Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo V

⠀⠀⠀

Miércoles, 30 de junio de 2021, 18:19

⠀⠀⠀

Taehyung se encontraba delante del bar que se había convertido en uno de sus lugares más frecuentes, sumándose al trabajo y su hogar.

Miró su reloj. Hubiera sido buena idea investigar a qué hora abrían el lugar, pero no se le ocurrió hasta que estuvo allí, parado esperando a que dieran las siete.

Pudo tomarse el día libre debido a la cita que tuvo antes de tomar camino a Zero O'clock. Había sido más temprano de lo normal, así que su padre le permitió no ir a trabajar y concentrarse más para su encuentro con la hija de los Byun. Se supone que tenía que intentar de todo para que se diera la oportunidad de algún romance con ella, pues era una gran mujer y su familia tenía una marca de joyería. Sin embargo y como siempre, no se dio.

Más por Taehyung que por ella. La chica parecía interesada, sólo un poco dudosa. Al final de la comida, ella se despidió de él con un beso en la mejilla, algo que no le daba asco a Taehyung, pero sí le incomodaba un poco.

Él era fiel a su espacio personal.

-¿Cómo es que viniste más temprano que yo? -Jeongguk apareció en su campo de visión con una enorme sonrisa, gesto que desapareció a cambio de una mueca de asombro y confusión.

-¿Qué pasa?

-Eso no se quitará fácil -dijo algo burlón. Su mano viajó hasta el rostro de Taehyung, frotando un poco su cachete con su pulgar. Seguido de eso, se lo mostró.

Su dedo estaba manchado de rojo, y Kim pudo adivinar rápido lo que pasaba.

-¿Estuve así todo este rato? -lloriqueó el mayor, sacando su celular con el fin de quitarse esa ridícula marca de beso.

Jeongguk rio mientras Taehyung se tallaba fuertemente la mejilla con el pañuelo que acompañaba su traje.

-Te quedará más rojo. Vamos al baño -el menor abrió el local con una llave, dejando pasar a Taehyung primero.

-Pensé que Yoongi llegaría antes que nadie.

-Yo soy el encargado de poner todo en su lugar antes de abrir. Ya que Dahyun se encarga de los números y Yoongi de los proveedores, lo que me toca a mí es alistar.

Al principio, Taehyung había tenido miedo de hablar mucho sobre negocios y ese tipo de temas con Jeongguk con miedo a aburrirle o algo parecido. Pero no era el caso, para nada. Siempre que hablaban del bar, a Jeongguk le brillaban los ojos y respondía con tanta seguridad.

Entonces el azabache le tomó de la muñeca suavemente, y lo llevó al baño. El peligris pensó desde un principio que sólo le llevaba para que pudiese limpiarse, sin embargo no contaba con que el contrario quisiera ayudarle.

-P-Puedo hacerlo yo mismo.

-Está bien, no tengo mucho que hacer igual -respondió Jeongguk, tomando un pedazo de papel higiénico y mojando solamente la punta.

Y mientras Jeon se enfocaba en quitarle ese color rojo a su mejilla, Taehyung sentía que le estaba siendo infiel al espacio personal, y no le desagradaba ni un poco.

De hecho, al tenerle así de cerca era capaz de notar el lunar que se encontraba debajo del labio inferior de Jeongguk, y su cicatriz en su mejilla. Era casi invisible.

-¿Disfrutas la vista? -carcajeó, pues era imposible no notar que el mayor se había puesto nervioso-. Me pregunto cómo un beso cayó aquí...

Taehyung se mordió su mejilla interior antes de responder:

-Una de mis citas...

-Lo imaginé -entonces tiró el papel-. Listo, ya no está. ¿Quieres algo para comer mientras yo acomodo todo?

-Puedo ayudarte.

-Nop, eso sí que no -negó con su cabeza-. Fue suficiente la vez en la que lavaste todos los platos. Te daré unas galletas que traje, ¿qué tal?

-¿No las compraste para ti?

-No específicamente -por primera vez, Taehyung pudo ver a Jeongguk riendo con nervios-. Eran mis galletas favoritas en mi niñez, las miré y me acordé de cuando me dijiste que no te iba el picante. Las compré pensando en dártelas por si por alguna razón no las conocías -rascó su nuca, nunca dejando de ver al mayor-. Así que está bien.

-¿Sabías que iba a venir hoy...?

-No, yo no sabía cuándo ibas a venir... Así que también las traje ayer. Espero no estén rotas por las cosas que hay en mi mochila.

Jeongguk sacó de ésta un paquete amarillo de galletas, uno que Taehyung pudo reconocer al instante.

-Oh, a mí me gustaban mucho las de fresa -sonrió recibiendo en sus manos el paquete-. Aunque las de vainilla no están nada mal.

-Las de vainilla son mejores que cualquier otro sabor -espetó Jeongguk mientras acomodaba una mesa en el centro-. Podemos tener un debate sobre eso -Taehyung rodó los ojos.

El peligris se quedó sentado en una de las mesas que Jeongguk se apresuró a poner. Faltaban unos minutos para abrir, su único consuelo era que aún no había gente esperando afuera.

-Hay muy pocas botellas de alcohol -comentó Taehyung al mismo tiempo en que masticaba una galleta. Tenía ese pequeño refrigerador delante de él, así que era imposible no darse cuenta de que solamente habían seis botellas en él.

Jeongguk movió algunas cosas dentro de la cocina al terminar de acomodar las mesas y otros pequeños detalles.

-Sólo hay cinco aquí adentro -gritó. Luego salió, colocando sus manos en su cadera. Estaba pensando cómo ir a comprar alcohol sin dejar solo el lugar ni a Taehyung.

-Quedan diez minutos para abrir. ¿Dahyun aún no va a venir?

Jeongguk asintió, notando también que la chica no había llegado a la hora que se requería.

-Parece que está teniendo problemas con su auto. Va a dejarlo en el taller y luego vendrá en taxi -responde después de mirar el chat que compartían los tres. En él, Yoongi confirmaba que llegaría dentro de poco-. Esperaremos a Yoongi y él se encargará de atender a los clientes que vayan llegando mientras compramos el alcohol.

Taehyung le miró, su rostro estaba serio pero dentro de sí le gustaba el hecho de que Jeongguk no quería dejarle solo.

Jeongguk se sentó a su lado, tomando una galleta y mordiéndola al instante.

-Uhmmm -dice gustoso-, saben a infancia -y sonríe.

Taehyung notó que Jeongguk siempre sonríe.

-Fallé.

Jeongguk abrió en grande sus ojos, y después le compartió una mirada comprensiva.

-¿Quieres contarme qué pasó?

Taehyung le miró unos segundos, el chico seguía masticando la galleta, y no se había dado cuenta de lo tierno que se veía haciéndolo.

-Le dije que no quería citas, él me dijo que necesitaba casarme para darle un nieto que trabaje después de mí y luego nos interrumpieron -suspiró-. No pudimos seguir hablando del tema.

Jeongguk asintió levemente, luego tomó una galleta y se la extendió a Taehyung.

-Todo estará bien. Tómate tu tiempo, ya sabrás decirle -el mayor tomó lo que Jeongguk le extendía-. ¿Tienes alguna cita esta semana?

-Papá no me ha dicho nada.

-Me gustaría ser yo quien te obligue ir a una cita esta vez.

Taehyung rio divertido.

-Déjame adivinar. ¿Contigo?

-Exactamente.

⠀⠀⠀

⠀⠀⠀

⠀⠀⠀

⠀⠀⠀

⠀⠀⠀

⠀⠀⠀

⠀⠀⠀

⠀⠀⠀

⠀⠀⠀

⠀⠀⠀

;;;;

⠀⠀⠀

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro