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Ustedes son extraordinarias hijas mías algo que el mundo jamás ha visto destinadas a la grandeza y proteger a los guerreros de corazón noble la fuerza del mal está creciendo una organización criminal japonesa conocida como"el clan del pie" llamada así porque pasan por encima de la gente buena sin concideración su líder " el destructor" las convatira con ferozcidad su clan del pie las superará en número, los ninjas las verá como su única esperanza gracias al milagro que Sun Yi les vendijo, ojos enfocados, hombro con hombro, siempre en guardia y empezamos sean como el panda mismo dirijan su camino se que están anciosas de responder a su llamado pero aún no han completado su entrenamiento el monasterio Fénix deberá ser su hogar como su padre /sensei les pido confianza, paciencia... paciencia aún no están listas para soltar sus bestias interiores yo se cuando ese día llegue y salgan de las sombras van a ser responsables de cosas increíbles.

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Las calles de japón se iluminaban con la luz de la luna roja el ambiente es tranquilo con un viento soplando algunas hojas que estaban tiradas en el suelo, la gente se encontraba dormida en sus respectivas casas sin ningún tipo de molestia pero el silencio se interrumpe por unas pisadas peculiares que se sonaban en los techos de los edificios revelando unas sombras ninja que se dirigían a un monasterio pequeño en el barrio chino, el edificio era de color blanco con tejados y puertas rojas a su alrededor había árboles de cerezos adentro se veia un patio que estaba decorado con velas rojizos, linternas del mismo color y estatuas en forma de una criatura peculiar, la gente estaban esperando el momento para empezar la ceremonia hasta que derrepente ven salir de la casa un hombre de unos treinta años pelinegro con un mechón rojo llevaba un traje ninja rojo con toques cafés, mientras a su lado se encontraban cuatro niñas de trece años que llevaban puesto unos kimonos de distintos colores: celeste, morado, rosa y turquesa todas al ver que las estaban observando se ponen tensas por el ambiente pero luego un niño de unos dos años mayor que ellas aparece a su lado tenia un cierto parecido al adulto pero sus ojos eran azules al mirarlas les sonrie con cariño para así empujarlas al centro delicadamente.

─ No tengan miedo Shimai's solo sigan adelante y todo estará bien ─dice el ninja en un tono calmado mientras empuja a las féminas.

Las chicas solo veían a la gente que estaban en sus lugares mirándolas con una sonrisa para calmarlas pero aún así sus nervios empezaban a elevarse por el miedo ya en el centro cada una se pone en su posición mientras miran enfrente del pelinegro junto a su aprendiz y un Chamán que estaba a su lado.

─ Sensei no queremos hacer esto ─ menciona una de las niñas que es una peliceleste de ojos celestes que tenía una mirada triste.

─ Tenemos miedo de que algo malo le pase si no lo protegemos ─ dice una pelirosa y ojos negros con la misma expresión.

─ Además nuestros pandas son parte de nosotras no queremos quitarlos ─ continúa diciendo una peliturqueza y ojos verdes claro que tenia una expresión de miedo.

─ ¿Debe haber alguna manera? ─ pregunta una pelipúrpura y ojos azules.

─ Lo sé su bendición fue un gran milagro para todos pero no hay otra opción mis niñas mientras allá gente mala que querrá cazarlas una por una hasta extinguirlas lo mejor será ocultar sus habilidades solo así estarán a salvo ─dice el oji-ruby con una mirada sería pero protectora a las niñas que solo hicieron que bajaran sus miradas por la tristeza.

─ Hey enanas no se preocupen cuando ya esten realmente a salvo podran soltarlas ¿De acuerdo? ─ les trata de animar el oji-ambar sonriendoles dulcemente lo cual las hace sentir mejor por un momento.

─ No se vallan a moverse del círculo ¿entienden?, mientras la luna roja brille en el cielo, el reino astral estará abierto y este círculo es la puerta ─ dice el Chamán dándole las indicaciones a las niñas mientras hace un círculo de gis donde al terminarlo da una señal a las monjas.

( Canción multimedia)

Los adultos empezaron a tocar sus instrumentos en sincronía siguiendo la percusión del otro ahí comenzáron a cantar el ritual en japones mientras las jovencitas solo podían ver lo que pasaba con miedo y nervios donde pudieron ver a su figura paterna y su hermano mirándolas uno era serio pero en un tono cálido é el otro les sonreía aún cantando con la gente fuertemente, las féminas solo cerraron los ojos para concentrarse en la canción pero no podían se pudo dar cuenta la peli-celeste que con apoyo agarro las manos de la morada y rosa solo para que la última tome la de la turqueza haciendo que se sientan calmadas con su compañía.

─ Oh ~ Sun Yi venerable ancestra escúchanos ahora ─ empieza a hablar el chaman llamando a la antepasada mientras se empieza a brillar el círculo de giz en un brillo verde pastel ─ Guíe a estas niñas a su tormenta interna ─ siguió hablando mientras todos contemplan la luz de la luna roja dándole energía al portal haciendo flotar a las niñas que estaban en el ─ ¡Más fuerte!, ¡Más fuerte! y ¡¡regresa el espíritu del panda rojo de donde vino!! ─ Termina su frase para luego apuntar la espada en el cielo donde se pone enfrente del eclipse rojizo.

Derrepente la arma hace que se salga un rayo rojo que le da justo en la cabeza de cada chica haciendo que queden inconscientes y floten en el aire aun tomadas de las manos mientras que afuera del templo las sombras del inicio contemplaban como se estaba haciendo el ritual no movían ningún musculo hasta que su líder mueve con su dedo dando una señal que vallan a atacar y les siguen sus órdenes.

Aún adentro todos seguían haciendo su trabajo en el ritual donde observan como unos espíritus pandas rojos pero con distintos colores salen del pecho de las jovenes ahí el sensei, el chaman, el joven y una monja sacan de sus bolsillos cuatro brijes diferentes de cristal donde las almas empiezan a meterse poco a poco en sus respectivas joyas hasta que escuchan un estruendo en la gran puerta haciendo sorprender a todos mostrando muchos ninjas entrando al monasterio junto con un guerrero de armadura brillante.

─ El clan del pie, ¡sigan cantando no se detengan hasta que se termine el ritual! ─dice el pelinegro con seriedad mientras da la orden donde le hacen caso para luego darle el brije a un ninja a lado suyo y saca su katana.

─ ¡No espere Sensei! ─ le grita su estudiante con una mirada preocupante.

La gente junto al oji-ambar empiezan a cantar más fuerte haciendo brillar más el portal pero las jovenes al oir los gritos de guerra sus seños fruncen haciendo que sus almas se detengan sorprendiendo lo que ven, el ninja con una mirada neutra empieza a pelear con los guerreros esquivando sus golpes y noqueandolos con sus habilidades de Tae kuan do más con sus extremidades de panda todos estaban haciendo lo posible para no interrumpir la purificación pero derrepente el pelinegro es noqueado por el mismo guerrero que venía con los del pie ambos se observaban con desprecio el ambiente se hacía más tenso hasta se podía decír que su alrededor se volvió en cámara lenta, el pelinegro corre directo hacia el caballero gritando fuertemente donde empezaron a chocar uno contra el otro con sus armas, la pelea es rigida ambos queriendo ganar la batalla resiviendo golpes y cortadas hasta que se empujan para incarse cansados.

─ Rindete Yeii Sasuke ─ dice el caballero de rojo en un tono serio pero metalico debido a su armadura.

─ Un Ninja Yeii jamás se rinde prefiero morir ─ le contesta jadeando debido al cansancio mientras se levanta todo adolorido.

─ Terminos aceptados ─ lo observa en una mirada furiosa y empieza a correr hacia el.

Ambos empezaron a golpear sus espadas con fuerza para poder ganar la batalla iniciando con golpes y habilidades de pelea, cada uno mostrando sus potenciales mientras la ira les daba la fortaleza de seguir derrepente el ninja usa sus poderes para darle un puñetaso al enemigo dejandolo tirado en el suelo mientras lo apuntan con su katana.

─ Tu turno Bradford, rindete ─ responde mientras lo mira en una forma furiosa pero luego siente una prescencia debíl para luego voltear y observar que sus niñas se estan moviendo de un lado a otro con el seño fruncido haciendo que su expresión se cambie a preocupación.

El samurai al ver eso toma la oportunidad y le patea los pies para hacerlo caer al suelo é derribarlo haciendo que su espalda sea lastimada pero justo cuando lo iba a noquearlo se defiende moviendose para luego levantarse donde nota como su amuleto parpadea debido a que su bestia interior se esta debilitando .

─ No tienes a donde huir Guerrero panda rojo dame a esas niñas y el amuleto ─ sonrie malisiosamente el samurai donde camina hacia él.

El ninja estaba acorralado así que empezó a saltar por el muro para huir donde es perseguido por el clan de pie hasta que es rodeado con suerte aún le quedaba algo de energia para pelear lo cual derriba a todos los ninjas dejandolos inconsientes pero derrepente es derribado por el samurai haciendo que caiga al suelo todo adolorido, los presentes aún cantando tenian una mirada inquietante sabiendo que su maestro no sobrevivira, el pelinegro trato de levantarse pero Bradfort lo acorrala para empezar a orcarlo apretando su cuello y levantandolo del suelo.

─ ¡OJI! ─ exclama aterrado el joven lo cual se distrae de su concentración en el ritual.

─ Todo termina aquí ─ murmura malvadamente mientras mira como su rival es sofocado por su fuerza hasta que derrepente escucha unos gritos por parte de las estudiantes.

Los ojos de cada femina se abren para mostrar solo un fondo sin blanco la gente se quedo estetica al ver lo sucedido los espiritus salieron derrepente de los brijes espantando al publico ahí se contemplan a las bestias viendo con rabia al samurai que observaba todo con miedo para luego ser empujado por ellas al muro y quedar inconsiente soltando al oji-rubi que tosia por la falta de oxigeno haciendo que el pelinegro corra a auxiliarlo dejando a lado el ritual mientras la gente corría asustada por el caos que había, las hermanas empiezan a bajar lentamente al suelo mientras sus pandas vuelven a los brijes tirados en el suelo donde se nota un gran destello en cada uno donde se nota que ellas cambiaron el color de su cabello pero con el mechas de distantas formas en un tono: celeste,rosa, lila y turqueza.

─ Sensei ¿Se encuentra bien? ─ habló el oji-ambar que lo trataba de ayudar a levantarlo.

─ Ellas tenian razón el panda ya es parte de ellas pero al parecer sus espiritus son conscientes de que aún no están del todo listas a penas son jovenes ─ balbucea todo aturdido por lo que pasó mientras observa a las feminas inconsientes y sostiene su amuleto donde su brillo se empieza a debilitarse.

─ ¿De que habla Sensei? ─ le pregunta confundido pero tambien mira con preocupación a sus hermanas.

─ Deben irse, vallanse a otro lugar donde tus hermanas y tu puedan crecer como adolescentes normales hasta que estén listos emocionalmente, cuando ese momento llegue quiero que busquen a Hamato Yoshi ─ explica en un tono debil para voltear a ver al pelinegro.

─ ¿Hamato Yoshi?, ¡¿El aún sigue con vida, pero como?! ─ dice sorprendido el joven al saber la verdad.

─ Lo descubrí hace algunos meses al parecer sobrevivio pero esta oculto en Nueva york vallán ahí ,pero no lo encuentren hasta que sea el momento más adecuado o si es una verdadera emergencia, la maestra Inochi vive allá les dara un lugar donde vivir  ─ continuá hablando pero conservando un hilo de cansancio.

─ N-No, no podemos dejarlo yo no lo dejare ─ contesta todo aterrado pero con un toque de tristeza é dolor su aprendiz.

─ Hiroki ya es demasiado tarde detendre al pie lo suficiente para que escapen, yo debi ser el que guiara a las chicas cuando estuvieran listas pero ahora esa posición te lo dejare a ti ─ habla sasuke con seriedad para luego quitarse el amuleto de su cuello y se lo da al joven.

─ ¿A-A mi? ─ balbusea todo paralizado mientras agarra el amuleto más es sostenido por las manos de su maestro.

─ Cuidalas Tadashi que Sun Yeii los guie hasta el final para llevarlos a un futuro más iluminado─ les bendise el adulto donde el oji-azul lo mira sorprendido pero tambien triste.

─ No lo olvidare Sasuke Sensei ─ contesta el pelinegro mientras lo mira intentando de que las lagrimas lleguen a él.

─ Ahora vallanse y rapido antes que otros soldados del pie lleguen ─ le advierte donde se sostiene su brazo para mantener fuerzas donde observa al pelinegro asentir con la cabeza donde se limpia sus lagrimas antes de que se caigan.

El adolescente empieza a correr directo a las niñas donde agarra las joyas que estaban tirados en el suelo para luego incarse a ayudarlas a levantarlas.

─ Ta-Tadashi el ritual nosotras-─ trata de explicar muy cansada la chica de ojos azules claros que ahora su cabello es castaño largo ondulado pero con puntas celestes.

─ Lo sé, fue muy valiente su acción pero ahora hay que salir de aquí ─ la carga en modo nupcial donde la mira pacificamente para luego observar a las otras ─ ¡Ayudenme a llevarlas afuera rapido! ─ avisa a unos ninjas del clan que estaban cerca donde lo obedecen y recogen a cada chica para empezar irse corriendo del lugar hasta la salida.

Sasuke solo podia sonreir por ultima vez a sus estudiantes rogando por su diosa de que los cuide en su cruzada derrepente escucha un quejido donde al voltear observa al samurai levantarse de su tranze donde al notar que ya no estaba las infantes mira con rabia el ninja para sacar su gran espada.

─ Esos mocosos no se escaparan de nosotros algún día tendran que salir de su agujero tarde ó temprano y por fin el clan del pie terminara con ustedes miserables comadrejas ─ habla con furia apuntandolo con su espada 

─ ¡No!, Sun Yeii y el amuleto guiaran a los nuevos guerreros te detendremos a ti y a tu amo tal vez sea tarde para mi pero no el de la pelea ─ gruñe todo furioso mientras mira con rabia al samurai.

El Ninja respira profundamente para luego hacer un movimiento a sus manos donde parece una tecnica que causa un gran temblor que divide el piso donde estaban los dos el samurai lo mira mal pero saca una bomba de humo donde lo hace para desaparecer, Sasuke solo sintio sus ultimas fuerzas de energia y empieza a desplomarze en el suelo dejando que el suelo se derrumbe con el, la gente afuera del templo solo podian ver con horror la masacre que pasaba, los aprendizes al ver como su maestro se sacrifica el dolor en su pecho empieza a oprimirse junto a sus lagrimas asi todos juntos se abrazan incados para dejar salir su herida profunda.

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