El camino hacia la heladería estaba llenos de autos. Jisung, Yeonji, Chan y Minho decidieron llevarse un auto. Jisung, notando que no había nadie en sus autos. Comenzaron a correr hacia el punto de intersección.

Se abren los ojos al ver la cantidad de piezas de automóviles por todas partes y el camión destrozado. Había policías cerrando el lugar. Había una ambulancia qué partió junto cuando llegaban allí. Yeonji miró a su alrededor y vio a un grupo de personas a las que se acercó.

-Disculpe, ¿qué pasó aquí? -Una mujer mayor dio un paso al frente.

-Hubo un accidente. Esta señora cruzó la intersección y ese camión chocó contra el auto. ¡Parecía que el impacto dañó a algunos de los mecánicos del auto, porque segundos después explotó! -Los ojos de Yeonji se ensanchan.

-¿Qué pasó con la gente que estaba dentro? -La señora permaneció en silencio.

-Bueno, una señora escapó... pero... Todavía había un niño pequeño dentro cuando el auto explotó... -El corazón de Yeonji se hundió.

-¿Un niño pequeño? -La señora asintió, con lágrimas en los ojos.

-No pudimos sacarlo... -Yeonji se inclinó ante la dama y corrió de regreso con el grupo, que estaba hablando con un oficial.

Jisung rompió a llorar. Minho instantáneamente lo abrazó.

-Entonces... es verdad... Changhee -Yeonji sintió que las lágrimas corrían por su mejilla. Chan miró hacia otro lado, no queriendo mostrar su dolor. Minho intentó mantenerse fuerte para Jisung, pero fue demasiado. También comenzó a llorar y abrazó a Jisung con fuerza.

-¿Por qué lo haría... ¡Cómo podría ella! -Jisung sintió que la ira de apoderada de él lentamente. Empujó a Minho.

-¿Cómo pudo hacerle eso a Changhee? ¿Por qué haría eso? ¡Era yo quien buscaba! ¿Por qué carajos traería a Changhee a esto! ¿Por qué lo haría? -Jisung cayó al suelo llorando. Minho también sintió que la ira aumentaba dentro de él.

-Voy al hospital. Yeonji, Chan, cuida de Jisung -Chan agarró el brazo de Minho.

-No hagas nada estúpido... Conozco la situación, pero no puedes hacer nada estúpido que te meta en problemas. Jisung te necesita, ahora más que nunca -Minho miró fijamente a Chan, antes de arrancarle el brazo y marcharse. Yeonji ayudó a Jisung a ponerse de pie.

-Sigámoslo. Vamos Jisung, necesitas a Minho tanto él te necesita a ti.

Cuando Minho llegó al hospital, preguntó por Jeonmin.

-Lo siento señor, a nadie se le permite entrar a menos que sea un miembro de la familia o una persona importante -Minho golpeó el mostrador de recepción con las manos.

-¡La mujer mató a mi hijo! -La señora permaneció en silencio sin saber qué decir. El ascensor se abrió y una ola de gente salió corriendo.

Entre ellos se encontraba Felix, Chan, Seungmin, Hyunjin, Jeongin, Changbin, Yeonji y Jisung. Chan empujó suavemente a Minho hacia un lado para hablar con la dama.

Felix llevó a Jisung hasta Minho, quien rápidamente lo tomó en sus brazos. Felix se alejó de la pareja. Chan se acercó a ellos y se apiñaron a su alrededor.

-Bueno, ¿qué dice?

-Si queremos entrar tenemos que esperar cinco horas. En este momento Jeonmin se encuentra en estado crítico y sólo la familia y una pareja pueden pasar -Hyunjin gruñó.

-Cuando entre allí,-

-Cállate, harás que nos echen -Hyunjin miró a Seungmin, quien le devolvió la mirada.

-¿Cómo puedes decirme que me calle? ¡Ella asesinó a Changhee! ¡Su maldito cuerpo fue explotado! ¡En sólo pedazos! ¡Cómo diablos merece vivir! -Jeongin pisoteó el pie de Hyunjin.

-¿Puedes callarte? ¡Crees que mencionar a Changhee en este momento está bien! ¡Para de recordarlo! Lo sabemos -Jeongin luego miró a Minho y Jisung.

Minho estaba susurrando cosas dulces al oído de Jisung, mientras se abrazaban con fuerza. En cierto modo, Minho también se repetía esas dulces cosas para calmarse.

-Chicos, tenemos cinco horas hasta que obtengamos respuestas. Necesitamos pensar racialmente. Si interrumpimos allí haciendo una escena, nos podrían echar y no hay manera de que obtengamos respuestas. -Felix dijo mirando a los chicos.

-Pero hasta entonces... Estemos aquí para aquellos que más nos necesitan -Felix asintió con la cabeza hacia Jisung y Minho, que ahora estaban sentados en una silla (Jisung en el regazo de Minho). Chan asintió.

-Tiene razón. Nos necesitan... Y no podemos permitir que sus propias emociones se interponga en el camino para ayudar a quienes nos necesitan. Habrá un momento para que todos expresemos nuestras emociones, pero ahora no es el momento -Hyunjin frunció el ceño. Changbin se frotó suavemente la espalda.

-Simplemente no lo entiendo. Si ese fuera nuestro hijo, esa perra estaría muerta ahora mismo. Joder, no me importa si voy a la cárcel, enciérrame por lo que me importa... Siempre y cuando sepa que está muerta y pague por lo que ha hecho... Con mucho gusto recibiría la última consecuencia -Hyunjin murmuró en voz baja. Changbin frunció el ceño.

-Cálmate bebé. Si ese fuera nuestro hijo estarías llorando. Lo último que harías sería matarla -Hyunjin puso los ojos en blanco.

-Ahora hagamos todo lo posible para consolarlos -Changbin miró a Minho y Jisung, todos los demás estaban a su alrededor, diciéndoles que todo estará bien y que siempre estarán ahí para ellos.

Todo lo que Jisung quería en ese momento era despertar de la pesadilla, pero lamentablemente era la realidad.