- ¡Taehyung! ¡Detente! ¡Te vas a lastimar de esa manera!- Namjoon lo tomó de los brazos para que se detuviera.

- ¡No lo quiero cerca mío!- Gritó con lágrimas en los ojos dejando que su cuerpo escurra por la pared hasta caer sentado al piso. Lágrimas empezaban a salir de sus ojos con violencia. Yoongi lo miraba indiferente pero la verdad es que le dolía verlo así y Namjoon no sabía que hacer, solo lo observaba, queriendo hacer algo pero sin saber exactamente qué.- ¿Sabes lo que vi?- Taehyung se levantó abruptamente asustando a los dos que estaban con el. Sollozó una vez más y sonrió amargamente limpiándose las lágrimas que mojaron todo su rostro.- ¡Besaba a otro! ¡Un desconocido!- Taehyung se acercó de Namjoon y con agresividad lo tomó del abrigo.- ¡Un cualquiera!- Sacudió a Namjoon por los hombros con fuerza.

- Calma, Taehyung.- Yoongi con paciencia se le acercó y lo alejó de Namjoon porque por lo visto le iba a lastimar si seguía así.

Volvió a echarse al pasto y abrazó sus piernas mientras sentía las lágrimas venir de nuevo.

- Tuve que fingir que todo estaba bien por la noche.- Miraba perdidamente a la tierra bajo sus pies.- ¡Cuidarlo después de todo lo que vi! ¡Fingir que poco me importaba! ¡Soportar todo!- Namjoon y Yoongi se miraron.- No sabia que me sentía tan herido hasta hoy por la mañana cuando recordé exactamente el por qué de todo, ayer no fui capaz de pensar en nada, lo traté de lo mejor sin recordar lo que había visto en aquel callejón y como me sentí cuando lo hice.- Silencio.

- Lo sentimos, Taehyung.- Namjoon murmuró sin saber que decir.

Yoongi se alejó un poco de los dos sólo para ir a atrapar la pelota de basketball arrojada a una esquina del parque. Se acercó nuevamente a Taehyung, agachando para quedar a su altura.

- Te diré que debes hacer.- Taehyung volteó a mirar a Yoongi, este le puso la pelota frente al rostro.- Tomar un aire mientras jugamos un poco ¿te parece?- Taehyung sólo fue capaz de sonreír y asentir aceptando la ayuda de Namjoon para levantarse.

No era exactamente un consejo, sin embargo sonaba mejor que quedarse tirado ahí a llorar por alguien.

Hoseok lo observó todo desde el estacionamiento del parque sin que ellos se dieran cuenta. Tenía los puños apretados contra el volante mientras suspiraba pesadamente. Jungkook se las pagaria por haber dejado a su primo en aquel estado.

Arrancó con fuerza sabiendo exactamente a donde debía ir.

― 🌹 ―

Hoseok empujó la puerta de la habitación de su primo encontrando a Jungkook aún durmiendo. Le arrebató las mantas que lo cubrían y lo sacudió del pijama. Jungkook se despertó asustado, parándose inmediatamente para poder entender que pasaba. Su cabeza parecía querer explotar cuando se levantó tan deprisa.

- ¡¿Que piensas que haces?!

- Supongo que puedo hacerte la misma pregunta.- Hoseok contestó con ironía. Jungkook frunció el ceño.

- ¿Quieres explicarme que rayos pasa?- Hoseok lo miró con ira, el mayor nunca se había sentido así. Era conocido en cualquier lado de aquella pequeña ciudad por su gran corazón, su alegre sonrisa y preciosa personalidad, pero desde que vio a Jungkook por primera vez, no tuvo paz. Jamás alguien iba a entender pero su Taehyung era mas precioso que cualquier cosa que en su vida, su bien mas preciado.

- Si eso es lo que necesitas para poder sentir al menos un poco de culpa entonces te lo diré con mucho gusto, si eso servirá para dejarte en la situación que Taehyung se encuentra ahora ¡por supuesto te lo diré! ¿Quieres escuchar todo? ¡Pues bien! ¿Qué te parece si el chico que te gusta es un hijo de puta que no hace más que lastimar con sus palabras y acciones? Una noche se va de la casa, se emborracha, le manda un mensaje pidiendo ayuda y cuando este va por el se lo encuentra besándose en media calle con otro tipo tan basura como el ¿eh? ¿Qué te parece? ¿Te gusta? Pues no ha terminado. Ignorando todo eso lo lleva a casa, lo cuida, le hace todo lo necesario para que se sienta bien ¡Y toda esta mierda porqué prefiere que ese maldito desgraciado esté bien en lugar de cuidar de si mismo! Y bueno, la historia termina así ¿Satisfecho? ¿No logras enterarte aún? Pues te voy a aclarar el cerebro por las dudas. Ese maldito hijo de madre eres tú. No me sentaré a ver como mi chico sufre por alguien como tu ¿entiendes? Arregla esto antes de que yo mismo lo haga asegurándome de que jamás en tu puta vida vuelvas a verle.- Hoseok se dio cuenta de que había acorralado al chico en la esquina de la habitación ya que mientras hablaba avanzaba sobre el haciendo que Jungkook diera un paso hacia atrás.

Jungkook tenía lo labios entreabiertos pero no respiraba. Sus ojos estaban abiertos de par en par. No pestañeaba. No reaccionaba.

Algunos minutos se pasaron y cuando logró raciocinar sobre todo lo que se le había dicho, miró asustado a sus manos como si hubiera matado a alguien.

- Qué mierda hiciste, Jungkook...- Fue lo ultimo que murmuró antes de correr al baño a cambiarse.

Tenía cosas que arreglar.

― 🌹 ―

- ¡Yugyeom!- El chico de la otra noche estaba sentado frente al bar con otro chico al lado. Se giró al oír su nombre ser llamado y una expresión de sorpresa se dibujó en su rostro.

¿Qué hacía Jungkook ahí?

- ¡Jungkook!- Se levantó de su puesto y se acercó a abrazarlo.- ¿Qué haces aquí?- Preguntó extrañado.

- Solo quería arreglar las cosas sobre ayer. Lo que pasó fue accidente ¿ok? Estaba borracho y... No debí hacerlo.- Yugyeom lo analizó algunos segundos.

- Por supuesto, Jungkook.- Declaró al fin con una gran sonrisa. Jungkook lo miró extrañado.- ¡Somos amigos! Estábamos borrachos. No hay de que preocuparse, al fin fue solo un beso ¿no?

- Exacto.- Jungkook contestó después de algunos segundos reflexionando.- Bueno, debo irme. Tengo cosas que arreglar.

- ¿No te puedes quedar para mi presentación?- Yugyeom lo sostuvo de la muñeca antes que se fuera.

- ¿Presentación?

- Soy bailarín del club hace un mes y medio. Empiezo en 15 minutos. Me gustaría que te quedaras.

- Yo también, pero debo irme, de verdad. Vendré otro día a verte. Fue un gusto hablar contigo.- Comentó Jungkook empezando a alejarse.

- El gusto ha sido mío ¡Espero que logres resolver tus asuntos!- Gritó cuando Jungkook ya casi salía del club.

- Yo también...- Murmuró a aí mismo.

― 🌹 ―

Jungkook bajó del autobús y miró a su alrededor, en la esquina se encontraba el parque en que, según la nota de Hoseok, Taehyung debía estar.

Caminó en esa dirección.

Las manos le sudaban. Estaba nervioso.

En esa mañana el sol brillaba radiante, se escuchaban uno que otro pájaro cantar y la brisa era fresca. Era un maravilloso día para todos, menos Jungkook.

Cuando empujó las rejas de hierro y adentró el espacio recreativo dirigió su vista a la cancha de basket.

Allí lo vio.

Jungkook se acercó a pasos lentos sin ser notado, atrapó con su mirada a Taehyung junto a tres tipos más, uno de ellos, Hoseok. Estaban sudados, sus respiraciones irregulares mientras recorrían toda la cancha de un lado a otro lanzándose la pelota y gritando por la emoción del momento.

Jungkook observó como un chico de piel morena intentó pasar le la pelota a Taehyung pero fue bloqueado por el brazo de un pequeño blanquecino de capucha negra que jamás había visto en su vida.

- ¡Es enano pero es increíble como juega! ¡Joder!- El moreno bromeó mientras los tres jugadores se detenían a mirar como Yoongi corría hacia la cesta y marcaba punto.

- De que adelanta ser grande y torpe ¿uh?- Yoongi devolvió la broma sin reírse tirando la pelota a la cara de Namjoon. Por milagre este logró atraparla.

- Está bien, chicos.- Taehyung comentó agotado.- Voy por un poco de água, quieren que... Jungkook...?

El juego de los tres se detuvo al escuchar tal nombre salir de la boca de Taehyung, todos se giraron por donde Tae había ido y de repente Jungkook se había vuelta el centro de atención de aquel quatro par de ojos. Este siquiera se dio cuenta cual fue el momento en que Taehyung notó su presencia pero en ese mismo instante lo unico que quería saber era una manera de huir de aquellas miradas.

- Por favor, vete.- Taehyung murmuró acercándose de donde Jungkook estaba para pasar de largo en busca de agua. Todos lo otros tres oyeron el pedido.

Y bueno, lo que pasó enseguida, fue algo que siquiera Jungkook se imaginó haciendo.

Antes que Taehyung fuera capaz de pasar de largo Jungkook suspiró profundamente y tomó de la muñeca de Tae para detenerlo. Taehyung estaba decidido a arrancar su muñeca de aquel agarre pero los brazos que lo envolvieron hicieron que se callase.

Jungkook lo abrazó como si aquel fuera el último día juntos.

Hundió su cabeza en el pecho del mayor que seguía sin reacción. No quería pensar en ese instante que su abrazo no estaba siendo correspondido, entonces cerró los ojos con fuerza e inhaló del aroma que siempre acompañaba al mayor, de esta vez mezclado a un poco de sudor.

- Perdón....- Murmuró sintiendo sus ojos llorosos sujetando a Taehyung con más fuerza, escondiendo más su cabeza en el pecho ajeno y creyendo que no fue oído.

Eso fue lo que creyó.

Pero solo hasta el momento en que largos brazos lo envolvieron dulce y delicado. Esa fue la respuesta a su pedido.

Taehyung cerró sus ojos poniendo su mente en blanco. No quería pensar en nada. No necesitaba nada mas. No cuando tenía a su chico abrazandole fuertemente y pidiéndole perdón.

― 🌹 ―

- Por eso detesto el amor.- Yoongi opinó observando la escena de lejos.- Algunas horas atrás lloraba como niño mientras confesaba lo mucho que lo odiaba y ahora deja que lo abrace.- Yoongi chasqueó la lengua.

- Que preciosos...- Namjoon comentó maravillado con el milagro que tenía frente a sus ojos. Yoongi lo miró asqueado.

- ¿Tu que opinas, Hope?- Yoongi cuestionó al verlo observar todo en silencio.

- Yoongi, dime. ¿Crees que si arrojo la pelota de aquí soy capaz de darle en la cabeza de mierda de ese Jungkook?- Hoseok cuestionó pensando seriamente en ejecutar su plan.

- No, querido amigo. No creo que tengas puntería para eso, en cambio, yo si. ¿Quieres que lo intente?- Yoongi respondió.

- Adelante.- Hoseok confirmó y Yoongi elevó la pelota en el aire cerrando un ojo como si estuviera apuntando a la cabeza de Jungkook.

- ¡Yoongi! ¡Estas loco!- Namjoon le arrebató la pelota de las manos antes de que su amigo de verdad le diese con la pelota en la cabeza de Jungkook.

― 🌹 ―

Jungkook al fin fue capaz de soltarlo pero no de mirarle a los ojos.

- Perdón.- Volvió a repetir aún sin mirarlo.

Taehyung no quería decirle nada, no creía necesario las palabras. Lo observó desde donde estaba, lo que más se podía ver era la cabellera castaña del menor ya que no había sido capaz de alzar la mirada.

Sin dudarlo lo tomó por los hombros suavemente y volvió a acercarlo a él y envolverlo con cariño.

Jungkook recostó su cabeza en el pecho ajeno y dejó que aquella lágrima solitaria cayera por su rostro mientras abrazaba el abdomen de su mayor.

Taehyung no se arrepentía.

Al final, eran sólo dos semanas con aquel chico por cerca.

Y aunque le doliera pensar en eso, sonrió por arriba del hombro de Jungkook.

- Sabes que te perdoné en el instante que hiciste con que me detuviera.- Murmuró contra la cabellera del menor.

- Gracias.- Fue lo ultimo que Jungkook murmuró antes de seguir concentrado en escuchar el corazón de Tae golpetear contra su oído.

Ahora se viene lo bueno, mis Taekookas.

Espero les esté gustando.

Gracias por estar leyendo.

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