Entraron a la sala. Habían pocas personas, Ray se sento a lado de su ama en su izquierda mientras que su madre se sentaba en su derecha y su esposo a lado de ella.

―van a pasar los anuncion primero―dijo su esposo, mientras pasaba las palomitas.

―ten―Carol le entrego las suyas.

{O como ustedes le digan es sus países}

―gracias ama―se acomodó.

Cada uno ya tenia lo suyo, palomitas y soda y algún que otro caramelo.

―¿puedo saber que vamos a ver?―preguntó Ray.

―claro―dijo el padre―es un anime, trata sobre dos chicos y una chica que son unos genios y se meten en unos problemas e intentan huir de ellos―explicó.

―pero es cómico, alguno de mis amigos me lo recomendaron―terminó Escarreola.

El hombre abrió ligeramente sus ojos para luego sonreir y saludar. El azabache extrañado miro hacia atrás.

―hola Leslie―saludó Norman.

―Rayos, acertastes―reprochó Don.

Norman se sento a lado de él sonriente.

―Wow, Norman―dijo Emma―me sorprende.

―era la unica pelicula que comenzaba en menos de 5 minutos―le dijo.

―habian como cinco―está vez hablo Gilda

―no eran aptas para menores―contradijo.

―¿y los asientos?―dijo Emma.

―lo hize al azar―respondió.

―que suerte que hayas acertado.

―Ray―la niña murmuró mientras movia su antebrazo―¿son tus amigos?

Ray los miro, había pasado un mes con ellos, se habían abierto sin vacilación, haci eran con toda las personas ¿lo eran? Pasaba el mayor tiempo con ellos, ¿los consideraba? La respuesta era clara: No, no los consideraba amigos, aún no.

―No―murmuró.

―¿son compañeros?―preguntó.

―correcto ama―.

―ya comenzó―dijo su señora.

Comenzando con las industrias que la crearon entre ellas el Studio Ghilbi.

―me encanto cuando vi el trailer―dijo Emma―fue genial.

Seguro le iba a gustar, habia visto pocas veces películas de ello y eran buenas.

Su pelicula favorita de ellos-que aún no lo decidia entre dos-eran: El viaje de Chihiro y la princesa Mononoke.

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Entralazaron las manos, Ray se sobresalto para luego mirarlo.

Su rostro reflejaba emoción por lo que pasaba en la pelicula, mientras que los demás sentian una gran tensión por ella.

―¿estas vivo?―dijo la protagonista.

El otro chico se acerco y le abrazo, cuando se separaron el terciario, le golpeo.

―maldito bastardo―dijo el terciario.

―auch, eres cruel―contesto el lastimado.

―¡Ingrato sabes cuanto sufrimos!―exclamó.

Mientras la protagonista estaba preocupada. Y el lastimado solo mantenia una estupida sonrisa, mientras que el otro solo se desahogaba.

Entendia la emoción u la tristeza que sintieran todos los presentes.

Cuando el albino se dio cuenta de lo sucedido, le pidió disculpas.

El no tenia nada en contra, la mano del contrario era calida y no le apretó como cualquiera lo hiciera, solo la sostenia.

―no importa―respondió el azabache, sostenio su soda y la comenzó a beber.

Culmino la película y al irse, Carol pidio unos helados, la cual se unio Emma.

―de acuerdo, de acuerdo―al final sucumbió su señora cuando su esposo se unio a pedir helado.

Se encaminaron a la tienda más cercaca que vendiera.

Al llegar, Emma pidio naraja, su ama e Don chocolate, Norman fresa junto a su señora, Gilda, el y su señor vainilla con chipas de chocolate.

―¡yo tambien monte una jirafa!―emocionada grito su ama, Emma y ella habian establecido una conversación.

Vio como Emma sonrio ampliamente.

Termino su helado, para luego limpiarse y votar la servilleta.

―dime―la voz de Norman lo puso en alerta―¿tu prima que edad tiene?―preguntó.

―seis―le respondió.

Norman termino el suyo tambien.

>>>>>>

Aun no se acostumbraba bien al tacto o la atención que le daba Norman.

En cuatro días Norman habia comenzado abrazarle, acariciarlo en el cabello.

Le gustaba sentir las acaricias.

―tu cabello―paro Norman―es muy suave, ¿que usas?―preguntó.

Ray se sentia en paz al sentir los dedos de Norman pasar por su cabellera negra para después ser arrebatada en su segundo.

―solo uso aconcicionador o alguno que otro tratamiento―contestó.

―Buenos dias―una compañera entro saludando.

―buenos dias―dijo Norman.

Ray rescosto su cabeza en la mesa. En unos minutos despues sintio nuevamente el tacto de Norman al ser acariciado.

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Mientras Ray se removia para luego recortarse nuevamente en el pecho de Norman, quien le leía a Emma, mientras que la chica solo asentía. Luego se unieron Gilda, Don y Anna.

―espera―detenio Don―pero ¿por que no les dijo al principio de la farsa?―preguntó.

―quizas para indagar más y haci para cuando los demás supieran tener todo preparado―dijo Gilda.

―o solo acepto su destino―opino Anna.

―pero que causaría ello, ¿no confiaba en los demás?―se preguntó Emma.

―¿Que leen?―preguntó entre murmuró Ray, mientras se lavantaba.

―la chica detrás de los libros―respondió Norman.

Los demás discutían la razón que la protagonista no decia nada.

Norman levanto su mano y comenzó acariciar la mejilla de Ray, quien estaba un poco adormilado.

Su semana había sido un poco difícil, el, Lucas y Zazie llevaban investigando al tio de Norman junto a la madre de Emma, le había sido un poco dificil mirarlos a la cara, al saber que sus familiares hacían, con los trabajos "simples"que dejaban sus profesores y al ser guardespaladas de Carol le resultaba muy complejo arregalar su tiempo.

Pero era su deber hacerlo.

―no has dormido―dijo Norman que le seguía acariciando―tenemos las dos horas libres después del receso―notificó.

Ray solo asintió, Norman atrajo su cabeza hacia su hombro.

―te levantaré cuando vayamos al salón ¿esta bien?―preguntó.

―sí, esta bien―y haci cayó dormido ante la seducción del sueño.

―¡¡No....―iba exclamar la rubia para buscar una respuesta ante la discusión pero hiso o más hicieron silencio ante la mirada del albino quién tenia uno de sus dedos en sus labios.

Emma asintió para levantarse.

―voy al baño―aviso para luego retirarse.

El lugar donde habitaba el árbol, no era un lugar ruidoso, una de las razones por la que Ray la eligio.

Casi nadie iba ahí, lo que significaba que el azabache podia dormir sastifatoriamente junto al silencio y las acaricias de Norman, no podia pedir nada más.

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―gracias Zazie―agarro el papel y lo acomodo en su tablero.

Bostezo y se sentó en la silla dando vueltas en ella.

―descuida puedo sorpotarlo un poco más―se estiró y nuevamente se levanto.

Comenzo a escribir toda la información recopilada, la cual era escasa.

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Se escuchaba la voz de su padre contándo junto al baile de su madre, el albino fue empujado por Emma a bailar y Anna quien se unia al canto.

Mientras Don y Gilda aplaudían, los padres de Gilda bailaban, los de Don comían y su tio junto a su amada tia solo reían.

Era común de sus familias comer todos los sábados juntos, quedarse hasta la noche bailando y cantando. Los jovenes dormian como en pillamada y los adultos bebían sin cansancio.

―¿entonces es su nuevo integrante?―dijo la madre de Emma con su amplia sonrisa.

―sip es algo introvertido―explicó Emma―pero es muy divertido.

―siempre lleva un libro consigo―añadió Gilda.

―nunca lo he visto sonreir―informó Don.

―llega antes de Norman y su pelo tapa uno de sus ojos―Anna acomodó su cabello tratando de hacerlo como el de él.

―le gusta la acaricias, su elemento favorito es el fuego, la fisica cuantica, el ajedrez y muchas otras cosas más―enumeró Norman―las acaricias le gusta más en la cabeza, no se da de cuenta cuando demuestra algo de su gusto.

El padre tosio ligeramente―se escucha genial.

―lo pueden invitar alguna vez―propuso Peter.

―¡Sí!―exclamó la pelirroja.

◇◇◇◇◇◇◇

―no―contestó el azabache
indiferente.

Rompiendo el deseo del albino que conociera a sus padres junto a su tío y su tia.

―¿por qué?―Emma lo sacudió.

―Emma tengo trabajo―la detenio―no puedo faltar, tambien debo cuidar a mi aaaaa prima―la alejo.

―¡p-pero!―la chica nuevamente le iba a pedir.

―Emma―Norman la consolo con la mirada―Leslie dijo que no, no hay que obligarlo―negó.

―perdón.

El azabache se acomodó en su asiento correspondiente.

―un mes, una semana, dos día, siete horas, veintiocho minutos―derrepente hablo―son raros, confían claramente en un extraño.

Se estiró.

―no eres un extraño―reprendió Norman.

―¡eres nuestro amigo!―exclamó.

―Emma esta en lo correcto―asintió Don.

―literalmente soy un extraño―pensó mientras suspiraba―confían en alguien que no conocen bien.

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Los moretones eran notorias sobre su piel. Debia tener cuidado con sus practicas, el androide le dejo, moretones en el ojo, en las pienas, muñeca y el labio partido aún que ese no era el problema, ya que los tejidos en medio de su descanso deberian cerrarse.

Pero los moretones, no eran el caso. Era dificil que desaparecieran o ocultarlos.

Y tambien cuando intento golpear a uno, este esquivo y golpeó la pared teniendo ligeras fracturas.

La pared y él.

Estaba muy cansado pero no podia pegar el ojo.

―tienes que dormir―regaño su prigenitora.

―nesecito terminar―junto los hilos.

La mujer fruncio el ceño, lo jalo y lo rescosto.

―duermente―ordenó.

Debia hacerlo o se le iba a dificultar más que los golpes desvanecieran. Estas solo lo hacian al descanzar.

Su madre saco el tablero juntó a Zizie, quien al terminar lo acariciaba.

!!!!!!!!!

―¡¿que te sucedió!?―exclamó preocupado Norman.

No se había dado cuenta cuando Norman le vio los golpes.

Todo habia sido normal, si el contrario no se hubiera puesto de amistoso. No, no era la culpa del albino era la suya por ser tan despistado. Si hubiese sido más atento quizas nunca le hubiera visto las heridas.

Pov Ray.

―Leslie―saludo para luego abrazarme.

Sentí como su respiracion se acercó y me besó en la mejilla, dandome un pequeño escalofrio, para luego repartilo por la parte destapada de mi rostro.

Acción que me hiso sentir muy.... No le tengo explicación pero tampoco me desagrada.

Agarro mi mano y entrelazo sus dedos con los mios.

¿esta acción no es indebida? Mayormente lo hacen las parejas.

Su sonrisa se amplió, su semblate se me hace familiar ¿de dónde?.....¡ya se!

En una de mis experiencia de visualización, una pareja pasaba delante del auto.

La chica miraba al joven con unos ojos llenos de ternura mientras el chico parecia nervioso ante la presencia de la joven.

Sin darme cuenta el me hablaba, mientras había sacado un brazalete de una cajeta chiquita, me sostenio de la muñeca y me quedé paralizado.

Quite mi mano inmediatamente pero ya era tarde.

Su sonrisa llena de inocencia, su mirada tan cálida. Fue opacada de horror y preocupación.

―Leslie―la voz de Norman sonó rota―¿quien te hiso eso?―me preguntó.

―nadie―respondi.

No mentía un robot no era una persona, solo era puro metal, plástico y cables.

―mientes―espeto Norman, para luego abrir ligermante sus ojos.

Saco algo de su mochila.

¿que es? ¿un pañuelo? Mierda.

Antes de reaccionar debidamente, se tiro encima mío para pasarme todo el pañuelo por el rostro.

La bufanda.

Lo quite de encima con facilidad, antes que se le ocurriera quitarme la bufanda, una briza fria recorrió la parte de mi rostro que se suponia que debia estar tapado por mi pelo.

Vi su mano que tenía el pañuelo, que parecia tener polvo y su rostro demostró miedo.

¡Maldita seas! ¡¡Ratri!!

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Buenos dias, tardes y noches.

En cualquier momento que me leas.

Es el segundo capítulo más largo que he escrito en mi corta vida.

Aunque la imagen no tenga que ver con nada de la historia, me gusta.

¡te agradezco por leer!

Atte:La autora.