Minho despertó y se encontró con el hermoso ángel Jisung durmiendo a su lado. Sonrió y apartó los mechones de cabello de la cara de Jisung para poder verlo mejor. Jisung se removió mientras dormía.

-¿Minho? -Los ojos de Jisung se abrieron lentamente. Minho sonrió.

-Estoy aquí amor. -Jisung mordió su labio.

-Minho... Soñé que volvíamos a tener una familia completa. Esta vez tuvimos una hija, ella era hermosa. Se parecía mucho a ti que a mi. Sin embargo, también había un niño en mi sueño... Él no era Changhee, era alguien más. No tenía nada en común con nosotros. Su cabello era castaño y sus también eran más claros. -Minho se encogió.

-Estoy seguro de que el tiempo lo explicará todo. -Jisung tarareó.

-Ya sabes... El sexo matutino es el mejor sexo. -Los ojos de Jisung se ensanchan.

-Minho... Te juro que si no dejar de hablar de sexo me iré en este instante. -Los ojos de Minho se ensanchan. Rápidamente envolvió sus brazos alrededor de la cintura de Jisung, acercándolo a él.

-No te vayas. Lo siento. Yo no estaba... Sólo quería ser gracioso, pero me detendré ahora. -Jisung comenzó a reír.

-¡Estoy bromeando Minho! Nunca te dejaría, pensé que lo había dejado bastante claro. -Minho suspiró.

-Aún así no bromees con eso.

-Entonces no bromees con el sexo. -Minho asintió.

-¿Qué te gustaría hacer hoy? -Jisung miró su teléfono.

-Felix me dijo que Jeongin trabaja en este restaurante realmente elegante en el lado oeste de la ciudad. ¿Por qué no vamos allí?

-Suena perfecto, ahora preparémonos. -Jisung asintió y se sentó.

-Me ducharé primero.

-¿Por qué no podemos ducharnos juntos? -Jisung miró fijamente a Minho haciendo pucheros.

-No me presiones.

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-¡Buenos días! Bienvenido a nuestro comedor, ¿cuántos? -Jisung sonrió ampliamente. Jeongin parecía absolutamente adorable.

-Sólo dos. -Jeongin asintió. Sonrió a la pareja.

-Dime, ¿cuándo empezaste a trabajar aquí? -Preguntó Minho mientras Jeongin les llevaba a una mesa.

-Hace aproximadamente una semana. Seungmin me dijo que debería trabajar en algún lugar que realmente me pague por mi arduo trabajo. -Minho tarareó.

-¿Cómo van las cosas entre tú y Seungmin? -Jeongin colocó los menús sobre la mesa, que tenia el número cinco grabado en un metal de color dorado que estaba adherido al borde de la mesa. Minho y Jisung estaban sentados uno frente al otro.

-Ah, es como un sueño~ Honestamente, si me casara con Seungmin no me sorprendería. -Jisung sonrió.

-Ya estás en tu segundo año de universidad. -Jeongin tarareo. Para entonces, Hyunjin y Felix habían abandonado los estudios para poder cuidar adecuadamente a sus hijos. Seungmin también abandonó sus estudios y les dijo que era porque Jeongin y él podían pagar las tasas universitarias de ambos, por lo que decidió que era mejor pata Jeongin continuar estudiando. Jisung dejó de asistir debido a la muerte de Changhee. Chan había terminado sus cuatro años.

-Es bastante solitario, ¡pero hice más amigos!.

-Qué bien. -Jeongin sonrió ampliamente y sacó su pequeño cuaderno.

-Entonces, ¿Qué te gustaría pedir? -Minho, que se había quedado callado porque estaba mirando el menú, ya tenía algo en mente. Jisung por otro lado había luchado para elegir algo.

-Quiero el especial de la casa. -Jeongin asintió y rápidamente lo garabateó.

-¿Y tú Jisung? -Jisung se mordió el labio.

-Um... sabes qué, me gustaría lo mismo. -Jeongin asintió.

-Bueno, su pedido estará listo en unos quince o veinte minutos, así que pónganse cómodos. -Jeongin recogió los menús y se fue. Luego volvió.

-Lo siento, olvidé preguntar. ¿Qué desean beber?.

-Agua está bien para mí. -Jeongin asintió.

-Té verde para mí. -Jeongin sonrió.

-De acuerdo. Volveré con sus bebidas en menos de cinco minutos.

-¡Jeongin es tan lindo! -Minho frunció el ceño.

-¿Y yo qué?.

-Tú también eres guapo, por supuesto. Pero creo que eres más sexy que otra cosa. -Minho sonrió satisfecho.

-Ah de verdad. -Jisung tarareo. Pudo ver que la lujuria comenzaba a formarse en los ojos de Minho.

-Sí, no intentes nada, estamos en público. -Minho suspiró.

-Sí, y te dije que no haré nada sin tu consentimiento. -Jeongin regresó con las bebidas.

-¿Han visitado a Felix y Hyunjin?, Hyujoon y Yeoseok han crecido un poco. -Dijo Jeongin mientras dejaba las bebidas.

-Pasaron por mi casa ayer. ¡Hyunjoon es tan lindo! Realmente se parece más a Chan, pero siento que su personalidad alegre y curiosa definitivamente es de Felix. Y Yeoseok realmente se parece a Hyunjin, realmente espero que en cuanto a personalidad sea como Changbin. -Jeongin asintió.

-¿Tienen en mente algún nombre para los niños?.

-Minhee. -Minho miró a Jisung, quien sonrió mucho.

-Oh, ¿por qué Minhee?.

-Porque es la combinación más corta que se me ocurrió, de los nombres de Minho y Changhee. Las dos personas más importantes para mí. -Jeongin sostuvo su corazón.

-Eso es muy lindo. -Jisung sonrió. Minho sintió que se ponía rojo.

-Yo estaba pensando en algo como... Hmm... Kyubok para la niña y Junghwa para el niño.

Jisung asintió.

-Ambos son nombres hermosos. -Jeongin sonrió.

-Gracias. Ahora vuelvo con tu comida.

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Cuando Jisung y Minho volvieron, estaban tropezando por la casa. Después de salir del restaurante, decidieron ir al bar cercano. Puede que bebieran demasiado. Jisung, de alguna manera, consiguió llamar a Felix para que los recogiera.

Minho y Jisung consiguieron entrar en su dormitorio. Sus mentes estaban nubladas mientras se desnudaban. Se giraron para mirarse. Hubo una pausa mientras admiraban la belleza del otro. Incapaz de contenerse más, Minho cerró la brecha entre él y Jisung. Sus labios se movieron en sincronía.

-¿Hasta dónde quieres llegar? -consiguió preguntar Minho. Jisung le miró fijamente a los ojos.

-Todas las formas. Minho te quiero. Yo te necesito. -Minho hizo girar a Jisung. Pegó a Jisung contra la pared y lo embistió. Minho abofeteó duramente el trasero de Jisung. Comenzó a poner mordiscos de amor en la nuca de Jisung.

Jisung gimió de dolor, pero pronto fue reemplazado por placer. Gimió ruidosamente. Minho observó cómo Jisung se derretía ante su toque y solo aceleraba el ritmo. Jisung se mordió el labio para tratar de ocultar los sonidos pecaminosos que amenazaban con salir. Minho alcanzó su punto. Minho sonrió y agarró las caderas de Jisung y se movió más rápido.

-Minho~ Ah joder~ ¡Te Amo! -Minho seguía empujando dentro y fuera.

-Yo también te amo, Jisung.

-Minho~.

Minho volteó a Jisung y rápidamente lo levantó. Jisung envolvió sus piernas alrededor de la cintura de Minho.

-Minho~ -Minho tumbó a Jisung en la cama.

-Minho~ Voy a~ Voy a... -Jisung gimió fuerte. El líquido blanco, pegajoso y espeso cubría las sábanas.

-Ah joder Jisung~.