❲ Christopher ❳

Él último día que pasaré en la universidad ha llegado. Hoy se celebrará la fiesta de despedida que fue organizada por Seungmin y Félix. Sinceramente, no deseaba hacer una fiesta, pero tampoco puedo negar que me siento demasiado feliz a causa de que podré convivir con mis amigos más cercanos el día antes de marcharme. Miré alrededor en busca de cierto chico de cabello rubio después de comprobar que ya transcurrieron dos horas desde que inició la fiesta y lamentablemente, Minho no ha aparecido.

—Pensé que si asistiría porque es el último día que nos podríamos ver, pero veo que he sido un completo estúpido por tener la esperanza de que las cosas serían diferentes entre nosotros— admití tan pronto Félix se posó a mi lado derecho.

Félix colocó su mano sobre mi hombro derecho y tras darle un ligero apretón, dijo con tono suave—: Ambos sabían lo que sucedería si se embarcaban en una relación tan difícil de sobrellevar. No culpo a ninguno de los dos, sin embargo, no tengo duda de que debieron de haber pensado mejor las cosas. Quizá, en un futuro no muy lejano, puedan reencontrarse y su amistad volverá a fortalecerse. Las cosas van a mejorar, ya lo verás— me aseguró.

Asentí con la cabeza antes de decir—: Espero que algún día, volvamos a ser amigos.

—Te aseguro que así será.

Conozco a la mayoría de los estudiantes de medicina puesto que yo también estudio eso, sin embargo, Minho nunca me dijo el nombre del chico que le gusta y sinceramente, no pude preguntárselo directamente porque deseaba tanto no pensar en ello a causa de que me sentiría celoso.

La verdad espero que le vaya de maravilla a Minho porque no puedo desearle el mal a una persona que amo con todo mi corazón. Él se ha ganado cada parte de mi corazón, mente y cuerpo por lo que tengo la certeza de que no podré encontrar a nadie más que pueda tener ese efecto en mí, sin embargo, estoy dispuesto a continuar siendo su amigo si él me lo permite porque no quiero perderlo nunca.

—¿A qué hora vamos a empezar a beber hasta perder el conocimiento? — preguntó Seungmin tan pronto apareció frente a nuestro campo de visión con dos botellas de tequila.

—No puede ser... — murmuró Félix.

—¿Qué pasa? ¿Esto es un funeral? — preguntó Kim.

—Por supuesto que no— respondí mientras tomaba una botella de tequila.

—Por un momento, pensé que me había equivocado de ubicación— bufó.

—¿No puedes pensar en otra cosa que no sea beber? — le preguntó Félix.

—No, realmente— admitió. —Se supone que las fiestas son para divertirse, ¿no?

—Sí, claro— respondió el peligris.

—¿Por qué siempre están discutiendo? — no pude evitar preguntarles.

—La culpa es de Félix— respondió Kim.

—¡Eso no es cierto! — se quejó el peligris y cuando estaban a punto de iniciar otra tonta discusión, la puerta fue abierta. Tontamente, pensé que sería Minho el que había llegado, pero no fue así.

—¡Ya llegamos! — anunció Hyunjin tan pronto entró al departamento acompañado de Jeongin, su pareja.

La verdad es que me duele demasiado el hecho de que Minho haya optado no asistir a la fiesta de despedida porque tenía la esperanza de que todavía existía un poco de nuestra amistad, pero fui un completo tonto al pensar eso. Si tan solo pudiera devolver el tiempo, me gustaría volver a aquel día de nuestro encuentro en el parque y evidentemente, no lo hubiera dejado ir, pero ya es demasiado tarde para arrepentirme.