Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

🪻┆Remordimiento

Estando debajo de mis sábanas, miraba el techo pensando en la llamada de Jihoon, sus súplicas con la necesidad de verme habían durado más de media hora. Entre el llanto y una voz quebrada como escandalosa casi lograba dejar mis tímpanos rotos.

*Flashback*

— Jihoon…

— Jungkook, mi amor. Dime que no es verdad.

— ¿Verdad? ¿A qué te refieres?

— Ese hombre te lavó el cerebro ¿Verdad? Te puso en mi contra.

— Primero que nada, respira. No logro entenderte con claridad. Si me hablas rápido me será difícil comprender una sola palabra de lo que dices.

— ¿Es qué mi llanto no te conmueve?

— Jihoon…

— Te extraño mi vida, y puedo entender que en tu confusión, hayas caído en la telaraña de ese hombre que solo quiere vernos separados. Pero nosotros somos más fuertes, tenemos una historia de siete años.

Juraría que con sólo escuchar su voz antes hubiera afirmado y sonreído para cumplir su petición, pero ahora…

— ¿Qué dices? No puedes estar hablando en serio —contesté manteniendo aún mi voz neutral.

— Entiendo, sé que puedes estar enojado por el hecho de que me haya ido, pero comprenderme, estaba bajo un estrés terrible. Ese hombre me humilló.

— ¿Ah sí? ¿Y también te humilló durante estos siete años de relación? —al sólo obtener el silencio, hice una pausa para no sonar tan violento—. Escucha Jihoon, no es la primera vez que haces este tipo de cosas. Y por supuesto antes las dejaba pasar, pero ¿Sabes? Soy humano y esto me ha ido cansando desde hace un buen tiempo, mucho antes de que volviéramos.

— Jungkook…

— Espera, déjame terminar —lo interrumpí—. Quien tomó la decisión de irse, fuiste tú. Jihoon yo no puedo seguir con un hombre que cada vez que le moleste algo, se vaya durante uno o dos meses ¿En verdad así imaginas nuestro matrimonio?

— Mi vida, te juro que esta fue la última vez. Prometo que cambiaré.

— Es que no se trata de cambios, Jihoon. Simplemente creo que…

— ¡Espera! —me detuvo con un grito—. En dos días llega mi vuelo de regreso, hablemos en persona. Puedo demostrarte que puedo cambiar y madurar.

— Jihoon…

— No respondas ahora, por favor. Te llamaré cuando haya aterrizado para vernos en aquel departamento que fue testigo de nuestras reconciliaciones. Revivamos los inicios de esto tan lindo que construimos juntos.

Lo que mencionó me trajo sin lugar a dudas nostalgia. En nuestros altos y bajos, tuvimos buenos momentos, mas no puse una respuesta.

— ¿Eso es un sí? —me preguntó.

— No lo sé, no puedo prometerte nada.

— Estoy seguro que vendrás, te amo —finalizó la llamada tras largos minutos de conversación.

*Fin Flashback*

— ¿Qué diablos debo hacer? —me dije en la cabeza.

Antes no era difícil tomar una decisión, pero ahora… ¡Mierda! Por qué todo es tan difícil.

Me senté en la cama con las rodillas semi dobladas, apoyando mis codos en ellas, mientras pensaba en la confesión de Jimin.

Sus mejillas mojadas y ojos brillantes, contándome todo lo que el guardó durante años, y aún así no haberse dejado consumir por mi abandono.

Todo, cada uno de mis malditas creencias sobre el hombre que es mi esposo resultaron erróneas, ocasionando que esa noble criatura con un corazón lleno de amor, se lastimara.

Jimin me entregó su primera vez, y aunque el dolor prevalecía en su rostro, no me detuvo ¡Mierda! ¿Cómo pude ser tan egoísta? Poniendo como excusa el concebir a un hijo a cambio de su libertad ¡¿En qué diablos estuve pensando?! Estaba más que justificado su odio y resentimiento hacia mi persona.

Y desde que tuve la verdad de sus propios labios, siento este remordimiento en mi pecho. Cada una de esas gotas eran las de un hombre que lloraba desde el alma. Y me odié, por un maldito segundo me odié por ser causante de esas lágrimas.

— ¡AH! —apreté las sábanas bajo mis puños.

Creí que con solo tenerte una vez, apagaría este fuego por ti Jimin, pero… Desde ese momento en que te hice mío, lo único que he logrado es que tu piel se impregne en cada uno de mis sueños. Tu dulce aroma embriaga a mis sentidos, pero siento que ya no es suficiente. Quiero más, anhelo volver a oír tu voz en mi pecho, eres una necesidad que se ha convertido en mi oxígeno para vivir.

(Personaje misterio)

Una noche más, un encargo más. Mi vida desde la edad suficiente ha sido un infierno ¿Pero qué puedo pedirle al mundo? Cuando siempre he sido invisible ante los demás. Solo tenía a esta vida, una a la que no había tenido más opción que seguir.

— ¡No lo hagas, te ruego que no lo hagas! —me suplicaba un hombre arrodillado con una venda en los ojos frente a mí — ¡Ten compasión de mis hijos! Ellos me esperan en casa.

Se supone que con el tiempo esto debería haberse vuelto fácil, pero no lo era. ¿Cuántas vidas habían acabado estas manos? ¿Cuántas familias habían llorado a sus muertos por mi causa? A veces sólo quería voltear el arma y dispararme en la cabeza para terminar con todo esto.

Apretando mis labios, mientras una lágrima resbalaba de mi mejilla apreté el gatillo, dejando un gran charco de sangre que se formaba a partir de la de ese sujeto.

— Lo siento, en verdad lo siento… —caí de rodillas, llorando por lo que acababa de hacer. Donde fuera que vaya, veía mis manos manchadas, me faltaba muy poco para perder la razón.

— Ya es suficiente T. Blanco, nosotros nos encargaremos del cuerpo. Vete antes de que entres en tus crisis emocionales — dijeron los dos sujetos que habían secuestrado al hombre que había perecido por mis manos.

Ocultando mi rostro bajo la oscura noche, salí de esa fría habitación. Al llegar afuera no pude evitar mirar a las estrellas, ahí en lo alto donde todo brillaba, a aquel lugar lugar que soñaba ir cuando era pequeño. Jamás me imaginé que sería T. Blanco, cual animal asesino que nadaba en el océano y atacaba a su presa sin considerar si era joven o anciano.

— Solo deseo una vida normal ¿Es mucho pedir?.

Moviendo mis manos y piernas, me desperté tras una noche larga. Hundido en mis memorias, había dormido con la flor pegada a mi pecho. Solo la había sacado durante unos segundos, pero al final, resistirme fue inútil.

Me senté en la cama, y exhalé fijando mis ojos en el objeto.

— Bien dicen que el pasado es eso, y no debe volver —me acomodé para devolver el objeto al cajón y levantarme para iniciar mi día.

Elevando mis brazos detrás de mí cuello, estiré mis músculos. Tras ello, me dirigí al baño a tomar una ducha lo suficientemente fría para mantenerme despierto durante todo el día, aunque claro, no podía olvidar el café y el delicioso tiramisú de la señora Choi.

Luego de doce minutos, salí con la bata aferrada a mi cuerpo. Me dirigía a sacar mi ropa para la oficina, mas mis ojos fueron atraídos por la luz que parpadeaba desde mi celular, sequé mis dedos antes de revisarlo, entonces, observé los dos mensajes que habían llegado mientras tomaba un baño.

— Yeji —pronuncié, se trataba de mi madre. Leí los mensajes donde ella me decía que quería reunirse conmigo hoy, pero no en casa, más bien quería hacerlo en un lugar más discreto. En el segundo mensaje decía que llevaría los papeles de la fábrica.

Bien, llegaría tarde a la oficina, pero esa fábrica significaba mucho para mí.

Respondí a su mensaje con mi respuesta y la dirección del lugar donde podíamos reunirnos, casi al instante recibí su respuesta.

—Señor Jimin, buenos días —me saludó  Hyejin.

— Buen día.

— ¿Qué desea para desayunar?

— Oh Hyejin, no te preocupes por mí, comeré algo en el camino.

— ¿Se siente bien? —preguntó examinando mi rostro—. Lo noto nervioso.

— Solo tengo prisa, no hay de que preocuparse —contesté alejándome por las escaleras.

Sin embargo, al ir bajando me encontré a Jennie, arrastrando su falda larga por poco tropieza, pero mis brazos fueron más rápidos para sujetarla de los hombros.

— ¡Dios! —más asustado estaba yo que ella—.Jennie, por Dios, no puedes andar por ahí como si nada, casi resbalas.

— Supongo que el embarazo me tiene así, hace unos días ya sentía los malestares, pero estos están aumentando.

— Entonces, debes ir pronto al doctor, para que te recomiende las vitaminas y demás medicina que deberás tomar durante el proceso de tu embarazo.

— Jackson dice que iremos luego de que él termine con unos asuntos aquí en la ciudad.

— Jennie… —me tomé el tiempo a tomarla de las mejillas. En ella no había malicia, es una persona capaz de sensibilizarse con los sentimientos de los demás, y entendía que para ella la palabra de su esposo era primero—. Escúchame, tal vez Jackson demore, pero tú no puedes esperar.

— Pero él dijo que…

— Jennie ¿Acaso no quieres ver a tu bebé?

Ella sonrió ampliamente, colocando sus manos sobre las mías.

— No sólo debes preocuparte ahora por ti, también por el o la nueva huésped.

— Ja, ja, ja De acuerdo Jimin, lo haré.

Más tranquilo, me fui al café, luego de ayudar a Jennie a bajar de las escaleras.

Mirando la hora en mi celular, pensé si realmente mi madre decía la verdad sobre traer consigo las escrituras. Ella era hábil engañando. Tanto su marido como ella eran dos personas sin culpa ni remordimiento para actuar.

De cualquier modo ya estaba aquí y solo me quedaba esperar.

Fue ahí que tomando un asiento, esperando la llegada de mi progenitora, vi en la televisión con una noticia espantosa.

— Oh mi Dios… —susurré al pensar en la familia de esa pobre víctima, pero al mostrarse la foto de este, sentí como mis nervios se erizaron—. No puede ser él…

Se trataba de uno de los accionistas de nuestra empresa, precisamente él había estado presente en la última presentación de la colección Jeon. Algo debía estar mal con esa información, no podía creer que eso fuera verdad.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.

🪷😶‍🌫️❤️‍🔥No se les olvide votar❤️‍🔥😶‍🌫️🪷

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro