez ella….- hablo Honoka esta vez dando palmaditas en la cabeza a Umi pero esta de inmediato volvió a exaltarse.
-¡De ninguna manera!- irrumpió de nueva cuenta.
-pero…-
-¡No!-
De nuevo el silencio permaneció un momento entre ellas, Kotori y Honoka querían ayudar a su amiga, pero Umi se negaba rotundamente a todo lo que ellas decían, tal vez sería mejor que la que hablara fuese Maki….. Esto en caso de que ella sintiera lo mismo…. Lo cual no sabían.
-Cielos….. al menos inténtalo, no pierdes nada- animaba Kotori volviendo a acariciar a su amiga.
-Pero Kotori….-
-Al menos inténtalo ¿Si?-
Umi al ver aquella mirada amable en el rostro de Kotori solo suspiro y dando un gran respiro, volvió a incorporarse como era debido, se separó del abrazo de la peli gris y aclarándose la garganta las miro decidida.
-Bien…. Lo intentare, solo espero que no resulte tan mal….- aclaro Umi haciendo a sus amigas sonreír ante su ¡Por fin! Valentía.
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-¿Te gusta Umi-chan?- exclamaba con completa sorpresa Rin en aquel salón de primer año y ante su des moderación de volumen, Maki cubrió su boca de inmediato.
-¿Quieres callarte? No tienes por qué gritar- se quejó Maki con la peli naranja que solo trataba de calmar su euforia.
Maki acababa de contarles a Hanayo y a Rin, lo que sentía por Umi, Hanayo se sorprendió grandemente pero Rin, ella tácticamente exploto de sorpresa e hizo evidente aquello. Esa era la razón por la que Maki no quería decirle nada a nadie, pero sus nervios le hicieron decírselo a Rin y Hanayo, después de todo confiaba mucho en ellas, pero quería evitar a toda costa la reacción de sus amigas, y a parte de ellos quería pedirles un consejo.
-Bueno, ahora que están más tranquilas y menos eufóricas quería preguntarles ¿Qué debo hacer? Desde hace tiempo quiero decirle como me siento pero ya saben cómo es ella, con todo eso del amor- decía Maki un poco decaída ante mencionar eso y pensar después en lo que diría a continuación. -….. si ella se avergüenza con situaciones románticas entre un chico y una chica ¿Qué puedo esperar que piense entre dos chicas en una situación romántica?- terminaba por decir y sus amigas solo la miraron con compasión.
-Bueno Maki-chan, sabemos que tienes miedo, pero creo que sería bueno que te arriesgaras a ver qué pasa- decía primeramente Hanayo a la pelirroja decaída.
-Pero ¿Si ella ya no me quiere cerca después de eso?- decía Maki aun mirando lo bajo.
-Entonces sabrás que no era una buena elección para ti, recuerda que si no te arriesgas no ganas- continuaba Hanayo.
Estas últimas palabras hicieron que Maki levantara la cabeza con un poco más de ánimo y mirara a sus dos amigas de primero que le sonreían con mucho cariño.
-ah…. Muy bien muy bien, lo hare, voy a confesarle mis sentimientos hoy mismo, pero si no funciona… voy a dejar M's- con eso último en boca, Maki tomo sus cosas y dejo a sus dos amigas que tras esas palabras se posaron preocupadas.
No esperaron que la pelirroja les diera semejante condición, lastimosamente no había nada que hacer, solo esperar.
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Las clases habían terminado, por lo que una nerviosa Umi se dirigía hacia el salón de música donde había quedado con Maki para comenzar a trabajar con la canción, y aunque aún seguía muy dudosa sobre si decirle o no a la pelirroja, ya daba por hecho que esta la iba a rechazar.
-pero…. Debo intentarlo….- pensó para sí misma mientras caminaba a paso lento hacia aquella sala donde seguro la pelirroja ya estaría esperándola.
Estando parada a la par de la puerta que la sala de música, Umi se quedó mirando, sus nervios estaban a flote, sin embargo poco a poco se fueron calmando al notar un bello sonido que provenía del interior de aquel lugar, era el suave sonido del piano que invadía suavemente sus oídos. Umi se quedó parada un breve momento fuera escuchando las suaves teclas sonar.
Lentamente comenzaba a entrar a la sala de música sin que la pelirroja se percatara y una vez logro introducirse la observo con sigilo, Maki como siempre, permanecía con los ojos cerrados mientras jugaba una pieza bastante suave y calmada, se sentía grata de poder escuchar de tan cerca la voz de la pelirroja acompañada del piano. Por instinto cerro los ojos y se quedó recargada en la pared escuchando y disfrutando de aquel sonido, hasta que este se detuvo, y rápidamente abrió los ojos encontrándose con la mirada color violeta de una pelirroja que la miraba con una sonrisa muy tenue.
-No sabía que te gustaba espiar- dijo Maki al ver a la peli azul mirándola completamente sorprendida.
Umi se tensó un breve momento al verse descubierta por la pelirroja que aun la miraba con detenimiento, los nervios de nueva cuenta comenzaban a volver a ella y tratando de no ser muy obvia, desvió la mirada de la de la pelirroja y dejo salir una risa muy ligera.
-Me atrapaste, lo siento, simplemente no pude evitar meterme aquí a escucharte tocar- decía Umi saliendo de atrás del piano con una nerviosa sonrisa que le dedico a la pelirroja.
-Descuida….. um… la verdad me decidí a tocar un poco en lo que llegabas, yo… tengo algo de qué hablar contigo- decía Maki a la morena que al escuchar esas palabras sintió como su corazón comenzó a latir fuertemente.
-ya veo….. Yo también tengo algo de qué hablar contigo así que…. A… Apresúrate…- dijo Umi en respuesta y se acercó un poco para poder ver mejor a la pelirroja.
Maki mirando aun a la mayor, se hizo a un lado donde se encontraba sentada en el banco del piano y con su mano palmeo este, indicando que Umi se sentara a su lado para poder hablar. Umi con cierto sigilo camino hasta la pelirroja y accediendo a la indicación se sentó a su lado con sus manos apoyadas sobre sus piernas y mirándolas con timidez. Ambas chicas se quedaron a la par en un incómodo silencio.
-Sa…Sabes…. No es que esté hablando por mí pero…. Una amiga, está enamorada de otra chica y… ummm no sabe cómo confesárselo, y yo no soy buena dando consejos, así que…. ¿Qué piensas al respecto?- decía Maki de una manera un tanto sospechosa que Umi alcanzo a entender poco, sin embargo se sintió extrañamente feliz.
-Um…. Yo… yo no creo…. Que sea malo…. Ella debería ser va…valiente y ummm no se….- decía Umi sorprendiendo a Maki que por primera vez se giró a verla manteniendo aquella expresión sorprendida.
Maki no podía creer que Umi estuviese diciendo eso, ¿La correcta y tradicional Umi dijera eso? De verdad se había llevado una sorpresa.
-Tu… de verdad….- dijo Maki casi en un susurro mirando a la morena.
Con un breve momento se quedó mirando a Umi, un impulso la llevo a comenzar a acercarse a ella levemente, eso hizo que hizo que la morena levanto la cabeza para encontrarse con los ojos violetas de Maki, ambas chicas se miraron unos segundos directamente, sintiendo como en su pecho su corazón se aceleraba, sus respiraciones pacificas invadían el salón de música. Sin embargo ambas se sentían bien, era como si en sus miradas encontraran tranquilidad, una tranquilidad que para suerte de ambas no desaparecía.
-¿E…so es todo lo que tenías que decirme Maki?...- susurraba Umi a la pelirroja que se mantenía cerca de ella todavía y con completa lentitud, Maki poso su mano sobre la de Umi y la acaricio con su pulgar.
-Si…. Eso era todo….- era la susurrante respuesta de Maki que lentamente se comenzaba a acercar a ella, no podía creer de donde había sacado el valor para estar actuando como lo hacía. Simplemente estaba dejándose llevar por ese extraño impulso que la controlo.
Umi se sentía tensa, mas sin embargo no se alejaba ante el rostro de Maki prontamente acercándose al suyo lentamente, ella quería que esa distancia que las dividía se cortara completamente y poder tocar con sus labios, esos rosados labios contrarios de la pelirroja que estaban tentándola y amenazando con tocar los suyos.
Umi desesperada por aquella cercanía de golpe, rompió con la distancia y estampo con cierta brusquedad sus labios con los de Maki, siendo por primera vez que estos se tocaban de una manera un poco desenfrenada.
Maki por supuesto estaba llena de sorpresa, pues esperaba dos cosas de su atrevimiento, una bofetada o un beso muy sutil, pero Umi simplemente la había tomado con una muy ligera brusquedad a su parecer para besarla como lo hacía en ese momento. Con dificultad hizo que Umi se separara de ella y ambas chicas se miraron con fervor y una agitada respiración ante la repentina acción de la morena, provocada por la pelirroja por supuesto. Unos silenciosos segundos pasaron, ambas frente contra frente aun mirándose con ese sentimiento a flote.
-…. ¿Qué es lo que tu ibas a decirme?...- pregunto de repente Maki a la morena que dando una ligera sonrisa ante la pregunta de Maki, acaricio con su mano la mejilla de la pelirroja.
-… Te amo…. Eso es lo que tenía que decirte….- dijo Umi con completa seguridad que no estaba segura de donde había sacado, pero no podía retractarse ya, sus palabras ya habían salido y la pelirroja ya las había escuchado.
Esta vez, quien se lanzó al ataque para comenzar a besarse otra vez, fue Maki, que tras acercarse velozmente a la morena, paso sus brazos alrededor del cuello de esta, haciéndola acercarse más para tener un mejor alcance en su beso, Umi en respuesta rodeo con sus brazos la cintura de Maki apegando sus cuerpos un poco más.
Ambas chicas disfrutaban de ese beso, ¿Para qué mentirse y reprimirse tanto tiempo a lo que sentían y deseaban de la otra? Justo ahora es lo que hacían, demostrarle a la otra que sus sentimientos eran correspondidos, aunque no era la manera más decente de hacerlo, pues se les había olvidado ya que se encontraban en la sala de música donde cualquiera que pasara y decidiera entrar las podría ver, aunque no parecía importarles mucho, estaban perdiéndose en los labios de la otra.
Maki perdida en el movimiento y las caricias que sus labios sentían por parte de Umi, sin separarse del beso, se puso de pie para después volver a sentarse pero sobre las piernas de la peli azul estando así mas cómodas y en una mejor posición para seguir besándose.
Umi necesitaba algo de aire y encima de todo comenzaba a reaccionar a que no debían estar haciendo aquello ¿Cómo un simple beso se había convertido en algo tan acalorado de repente? Con eso en mente se separó de la pelirroja tomando aire y mirándola con un evidente sonrojo en sus mejillas que parecía ya perpetuo.
-..Ah…. espera Maki… aún estamos en la escuela, alguien podría venir y…- trato de detener a la pelirroja, pero a cambio solo sintió como esta volvió a acercar sus labios, pero esta vez hacia su cuello, moviendo sus labios contra la piel de Umi que rápidamente se erizo ante el contacto, con ello no pudo evitar dejar salir un ligero gemido que hizo que Maki se separara rápidamente de ella con sorpresa y un notable rubor.
-…¿Umi? …. Acaso eso fue un gem…- trato de decir Maki pero la morena, cubriendo sus oídos y desviando la mirada la irrumpió.
-¡No lo digas, es muy vergonzoso!... Esto… es tu culpa….- decía Umi permaneciendo en la posición mencionada y Maki solo rio ante la reacción de Umi.
La pelirroja esta vez sin decir nada, acerco sus manos al cuello de Umi, respectivamente a su listón color rojo y lo desabrocho para después retirarlo, Umi volvió su vista a ella sorprendida y la pelirroja tras una traviesa sonrisa desabotono los primeros botones de la camisa blanca de la mayor.
-Es una sorpresa que simples besos en el cuello te hayan hecho hacer ruidos extraños….. Eso me hace pensar y me tienta a probar…. ¿Qué harías con más que simples besos?—decía Maki con voz juguetona y Umi sintió como si su corazón hubiera dando un ligero salto y como si en su estómago hubieran tirado un balde de agua fría.
-¿Ma…Maki?...- fue lo único que pudo articular antes de ser silenciada de nuevo, pero esta vez los labios de Maki habían vuelto a atacar su cuello, haciéndola estremecer.
Maki había cambiado por completo, simplemente encontró a una tímida pelirroja tocando el piano y tras besarla ahora veía a una pelirroja con una mirada realmente lasciva que amenazaba con explorarla hasta donde se le antojara. Ahora la mayor se cuestionaba ¿Estaba bien si la dejaba continuar? No es como si la rechazara, simplemente no le parecía buena idea comenzar a hacer algo más en un lugar como la escuela, y peor aún ¿Cómo pretendía detener a la pelirroja si ella misma no era capaz de detenerse también? Simplemente seguía las caricias y se dejaba llevar por lo que su piel sentía sin percatarse que Maki ya había desabotonado su saco y acababa de terminar con su camisa, dejando a la vista su torso y un sujetador color blanco. Eso a la vez de que los labios de la pelirroja estaban descendiendo de su cuello a sus clavículas y aún en proceso de descender más.
-¿Qué más da?- pensó Umi mandando al diablo todo lo que pensaba y con completa confianza, comenzaba a deshacer el listón azul de Maki y a seguir el mismo patrón que la pelirroja ya había terminado, abrir la camisa de la menor para su completo disfrute.
-… No quites todo…. Solo lo necesario….- pedía Maki hablando contra la piel de la morena para después separarse y mirarla a los ojos, el rubor y el comienzo del sudor se hacían evidentes.
-¿Por qué no?- pregunto Umi algo desubicada por la petición de Maki y esta solo sonrió antes de acercarse de nuevo al cuello de la morena.
-Si alguien viene, será más fácil arreglar nuestras ropas que vestirnos completamente- decía Maki y con eso, volvió a conectar sus labios con la piel de Umi que volvió a estremecerse.
Umi siguió disfrutando de los labios de Maki recorriendo su piel, por su parte ella no quería quedarse atrás por lo que con sumo cuidado, una vez logrado abrir la camisa de Maki, introdujo lentamente sus manos dentro del sujetador color azul de la pelirroja tocando sus pechos directamente, pronto sintió en cuerpo de la pelirroja estremecerse ante la repentina caricia.
-ah…. Umi…. Estas un poco fria…- dejaba salir un ligero gemido Maki ante el toque de Umi, la morena aprovecho la distracción de Maki y que se separara de ella para que esta vez fuese Umi quien con unos sedientos labios, atacara el cuello de Maki.
La pelirroja no replico, al contrario solo aferro sus manos a la cabeza de Umi dejando que su cuerpo disfrutara de los labios de la peli azul besar su blanca piel y las manos, ahora tibias, de la mayor comenzar a moverse sobre sus pechos, dándole así también un poco más de placer.
Umi movía sus manos con delicadeza y lentitud, después con su dedos se encargó más a fondo de acariciar esas dos extremidades en específico de Maki quien cerraba los ojos dejando que sus sentidos fuesen mejores, esto acompañado de pequeños jadeos de placer.
-Maki… ¿Esta bien si yo… ummm…?- hablo Umi sacándola de su pequeño trance, Maki bajo un poco la mirada para verla mejor y la morena tenía una adorable vista, su rostro estaba demasiado cerca del pecho de Maki, entonces la pelirroja entendió que era lo que Umi pretendía hacer, por lo que con una ligera sonrisa se inclinó para besar su frente y asentir.
-está bien Umi, has lo que gustes…- fue la respuesta de Maki acariciando la cabeza de la mayor.
Umi con más confianza levanto un poco el sujetador de Maki para que los pechos de la más joven quedaran a su vista, con esa acción pudo apreciar un muy bello y apetecible color rosado en ellos, dando una mirada más a aquellos ojos violetas que aun la miraban, se aseguró de que todo estaba bien para acercar su boca uno de los pechos de Maki y atraparlo con sus labios, podía olfatear el dulce y fresco olor en la piel de Maki que le encantaba tanto, entonces tras escuchar un gemido un poco más sonoro de la menor, comenzó a mover su lengua contra aquel pequeño y rosado botón.
Umi sentía como el calor de su cuerpo se anidaba en su vientre bajo y a su vez, con Maki sentada aun sobre sus piernas, podía notar cuando calor irradiaba el cuerpo de Maki también, especialmente cierta zona que de solo pensar en ella sintió sus latidos acelerarse.
Maki se sentía bien ante las caricias de Umi que cambiaba de pecho repetidamente, sin embargo otras partes en específico comenzaban a demandar atención, por lo que la pelirroja viéndose un poco insegura de si hacerlo o no, opto por mover sus caderas sobre Umi en un instintivo deseo de sentir un poco de atención sobre esa zona que deseaba.
Con el movimiento de Maki no solo ella sintió placer al rose, pues una sonrojada peli azul se estremeció y dejo escapar un pequeño gemido tras la acción de Maki, esta se había frotado contra ella, y ¡Claro que lo había sentido!
La pelirroja por supuesto noto la reacción de Umi y con un caprichoso deseo, quiso escuchar la voz de placer de Umi una vez más por lo que volvió a repetir el movimiento, pero esta vez con un poco más de fuerza y empeñando un poco más su peso para que ella también pudiera sentir más aquello.
La pelirroja conforme con el resultado comenzó a repetir esos movimientos sobre Umi, podía sentir como las manos de la morena la apretaban ligeramente tras cada movimiento y a su vez había conseguido lo que quería, escuchar la voz de Umi un poco más sonora. Esto le dio ánimos de que sus movimientos poco a poco conforme pasaban los minutos fuesen más veloces, ejercieran más presión y a su vez que su cadera se moviera con más fluidez, dándole mejor placer a ambas con esos roses a los que Umi recibió muy bien.
-ah… Ma…Maki…. Estas pesándome mucho…ah….- hablaba Umi agitada y Maki solo la miro un breve momento deteniendo los movimientos de su cadera.
-Está bien, pasemos al banco grande- fue lo único que dijo Maki levantándose de encima de la morena y sujetando su mano para caminar al menos 4 pasos y llegar a un banco más ancho y más largo al lado del piano donde se recostaron, Maki encima de Umi.
-…Te amo Umi…. Te amo mucho…..- fueron los susurros de Maki antes de comenzar a besar a la peli azul otra vez, bajando lentamente de sus labios a su cuello y de su cuello hasta sus pechos. –Está bien su levanto tu sujetador ¿Verdad?- preguntaba Maki a Umi que tímidamente asintió.
La pelirroja no se hizo esperar y levanto cuidadosamente el sujetador blanco de la mayor, dejando a la vista también los pequeños y redondos pechos de Umi, le parecían perfectos a pesar de todo, y relamiéndose los labios, comenzó a lamer y succionar uno a uno con gentileza, haciendo que Umi diera un par de gemidos. Aunque no conforme con ello, con una de sus manos comenzó a acariciar una de las piernas de la morena de arriba hacia abajo, tras cada recorrido subía un poco su mano al grado de comenzar a introducirla bajo la falda de Umi y llegar a tocar sus bragas.
Nuevamente sintió como la Umi se removió en su lugar, esto denotando su nerviosismo y que de inmediato había notado las acciones que estaba a punto de hacer. Con un tacto realmente cariñoso, Maki comenzó a introducir su mano dentro de aquella prenda que denotaba la excitación de la mayor, pues estaba ligeramente húmedo, importándole poco eso se aventuró a tocar directamente la entrepierna de Umi que dio un salto un poco más brusco ante en contacto y aferro sus manos a los costados de Maki.
-E...Eso…Eso es muy….ah….es muy atrevido…ah….espera Maki….- decía entre gemidos la morena pues Maki había comenzado a mover sus dedos contra esa zona con completo descaro e ignorando a la mayor volvió sus labios a sus pechos, degustándolos como hace unos instantes.
Umi se rindió rápidamente y dejo que Maki continuara acariciándola, pues aunque lo negara con el pensamiento, esas caricias se sentían realmente bien, principalmente cuando los dedos de Maki pasaban sobre su erecto clítoris y hacían círculos sobre él. Incluso había tratado de hacer que sus gemidos no fueran tan notorios pero el placer se lo impedía.
Maki por su parte comenzaba a sentirse impaciente de no recibir caricias por lo que pensó en apresurarse a que Umi terminara para que ella la mimara después y con eso en mente comenzó a intentar entrar en la morena pero esta de un empujón la detuvo desconcertándola bastante.
-¿Es que no escuchas? Te dije que esperaras- se quejaba un poco molesta Umi con la pelirroja que solo suspiro, debió prestar más atención.
-Lo siento Umi…. ¿Qué pasa?- pregunto a la arquera que dando un par de jadeos levanto la cabeza para mirarla.
-Sabes… es la… ummm es la primera vez que hago esto…. Así que si estoy a punto de entregarte algo tan importante, quiero que tu hagas lo mismo por mi….. ¿Entiendes a lo que me refiero?- decía un poco tímida Umi y Maki pensando un poco las palabras entendió a que se refería la mayor.
-Bien….. Entonces ummm ¿Lo hacemos al mismo tiempo?- pregunto Maki a lo que Umi con una sonrisa un poco más decidida asintió.
Ambas chicas estaban frente a frente, de nueva cuenta una sobre la otra, Maki sobre Umi respectivamente, con mano derecha habían comenzado a acariciar la intimidad de la contraria un poco más antes de proseguir a algo un poco mayor. Ambas se miraban con lascivia y deseo, claro sin dejar de lado el amor.
-Bien…. ¿Estas lista ya?- preguntaba Umi a la pelirroja que respiro hondo por un pequeño momento para después volver a mirar aquellos ojos marrón.
-Lo estoy…. ¿Y tú?- pregunto de vuelta Maki a la arquera que con un tímido asentir dio luz verde a que ambas podían proseguir.
Ambas chicas sin despegar su mirada de la otra comenzaron a introducir sus dedos en el interior de la otra, ambas haciendo una ligera mueca de dolor para que después su respiración volviese a agitarse.
-¿Estas bien?- pregunto primero Maki a la peli azul que tratando de mantener su ritmo asintió.
-Si…. ¿Y tu?...- devolvió un poco preocupada por la expresión de Maki, pero esta se suavizo al darle la respuesta.
Sin volverse a preguntar nada más, ambas chicas tras permanecer un periodo corto de tiempo comenzaron a mover sus dedos, penetrando a la otra con sutileza y lentitud. Los jadeos en ambas no se hicieron esperar, Umi con su inexperiencia trataba de cambiar de ritmo no muy bruscamente, y Maki de igual forma inexperta pero informada hacia círculos con sus dedos en el interior de Umi quien daba jadeos un poco más sonoros cambiando a que estos fuesen gemidos.
Ambas chicas tras pasar un tiempo acariciándose comenzaron a acelerar el ritmo, haciendo que entraran y salieran de la otra, incluso tras un momento un poco más prolongado incluyeron un segundo dedo a la actividad para hacer de ella algo más placentero.
Los gemidos de nueva cuenta invadían el lugar, ambas voces completamente sumergidas en el placer de hacer suya a la contraria con semejante lujuria que no pensaron desatar tan pronto y en esa circunstancia.
-Ah…ah…AHA…. Ma…Maki…. Ciento algo… extraño….- decía entre gemidos Umi viendo aun el rostro ruborizado de la pelirroja que también gemía encima suyo.
-Yo…ah…Mnn…. También…. Creo que…. Voy a …..Ah…- trataba de hablar Maki entre la actividad, más sin embargo solo pudo inclinar su rostro contra el de Umi para comenzar a desatar un nuevo beso con pasión y desenfrenamiento, mientras que a su vez, sus movimientos con sus manos eran cada vez más acelerados al punto de comenzar a sentirlas entumecidas, y aun con eso no se detuvieron.
Una sonora exclamación de placer y una sensación de igual procedencia recorrieron el cuerpo de ambas chicas que detuvieron de golpe sus acciones y sintieron toda esa acumulación de placer ser liberada de una manera realmente relajante y llena de sensaciones que nunca habían experimentado. Maki salió del interior de Umi y esta ultima de Maki.
La pelirroja se recostó un breve momento sobre Umi mientras ambas trataban de regular su respiración. Aquello realmente había sido algo que ninguna de las dos se esperó que sucediera de una simple confesión, solo sucedió y aprovecharon el momento para dejarse llevar.
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-Maki….. ¿Por qué no me dijiste como te sentías?- Umi fue la primera en romper con el tranquilo silencio.
-Yo…ummm bueno…. ¿Por qué no me lo dijiste tú?- contraataco Maki acurrucándose más sobre Umi, pues aún permanecía sobre ella.
-Ummm eso es porque… cielos, sabes que soy un manojo de nervios cuando se trata de estas situaciones….- se quejaba Umi haciendo un mohín para después suspirar. –Pero me alegro que lo haya hecho…. Ahora puedo sentirme un poco más honesta contigo…. Y la verdad es que te amo, Maki….- finalizo Umi acariciando la cabeza de la menor.
-Yo….. También…..- fueron las tímidas palabras de Maki, una sonrisa se acurruco con completo cariño sobre Umi y permanecieron así un poco más, compartiendo un mismo sentimiento que les aprecio sumamente hermoso a cada una.
-…..-
-….-
-….. Espera….-
-….¿Qué pasa?...-
-ya es tarde….-
-…..-
Por ultimo ambas se levantaron de golpe mirándose llenas de pánico y exclamaron al mismo tiempo:
-¡La canción!
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