Entra en la habitación con la bronca que apoderar a mi cuerpo. No lo podía creer, como era capaz de decirme en la cara. Cerré la puerta detrás de mí y me quedé mirando a un punto fijo. En eso mis ojos fueron atraídos por una presencia.

Era Blas que se había levantado. Su cara tenía marcas de almohada, había dormido muy profundamente.

-Hola gorda- me saluda con una voz débil. -¿Que pasó?- Habla entre bostezos.

-No pasa nada- mentí. -solo vinieron a preguntarme algo sobre el maquillaje de mañana- aclaré. -mira que en un rato me tengo que ir porque tengo que armar unos papeles, coser sus vestuarios y tengo que aprender una técnica nueva de maquillaje- sonreír.

El chico delante de mí asintió con la cabeza y se fue al baño a lavar lavarse los dientes. Me quedé sentada en la cama pensando en todo lo que había pasado recién, no sabía qué hacer con él.

No quería dejar a Matias en banda pero con lo que me había dicho recién era obvio que no quería nada conmigo, y si quería algo era para sólo una vez.

Decidida me levanté de la cama me cambié esperé a que la saliera al baño y entra en este, las cosas que tenía que hacer y llamé por teléfono a mi profesora de maquillaje, le avisé que iba a llegar muy temprano porque quería hacer algunas cosas, ella me dio el "okey" y emprendí viaje.

-Chau Blasito, después nos vemos- me acerqué a su cachete y le di un beso. -después te invito a tomar un café- el chico asintió colorado. -Chau lindo- le guiñe el ojo y salí del cuarto.

Mientras caminaba iba escuchando música, designado quedaba en la otra calle. Mientras caminaba con la música de fondo iba imaginando un montón de escenarios ficticios que podrían pasar, raramente hacía eso, lo hacía cuando estaba triste o aburrida.

Ya quería llegar a casa y estar con mis papás, con mi hermana y con mis amigos pero sabía que todo iba a ser distinto.

¡Dios de tanto pensar eso me dan ganas de llorar! Pensé en voz alta.

-perdón, me habló?- dijo un chico que estaba pasando al lado mío.

-No, discúlpame- reí avergonzada. El chico solo sonrió y siguió su camino. ¡Qué vergüenza! Pensé ahora sí para dentro.

Al decir verdad el chico no estaba nada mal. Era jovencito, ojos verdes y pelo morocho, tenía todo su brazo izquierdo tatuado como Messi. Era lindo.

Camine y camine hasta que llegué al estudié y ahí me la pasé casi todo el día.

🌧️

El clima se había puesto feo, gotas caían en el parabrisas del taxi que me estaba llevando hacia el hotel.

Estaba todo muy agradable.

Llague a la puerta de este y me bajé del taxi. Empapada camine hacia la puerta del hotel donde me resguardé en el techo de este, secándome un poco entré para ingresar al vestíbulo.

Allí sentando permanecía Blas con el celular, parecía estar en su mundo. Con una sonrisa me acerqué a él y me senté en el sillón de al lado.

-Hola chiquito- hable. -¿cómo estás?- Él chico levantó su mirada y sonrió.

-Bien, se re largo viste- habló con ironía en su voz. -Bueno, ya veo que te enteraste- rio al verme toda empapada.

-Si, lo vi- bromee. -Al final no vamos a poder ir a tomar algo, pero te prometo que para mañana vamos- sonreí.

-No pasa nada- sonríe. -Eu, Matías te busca, hoy vino a tu habitación y cuando me vio ahí me fulminó con la mirada- hizo una mueca incómoda.

-Dios, que pesado- me tape la cara. -donde está, así voy a buscarlo- Blas con pocas ganas me dijo que estaba en su habitación y yo me dirigí hacia allí. Me despedí del ruloso con un beso en la mejilla y camine hacia la habitación de Matías.

Cuando llegué a esta, él ya estaba parado en la puerta esperándome y cuando le vio rápidamente se acercó a mí.

-Perdón, no quería decir eso lo juro- habló. -Es decir, yo quiero estar con vos pero no quiero hacerlo público- continuó hablando.

-Hola, no?- pregunté irónica. Ni me había saludado. -Mira Mati, no me parece, si vos queres tener algo conmigo pero lo ocultas para no lastimar a tu ex novia la verdad que no estás enamorado de mí ni poco- cruce mis brazos incomoda.

-Pero no la quiero lastimar, por favor entendeme a mí-suplicó. No lo podía creer. Matías seguía parado entre el marco de la puerta y la habitación, estaba mojado por la lluvia y sostenía un pucho sin usar en sus dedos. -Te lo pido- volvió a suplicar.

-No Matías, no- negué. -No estoy cómoda así, yo posta te amo pero no me parece bien- gire mi cara hacia un costado, me era difícil mirarlo a la cara después de la barbaría que le acababa de decir.

-sabes que, deja- hable finalmente. -No pienso estar con vos, ya me cansé de que me uses así Matías. Es cualquiera, como sabes que yo estoy completamente enamorada de vos aprovechas eso- me di media vuelta y me fui corriendo a mi habitación.

Mientras corría escuchaba los gritos de Matías llamándome pero yo no cedía. Corrí hasta mi habitación, estaba la puerta abierta así que pensé que Blas estaba allí.

Cuando entré vi al ruloso sentado en el sillón con el celular. El chico al ver todo el movimiento que yo estaba haciendo capté su atención.

-Que pasó?- preguntó. Yo simplemente me acerqué a él, pocas lágrimas brotaban de mis ojos. -¿Que pasó linda?- preguntó ahora con un tono meloso.

Yo me senté en su regazo y me acosté en su hombro. -estoy enojada- suspiré. El chico acariciaba mi espalda con las yemas de sus dedos, causándome escalofríos.

-¿por qué estás enojada?- volvió a preguntar. Sus dedos comenzaron hacer trazos más largos, iban de mi espalda baja hasta mi cuello y allí me agarraba el pelo.

-Por nada, quiero dormir- me queje. Mi cabeza permanecía en su hombro. El chico me movió para que esté más cerca de él haciendo que nuestras intimidades rocen.

-¿ya queres dormir?- sus manos hacen una colita toda desarmada en mi pelo. -No queres hacer algo más- preguntó. Ahora nuestras caras estaban enfrentadas, sus ojos seguían todos mis movimientos, poniéndome nerviosa en cada uno de ellos.

-Blas, ahora no- suspire. El chico comenzó atacar mi cuello, hacia pequeños chupetones en este. Un pequeño suspiro salió de mí haciendo que el chico aumente su velocidad.

Blas movía mi cuerpo de atrás hacia adelante a su gusto. Mi cuerpo se había dormido por su toqueteo constante. El chico comenzó a subir sus besos hasta mi labio y allí nos fundimos en un beso.

QUE HERMOSOS.....

Hola amores jejej, como están??? Todo bien?

Perdón por tardar en subir cap, este no es el de 4000 palabras, ese es para el final de la historia. Los amo demasiado... besos.

Perdón por cortar el cap así cariños