Titulo•• «Esperanza mía»

La vida es como un pasadizo secreto, estás en ella pero realmente no sabes a lo que te puedes enfrentar más adelante, crees que todo es color de rosa cuando no es así «¡hay que tener los pies en la tierra!»porque nada tiene sentido en ella, vivimos por vivir a veces me pregunto ¿Por qué estoy vivo? prefiero no existir.

Y tal vez dirán que estoy loco pero nadie sabe por lo que he tenido que pasar, mi vida no ha sido fácil, mi madre me abandonó cuando nací, ni siquiera conozco a mi padre y he tenido que enfrentarme solo a todos los peligros y situaciones complejas, he caído muchas veces y me cuesta levantarme, ya no quiero hacerlo.

Es un nuevo día y apenas quiero comenzarlo, escucho la voz horrible de mi tío; tapo mi rostro con mi almohada pero siento de nuevo esa voz que retumba afuera de mi habitación y que me causa escalofríos.

— ¡No quiero ir, no puedes obligarme! — grito con voz áspera.

— Namjoon sabes de lo que soy capáz no soporto que no respondas a mis mandatos —
demanda tratando de intimidarme.

No respondí a su llamado y eso solo empeoró la situación haciendo que se acercara a mí, sentía sus fuertes pasos a mi lado. Bruscamente quita la almohada que cubría mi rostro dejando este descubierto.

— Tu rebeldía no te sirve de nada porque siempre harás lo que yo diga. ¡Levántate de una maldita vez! — grita furioso apretando mi cuello tan fuerte que me costaba respirar, traté de liberarme empujando con mis manos sus dos hombros, con mi respiración casi apagada miro a mi derecha y alcanzo a ver un jarrón, trato de estirar una de mis manos para alcanzarlo pero no podía hacerlo, hice mi último intento y logré tomar aquel jarrón haciendo que este estallara en su cabeza dejándolo tirado en el suelo.

Puesto en pie y libre de ese monstruo que tengo como tío me alejo un poco para uir pero cuando casi llego a la puerta de salida miro hacia atrás y veo su cuerpo casi sin vida. Ya no soy el mismo niño que soportaba tus maltratos y torturas por no querer trabajar, solo tenía 10 años deseaba jugar, quería ser amado. ¡Necesitaba ser feliz y sentirme protejido por alguien! dije con voz quebrada y mis ojos inundados en lágrimas.

Sin mirar atrás seguí mi camino, perdido y sin rumbo sin saber a donde ir solo me dejé llevar por mis pies, mi mente no pensaba, tenía la mirada perdida.

Luego de caminar por horas llegué a un lugar desconocido era extraño porque en muchas ocasiones había pasado por aquí y nunca lo vi, era extraño, se trataba de un campo lleno de girasoles acompañado de un cielo despejado con nuves en forma de corazones. Sin prestar mucha atención a eso me adentré en él pasando un estrecho camino que parecía estar hecho a mi medida.

Al llegar al final de aquel sendero vi una puerta en medio de la nada. ¿Cómo podía ser esto posible?, me interrogué a mi mismo. Abrí la puerta y casi no podía creer lo que había frente a mí era un lugar irreal no tenía suelo me encontraba flotando en el aire, a mi alrededor predominaba el color morado mezclado con blanco parecía un sueño, froté mis ojos repetidas veces para despertarme, pero fue en vano todo seguía en en mismo lugar. Sin esperarlo aparece como por arte de magia un gran camino cubierto con pétalos de flores y lo mas impresionante es que escucho una voz lejana que me dice...  «Sigue el camino de pétalos hasta el final y sabrás de donde proviene esta voz que escuchas» sorprendido seguí por aquel camino que se encontraba flotando en el aire.

Cuando llego a su final desaparecen aquellos pétalos y frente a mi vista se crea un jardín donde predominan distintos tipos de flores y justo cuando me atrevo a tocar una de ellas irradia una luz haciendo que mi vición se dificulte; cuando aquel destello lumínico disminuye mis ojos se abren en sorpresa como niño pequeño ilusionado al ver una hermosa mariposa gigante soltando pequeños destellos dorados a su alrededor.

— Jóven Kim Namjoon se que has perdido la esperanza y las ganas de vivir — expresó la hermosa mariposa.

— Esto no puede ser real, dime que es una broma de mal gusto — digo dudando aún sin poder creer en lo que hay a mi alrededor.

— Lo dices porque siempre quieres buscarle la lógica a todo, tienes miedo de creer, de sentir emociones y sentimientos mas bien dicho "Amor" — menciona y sus palabras removieron mi interior. Sígueme y te mostraré algo que cambiará tu vida dice extendiendo sus alas para que de esa forma subiera a ellas.

En respuesta a sus palabras subí sin pensarlo dos veces, no se porque sentía tanta confianza hacia aquel ser, estaba teniendo tantas sensaciones distintas en ese momento; sensaciones nunca antes sentidas. Esto era nuevo para mí, siempre he tenido un vacío profundo en mi corazón que nada me lo ha podido llenar.

Llegamos al lugar que la gran mariposa había mencionado, volamos por muchas horas parecía un lugar lejano, finalmente bajo de sus alas pero veo que todo era oscuro solo brillaba la luz de ella, no pude evitar sentir temor esta vez, mi cuerpo temblaba al ver todo de ese color.

— El color negro simboliza tu pasado todo lo malo que has vivido, tendrás que enfrentarte a él para poder seguir adelante —dice y mis miedos comenzaron a apoderarse de mí lentamente.

De pronto aparece la imagen de mi madre dejándome abandonado, era tan real que mi alma lloraba de tristeza no podía tomar control de esa situación seguido de eso mi tío golpeándome sin descanso hasta dejarme inconsciente, mis lágrimas crearon un río cristalino, comienzo a hundirme en él cada vez más lo único que pasaba por mi mente en esos momentos es que era mi fin. Ya casi sin respirar una mano toma de la mía sacándome de esa forma a la superficie de aquel río, alzo mi rostro para ver quien era y quedo sin palabras al ver a una bella chica, su cabello era rubio tal cual un sol resplandeciente; los ojos azules como el mar y su rostro tan delicado como la seda.

Al verla sentí como una paz llenó mi alma, un cosquilleo en mi estómago, era amor a primera vista. Ella solo cruzó su mirada con la mía.

—Yo soy la mariposa que viste hace instantes; ella simboliza el amor eterno —expresa e interrumpo sus palabras.

— Lo sé, me pude dar cuenta de eso, contigo conocí el amor "Esperanza mía" — dije y nuestros labios se unieron en un delicado beso lleno de pasión.

Por primera vez en mi vida me sentí amado de verdad, siempre será mi mundo
«El regalo que le dió sentido a mi vida» jamás estaré solo.

*Muchas veces creemos que la vida no tiene sentido pero siempre hay algo que nos alegra el alma y nos devuelve la esperanza.*

•Fin•