No me dejes
— La puerta está abierta... — dije entrando a casa lentamente
— ¡TAEHYUNG ABRE LA PUERTA! — escuché la voz de mi padre que me puso alerta
De inmediato subí, viendo a mi padre en frente del cuarto de mi hija, tocando de forma desesperada mientras tenía una botella de whisky en su mano.
— ¡TAEHYUNG! —
— Para — dije agarrándolo del brazo
— ¡Suéltame! — exclamó empujándome
— Padre cálmate — dije agarrándolo de los hombros, no quería pelear con él, quería pegarle pero no lo haría — vamos abajo — dije agarrándolo con fuera
— Necesito hablar con Taehyung — dijo intentando soltarse de mi agarre
— No, necesitas calmarte —
Lo llevé a la sala, lo senté y vi como él simplemente empezó a tomar, no sabía que había pasado, pero no me gustaba esto.
— Trae más, vamos a tomar — estaba borracho
— No —
— Dije que traigas más, ¿¡Por qué carajo todos me dan la contra!? — preguntó intentando levantarse, de inmediato lo detuve
— Bien, traeré más — dije viendo como sonrío, no sabía qué había pasado pero al parecer Taehyung le había dicho que no a mi padre
Fui a traer más licor, dos botellas más, no pensaba abrir las dos, sería demasiado para él, pero debía de traer dos para que piense que la tomaría y se quede tranquilo.
— Bien, dime que pasa — dije dejando las botellas en la mesa
— Faltan los vasos — dijo riéndose
— Bien... — dije yendo por los benditos vasos — aquí están —
— Perfecto — dijo abriendo una botella para servirse — toma tú también —
— Me gustaría que mejor me digas que sucede — dije viendo como su rostro cambio
— Taehyung se molestó —
— ¿Por qué se molestó? — pregunté viéndolo fijamente
— Ayer fue nuestro aniversario, ya sabes, quise ser romántico, lo saqué a comer, fuimos a un caro restaurante y lo hice feliz — dijo sonriendo — luego lo llevé a un hotel — dijo riéndose
— ¿Qué más? — pregunté viendo como me sirvió en un vaso licor
— Toma tu también —
— Sigue contando lo que pasó — dije agarrando el vaso, pero sin dejar de verlo
— Estoy en celo, se lo dije, le dije que quería tener sexo y me dijo que no — dijo molesto
— ¿Eso fue tod-...? —
— Me dijo que no pero sabía que era un sí, así que le quité la ropa y lo tiré a la cama, realmente es un gran omega, no tienes idea — dijo riéndose — pero a la mañana siguiente se levantó llorando, dijo que dijo que no y salió corriendo del hotel, me puso de mal humor maldita sea —
— ¿Que hiciste qué? — pregunté sintiendo mi mano temblar de ira
— Eso no importa, ¡LO QUE IMPORTA ES QUE TAEHYUNG AÚN NO A APRENDIDO QUE DEBE DE HACERME CASO! — gritó tirando su vaso al piso
— Tal vez no te desea — dije viendo como me miró fijamente — seguro no le haces sentir ni una pizca de deseo y por eso te rechaza, seguro quiere a un alfa mucho mejor que tú, uno que le de los placeres que un viejo como tú no le puede dar — dije intentando calmarme, quería golpearlo
— Yo lo satisfago mucho, Taehyung es mi omega — dijo sonriendo — mío —
— Pues lamentablemente parece que ya no quiere serlo —
— ¿Qué haces aquí? — preguntó poniéndose de pie — ¿Acaso no estás viviendo con Hoseok? —
— Terminé con él — dije también poniéndome de pie
— A-ah... bueno que pena — dijo riéndose mientras se tambaleaba hasta un pequeño estante, sacó otra botella y se la empezó a tomar
— Iré a mi cuarto — dije viendo como ni siquiera me escuchó, estaba ocupado en beber
Subí lentamente las escaleras, pensando en Taehyung, en mi hija, sintiendo mucho miedo de mi padre, nunca lo había visto así, él siempre ha sido una persona autoritaria, le gusta que hagan caso siempre a lo que dice, no importa si no estás de acuerdo, pero nunca lo he visto reaccionar de ese modo, y me da miedo.
— Taehyung — dije en frente de esa puerta, escuchando como pisadas fuertes se escucharon adentro, viendo como de inmediato se abrió por completo la puerta
— Jungkook — dijo Taehyung sonriendo
Me lancé a abrazarlo, tenía puesto un vestido blanco arrugado, su cabello y rostro eran un desastre, su cuello tenía marchas rojas, incluso sus piernas estaban temblorosas, su mirada llorosa lo hacía ver aún más roto, mi pecho dolió mucho al verlo así.
— Ju-ungkook — dijo abrazándome con sus brazos temblorosos, sus suspiros rotos eran ocultados en mi pecho
— Tranquilo, estoy aquí, no te pasará nada malo — dije retrocediendo con cuidado, sin soltarlo, quería cerrar la puerta con seguro
— No-no quería —
— Lo sé — dije sin soltarlo
Lo llevé al pequeño mueble que Yerin tenía en su cuarto, lo senté y me senté a su lado, secando las lágrimas que no dejaban de salir de su rostro.
— Cálmate — dije poniendo mis manos en cada lado de su cabeza para dejar un beso en su frente
— No-o me dejes, por favor no me dejes — dijo agarrando con fuerza mis brazos — po-por favor no nos dejes —
— No lo haré — dije agarrando sus manos — he vuelto, ya no me iré —
— ¿En-en serio? —
— Sí — dije acercándome a sus labios
Juntamos nuestros labios en una danza suave, Taehyung se aferraba a mí con fuerza, sus brazos temblaban y no dejaba de llorar. Lo eché suavemente en el mueble, separando ligeramente nuestras bocas.
— Jungkook por favor... —
— Dime, Taehyung — dije acariciando su cabello, notando como ya habían crecido mucho sus raíces negras, después de tanto tiempo pintándose se estaba dejando el cabello natural al parecer
— Borra sus toques — dijo en voz baja — me siento mal, no quiero seguir sintiendo sus manos encima mío —
— Taehyung... —
— No lo quiero, bórralo — suplicó
— Lo borraré, borraré todo de él — dije besando su cuello
Le saqué su vestido, empecé a marcar su cuerpo encima de las marcas dejadas, lo acaricié con suavidad y delicadeza, sintiendo como Taehyung se estremecía.
— Jungkook... — dijo abriendo sus piernas
— Borraré todo — dije hundiéndome en él, haciendo que rápidamente se aferre a mi espalda
— Jun-jungkook — gimió contra mi boca
Fue lento, acariciaba su cuerpo y le decía lo mucho que lo amaba, lo besaba y abrazaba, quería hacerle sentir todo mi amor.
— ¡Ahg! — gimió cuando empecé a moverme un poco más rápido
— Te amo, nunca te dejaré Taehyung —
— No-no, no me dejes —
Nos corrimos, besándonos para callar nuestros gemidos llenos de amor, sintiendo como algo más que nuestros cuerpos se unían.
— Jungkook... — dijo besándome todo el rostro — no me dejes —
— No lo haré — dije sin soltarlo
Taehyung no dejaba de pedir que no lo deje, no dejó de pedirlo hasta que quedó dormido, lo tapé con una manta de Yerin, me arreglé la ropa y me acerqué a mi pequeña, la había extraño mucho, no la había visto por cinco largos meses, estaba más grande.
— Eres tan linda — dije acariciando su cabello, viendo como abrió sus ojos poco a poco
— ¿Pa? —
— Sí mi reina — dije sonriendo
— ¡Pa! — exclamó levantándose para abrazarme
— Ay mi cielo lindo — dije apachurrándola entre mis brazos
— ¡Pa voliste! — exclamó sin soltarme
— Así es mi vida, volví —
— Pa... apa malo — dijo alejándose de mí — apa gita feo y papi llora, yo no llora, papi se pondía más tiste — dijo frunciendo el ceño — ¿Apa pega a papi? —
— Espero que no... — dije acariciando su mejilla — pero no te preocupes mi cielo, ya pa llegó y no los dejará — dije sonriendo
— Sí, pa no te vayas —
Me eché con Yerin en su cama, dormimos un rato, pero rápidamente me levanté al sentir un peso más en la cama.
— Yo también quiero echarme con ustedes — dijo Taehyung echándose al otro extremo, dejando a Yerin en medio de nosotros
— ¿Te sientes mejor? — pregunté agarrando su mano, notando recién que no había un anillo en él
— Si estás aquí sí — dijo sonriendo
— ¿Te a pegado? — pregunté preocupado, preocupándome más al ver como miró a otro lado
— Vamos a descansar, no quiero hablar de eso, no más —
— Bien... —
Salí del cuarto luego de un rato, Taehyung y Yerin debían de comer algo, no querían bajar por miedo, yo tampoco quería que bajen. Al llegar a la sala vi a mi padre completamente dormido, estaba roncando mientras tenía su cabeza pegada a la mesa. Llevé mucha fruta, yogurt, cereal y muchas cosas empaquetadas, no quería cocinar, quería evitar que mi padre despierte.
— Llegué con comida — dije entrando al cuarto con dificultad
Rápidamente Taehyung se acercó a mí y me ayudó, junto a Yerin comimos, ella se veía contenta de tenernos con ella, nos había agarrado de la mano y nos miraba seguido.
— ¿Quieres que te traiga ropa? — pregunté al notar como ya hacía algo de frío, Taehyung no podía seguir con ese vestido
— Me quiero dar un baño —
— Ve, él duerme en la sala —
— Bien —
Taehyung se metió a bañar y yo saqué algo de ropa del cuarto de ambos, seguro Taehyung no iba a querer dormir con él, seguro iría a uno de los cuartos extras que hay, así que me llevé mucha ropa de ahí.
— ¿Ya te bañaste? — pregunté al verlo en el cuarto de nuestra hija
— Sí, me voy a camb-... — mi celular lo interrumpió
Al ver mi celular me salió en nombre de Hoseok, miré a Taehyung y dejé la ropa en el mueble.
— Ahora vengo — dije cerrando la puerta para ir a mi cuarto — dime — dije apenas contesté la llamada
— Ju-ungkook vuelve — dijo llorando
— Ya te dije que no, Hoseok siempre pides algo, no puedo estar con una sonrisa en el rostro y disponible a tu familia las veinticuatro horas, es agobiante —
— Lo-lo sé, hice mal pero no lo haré más —
— Hoseok... dame tiempo, siento que lo de la boda es apresurado — dije escuchando las risas de Yerin y Taehyung
— ¿Ti-tiempo?, ¿Cuánto tiempo? —
— No lo sé, y si no estás dispuesto a esperar lo entiend-... —
— ¡Te voy a esperar!, ¡Así sean diez años yo voy a esperar! —
— Es tu decisión — dije colgando
Volví al cuarto, no sin antes bajar para asegurarme de que seguía durmiendo.
— ¿Todo bien? —
— Ujum... Yerin quería dormir un poco más — dijo sobando la espalda de Yerin suavemente para luego alejarse
— ¿Es bueno que duerma tanto? —
— Por hoy sí — dijo acercándose a mí — me alegra que hayas vuelto — dijo enredando sus brazos a mi cuello — me sentía solo sin tí —
— Tenías a Yerin contigo, es una pequeña parte de mí — dije agarrando su cintura
— Solo por ella pude seguir bien — dijo alejándose un poco — pero ella no es tú, te extrañé mucho — dijo desatándo su bata, dejando que se resbale hasta sus hombros
— Yo también te extrañé — dije pasando mi mano por su pecho
— Pensé que me habías olvidado —
— ¿Cómo podría hacer eso? — pregunté viendo sus labios
— Pensé que estabas feliz con Hoseok, que él te hacía sentir feliz —
— No — dije sonriendo — no puede, no importa que tanto hayamos estado en la misma cama, no era lo mismo, él no... no era tú — dije agarrando su mentón para unir nuestros labios
— Jungkook... — suspiró contra mi boca
— Salgamos del cuarto — dije jalándolo del brazo hacía el pasillo
— Esper-... —
— Quiero cogerte con fuerza Taehyung, no me quiero controlar — dije agarrándolo de la cintura
— No te controles — dijo sonriendo, se soltó de mi agarre y se volteó, dejando la bata caer por completo
— Taehyung... — me acerqué a él para agarrarlo del trasero
— Cógeme aquí, aquí fue la primera vez — dijo frotándose contra mí
— La primera vez — dije bajando mi pantalón — aún lo recuerdo — dije entrando en él
— ¡Ahg! —
— Te cogí tan bien, te dejé lleno — dije moviéndome con fuerza
— Sí-í, todo se desbordó — gimió mientras movía sus caderas en círculos — tu-tuve que juntar mis piernas para que parara, todo tu semen salía de mí —
— Te voy a dejar igual de lleno — dije metiendo mi dedo a su boca mientras me movía
Taehyung gemía con fuerza, yo tampoco me controlaba, me movía desesperadamente mientras sentía como sus paredes se mojaban más.
— Tan delicioso — suspiré contra su oído
— ¡Uhg! — nos corrimos mientras decía eso
— Tan lindo — sonreí, sintiendo como rápidamente era empujado — Taehyung... —
— Prométeme que estarás siempre conmigo — dijo viéndome fijamente — Jungkook, por favor... —
— Lo prometo — lo agarré de la cabeza y lo besé — estaré siempre contigo
— Te amo — dijo sonriendo — realmente lo hago — me abrazó su suspiró — no me dejes Jungkook — dijo pasando su mano por mi espalda
— No te dejaré — dije besando su nariz
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