Karina fue admitida en el hospital. No queríamos arriesgarnos a admitirla en ForestVille en caso de que el asesino fuera alguien del personal y esperara esa oportunidad para matar a Karina, así que la llevamos a otro recomendado por JiMin.

Yo estaba sentada al lado de Karina.

Sus ojos estaban cerrados, su cuerpo apoyado contra la cama de hospital conectada a una vía intravenosa. Su pecho subiendo y bajando a ritmo lento.

Era la expresión más pacífica que había visto en su rostro. Alejé el cabello de su rostro, cuando escuché el sonido de botas acercándose y la presencia de alguien en la habitación.

Me di la vuelta para mirar a JiMin detrás de mí.

Me pasó una mirada preocupada.

-¿Qué dijo el doctor? - pregunté.

-No hay nada de qué preocuparse. Karina está fuera de peligro. - ella dijo.

No confiaba en que JiMin me dijera la verdad. Ella podría estar mintiendo para hacerme sentir menos preocupada por Karina.

-Me quedaré aquí a su lado hasta que despierte. - dije. - ¿Podrías traerme algo de café?

Miró la taza vacía. - Un café es lo último que necesitas. Descansa un poco. Has estado despierta toda la noche. Yo me quedaré aquí.

-¿Qué hora es?

JiMin consultó su reloj. - Son las 11:00 AM. - puso su mano sobre la mía. - Puedes confiar en mí, es mi hermana.

Había perdido mi voluntad para discutir y quería dejar de pensar por un momento y dormir un poco.

Decidí dejar de ser terca y dirigirme a casa.

-Llámame tan pronto como se despierte.

JiMin asintió. - Lo haré.

Ese día pasé la mayor parte durmiendo.

Cuando me desperté, ya eran más de las ocho de la noche.

Una sensación de temor se apoderó de mí cuando recordé los eventos del día. Estaba agotada más allá de un límite y todo lo que quería era volver a dormir y olvidarme de todo.

Llamé a JiMin para preguntarle cómo estaba Karina y ella me dió un informe exhaustivo sobre su salud.

El médico dijo que Karina todavía estaba el efecto de la anestesia y que despertaría dentro de una hora.

Toda la unidad de la fuerza policial y el equipo de agentes del FBI esperaban a qué Karina se despertara.

Ella tenía un nombre.

Conforme pasaba el tiempo, el asesino tenía más tiempo para cubrir sus huellas.

¿Cómo iban a descubrir al asesino?

Mi estómago gruñó, decidí hacerme un sándwich y caminé hacia el área de la cocina adyacente.

Saqué verduras y un frasco de mayonesa del refrigerador. Tomé dos bocados del sándwich cuando mi teléfono comenzó a zumbar en la mesa.

Deje el sándwich a medio comer en mi plato y corrí hacia la mesa para tomar mi teléfono, pensando que JiMin me estaba llamando para decirme que Karina finalmente había despertado.

La decepción se apoderó de mí cuando me di cuenta de que no era JiMin.

Era NingNing.

-Hola, Yizhuo. - dije al teléfono.

Después del ataque en el hospital, NingNing no había sido la misma. Ella evitaba hablar conmigo y parecía mucho más estresada de lo normal.

Había considerado su comportamiento como una fase más de alguien que había pasado por un momento difícil.

Le pedí una y otra vez que me contara lo que había ocurrido la noche que la atacaron, pero ella dijo que no podía recordar.

¿No podía o no quería recordar?

Era un poco extraña lo evasiva que estaba siendo, teniendo en cuenta lo mal que estaba la situación.

-Winter, ¿estás ahí? - oí la voz de Yizhuo al otro extremo.

Ella sonaba angustiada.

-¿Está todo bien, Ning?

-¿Puedes venir a mi casa, Winter? - ella preguntó.

-¿Ahora mismo? - pregunté. - Uhm, está bien, pero ¿qué pasa?

-Tengo algo que decirte. - ella dijo y una pausa más tarde continuó. - Se trata del asesino y es urgente. Necesito sacarme esto del pecho.

No necesitaba escuchar más.

Ya estaba a mitad de camino, cogí mi chaqueta y las llaves del coche colgando del gancho.

-Voy en camino.

-Estaré esperándote. Estoy muy asustada, Winter.

-No te preocupes. Estaré allí en diez minutos.

Me alegré de que finalmente NingNing se estuviera abriendo y quisiera hablar sobre esa noche. Podría usar alguna información que llevaría a JiMin un paso más cerca de atrapar al asesino.

-¿A dónde vas? - casi había olvidado que mi hermano había regresado a casa después de haber un turno de veinticuatro horas en el hospital.

-Voy a ir a la casa de NingNing. - le expliqué. - Ella sonaba realmente asustada.

TaeHyun asintió. - Está bien, pero ven a casa pronto. Ya no es seguro en ningún lugar.

En lugar de discutir, solo asentí.

-Regresaré antes de que te des cuenta.

La lluvia comenzó a caer en pleno apogeo. Ni siquiera podía ver el camino claramente.

La lluvia caía con fuerza y noté a una ambulancia a un lado de la carretera con un auto completamente destrozado en un accidente y dos cuerpos que estaban subiendo en una camilla.

Un escalofrío recorrió el cuerpo.

Unos minutos más tarde, estaba estacionando en la entrada de la casa de mi amiga. La calle estaba inquietantemente silenciosa.

Miré el espejo y noté cuando desordenadamente estaba mi cabello. Salí del auto y prácticamente corrí hacia el porche.

Me dirigí al porche poco iluminado, con gotas de lluvia cayendo en mi chaqueta.

Toqué el timbre y esperé.

Unos segundos después volví a tocar el timbre.

Entonces toqué la puerta un par de veces.

¿Era posible que NingNing estuviera tan asustada como para no abrir la puerta?

-NingNinf, soy yo, Winter. - llamé. - Abre la puerta.

Sin respuesta.

Presioné mi oreja contra la puerta, no se escuchaba ningún sonido.

No se escuchaba ni un sonido.

-¡Yizhuo, estoy afuera!

Volví a golpear, está vez más fuerte.

-Déjame entrar.

Finalmente, alcancé su teléfono y marqué su número.

Ella no respondía.

¿Qué estaba pasando?

Alcancé el pomo de la puerta y la giré. La puerta se abrió fácilmente.

Entré por el vestíbulo y me quedé debajo de la escalera oscura. Había música suave a la deriva de la radio en la cocina.

Sus padres estaban fuera de la ciudad para asistir a una boda de parientes lejanos, por lo que ella estaba sola hasta la semana siguiente.

La barra de la cocina estaba abierto con un paquete abierto de papas fritas y trozos de carne en rodajas.

No me sorprendería si ella hubiera invitado a alguien y cuando se hubiera ido, decidió llamarme.

Esa sería la típica Ning Yizhuo.

-NingNing, ¿estás arriba? - llamé.

Revise la sala de estar, pero todo lo que encontré allí fue una manta desordenada, un vaso casi vacío de lo que parecía ser vino y un libro de orejas de perro, el que me había prestado unas semanas atrás.

¿Podría ser una trampa?

No confíes en nadie, Winnie.

La advertencia de Karina se repitió en mi mente.

Ni siquiera llevaba el arma que Karina me había dado.

Necesitaba ser cautelosa.

Subí las escaleras y llegué al primer piso.

Me dirigí directamente a su habitación al final del pasillo.

Las luces parpadearon.

Seguí caminando hacia delante y llamé a la puerta primero.

Cuando ella no respondió, abrí la puerta y entré al dormitorio.

La cama parecía estar desordenada. Había una bata de baño en el piso alfombrado. Maquillaje esparcido sobre el tocador.

Escuché el sonido de una canción de rock desagradablemente fuerte que venía del baño.

De nuevo, la típica Ning Yizhuo.

Cuando abrí la puerta del baño, la encontré en la bañera.

Boca abajo.

La bañera estaba llena de sangre.

Sus brazos estaban a ambos lados de la bañera.

Los azulejos estaban teñidos de color escarlata brillante, salpicaduras pintadas en la pared.

Por un minuto pensé que estaba alucinando hasta que me di cuenta de que estaba gritando.

JiMin había tenido mi mano en la suya todo el tiempo en el que estuve contándole lo que había sucedido cuando encontré el cadáver de NingNing.

Cuando entré en pánico y salí corriendo de la casa, ví huellas de zapatos en el barro.

Huellas grandes.

Estaba tan perturbada.

No podía borrar esa imagen de ella en la bañera de mi mente.

TaeHyun tenía su brazo alrededor de mí. Lloré en su hombro.

-Iba a decirme algo sobre el asesino, ¿cómo la alcanzó antes que yo?

-Es obvio, ¿no? - dijo JiMin.

-¿Qué? - yo pregunté.

-Dejó que el asesino entrará a la casa porque era alguien a quién conocía y en quien confiaba. Eso o el asesino irrumpió en la casa de alguna manera mientras ella se estaba bañando. - dijo JiMin.

-No hubo allanamiento. - le confirmé, secándome las lágrimas.

-El asesino debe haber entrado por la ventana o...

-Abrió la cerradura como un ladrón. - TaeHyun completó.

JiMin asintió. - Ese podría ser el caso. Es bueno en no dejar ningún rastro. Sabe cómo limpiar su desastre. - JiMin volvió su mirada hacia mí. - ¿Yizhuo te dijo algo sobre el asesino? Cualquier cosa que haya mencionado y se te olvidó.

-No. Ella iba a hablar conmigo personalmente. - dije.

-Incluso el detalle más pequeño ayuda, Minjeong. Piensa bien.

-Ella no me dijo nada antes de morir.

-Se está burlando de nosotros. La forma en que dejó su cuerpo allí, en la bañera, se está burlando de la policía.

Justo entonces el teléfono de JiMin comenzó a sonar.

Me soltó la mano.

-Tengo que tomar esto.

Le di un asentimiento.

Caminó un poco más lejos, así tuvo la privacidad suficiente para la llamada, pero por sus expresiones quedaba claro que no le gustaba lo que estaba escuchando.

Después de colgar el teléfono, se acercó a mí y me dió una débil sonrisa. - El deber llama. Uh... tengo que irme. - ella dijo.

Algo no estaba bien.

-Me iré por un tiempo, ¿crees que puedas manejar el interrogatorio por ti misma?

Busque en sus ojos. - ¿Qué está pasando, JiMin?

Ella miró hacia otro lado. - No es nada. Ha surgido algo importante.

JiMin se giró para irse cuando atrapé el final de su brazo y la detuve.

-Era del hospital, ¿no? ¿Qué está pasando? ¿Qué me estás escondiendo?

Estaba teniendo dificultades para respirar al pensar en las infinitas posibilidades de lo que podría haber salido mal.

Aparte de NingNing, había otra persona que sabía quién era el asesino.

¿Era posible que el asesino hubiera matado a NingNing solo para distraer a la policía de su verdadero objetivo?

Su objetivo real era Karina.

Cogí las dos manos de JiMin en las mías.

-Por favor dime lo que estaba pasando, merezco saberlo. ¿le pasó algo a Rina?

-Los médicos dijeron que el trauma de la lesión que tuvo Karina fue tan grave que... - JiMin evitó el contacto visual. - Es tan grave que Karina entró en coma.

F por Ningײ