-¿Vas a trabajar en una librería?- Jimin se acostó en la cama mirando al techo.

-Si, quiero ayudar a mis padres con los gastos- Taehyung estaba sentado en la ventana con su mirada puesta en las estrellas como todas las noches, volteó a mirar a su amigo. -Solo son algunas horas-

-¿Por qué una librería?- Jimin se apoyó en sus codos para mirar a su amigo.

-Me gusta leer, amo los libros- Suspiró. -Me sentiré como en un mundo mágico-

-¿Ya no vamos a leer juntos?- Preguntó y cubrió su rostro con la almohada al recibir una mirada filosa por parte de su mejor amigo. -Prometo leer el capítulo... ¿Seis?- Entrecerró sus ojos con duda sin recordar cuál era el último que habían leído juntos.

-Vamos en el capítulo ocho- Lo señaló. -Se suponía que este fin de semana lo ibas a terminar- Suspiró. -Quiero seguir leyendo y no puedo seguir esperandote-

-Es que me aburre...- Jimin se sentó de golpe en la cama. -Mejor cambiemos de libro, uno de aventuras o de acción-

-Prometiste leer el de romance conmigo... Ya hemos leído todos los que tú me has dicho-

-Pero Tae.... Ese libro no tiene nada de romance. Ni siquiera se han besado-

-En el último parecía que en el siguiente venía el beso- Miró de reojo a su amigo. -No he podido averiguar si se besan o no, porque alguien... aún no lee- Reprochó.

-Ya, perdón. Hagamos algo...- Jimin se puso de pie y abrazó a su amigo. -Ve a preparar algo de cenar y yo mientras tanto voy a leer el último capítulo que me hace falta... Leemos el siguiente juntos-

Taehyung sonrió. Jimin siempre lo convencía fácilmente.

-Esta bien...-

Mientras Taehyung cocinaba, Jimin se sentó en la cama a terminar de leer. Amaba la lectura al igual que su amigo pero prefería leer historias de acción o aventura, a veces incluso de misterio. Las de romance le gustaban pero no tanto como a Taehyung.

Cuándo la comida estuvo lista, ambos subieron a la habitación para leer el siguiente capítulo. Ambos se sumergieron en un silencio hipnotizante mientras leían cada uno en su propio libro, dejándose llevar por el rumbo de las palabras.

Taehyung leía con calma, degustando cada frase e imaginando cada escena. Por otro lado, Jimin leía rápido y con angustia de saber que decía el párrafo de más abajo, espiando pequeñas palabras que le revelaban lo que iba a ocurrir.

Jimin rápidamente llegó la escena del beso, soltó el aire contenido de sus pulmones, internamente gritó de alegría por el anhelado momento. No quiso dañarle el momento a Taehyung con sus reacciones y disimuló su emoción.

Cuando Taehyung se acercaba a aquella escena que había estado esperando, su corazón empezó a latir con fuerza, su cuerpo se estremeció, como si él fuera el que estuviese a punto de recibir ese beso.

Con una sonrisa en su rostro leyó la escena donde los personajes se acercaban poco a poco. Sabía lo que venía, su mente y su corazón estaban preparándose para leer ese párrafo que confirmaría su mayor anhelo. Una corriente recorrió su cuerpo cuando la palabra "beso" fue leída.

-¡Por fin!-

Taehyung gritó de emoción y llevó el libro a su pecho. Jimin sonrió.

-¿Ya lo leíste?-

-Si... Casi me quedo sin aire leyendo cada palabra, es que ahhh... El primer beso es... tan especial-

-Si, creo que valió la pena la espera-

-¿Verdad que si?- Suspiró. -A veces pienso que el beso es algo mágico-

-¿Cómo en los cuentos?- Jimin se burló.

-Sii.. Como en blanca nieves o la bella durmiente...- Sonrió. -Gracias al beso, la maldición se rompió. Todos fueron felices en su hermosa fantasía-

-Tambien puede pasar cómo en Shrek... Fiona pensó que sería una hermosa princesa, pero se quedó igual...- Taehyung lo empujó jugando con las almohadas. -Y que tal esa que beso al sapo, también la estafaron..- Taehyung empezó a hacerle cosquillas a Jimin. -Cuándo tengas tú primer beso, no te vayas a equivocar de cuento... No... Tae...- Se rió al sentir los dedos en su torso durante aquel juego.

-Me acabas de dañar la magia del primer beso- Empujó levemente a su amigo en la cama.

Cómo todos los fines de semana, Taehyung pasaba tiempo con su amigo, leyendo o viendo alguna película.

Esa noche, al terminar, Jimin estaba dormido. Taehyung permaneció en su ventana unos minutos más mirando al cielo a la espera de algo que ni el mismo sabía que era.

-¿Qué haces?- Bogum se acercó a JungKook.

-Nada, aquí esperando... Cómo todas las noches- En su rostro reflejaba tristeza y decepción. -Ya nadie cree en la magia-

-¿Sólo el chico de la ventana?- Se burló y Jungkook lo miró de reojo. -¡Solo decía!- Palmeó la espalda del castaño.

-Aunque tienes razón, creo que él es uno de los pocos que aún cree-

-Ya nadie pide deseos a las estrellas fugaces- Afirmó Bogum.

-Tal vez.. ¿Por qué no les hacemos ver qué existimos?- Miró a Bogum. -Puedo acercarme y tal vez hacerle ver qué la magia existe...-

-No- JungKook detuvo sus palabras. -Nada bueno sale de las interacciones con los humanos- Dijo Bogum con su semblante serio.

-Lo puedo intentar...- Jungkook miró a Taehyung en la ventana.

-Si te involucras demasiado... Puede ser riesgoso-

-No sería la primera vez...-

-Antea era diferente, además, somos estrellas fugaces, el tiempo es diferente para nosotros-

-Ya lo sé y tú entiendes.. Nuestra misión es cumplir deseos no mirar como pasan los años...-

-Esta bien... Ve e inténtalo- Bogum miró a Taehyung. -Espero logres que el chico pida un deseo-

JungKook sonrió, estaba convencido de que aquellos ojos que lo observaban cada noche eran de alguien soñador, creyente en la magia.

Todo era... Casi perfecto en la vida de Taehyung. ¿Que podría faltar?

-Taehyung- El mencionado alzó la vista al ver a su jefe frente a él. -Él será tú nuevo compañero- Señaló. -Enseñale todo lo que hay que hacer-

-Si señor- Sonrió y miró al chico. -Mucho gusto, soy Taehyung- Saludó con una reverencia.

El jefe se retiró, dejándolos solos.

-Un placer, mi nombre es Jungkook- Sus ojos se enfocaron en la sonrisa frente a él. -Tienes una linda sonrisa-

Taehyung sintió su corazón latir con fuerza y su cuerpo ponerse caliente de repente. Aunque no era la primera vez que recibía un cumplido, sonrió tímido.

-Gracias- Sus mejillas se pusieron rojas.

Para Jungkook no era la primera vez que interactúaba con humanos, hace cientos de años, era mucho más fácil. Todos creían en la magia pero con el pasar del tiempo, los humanos dejaron de creer y las estrellas fugaces tuvieron que abandonar la tierra y refugiarse en el cielo estrellado, camuflandose con las demás estrellas.

JungKook era alguien transparente que decía lo que pensaba sin temor, Taehyung poseia una belleza innegable y él no era ajeno a eso.

-No te pongas tímido, eres hermoso. Deberías estar orgulloso- La mirada fija y penetrante logró estremecer a Taehyung.

-No, es solo que... Nadie me había hablado así... Tan...-

-¿Sincero?-

-Si..-

-Perdón si es incómodo para ti, pero siempre digo lo que pienso...- Desvió la mirada para cambiar de tema. -Soy nuevo en la ciudad, entonces espero que puedas ser mi guía no solo aquí en el trabajo-

-¿En serio?- Sonrió. -¿De dónde vienes?-

-De... Muy lejos..- Se acercó. -Ahora dime en qué puedo ayudarte hoy-

Taehyung pasó saliva al sentir la cercanía. Sus ojos se encontraron y allí pudo notar un brillo excepcional en aquella mirada.

-Hoy hay que hacer inventario en bodega...- Mordió sus labios con nervios. -Ven, te enseño-

Poco a poco, JungKook empezó a compartir tiempo con Taehyung, ganándose su confianza para revelar su mayor secreto y ofrecer un deseo. Esa fue su intención inicial, pero cada día olvidaba su misión y disfrutaba de la compañía.

-¿Aquí te parece buen lugar?- Taehyung preguntó. JungKook asintió. -Creo que tenemos la mejor vista de la ciudad-

JungKook miró a Taehyung. -Si, la mejor vista-

-Ven, acomodemos todo, ya casi se oculta el sol-

En pocos minutos organizaron todo lo que habían llevado para su picnic. Se sentaron juntos a observar el atardecer.

-¿Quieres algo de comer?- Jungkook preguntó y empezó a abrir la canasta.

-¿Que trajiste?- Taehyung se inclinó a mirar.

-Nada picante obviamente, coca-cola de bebida y postre de fresa-

Habían pasado algunas semanas pero la intimidad entre ambos cada día era mayor. Les gustaba estar cerca todo el día, ninguno se sentía incómodo.

Se miraron y la naturaleza parecía armonizar el momento que estaban compartiendo.

-Me conoces tan bien- Taehyung arrugó su nariz con ternura y Jungkook quiso besar todo el rostro.

Comieron en silencio, mientras el sol se escondía. Sus siluetas quedaron reflejadas frente al imponente paisaje.

Cuándo la noche llegó, se acostaron a observar las estrellas.

-¿Crees en la magia?- Preguntó Taehyung con su mirada puesta en el cielo.

-Si, totalmente- Jungkook volteó a mirar a Taehyung y se recostó de lado.

-Todas las noches, miro las estrellas, esperando ver una estrella fugaz y pedir un deseo- Dijo Sonriendo.

-¿Qué pedirias?- Pregunto curioso, sus ojos brillaron cuando Taehyung se acostó de lado y lo miró.

-No sé... Tal vez, ganarme la loteria- Se burló. -Antes veía una estrella fugaz, no la he vuelto a ver. Siempre quise pedir algo, pero nunca lo hice-

-¿Por qué?- Jungkook se acercó. -¿No crees en la magia?-

Los corazones latian al compás y el sonido se mezcló con los ruidos de la noche.

-Si creo, solo que... siento que aunque mi vida no es perfecta... Soy feliz-

-¿Qué le haría falta para ser perfecta?-

Taehyung sonrió. JungKook enamorado de aquella sonrisa, lo observó.

-Amor-

JungKook se acercó lento, sus respiraciones se mezclaron, ambos cerraron sus ojos, un estruendo los hizo separarse, gotas empezaron a caer y rápidamente se levantaron para cubrirse de la lluvia.

JungKook miró al cielo y supo quién era el responsable de aquella tormenta. Buscaron refugio hasta que la lluvia cesó, recogieron todo y se marcharon a casa.

Al llegar, antes de despedirse. JungKook estaba decidido, su corazón confiaba en Taehyung.

-Gracias por todo JungKook, nos mojamos y todo se arruinó, pero me divertí mucho-

-No se arruinó nada.. Incluso la lluvia te hace ver aún más hermoso- JungKook le acarició la mejilla.

-¿Nos vemos en unos días?- Preguntó con ilusión.

-Si, aquí estaré luego de que regreses de vacaciones-

-Yo.. voy a extrañarte- Cerró sus ojos al sentir los dedos de JungKook acariciar su rostro.

-Yo ya te extraño- Sonrió. -Quiero decirte algo, antes de que te vayas-

-¿Qué es?-

-Sé qué puede sonar algo irreal, pero... Yo..- Suspiró. -Soy alguien mágico... Puedo concederte un deseo, el que tú quieras-

Taehyung permaneció en silencio, Jungkook lo observó con angustia.

-¿Mágico...?- Sus ojos brillaron. -¿Cómo una estrella fugaz?-

-Si, como una estrella fugaz...- Llevó sus manos a los ojos de Taehyung y cuando los retiró, tenía el cabello rubio.

Taehyung se sorprendió y llevó sus manos a la cabellera contraria. -Te luce el color rubio.. ¿Puedes hacer lo mismo con el mío?-

-Si, claro- Jungkook con duda miró a Taehyung. -No pareces asustado ¿Estás bien con todo esto?-

-El dia qué te conocí, noté algo diferente en tus ojos, tu mirada me decía que había algo especial en ti- Se acercó y acarició el rostro de JungKook. -Al parecer no estaba equivocado-

-Puedo concederte un deseo, el que tú quieras-

-No. Soy feliz con lo que tengo en mi vida- Le dió un beso en la mejilla. -Nos vemos- Se alejó feliz y sonriente.

-Nos vemos-

Jungkook lo observó ingresar en la casa. Había hecho todo lo posible para lograr que Taehyung pidiera un deseo. Allí, entendió el motivo de por qué los humanos ya no lo hacían como antes.

No era falta de creencia, habían aprendido a afrontar los problemas y resolverlos, enfrentarse a la dura realidad de la vida.

Cuando abrió sus ojos, Jimin se encontraba a su lado, con la cabeza recostada en sus piernas, dormido. Estaba en la camilla de un hospital.

-¿Jimin...?- Movió su cuerpo. Su amigo se despertó rápidamente. -¿Que pasó?-

-¡Tae!- Lo abrazó. -¡Despertaste!-

Taehyung cerró sus ojos y se quejó de dolor, se sintió mareado. -¿Qué pasó?-

Jimin permaneció en silencio. Las enfermeras enteraron a revisar sus signos vitales, Taehyung no entendía nada.

Su corazón se oprimió cuándo el médico le informó que sus padres habían fallecido en un accidente. Regresando de sus vacaciones, la carretera mojada los hizo perder el control y se estrellaron con un árbol. Taehyung duró varios días inconsciente.

Durante dos semanas, estuvo sumergido en la tristeza, sin querer comer ni levantarse de la cama. Su vida, sin sus padres, era gris.

-¿Cómo está?- Preguntó JungKook cuando llegó a visitar a Taehyung. Jimin estaba cocinando.

-Igual, no quiere comer-

-Iré a verlo- Jungkook se despidió de Jimin y subió a la habitación de Taehyung. Tocó a la puerta. -¿Puedo pasar?-

-Si- Respondió con voz apagada.

JungKook entró y encontró a Taehyung sentado en la ventana mirando el cielo. Se sentó a su lado y lo abrazó en silencio como todas las veces que iba a visitarlo. Le dolía verlo triste, sin aquella sonrisa que lo cautivó el primer día.

-Debes comer algo...-

-Solo quiero una cosa y tú lo sabes- Respondió sin mirarlo.

-Tae...-

-Dijiste que me darías lo que yo quisiera- Sollozó. -¿No fue así?-

JungKook bajó su cabeza, no podía decirle a Taehyung que revivir los muertos traería consecuencias. Por varios días, intentó convencerlo de que esa no era la solución, pero verlo tan triste lo hizo tomar una decisión que afectaría todo entre ellos.

-Esta bien- Dijo y Taehyung se dió la vuelta al escucharlo. -Lo haré-

-¿De verdad?- Una leve sonrisa se pudo ver en el rostro y Jungkook supo que todo valía la pena, si podía hacer que sonriera más.

-Si, pero hay reglas y... Debes aceptar todo lo que conlleva pedir este deseo-

-Lo haré- Apretó las manos que tenía entrelazadas con las de JungKook.

-Bien- Suspiró. Un papel mágicamente apareció frente a ellos. -Escribe tu deseo y firma-

-¿Una firma?- Preguntó

-Si, como cuando marcas tus libros-

Taehyung asintió. -Bien-

✍🏻

💮 Quiero que mis padres se salven del accidente.

✍🏻 By Kth ✍🏻

Bogum apareció al instante, luego de que aquel papel fuese firmado.

-Tienes una última oportunidad, JungKook- Taehyung se sorprendió, no comprendía lo que estaba ocurriendo. Bogum los observó por varios segundos. -¿Estás seguro?-

-Si, lo estoy..-

-Taehyung tu deseo incumple las leyes de la magia, pero tú estrella fugaz está dispuesta a sacrificar todo para cumplirlo- Taehyung empezó a respirar con angustia, no le gustaba lo que estaba escuchando. -Vas a recuperar a tus seres queridos, pero vas a olvidar a otros. JungKook dejará de ser estrella fugaz, ese será su pago-

-No, no...- Taehyung pidió con lágrimas en sus ojos. Miró a Jungkook. -No es justo...-

-Esta bien Tae, yo acepté antes de concederte el deseo.. Yo estaré siempre a tu lado... Cuidando de tí-

-Lo de ustedes es un amor imposible, si aceptas estar con él, serán castigados- Dijo señalando, mientras ambos mantenían sus manos entrelazadas.

-No me importa, solo quiero estar con él- Apretó con fuerza, dando apoyo.

-No lo hagas- Suplicó llorando. -Él dijo que...-

-Sé lo que él dijo y aún así, lo aceptaré- Volteó a mirarlo y le acarició la mejilla.

-No quiero olvidarte- Ladeó la cabeza para sentir la caricia en su piel.

-Yo solo quiero verte sonreír-

-Mi vida volverá a ser gris, no voy a sonreir-

-Yo me encargaré de que así sea, así no estemos juntos-

Juntaron sus frentes y antes de unir sus labios una luz estalló, separando los cuerpos.

Bogum se alejó, observando como la magia cumplía el deseo. Tanto él como JungKook sabían cómo romper el castigo.

Hola mis Lorechizadas

Les traigo un nuevo capítulo 💖

Lore 💜💚🐰🐻