Capítulo 14
Jamás había pasado tanto tiempo con alguien más de esa manera. Ni siquiera con Hoseok.
Cuando Hoseok y él tenían días libres y decidían pasarlo en la cama solo había dos formas de que hicieran eso; teniendo sexo o hablando de cualquier cosa, sobretodo de sus trabajos o algo que hubieran hecho en el club.
Estar abrazado a alguien más en silencio mientras los dos estaban despiertos y desnudos, era nuevo para él. Y ya había pasado al menos una hora desde que estaba en esa posición con Jungkook.
Se despertaron mucho antes de que tuvieran que salir de la habitación y ambos se habían sentido demasiado perezosos para moverse. Se habían mirado, ambos bostezaron y el menor volvió a poner la mejilla contra su pecho. Así habían permanecido desde entonces.
No sabía de que manera llenar el silencio, prometieron no hablar de sus vidas personales, estando en el club no comenzaría a hablar sobre trabajo y dudaba micho que el menor tuviera historias interesantes de sexo. Y en realidad podían tener más sexo, pero no sentía que fuera necesario, su cuerpo estaba saciado.
Jungkook se había comportado diferente. La primera vez se la pasaba diciendo no, de manera tímida aunque en realidad quería pedir más. Esa vez no fue así, conforme avanzó la noche, Jungkook se volvió más y más confiado de dejar que sus gemidos y súplicas fluyeran. Sobre todo su nombre. El menor había gemido tantas veces su nombre en medio del sexo y más cuando alcanzaba su orgasmo.
Había sido... extraño.
No malo... pero nunca le había pasado simplemente porque nunca había dado su nombre a quienes lo acompañaban a la cama en ese club y él no sabía los suyos.
Su mirada viajo por la desordenada habitación y se detuvo finalmente en el enorme reloj de pared frente a ellos.
- Jungkook, ya quedan veinte minutos antes de que tengamos que salir.
El menor suspiró y frotó su rostro contra su pecho como si fuera un gatito.
- Esta bien... - Jungkook se apartó bostezando y con sus ojos adormilados como si le estuviera costando despertarse a pesar de que llevaba una hora despierto. Sonrió. - ¿Qué?
- Tu aliento es terrible en las mañanas.
El color rojo cubrió las mejillas de piel blanca en un rápido segundo, incluso antes de que el menor le diera un empujón y se terminara de sentar. Lo están fulminado con la mirada.
- El t-tuyo tampoco huele a rosas... Además es probable que sea por haber tomado t-t-tu... - Se rio más fuerte cuando Jungkook no pudo terminar la frase y en su lugar el color rojo cubrió el resto de su rostro y su cuello. - ¡De todas maneras! ¡Mi aliento nunca es tan malo, es tu culpa!
Se sentó mientras su sonrisa aún continuaba en su rostro, eso hizo que el ceño de Jungkook se frunciera más.
- ¿Quién te dijo que tu aliento no era malo, tu esposo?
- Claro que si.
- Pues te mintió, es pésimo.
- Idiota. - Su rostro casi fue golpeado con la almohada que el menor le lanzó. - No te creo... Además no me importa tu opinión. - Un Jungkook con un enorme puchero se levantó de el cama y comenzó a recoger su ropa mientras él se divertía con el espectáculo de ese lindo cuerpo desnudo paseándose frente a él, no pudo evitar darle una palmada a una de esas mejillas cuando estuvieron a su alcance. - ¡Ahh!
El menor se aventó encima de él para alcanzar la almohada de antes y golpearlo con ella, o tratar porque pudo tomarlo entre sus brazos antes y apretarlo contra su cuerpo para que no pudiera moverse. Ese lindo trasero quedó apretado contra su pene suavizado, pudo escuchar un gemido amortiguado que Jungkook trató de ocultar.
- Lo siento, lo siento. - Mordió la nuca de piel suave riendo divertido cuando ese cuerpo delgado se retorció y se frotó contra él. - No pude evitarlo, lo estabas paseando frente a mi.
- Idiota.
- ¿Es la única mala palabra que te sabes o la única que te permiten decir? - Le menor se retorció con más fuerza contra su agarre y su pene comenzó a despertar contra esas mejillas tonificadas que lo presionaban. - Deja de moverte si no quieres que vuelva a meter mi pene en ese lubricado agujero tuyo. - Con su rostro escondido contra el colchón, Jungkook presionó su trasero contra su ingle en una invitación que lo hizo sonreír de nuevo. - No tenemos tiempo de eso, a menos que quieras dar un espectáculo porque los empleados nos encontrarán follando cuando vengan a sacarnos. Vamos a levantarnos.
Dejó otra palmada en esa mejilla carnosa que tenía a su alcance y salió de la cama antes de que su cuerpo decidiera tomar lo que se ofrecía a él tan libremente.
Había tomado lo que había querido de ese cuerpo lindo durante toda la noche.
Pensó que estaba saciado.
Pero solo faltó que se frotaba contra él para ver que aún podía tener más.
Si volvían a coincidir en ese lugar... Si Jungkook subía una vez más a una habitación con él, se aseguraría de tomar todo lo posible, hasta que se cansará del menor.
Se aburriría de ese cuerpo.
Lo había hecho muchas otras veces.
Si lo puedo tener una vez, más lo haré.
Había pasado menos de un día completo desde la última vez que había visto a Namjoon, desde el día anterior que salieron de la habitación y bajaron juntos hasta donde estaba el área de los sofás. Dónde encontró a su esposo besándose con Hoseok. Esa vez no había desviado la mirada, no se sintió bien, no le fascinó ver a Taehyung de esa manera, pero tampoco se sintió tan mal como la primera vez. Solo incómodo. O lo fue hasta que Namjoon agarro su mandíbula con fuerza para sostenerlo en su lugar mientras le metía la lengua y la movía contra la suya.
Él había quedado un poco aturdido después de ello. Sólo reaccionó cuando su marido estuvo a su lado poniendo un brazo alrededor de sus hombros y dirigiéndonos a los casilleros.
El camino a casa había sido silencioso, pero una vez que cruzaron la puerta de su hogar y se ducharon, parecían ser los mismos de antes.
Fue... extraño.
De un momento a otro pasaban a ser nuevamente un matrimonio. Tal como le había dicho la dueña del club la primera vez que habían ido y como le había dicho Namjoon cuando hablaron. Eran dos vidas separadas, ahora podía ver a lo que se refería y entendía porque era tan importante mantener ambas vidas separadas una de la otra.
Esa mañana había ido a la editorial directamente después de que el mayor le había mandado un mensaje diciendo que iría al trabajo con su chófer. Estuvo un poco nervioso sobre como serían las cosas entre el escritor y él, pero desde el primer segundo en que Namjoon había entrado al lugar su comportamiento fue totalmente profesional, lo que le ayudó mucho a relajarse.
Realmente era posible que convivieron en el trabajo después de haber estado juntos en el club. El mayor lo había dicho. No sentían nada el uno por el otro, ambos estaban casados y entendían que tenían que mantener sus vidas separadas, él lo entendía ahora.
Fue fácil comenzar a concentrarse en su trabajo, y para él momento en que la reunión llegó él ya estaba completamente metido en su trabajo sin que su mente se llenará de imágenes de lo que había sucedido.
Aunque su cuerpo adolorido aún se lo gritar cada vez que tomaba asiento.
🔁
Sabía que ser objetivo era lo que se requería para ayudarle a Namjoon al momento de que leyera su trabajo, pero saber que tenía en sus manos el primer borrador de la siguiente novela de RM lo hizo sonreír tanto que el escritor lo miró con una ceja alzada.
Pero era un momento que ni siquiera las burlas del mayor podrían arruinar.
- ¿Si sabes que has mirado la hoja del título como por cinco minutos y aún no empiezas a leer?
- Shh, estoy por leer un manuscrito de RM, soy la primera persona en tenerlo y tengo que disfrutar al máximo cada momento.
- Yo soy RM, y creo recordar que dijiste que tengo una horrible personalidad. ¿Aún así estas tan emocionado?
- Puedo mantener separados al Namjoon del club con el escritor para el que trabajo - le entrecerró los ojos al mayor -, ¿por qué no puedo también separar a RM de ti?
El más alto soltó una fuerte carcajada y se acercó un poco más en el sillón donde ambos estaban sentados, él con la laptop en su regazo y la pantalla mostrando el documento con la hoja en blanco interrumpida solo por las letras de color negó que formaban el título, el cuál si, había estado mirando por mucho tiempo. El mayor ahora lo miraba divertido, esperando que finalmente comenzará la lectura, lo que era su trabajo.
Emocionado comenzó a deslizar su vista por las palabras, se sumergió en la narración. Namjoon lo había acompañado los primeros minutos pero después se había ido de la biblioteca. Él había estado tan entretenido que no se sintió con ganas de apartar su atención lo suficiente para preguntarle a donde iba.
Y finalmente casi sale corriendo de la habitación para exigirle l mayor que continuará escribiendo y lo sacara del suspenso en el que lo había dejado con esas últimas palabras. Al libro aún le faltaba para considerarse terminado, pero ciertamente Namjoon y Jin habían combinado sus estilos a la perfección y solo lo dejaron con ganas de más de esa historia.
Quería... exigía el libro completo, porque ya se había enganchado tanto que necesitaba continuar Y saber que ocurría.
Planto una sonrisa en su rostro cuando escuchó los pasos de alguien acercándose al otro lado de la puerta, ya quería decirle a Namjoon lo mucho que le había gustado lo que había leído, pero él que entró no fue el alto moreno de cabello corto.
Fue el sonriente esposo bajito de este.
Era la primera vez que se encontraban fuera del club. A pesar de que Hoseok vivía en esa enorme casa, desde que inició a trabajar con Namjoon, nunca habían coincidido. Y mucho menos habían estado a solas.
Lamio sus labios más fe una vez, sus ojos no sabían donde posarse y su cuerpo estaba tratando de volverse lo suficientemente pequeño como para que Hoseok no lo viera. Aunque eso ya no era posible ya que Hoseok lo observaba, su sonrisa de corazón en su rostro.
- Hola.
- Ho-Hola.
- Nam esta comiendo en la cocina. Preparé algo rápido, si quieres puedes unirte a nosotros o te traigo un plato.
- Si no los interrumpo, yo puedo ir...
Sus dedos se movieron nerviosos, casi dejó caer la laptop de su regazo y cuando logró estabilizarse opto por colocarla en la mesita para que no ocurriera ningún accidente.
- Que podrías interrumpir. - El mayor señaló la laptop mientras entraba más en la biblioteca para sentarse a su lado. - Nam me dijo que estabas leyendo el avance del libro.
- Si...
Se sentía un poco diferente con Hoseok. El mayor también actuaba normal, como si lo del club nunca hubiera sucedido, pero le estaba resultando un poco más incómodo comportarse normal con él.
Y fue demasiado evidente.
- Puedes actuar normal conmigo. - Asintió, pero continuaba sin conectar la mirada con el mayor. - Si piensas que me siento celoso o nervioso por tu presencia en esta casa o por tu trabajo con Namjoon, puedo asegurarte que no es el caso. Confío en el juicio de Nam y él dice que eres capaz de mantener separado lo laboral con lo que ocurrió en el club, así que en realidad estoy bien con ello. - Una mano de dedos delgados se posó en su mejilla y lo hizo enfrentar esa sonrisa amable. No uso fuerza, tampoco fue un toque exigente. Fue más un roce. - Se que eres bastante nuevo en todo esto, es normal que tengas más dudas que respuestas. No te exijas y si quieres hablar con alguien, aunque suene extraño, puedes hacerlo conmigo. No soy tan estricto como Nam, no me molestaría hablar contigo sobre el club.
El mayor le volvió a sonreír antes de ponerse de pie y ofrecerle una mano para que la tomara.
Lo hizo aún un poco indeciso y sinceramente confuso por el ofrecimiento del esposo de Namjoon. Estaba siendo amable, pero, ¿realmente podían comportarse como amigos? Con Namjoon era un poco más fácil porque sólo tenían que tratarse de manera profesional, además su trabajo como agente del escritor era temporal, cuando Jimin volviera, ambos volverían a trabajar separados sin involucrarse con el otro. Namjoon y él no eran amigos.
Pero no expreso ninguno de esos pensamientos en voz alta.
Solo se dedico a seguir al mayor por esa casa que aún le parecía un laberinto, el único camino que conocía con certeza era de la entrada principal hacia la biblioteca.
Pero en esa ocasión pudo indicar al lugar al que iban por el aroma de la comida flotando en el aire. Sólo que fue detenido antes de que pudiera entrar.
- Solo una cosa. - Hoseok seguía con una sonrisa en su rostro mientras sostenía su antebrazo. - A tu marido realmente le gusta hablar y aunque no me molesta que lo hagan, me dijo algo que me llamó la atención. No tuvieron sexo entre ustedes después de que estuvieron con nosotros la primera vez. No quiero hacerme ideas, pero dijo que tu lo rechazabas. - El ambiente entre ellos se volvió serio, atrás había quedado pretender amistad. - Adquirir experiencia en el club, es con el propósito de aprender e innovar en la cama con tu pareja, no se trata de distanciarse. Así que realmente te encomiendo que tengas sexo con tu pareja, verás las diferencias ahora que ambos tienen más experiencias y... habla más con tu esposo...
Pudo notar que el mayor se guardo el resto de la frase para si mismo y ahora tenía curiosidad sobre ello.
¿Qué es lo que quería decirle?
¿Qué sabía Hoseok de Taehyung?
Makis, espero que su fin de semana haya sido divertido.
Tengan un lindo inicio de semanita 💜
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