De nuevo a Londres...
Después de tantos años al fin vuelvo a pisar tierras londinenses, extrañaba ese frío que te cala hasta en los huesos, hace ya tanto tiempo que no había estado aquí , que no sentía lo bien que era estar de vuelta en casa, pero no fue por qué quisiera irme,de hecho no fue opción mía más bien alternativa de mis padres para controlar a su niñita rebelde y pues en realidad no los culpo después de todo les cause un sin fin de problemas, pero eso no justificaba que me mandaran a un internado por sugerencia del hijo de uno de sus viejos amigos y sinceramente no pensaba en volver a casa de mis padres , después de todo mi madrina, una adorable señora ya mayor de edad pero con una personalidad completamente extrovertida prometió alojarme en su casa cuando volviera del internado y no iba a rechazar su oferta , había ido anteriormente tantas veces a su casa que verdaderamente podía sentirla como mía.
Decidida a todo,pare un taxi indicándole la dirección a la que me dirigiría a la cual sería mi nuevo hogar y dónde retomaría mi vida de nuevo, esperaba que ella me reconociera, habían pasado ya tantos años desde que la había visto que no me sorprendería sino me reconoce, en fin el conductor me había indicado que había llegado a mi destino por lo que le pagué y baje del taxi algo nerviosa, frente a mi a unos cuantos pasos estaba una puerta color obscuro con el número 221B lo cual me indicaba que por fin estaba en casa de mi madrina, empecé a dar unos cuantos pasos dispuesta a tocarla hasta que está fue abierta saliendo del interior de la casa un rubio algo bajito pero apuesto , percatandose de inmediato de mi presencia.
-Ah supongo vienes a verlo, solo déjame decirte que no está de humor ,te sugiero volver en otra ocasión, te lo digo por tu propio bien --dijo mientras finalizaba con una sonrisa--
-Amm bueno, yo en realidad venía a ...--me interrumpe--
- Aunque no debería ser grosero, pasa está helando aquí afuera -- haciéndome pasar sin dejar que le explicará- ¡tienes un nuevo cliente, será mejor que bajes ! -- grito desde la planta baja esperando llamar la atención del rizado--aunque será mejor que subas , no creo que baje -- empezó a subir los escalones con algo de prisa--
Realmente me había dejado confundida este tipo, es decir ¿ quién rayos se supone que era?y la pregunta más importante ¿a quién se supone que iría a ver?, decidí seguirlo así tal vez obtendría respuestas y fue así como lo seguí hasta la planta de arriba , haciéndome pasar a la sala, dejándome ver la espalda de un rizado quien veía hacia la ventana pensativo sin notar nuestra presencia o eso hasta que el rubio me hizo sentar frente a dos sillas.
-ponte cómoda, no tardará mucho en reaccionar y te podrá atender, quisiera quedarme pero tengo que estudiar un poco -- se disculpo algo apenado el rubio- suerte -- exclamó antes de irse--
Está es una de las ocasiones en las que me he sentido demasiado incómoda en mi vida, el tipo este ni siquiera se ha dado cuenta de mi presencia o eso creía hasta que empezó a hablar.
-será mejor que empieces a hablar antes de que me aburra más de lo que estoy -- exclamó el rizado aún de espaldas--
Yo me levanté de la silla dejando mi maleta sobre esta después de todo estaba muy confundida, se supone que está era casa de mi madrina, por lo que ¿quién era este tipo?
- Creó que te estás confundiendo, yo no soy cliente, ni siquiera se que haces --con el ceño levemente fruncido--
- Si no veniste a eso no me hagas perder mi tiempo -- dijo exasperado--
- Discúlpame pero para empezar el rubio no me dejó explicar a qué venía ni quién era, segundo si mal no recuerdo esta es casa de mi madrina y tercero es de muy mala educación darle la espalda a alguien! -- dijo dándole la vuelta rápidamente dejándose ver al rizado--
- ...Espera un minuto ¿qué tú no tenías cara granosa y frenos? -- dijo mientras me empezaba a ver de arriba a abajo analizandome --
De inmediato me sentí ofendida y sorprendida a la vez , es decir ¿cómo este tipo sabía eso de mí? No niego que antes era así , pero ¿cómo era que el sabía eso de mí?
- ¿Qué dijiste? --dije tratando de ver si no había escuchado mal--
- ¿Acaso no escuchas? -- empezando a rodearme-- si mal mi memoria no falla, tu tenías muchos granos y frenos , horribles por cierto.
- Mira tipejo no sé quién seas o cómo sepas eso, simplemente quiero saber si está es casa de la señora Hudson -- dije frunciendo el ceño-
- Pues mira mocosa, se nota que no me recuerdas y la verdad no me sorprende con el poco intelecto que tienes, déjeme refrescarte la memoria, soy Sherlock, Sherlock Holmes y si , esta es casa de la señora Hudson.
Un minuto, ¿acabo de llamarme mocosa este tipo? ,no me creo que este sea Sherlock, bueno al menos no lo recuerdo así. El Sherlock de mis recuerdos es completamente diferente, iba a decirle un par de cosas más hasta que mi adorable madrina entro por la puerta.
- Sherlock por dios ¿qué son esos gritos? --dijo con la vista puesta en el rizado--
- Su querida ahijada ha llegado querida señora Hudson.
Vi la cara de sorpresa de mi madrina al escuchar lo que Sherlock dijo por lo que de inmediato volteó a verme y vi cómo una sonrisa se formaba en su rostro.
- Susy cuanto has crecido linda -- dijo abrazándome --
Yo no me negué al abrazo después de todo la extrañaba demasiado, mientras la abrazaba vi cómo el rizado rodaba los ojos hasta que mi madrina se separó del abrazo y él se acercó a mí viéndome fijamente por lo que me puse incómoda y una mueca se formó en mi rostro , siguió así un rato hasta que se digno a hablar.
- Tus padres te mandaron a un internado en Berlín a los 16 por lo que no estás del todo familiarizada con lo que ha pasado fuera del internado o a mi parecer estás desorientada, te metieron ahí por sugerencia de Mycroft obviamente --dijo dando una leve pausa-- veniste aquí por qué la señora Hudson cómo buena madrina se ofreció a alojarte cuando volvieras del internado , por lo que tomaste en cuenta su oferta porqué no quieres volver a casa de tus padres de nuevo ,además de que no les has dicho de tu regreso, te quitaste los frenos mientras estabas en el internado y cuidaste mucho más tu piel por sugerencia de tus amigas del internado con las cuáles tienes un fuerte vínculo de amistad, tuviste un enamoramiento con uno de los chicos que había en el internado hasta que te rompió el corazón por lo que decidieron ser amigos, cortaste tu cabello recientemente, querías un nuevo look porque piensas que iniciarás de nuevo tu vida, ah y además estabas estudiando psicología pero te interesaste por ciencias forenses por lo que lo más probable es que estés acabando la carrera y por ello hiciste tú cambio de universidad aquí y lo más sensato que hiciste es quedarte a vivir con tu madrina. -- acabo diciendo con una media sonrisa--
Eso me dejó más que sorprendida , después de todo si había cambiado un poco.
-Ah y por cierto , bajaste de peso , antes estabas ya sabes gordita y verdaderamente nadie te hacia caso. -- finalizó con una media sonrisa --
Eso fue el colmo , nadie se mete con mi peso , por lo que aproveche que se distrajo un momento y le di un buen puñetazo en la cara lo que lo hizo caer de sentón al suelo y que este se tomará la nariz con un ligero hilo de sangre en esta.
- Y veo que ya no eres una niñita débil -- dijo mientras se agarraba la nariz--
Estaba a punto de irme encima de él hasta que mi madrina nos habló.
- Quietos los dos, ya tengo suficiente con el y John discutiendo así que se están quietos, Susy será mejor que vengas conmigo y Sherlock discúlpate con ella.
- Más bien ella debería de disculparse conmigo señora Hudson.
- Dije que te disculpes Sherlock -- dijo mientras lo fulminaba con la mirada--
- Bien ,bien discúlpame Susan Palmer por decirte tus verdades --dijo viéndome con algo de molestia--
Yo simplemente hice una mueca que no paso desapercibida por parte de mi madrina por lo que me codeó para disculparme también.
- Siento haberte golpeado en tu carita de niño bonito Sherlock Holmes --dije rodando los ojos--
- Se que está cara de niño bonito te gusto alguna vez -- dijo mientras sonreía de lado--
Estaba por decirle un par de cosas más hasta que mi madrina me dirigió hacia la puerta bajando las escaleras conmigo y dejándome pasar a lo que era la parte dónde vivía ella, indicándome que me sentará y yo terminé obedeciendo a mi madrina.
- Disculpa a Sherlock , generalmente no eres a la única que ha irritado.
- No lo dudó, más bien discúlpeme por mi comportamiento. -- dije algo apenada--
- No te preocupes querida, yo también le hubiera dado un puñetazo en la cara. --dijo con una sonrisa--
Creo que después de todo será interesante vivir aquí, aunque algo me hace sospechar que Sherlock y yo seremos cómo perros y gatos , pero que más podría salir mal? ...
||Karly Morales||
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