ㅡHyunjin no quiero irㅡhizo un puchero Minho, viendo como su mejor amigo sacaba ropa de su armario.

ㅡNo me importa, ¿sabes lo difícil que es conseguir lugar ahí? Changbin y yo realmente nos esforzamos para que te diviertasㅡle dijo al pelinegro que seguía en su cama con el celular en las manos.

ㅡ¿Y tú que no tienes novio? ¿Cómo es que Jeongin te dejó ir?

ㅡÉl vendrá con nosotros, obvio no me iba a dejar ir soloㅡse quejó murmurando, haciendo reír al mayorㅡNi que fuera a hacer algo con alguien más.

ㅡJeongin te tiene muy sumisoㅡrió Minho.

ㅡCállateㅡHyunjin le tiró una almohada a su amigo que seguía burlándose de élㅡMejor vístete, usarás estoㅡle mostró un conjunto de ropa muy para la ocasiónㅡTe verás muy sexy.

ㅡ¿Seguirás jodiéndome la existencia si no voy, cierto?

ㅡSip, y también nos devolverás el dinero que Changbin y yo gastamos en ese lugarㅡle dijo con una sonrisa.

ㅡLos odioㅡmurmuró, tomando el conjunto de ropa, empezando a vestirse. Se miró en el espejo de cuerpo completo frente a él, peinando su cabello negro, sintiéndose satisfecho con lo que mirabaㅡNo se ve tan mal, tenía tiempo de no arreglarme asíㅡdijo con una sonrisa triste.

ㅡOye, no pongas esa cara, tienes que seguir adelanteㅡconsoló Hyunjin, parado detrás del mayor, viéndolo a través del espejo.

ㅡLo sé, ya han pasado cuatro meses.

ㅡExactamente, así que pon tu mejor cara, agarra tus cosas y vamos por los demás, esta noche solo disfrutaㅡle dijo animado, esperanzado con que Minho olvide a su ex novio, Seungmin, que lo dejó porque según él, ya no lo amaba.

Minho suspiró, sintiéndose más tranquiloㅡVamos.

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El letrero del lugar brillaba con luces neón rosadas, en la entrada un hombre con una libreta en mano recibiendo las identificaciones daba la bienvenida. Esperaron alrededor de diez minutos para poder entrar. Si bien no era el lugar más caro de la ciudad, se lograba ver la diferencia, en el establecimiento todo estaba muy ordenado, limpio, con personal de seguridad en varios rincones, viendo que todo estuviera en orden.

Los cuatro tomaron asiento en su mesa asignada. Minho vio a su alrededor, encontrándose con chicos y chicas con poca ropa, sirviendo los tragos o bailando, se sentía un poco fuera de lugar ya que no solía ir a lugares así, pero trataría de pasarla bien, al final, no podía desperdiciar dinero.

ㅡIré a la barra por un tragoㅡanunció Minho viendo a sus amigos comiéndose frente a élㅡY búsquense un cuarto, no sean sin vergüenza.

Hyunjin levantó su mano, indicando que se vaya, siguiendo con su trabajo en la boca de Jeongin que se encontraba en sus piernas, correspondiendo los besos y toques que su novio le daba.

Minho negó levemente, sonriendo por sus amigos.

Caminó hacia la barra, encontrándose a lo lejos con Changbin que estaba ligando con un chico, nunca perdía el tiempo.

Momentos después, llegó de nuevo a su mesa con una bebida en mano, Hyunjin y Jeongin hablaban animadamente cuando el pelinegro apareció, minutos después llegó Changbin, avisando que se iría con el chico de antes.

ㅡNo pierde el tiempoㅡdijo Minho viendo desaparecer a su amigo entre la gente.

ㅡNo como tú, que han pasado horas y no has ido a ver si encuentras algoㅡle dijo HyunjinㅡPero para tu suerte me tienes a mi como tu amigoㅡsonrió con picardía.

ㅡInnie, dile que no me haga esa cara, siempre significa algo maloㅡhabló Minho con una mueca al menor del grupo.

ㅡLo siento, yo también estuve de acuerdo con la ideaㅡle sonrió esta vez el pequeño pelirrojo.

ㅡTomaㅡle extiendió una pequeña tarjeta que en número dorados ponía ''Habitación 30''ㅡDiviérteteㅡle guiñó el ojo.

ㅡ¿Qué mierdas es esto?ㅡpreguntó, revisando la tarjeta, dándose cuenta de que en la parte trasera estaba escrito el nombre del lugar.

ㅡEs tu pase a la diversión. Sabía que solo vendrías a sentarte así que hicimos el trabajo por tiㅡtomó un trago Hyunjin, peinando su cabello ligeramente largo hacia atrásㅡSolo tienes que ir hacia esa puerta de allá y te darán las instrucciones.

ㅡ¡Pero vete ya, se te pasará el tiempo!ㅡexclamó Jeongin, viendo que solo se había quedado sentado sin decir nada.

Minho muy confundido se levantó, dirigiéndose hacia donde su amigo le había indicado. Caminando entre las personas, pudo observar a unos pocos metros de él una escena que no estaba listo para ver, su pecho dolió, llenándose de impotencia, celos y tristeza, justo ese día habían coincidido en el mismo lugar, la vida es una perra.

Se hizo espacio más rápido entre la gente, sintiendo demasiado lejano su punto de destino. Salió del grupo de personas, recargándose en una pared, ¿Qué hacía su ex novio ahí besándose y dejándose tocar por otro chico? Quiso olvidar la escena, sintiéndose patético porque ya había pasado un tiempo, pero ¿Cómo borras dos años de relación en el que se juraban amor eterno? Deseaba irse, pero recordó a lo que iba, viendo la pequeña tarjeta en sus manos tomó la decisión de seguir su camino, necesitaba olvidarse de eso.

Entró a una puerta con letrero con letras de neón azules que ponía: ''Habitaciones V.I.P'', Minho seguía sin saber a dónde lo llevaría.

En la entrada, un hombre pidió la tarjeta que Hyunjin le había otorgado, revisándola que no fuera falsa, dobló una de las esquinas y se la devolvió, guiándolo hacia la habitación marcada.

Se detuvieron frente a la puerta, el hombre a su lado se aclaró la garganta, llamando su atención.

ㅡLas reglas son simplesㅡempezó a hablar, con voz tan seria que intimidó al pelinegroㅡNo debe de tocar a menos que se le sea permitido, no debe de exigir nada, los que trabajan aquí saben lo que hacen, y por último...ㅡMinho lo miró con intrigaㅡNo haga nada que no se le ordene. Ahora sí, puede entrar, disfruteㅡfinalizó, abriendo la puerta.

Entró lentamente, visualizando la decoración tan llamativa y sensual del lugar, el aroma varonil inundó sus sentidos. Cerró la puerta tras él, observando el ancho sofá en el centro de la habitación, una pequeña refrigeradora a un lado, una tarima con parlantes a los lados. No entendía nada, así que por inercia tomó asiento, esperando a que algo sucediera.

Segundos después, las luces tomaron un color tenue, llamando la atención de Minho que miraba sus manos con nerviosismo. La música empezó a sonar, era lenta, sensual. Miró a su alrededor esperando ver algo, de una puerta al fondo de la habitación salió un chico. La respiración de Minho se cortó por un momento, el chico solo llevaba puesto un bóxer ajustado y una camisa de botones larga, abierta completamente que llegaba un poco más arriba de sus rodillas, llevaba puesto un antifaz, cubriendo la mitad de su rostro.

El chico se acercó lentamente, mordiéndose el labio mientras miraba con detalle a Minho, que también tenía la mirada perdida en él, haciéndolo sonreír con arrogancia.

ㅡ¿Quieres algo de tomar?ㅡpreguntó el chico de antifaz, acercándose a la refrigeradora.

ㅡS-síㅡreaccionó.

El chico se acercó con ambas bebidas, tomando asiento junto a Minho, sonriéndole pícaro.

ㅡ¿Qué es este lu-lugar?ㅡpreguntó Minho, un poco tímido por la cercanía.

ㅡ¿Es en serio?ㅡrió suavemente el otroㅡAquí vienes a divertirte... Conmigoㅡdijo antes de tomar un trago de su bebida. Minho hizo lo mismo.

ㅡUn amigo me dio una tarjeta... Y vine a parar aquí.

ㅡQue buen amigo tienes.

ㅡEso creo...ㅡMinho se quedó en silencio.

El recuerdo de Seungmin apareció de golpe, recordándole lo miserable que se había sentido momentos atrás. No quería arruinar la noche que sus amigos le había preparado, miró al chico a su lado y le sonrió.

ㅡQuisiera otra bebida, por favorㅡdijo de manera amable, haciendo reír al contrario. Minho pensó en que quizás no debía pedirle nadaㅡS-si quieres voy yoㅡdijo, levantándose levemente, pero la mano del chico lo detuvo.

ㅡEres una ternuraㅡrióㅡNo te preocupes, la traeré yo.

Momentos después, Minho había empezado a sentir los efectos del alcohol en su cuerpo, se sentía más relajado, pero también más sensible.

Tomó el último sorbo de su bebida, dejando en la pequeña mesa el quinto envase. Se acomodó mejor en el sofá, sintiendo como el chico llevaba un rato tocándole suavemente los brazos, coqueteando.

ㅡ¿Cómo te llamas?ㅡpreguntó el chico, susurrando en su oreja.

ㅡMe llamo Minhoㅡrespondióㅡ¿Y tú?ㅡpregunta también, esta vez mirándolo.

ㅡPuedes decirme Hannie.

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Que nervios jaja me gusta la intensidad, lo siento