Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

CAPÍTULO NUEVE

ADVERTENCIA: El contenido del siguiente caso que se tratará en los capítulos a continuación, puede resultar perturbador, delicado o fuera del agrado de algunos lectores. Lea bajo su propia responsabilidad.

"Dicen que existen cinco etapas del dolor: Negación, ira, negociación, depresión y aceptación. Pero algunas personas deciden agregar una más: ...venganza."

Sentía como mi corazón latía tan frenéticamente, miré a Gulf quien tenía un gesto bastante preocupado y asustado. NamJoon y Maxiin se habían ocultado bajo unas mesas. Los gritos y el humo en aquel lugar eran incesantes.

—¡¡NECESITAMOS REFUERZOS, NOS ESTÁN ATACANDO!! —pidió Gulf, por medio del pequeño radio.

—¡Vamos en camino! —respondieron al otro lado.

—Ven aquí. —Le dije, mientras tiré de él para atraerlo hacia mí y ocultarnos bajo un escritorio cerca del cuerpo del agente que habían asesinado.

Prácticamente lo abracé y con fuerza lo apegué a mí, él llevaba puesto su chaleco antibalas pero aún así no podía salir, ninguno de los que estábamos presentes podíamos hacer algo. Nos atacaban desde los edificios del frente y era imposible defenderse contando solamente con pequeñas armas.

Bastaron segundos para que aquellas tan conocidas sirenas de policía comenzaran a sonar y los impactos de bala comenzaron a ser hacia otra dirección, todos nos miramos unos a otros al escuchar que el ataque cruzado había iniciado. Evidentemente los refuerzos habían iniciado un contraataque a los tiradores.

Adentro todo se quedó en silencio, los disparos habían cesado pero afuera se escuchaba todo el alboroto. De pronto todo se quedó en silencio también afuera, Gulf y yo nos miramos fijamente y él tragó grueso, luego miré a Maxiin y NamJoon en el otro extremo.

—No creo que haya acabado —musité.

—Tampoco lo creo —dijo Gulf.

—Es seguro que no ha acabado —siseó NamJoon.

—Yo creo que sí —habló Derek, quien por lo que entendí era primo de Art.

—¡NO! Aún no ha acabado, quédate en tu lugar —reprendió Maxiin.

—Debemos esperar aquí hasta que logren entrar los SWAT*comentó NamJoon, y todos los demás asentimos.

[(*) Bueno, por si alguien no sabe pues quiero aclarar que un equipo SWAT (en inglés: Special Weapons And Tactics: Armas y tácticas especiales), es un equipo o unidad de policías de élite incorporado en varias fuerzas de seguridad. Sus miembros están entrenados para llevar a cabo operaciones de alto riesgo que quedan fuera de las capacidades de los oficiales regulares, como el rescate de rehénes, rescate y protección de agentes, luchan contra el terrorismo y operaciones contra delincuentes fuertemente armados. Los SWAT, siendo equipos policiales especiales de élite que actúan en situaciones de máximo riesgo bajo una gran presión, tienen como objetivo fundamental salvar la vida de los civiles y agentes involucrados. Los equipos SWAT están a menudo equipados con armas de fuego especializadas que incluyen ametralladoras, fusiles de asalto, material antidisturbios, granadas de aturdimiento y rifles de francotirador. Estos equipos se movilizan en vehículos blindados y usan armaduras corporales pesadas, escudos antibalas, visión nocturna y detectores de movimiento para determinar de forma encubierta las posiciones de rehénes y de los secuestradores dentro de estructuras cerradas.]

Pasaron unos minutos más y los disparos ya no se escuchaban —Ahora sí —Volvió a decir Derek, y nuevamente se puso de pie saliendo de debajo de aquella mesa.

—¡NO¡ ¡No te levan!-- Mi oración se vió interrumpida cuando en cuestión de segundos se escuchó un disparo seguido por el cuerpo de aquel jóven cayendo al suelo, ya sin vida. Nos quedamos atónitos ante lo sucedido y los disparos comenzaron nuevamente.

—N-No... Derek... — Gulf comenzó a tratar de llegar hacia el cuerpo, con una gran desesperación y lágrimas en su rostro.

—Gulf, tranquilo — Le hablaba mientras lo sostenía de su hombro, el chico había sido aprendiz de Gulf.

—N-No... ¡NO! Mew, ¡DÉJAME IR A VERLO! —decía, entre lágrimas.

—Está muerto, Gulf, cálmate. —Pero parecía no escucharme por más que se lo repitiera una y otra vez.

—N-No... —Continuaba mirando el cuerpo frente a nosotros. Los disparos no se detenían, me preocupaba el hecho de no saber nada de Boun y Zee. El contraataque afuera podría poner en peligro la vida de muchas personas inocentes. —IRÉ A VERLO, ¡SUÉLTAME!

—¡CÁLMATE! ¡ÉL YA ESTÁ MUERTO!—grité, sintiendo la desesperación en mi pecho. Él se quedó en silencio, posiblemente en shock porque le grité de esa forma, pero relajó su cuerpo. No encontré qué más hacer así que lo abracé más fuerte y lo acerqué más hacia mí, para que se tranquilizara.

Poco a poco se escuchaba como más autos de policía llegaban, quiénes fueran los que nos estaban atacando parecía que no se rendirían fácilmente. De pronto el sonido de una puerta siendo azotada se escuchó adentro, dirigimos nuestras miradas hacia esa dirección y nos percatamos que eran los SWAT quiénes acababan de entrar.

Todos suspiramos un poco más tranquilos, llevaban consigo unos escudos claros que casi alcanzaban su altura, sus uniformes que los cubrían exactamente y protegían su cuerpo. Al llegar, unos se ubicaron al frente de todos nosotros en un medio círculo que nos protegía, ayudados de sus escudos algunos comenzaron a ubicar las mesas al frente de todos. Se ubicaron en posición de ataque y comenzaron a disparar hacia los edificios del frente.

Poco a poco nos íbamos sintiendo mareados por demasiado humo y el dolor en nuestra cabeza era insoportable, nuestros oídos estaban al borde de la sensibilidad, un poco más y juraría que sangre saldría por cada uno de nuestros oidos.

De pronto los ataques se detuvieron pero el SWAT continuó manteniendo su posición, esperamos alrededor de quince minutos para asegurarnos que los ataques ya no seguirían. Poco a poco unos se acercaron a nosotros y comenzaron a sacarnos de ahí, primero a los agentes que habían resultado heridos y luego llegaron hasta nosotros.

—Detective, —habló un agente SWAT —mi nombre es Ohm Thitiwat. —Este hombre parecía ser el líder. Yo asentí con una casi invisible sonrisa.

—Detective Mew Suppasit — Él asintió con amabilidad.

—Permítanme sacarlos de aquí. —Todos asentimos, y un poco mareados comenzamos a ponernos de pie —¡MANTENGAN SU POSICIÓN! ¡ÉSTO AÚN NO ACABA! —Ordenó Ohm, a los demás, luego tomó el pequeño radio que sostenía sobre su hombro. —Iniciando extracción de agentes, repito: iniciando la extracción de agentes.

—Copiado, las ambulancias y los paramédicos están listos para recibirlos —informó, una femenina voz al otro lado.

Algunos agentes SWAT comenzaron a ayudarnos a salir de ahí, mis pies parecían no tener tanta fuerza pero me obligué a caminar. Bajamos por las gradas debido a que los elevadores no funcionaban, seguramente era por el ataque, caminamos un poco más y comencé a buscar a Gulf con la vista, venía unos pasos atrás. Me detuve para esperarlo.

—¿Estás bien? —pregunté, con poca fuerza en mi voz.

—S-sí —respondió —. Gracias, Mew. —Posiblemente se refería a lo que sucedió momentos antes. Yo solamente asentí mientras le dedicaba una suave sonrisa.

—Salgamos de aquí — Le dije. Tomandolo del hombro, comenzamos a caminar juntos. Tres agentes del SWAT venían cerca nuestro.

Mi preocupación incrementó cuando nos acercamos al lugar en el cual se suponía que estarían Mark, Prem y Perth con Fluke. No había nadie, todo estaba cubierto por nubarrones de polvo y humo.

—Puede que ya los hayan sacado — Gulf al parecer había notado la preocupación en mi rostro, yo asentí con una sonrisa y seguimos caminando hacia la salida.

×

×

×

Al lograr salir del edificio los paramédicos inmediatamente llegaron a auxiliarnos, el ruido era tan perturbador, las sirenas de la ambulancia y de los autos de policía, la inmensa nube de humo saliendo del edificio. La pequeña área de atención que habían formado los paramédicos estaba protegida por los vehículos blindados del SWAT, estos estaban ubicados al frente de la ambulancia.

Los paramédicos nos separaron y nos dirigieron a la pequeña área de atención, me llevaron a un extremo y ya no pude ver más a Gulf, minutos después lo escuché toser y rápidamente sin importarme nada comencé a caminar para ir hacia él.

—¡Detective, por favor, espere! —Escuché la voz del paramédico. —Señor, tengo que revisarlo, por favor regrese —decía, pero hice caso omiso de sus palabras y seguí dirigiendome hacia donde escuchaba al pelinegro toser.

M-Mew... —susurró en cuanto me vió.

—Gulf, tranquilo, estoy aquí. —Me acerqué a él. Por alguna razón me sentí más tranquilo al estar cerca de él y poder supervisar la atención médica que recibía.

—¿No hay problema en que se quede, verdad? —La enfermera sonrió ante la pregunta de Gulf, y amablemente negó.

De pronto el paramédico que había tratado de atenderme, llegó y se detuvo de pie frente a mí, me miró con un gesto algo _por no decir mucho_ molesto. Llevaba en sus manos vendas y gasas, incluso una jeringa preparada, por un momento juré ver en sus ojos la maldad como intención de inyectarme eso en el rostro. Tragué grueso y un poco apenado.

—Lo siento —murmuré bajito. Él sonrió y me miró un poco más relajado, se acercó a mí y comenzó a atenderme.

De pronto Gulf tosió nuevamente, y al hacerlo escupió sangre. Mi corazón latió con más fuerza y rapidez al ver la sangre, sentí la preocupación instalarse en mi cuerpo.

—Tranquilo. —Me dijo la enfermera que atendía a Gulf —Después de inhalar demasiado humo es lógico que esto suceda. —Sonrió, al terminar de explicar.

No muy convencido de lo que ella dijo, abracé a Gulf mientras el paramédico comenzó a vendar la herida que desde antes tenía en mi rostro, esta sangraba mucho. La paramédico que atendía a Gulf fué por unas pastillas, me quedé tranquilo cerca de él mientras continuaba abrazándolo.

Mi preocupación por no saber nada de mi equipo me estaba carcomiendo, de pronto a lo lejos divisé una figura muy conocida para mí. Cerré y abrí mis ojos rápidamente tratando de ajustar mi vista para identificar mejor a quien estaba viendo frente a mí, luego de unos segundos aquella figura comenzó a aclararse y venía en dirección hacia mí. Mi corazón comenzó a sentir un poco más de tranquilidad, efectivamente era Perth quien se acercaba.

—¡Mew! ¿Estás bien? — Su rostro y su cabello estaban polvorientos, tenía pequeñas heridas en su rostro, seguramente era debido a los cristales. Su ropa estaba muy sucia al igual que la de Gulf y la mía.

—Estoy bien —respondí.

—Tú... ¿cómo estás? — Esta vez se dirigió a Gulf, este solo asintió y Perth lo imitó.

—¿Dónde está Fluke? —cuestioné.

—Con los paramédicos en el otro cámping —respondió.

—¿Y Mark? ¿Prem? ¿Dónde están? — Mi corazón nuevamente se aceleró al recordar al pequeño nerd y a Prem, recuerdo haberlos enviado a investigar, antes que todo sucediera.

—Están con Fluke, logramos salir a tiempo. Mark, Fluke, Prem, algunos agentes más y yo salimos cuando el SWAT ingresó. —Rascó su frente con un poco de frustración.

—Es un alivio saber eso. —Suspiré ya más tranquilo.

—Por un momento me preocupé por tí —dijo, con una sonrisa pesada, yo solamente sonreí ante sus palabras —Idiota. —Volvió a sonreír.

—¿Aún no sabes nada de Boun, Zee y los demás agentes que salieron tras aquel tipo? —pregunté.

—No —respondió frustrado.

—¡Aquí están! —Escuché la voz de Boun. Perth y yo nos giramos a esa dirección y mi corazón sintió un alivio grande al ver a Boun y a Zee, venían acompañados de Mark y Prem.

—¡Mew! —gritaron Boun y Zee al mismo tiempo.

—¿Estás bien? ¿Están todos bien? — Zee fue el primero en preguntar. Asentí con la cabeza, solté el abrazo con Gulf y me puse de pie por indicación del paramédico.

—Estamos bien. ¿Qué hay del tipo? — Boun y Zee se miraron uno a otro y suspiraron pesado —¿Qué ocurre?

—Durante la persecución el tipo atravesó muy rápido la calle y una furgoneta lo arrolló —informó Boun, soltando un suspiro.

—No puede ser, esto nos lleva a no tener nada otra vez. —Bufé frustrado.

—Por el momento hay que asegurar la vida de Fluke, es muy posible que regresen a buscarlo —comentó Gulf, ganándose un asentimiento por parte de todos.

—Por favor retirese el saco, está sangrando mucho y necesito revisar —dijo el paramédico.

—¡¿Sangrando?! —preguntaron todos al mismo tiempo.

Obedeciendo al paramédico me quité mi saco y al hacerlo sentí como mi abdomen comenzó a doler, estaba seguro que no había recibido ningún impacto pero al hacer un movimiento sentí humedad en mi abdomen.

M-Mew... tu herida —siseó Gulf. Llevé mi vista hasta mi abdomen y pude ver aquella mancha de sangre.

Quitese también su camisa —Me ordenó el paramédico, mi cuerpo se tensó al instante ante la petición, pero accedí, no tenía opción.

Estando seguro de que mi espalda estaba cubierta a la vista de los demás, obedecí y me retiré el saco. El paramédico comenzó a retirar aquella venda que hoy mismo por la mañana había sido renovada, estaba llena de mucha sangre, se había pegado tanto a mi herida que en el momento en que fué desprendida de mi piel solté un jadeo de dolor.

—Está infectada y ha empeorado. ¿No le dijeron que debía cuidarse? —Su pregunta fue retórica y su tono sarcástico.

—S-Sí,... pero, no he podido hacerlo como se debe —respondí. El paramédico continuó con su revisión, cambió la venda y desinfectó la herida. Minutos después llegaron NamJoon y Maxiin.

—¡¿BOUN?! —gritaron ambos.

El nombrado se giró un poco incrédulo y sonrió muy ampliamente al quedar frente a aquellos dos chicos que habíamos conocido hace años.

—¡NamJoon, Maxiin!... ¡Dios! No lo puedo creer. —Con una incrédula expresión, pero sonriendo, caminó hacia ellos para saludarlos —Cuanto tiempo. —Sonrió con más emoción, y los otros dos lo imitaron en su gesto.

—¿Se encuentran bien? —pregunté.

—Afortunadamente sí —respondió Max.

—Mew... Fluke se irá con nosotros —informó NamJoon.

—Estaba pensando en eso, —respondí —si es más seguro para él que esté bajo su cuidado, sabes que yo no tengo nada contra ello.

—Lo sé, te mantendremos al tanto de todo. Y SeokJin será quien lo atienda en todo el proceso, es el mejor —Aseguró NamJoon y yo asentí, también lo sabía.

—Listo —anunció el paramédico —. Debe cuidarla muy bien, para una próxima su herida le dará consecuencias más graves —advirtió, con voz suave pero amenazante.

—Gracias —respondí, él asintió y se fué.

—Mew... —Llamó Gulf, quien se encontraba un poco retirado. Me giré hacia él y lo observé atento, este me tomó de la mano y me alejó un poco de los demás —. Iré a buscar a mi equipo, cuídate por favor. —Sonrió

—¿Te veré más tarde? — Eso sonó más como una súplica.

—Por supuesto. —Sonrió.

Sin ser dueño de mis acciones me acerqué a él y lo abracé, fuerte pero sin lastimarlo. Sentí el hormigueo en mi pecho cuando el pelinegro suspiró, sentir su respiración sobre mi piel me hizo estremecer. Acabé el abrazo y con ambas manos tomé su rostro, sintiendo mis dedos temblar y mi corazón latir acelerado. Sus expectantes ojos junto a su sorprendida y confusa mirada, me volvían más torpe. Poco a poco lo acerqué a mí y deposité un suave y lento beso en su frente, cerré mis ojos al hacerlo y suspiré.

—Cuídate mucho, por favor — Gulf me miró sorprendido, pero al salir de su trance, me regaló una sonrisa. Sin más, asintió y se fué.

Por un momento me perdí observándolo alejarse y sonreí. NamJoon aclaró su garganta provocando que saliera de mi trance, sacudí mi cabeza y me dirigí a ellos nuevamente.

—¿Qué fué eso? —preguntó NamJoon, yo sonreí.

—Mew, ¿no me digas que bateas por el otro lado? —preguntó Maxiin, en broma, y todos los demás se echaron a reír.

—No digas estupideces. —Lo reprendí —Y-yo... yo n-no soy así. —Aclaré mi garganta, sentí como mis mejillas comenzaron a arder debido a la vergüenza que sentía, sabrá Dios por qué.

—La negación es la primera afirmación —dijo Perth, con una sonrisa. Este tenía su brazo rodeando el hombro del pequeño Mark.

—¿Ah, sí? Pues entonces lo mismo va para tí —solté, con sarcasmo, mirando fijamente el abrazo de él sobre Mark. Todos se echaron a reír, Perth se quedó en silencio y rápidamente soltó a Mark.

—¿Para qué lo sueltas? Ya no tiene caso —dijo Zee, todos nos echamos a reír.

—¡Cállense, idiotas! —bufó Perth, frunciendo el ceño. Pero aún así se notaba su vergüenza y timidez ante la situación.

[No sé si seré solo yo pero amo que con estos detectives nunca dura la seriedad. 😂😂 Siempre más de alguno tiene que salir con algo que vota por allá la seriedad hahaha. Me encanta.]




꧁×}•{×꧂




Una semana había transcurrido ya desde aquel ataque al FBI, mi equipo y yo nos quedamos en Washington pues fuera del hecho de que Coates nos había pedido quedarnos un poco más, todos teníamos curiosidad por saber de dónde había salido aquel chico. NamJoon se contactaba conmigo casi a diario, en este momento Fluke se encontraba bajo su cuidado y el de SeokJin.

Seguíamos sin saber nada del ataque, el mismo día habían encontrado el cuerpo de un chico que parecía había sido uno de los francotiradores que nos habían atacado. Pero lamentablemente había sido asesinado por los SWAT en el contraataque, dos días después fué encontrado un auto abandonado que contenia armas en su interior, sin placas ni registros de compras.

El motivo del ataque se volvía cada vez más misterioso, me generaba una cierta inquietud y había algo en mí que me decía que tenía que ver con mi hermana.

¿Habrá Fluke conocido a Becca?

¿Becca continuaba con vida?

¿Podría la mafia estar al tanto de mi búsqueda?

Tenía muchas preguntas en ese momento, pero por ahora no podría aclarar ningúna si no hablaba con Fluke, lo cual no me era posible por ahora, pues el chico estaba demasiado traumado como para dar declaración de lo sucedido.

Debido al estado en que quedó el edificio del FBI, nos reuníamos en un viejo edificio que se suponía era una antigua biblioteca, ahí se encontraba un cuartel secreto del FBI. Estos días pasados había visto a Gulf muy pocas veces, sentía que lo extrañaba, así que me preparé y decidí que iría a verlo a su apartamento.

Salí del cuarto y me dirigí a la sala de aquella habitación de hotel que compartía con Zee, todos se encontraban en la sala, o bueno todos a excepción de Boun.

—¿Dónde está Boun? —pregunté, frunciendo el ceño.

—Se sentía mal y dijo que descansaría un poco —respondió Perth.

—Fuí a verlo y efectivamente estaba durmiendo, así que preferí dejarlo descansar —aclaró Prem.

Me pareció extraño pues Boun no es de los que toman una siesta tan repentinamente y mucho menos es la clase de novio que se separaría de Prem. Pero dejando de un lado la histeria y el extraño presentimiento de que algo malo podía pasar, decidí guardar silencio.

—¿A dónde vas? —preguntó Zee, con cierta malicia en su voz. Quizás porque iba más arreglado de lo normal.

—Iré a ver a Coates —respondí con obviedad, y giré mi rostro hacia otra dirección.

Perth me miró con sus gatunos ojos entrecerrados, no muy convencido de lo que dije. Ignorando todo a mi alrededor salí de la habitación del hotel y al instante escuché como Zee gritó:

—¡Salúdame a Kanawut! —Sonreí divertido cuando escuché las risas de todos al interior de la habitación. Iría a ver a Coates y luego al apartamento de Gulf, en teoría no les estaba mintiendo.

Di unos pasos más hasta quedar frente a la puerta de la habitación en la que se quedaban Boun y Perth, no habíamos cambiado los lugares desde hace una semana que nos habíamos quedado aquí. Bastante preocupado por mi mejor amigo, decidí entrar.

Me inquietó que la puerta no estaba con llave, simplemente cerrada, abrí lentamente e ingresé a la habitación. Todo estaba en un completo silencio lo cual era normal si Boun estaba durmiendo, caminé hacia su habitación y efectivamente estaba dormido. Me acerqué a él y llevé mi mano a su frente, estaba hirviendo. Preocupado fuí en busca de un paño y un poco de agua para humedecerlo y ponerlo sobre su frente.

—Boun — Le hablé, no tan fuerte —Boun. ¿Debería llevarte a un hospital? —solté preocupado.

Desde que mi madre murió adopté un trauma psicólogico al ver personas enfermas, sentía que morirían frente a mí así como mi madre lo había hecho hace años. La imágen de mi madre agonizando en su cama venía a mí una y otra vez. Boun había sido la única persona que jamás me había abandonado, luego de la muerte de mi tío mi único refugio fue Boun.

T-Tranquilo... e-es solo fiebre, estaré bien... —habló bajo y trató de sonreír. Boun estaba al tanto de aquel trauma que había desarrollado luego de haber visto morir a mi madre.

—No estás bien — Le dije con mucha preocupación, Boun era como un hermano para mí. Y justamente ahora parecía que mi hermano estuviese en su lecho de muerte. Con su frente perleada en sudor, ojos hundidos y oscuros y sus labios bastante resecos, incluso percibí un leve temblor en sus manos.

—Tranquilo... s-seguramente me sentiré mejor luego de dormir u-un poco. —Sonrió, o al menos lo intentó.

—Está bien, pero de igual forma le diré a Prem que venga a verte. —Él asintió. —Volveré pronto, iré a la farmacia y te compraré unas pastillas, ¿ok? Estarás bien —susurré, y él asintió, regalandome otra leve y casi invisible sonrisa, con una extraña profundidad en sus ojos.

Sin muchas ganas y con demasiada preocupación, salí de aquella habitación. Ingresé al elevador y minutos después había llegado al estacionamiento, subí al auto provisional que me había entregado
Coates y me dirigí al edificio del FBI.






×

×


×




Minutos después me encontraba frente a una farmacia, hice una parada y me bajé para comprar los medicamentos necesarios para la enfermedad de Boun, luego de haberlo hecho ingresé al auto nuevamente y me dirigí al que había sido mi destino desde el principio.

Bastaron unos cuantos minutos para que me encontrara frente a aquel viejo edificio, la "B" de "Biblioteca" ya era solamente una sombra. Guardé los medicamentos de Boun en la guantera del auto y salí. Ingresé al edificio saludando a Anne quien era la "bibliotecaria" (también era una agente encubierta) de aquel lugar. Con una sonrisa me recibió y yo respondí a su gesto de la misma manera.

Di unos cuantos pasos más hasta llegar al tercer estante de libros que ahí se encontraba, estudié detenidamente con la mirada todos y cada uno de esos libros hasta encontrar el que era el indicado: un libro de forro morado oscuro con destellos dorados y unos pequeños adornos en plateado. Como título tenía: "El vencedor está solo". Era de Paulo Coelho. Vagamente recordaba haber leído ese libro, por lo poco que recordaba trataba acerca de un millonario ruso dolido por una ruptura sentimental, el cual idea un plan macabro para recuperar a su mujer. Dicho plan incluye varios asesinatos por venganza.

Tomé la punta de ese libro y tiré de el hacia el frente causando así que una puerta oculta se abriera a mi costado izquierdo y me dejara ver aquellas escaleras en forma de caracol. Dichas escaleras conducían al cuartel secreto. Solté el libro, seguidamente me dirigí a esa puerta para llegar a las escaleras y comencé a bajarlas.

Poco a poco divisaba unas luces, me sentí un poco mareado por las vueltas dadas al bajar las empinadas y caracoleadas escaleras. Al llegar al final de estas quedé frente a todos los agentes del FBI, entre ellos se encontraba Gulf, lo cual me sorprendió porque se supone que no debería de estar ahí, al menos no hoy. Aquel lugar en ningún momento parecía un sótano, tenía una oficina de archivos, una oficina de juntas, el área informática y todas las demás áreas que contenían las instalaciones del FBI.

—Mew... — Gulf me observaba un poco sorprendido, yo sonreí y caminé hacía él.

—¿Qué haces aquí? ¿No se suponía que debías descansar? — Me detuve frente a él.

—Ehm,... sí. Pero,... —Frunció el ceño y mordió su labio inferior.

—¿Qué ocurre, Gulf? —pregunté preocupado —¿Ha sucedido algo que yo no sé? — Él suspiró rendido.

—Mew, desde ayer nuestro sistema ha fallado. Bass, nuestro analista técnico ha intentado detener a quién sea que esté intentando infiltrarse al sistema, pero ha sido inútil. — La frustración se reflejó en su rostro.

—Pero... ¿por qué no me llamaste? Mark podría ayudar si es necesario —Me crucé de brazos.

—Lo sé... pero Coates nos pidió no involucrar a tu equipo por el momento —musitó, un poco bajo, pero aún fue audible para mí.

—¡¿Por qué?! Ella nos pidió que nos quedáramos y no creo que lo haya hecho solamente para tenernos encerrados en una habitación de hotel —espeté, molesto.

—Lo sé. Mew, escúchame. Desde ayer a nuestro sistema han llegado fotografías sin sentido, extrañas y borrosas, que únicamente tienen escrita la palabra venganza, hasta el momento no sabemos nada más.

—¿Aún no pueden rastrear la dirección electrónica desde la cual son enviadas? —pregunté.

—No... —respondió.

—Llamaré a Mark, estoy seguro que él podrá ayudar. — Gulf asintió. Saqué mi teléfono del bolsillo de mi pantalón y comencé a buscar el número de Mark, de pronto aquellas pantallas se iluminaron frente a nosotros dejándonos ver varias fotografías perturbadoras a la vista de cualquiera. Era una serie de fotografías de niños de no más de ocho años, cortados de su garganta, misma herida estaba cocida con un hilo nailon de un color verde oscuro. —¿Esto...?

—Es primera vez —respondió Gulf de inmediato, sin dejar de ver las pantallas.

Seguí buscando en mi celular el contacto de Mark, cuando escuché el sonido de algo impactando contra el suelo. Me giré a la dirección proveniente de ese ruido y me dí cuenta como Gulf había soltado su celular.

—Gulf, ¿qué ocurre?

—Mew... —Señaló la pantalla más grande que se encontraba frente a nosotros. En ella aparecían las mismas fotos de niños asesinados de la misma forma, pero todas estas rodeaban una foto en particular.

Tragué grueso y mis ojos se abrieron grandemente siendo aún incrédulo de lo que veía frente a mí, sentí una desesperación y preocupación agruparse en mi pecho. Esa foto centrada entre todas las demás tenía un círculo rojo atravesado por una linea, la palabra "venganza" al final de esta, escrita con letras rojo carmesí. Aunque su cabello era negro como el carbón, el parecido de su rostro lo hacía parecer un clon.

—Es... — Gulf no dijo más, debido al asombro y al shock del momento.

Idéntico a Bounrespondí, sin dejar de ver la foto. El mismo mal presentimiento de la tarde, volvió a hacerse presente. Martillando mi pecho con insistencia. Mi corazón se aceleró y rápidamente cambié a buscar el número de Prem. Marqué una, dos, tres veces, y no obtenía respuesta, pero no me rendí.

—Mew, —respondió Prem, por fin —¿qué sucede?

—Ve a la habitación de Boun y asegúrate de que se encuentre ahí.

—¿Qué? Mew, ¿qué es lo que ocurre? —Empezó a sonar preocupado.

—Prem, —mascullé —por favor, ¡SOLO VE A LA MALDITA HABITACIÓN Y ASEGÚRATE DE QUE BOUN SE ENCUENTRE AHÍ! — Mi frustración incrementó. Gulf se acercó a mí y me miró preocupado.

—Ok, estoy entrando —anunció Prem, escuché el sonido de la puerta de la habitación siendo abierta. Luego el sonido de la otra puerta del cuarto de Boun, siendo abierta. Por un momento todo al otro lado se quedó en un completo silencio.

—Prem... ¿qué sucede? —Los acelerados latidos de mi corazón incrementaron —¿Prem? —No hubo respuesta, solo una respiración entrecortada se escuchó —¡PREM! —grité frustrado.

M-Mew... Boun no está aquísiseó, con voz llorosa y entrecortada.





________________________________________________

¿Qué habrá sucedido?
¿Estará Boun a salvo?
¿Con qué clase de ignoto nos enfrentaremos esta vez?

Nos leemos en el próximo capítulo para descubrirlo.

¡Holi! 😁😅 Solecitos, me alegra mucho saludarlos nuevamente desde este fanfic🥺🤧🤧 extrañé tanto a mis detectives. Sé que los abandoné un tiempo, mucho tiempo realmente pero les expliqué el motivo, pero bien, ha vuelto la razón de sus suspensos 😁💜 la escritora a la que le encanta dejarlos comiéndose las uñas jsjsj 🤭
¿Qué les pareció mi regreso? ¿Si me disculpan por haberme ausentado tanto tiempo? 🥺. Espero que sí.💜

Espero que les guste el capítulo, que lo disfruten tanto como yo, cuídense las uñitas 😁🤭, no se olviden de dejarme sus comentarios y decirme si les gustó.

Sin más que decir, nos leemos a la próxima.


[Publicado: 16/07/21
Corregido: 03/06/23]

Nota 2023: Recuerdo que en el 2021 cancelé la historia debido al demasiado hate que recibía, en ese mismo tiempo fue que empezaron las denuncias a la historia y las acusaciones a mi persona por "no traer contenido adecuado" para la plataforma. Recuerdo que me encerré tanto en el miedo y la inseguridad que me provocaban esos comentarios, que dejé la historia casi como por dos meses o un mes y medio, hasta llegué a pensar que no podría darle un final bonito y un cierre merecido a mis detectives. Pero miren, ya estamos a dos años de que la historia llegó a su final y persistimos mis chicos y yo, no solo gracias a que no me rendí, sino gracias a ustedes que jamás me dejaron sola y que en ese entonces éramos pocos pero locos 🤭.

De verdad no tengo como agradecerles la fidelidad y apoyo que siempre me han dado, mientras corregía este cap y el anterior, recordé todos los mensajitos de apoyo y ánimo que recibía tanto aquí en Wattpad como en Instagram, Feeniks, jamás duden que sí esta cuenta y comunidad de Fénix renacientes de las cenizas, sigue en pie, es todo gracias a ustedes. De verdad les aprecio mucho.

Gracias por todo y acompañenme a ir por más.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro