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𝙵𝚛𝚒𝚎𝚗𝚍𝚣𝚘𝚗𝚎

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Decir que la situación era mala sería quedarse corto, estaban rodeados de villanos, y por si fuera poco ya estaba llegando a su límite, el cansancio compensaba a superarla, la adrenalina del momento comenzaba bajar, volviéndola más lenta como consecuencia.

Cómo había llegado a esto!?... Esa pregunta flotaba en su mente desde hace un rato. Un pacífico estrenamiento se convirtió en un campo de batalla; de repente villanos comenzaron a salir de una extraña nube púrpura, para después ser teletransportarda a un lugar que no conocía, junto a un picachu inútil, una pelipurpura con la que nunca había hablado, y la chica a la que más odia, Uraraka Ochaco.

Su anterior plan ciertamente les dio una gran ventaja; sacrificando a Kaminari como un peón, electrocuto a un gran número de villanos, sin embargo, no a todos, había al rededor de  30 villanos rodeándola. El rubio estaba fuera de combate, Uraraka no era buena peleando, y como resultado fue noqueada fácilmente, la chica de la cual había olvidado su nombre peleaba bien, pero no tenía mucha resistencia, ya estaba en las últimas, al igual que ella.

Tenía un plan, pero no estaba segura de si funcionaria, pero, dada la situación, tenía que hacerlo.

- "Supongo que es un todo o nada" -  saco de su bolsa de herramientas una jeringa, y rápidamente la inyectó en su pierna.

La azabache apretó los dientes al sentir el líquido entrar en su sistema.

Inmediatamente después salió corriendo hacia el grupo de villanos; su compañera la miro preocupada, mientras que sus adversarios la miraban con pena.

Pero contrario a lo que todos pensaban, la azabache tacleo con facilidad a uno de los villanos, rompiendo su formación.

Creando un escudo y una pistola comenzó a atacar, disparando a los ojos de sus atacantes y defendiéndose con el escudo.

Hundiendose cada vez más en la multitud, mientras atacaba y defendía, pero, en realidad, las balas de goma no servían de mucho; algunos villanos caían, pero la gran mayoría las esquivan o simplemente no les afectaban, y pronto se vio acorralada, sin balas, y con un escudo roto.

Era su fin, o eso pensaron cuando ella se deshizo de su escudo, y extendió sus brazos hacia sus costados; a simple vista parecía que se estaba rindiendo, pero eso jamás fue así, de las palmas de sus manos salió un pequeño tuvo, de aproximadamente una pulgada de diámetro, y del interior del tuvo, salió disparado a gran potencia un gas de color púrpura como si se tratara de una pistola de aire a presión.

Girando sobre su propio eje un par de veces, logro dispersar el gas en todas direcciones.

Cuando el gas por fin se disperso, pudo ver a su alrededor aproximadamente 20 villanos en el piso, todos inconscientes.

Inmediatamente después un fuerte dolor se apoderó de ella en todo su cuerpo; la jeringa de adrenalina había pasado su efecto, provocando que callera de rodillas.

Había sobrepasado su límite hace mucho tiempo, pero, lo logró; inconscientemente sonrío.

Pero no tuvo tiempo para festejar; estando de rodillas, pudo sentir pequeñas vibraciones provenientes del suelo debajo de ella. Segundos después escucho algo emerger frente a ella.

Frente a ella había una mujer con largas garras, la intensa sed de sangre la intimidó, pero no retrocedió, estaba  en su límite, pero aún podía crear un poco más de gas.

Sin embargo, la mujer se dio la vuelta y corrió hacia la pelipurpura, quien presa del miedo no se podía mover.

- Muere perra - dijo antes antes de lanzar sus cuchillas hacia el rostro de la chica.

El tiempo se había detenido, o al menos así parecía a los ojos de Momo Yaoyorozu, quien a la corta edad de 15 años iba a precenciar un asesinato.

Pero entonces, un destello verde paso a gran velocidad a lado de ella; segundo después la mujer "voló"  y se estrello contra una pared convirtiéndolo en escombros.

Frente a ella había un peliverde con un traje de heroe; su cuerpo se veía bastante tonificado, además de que los pequeños rayos alrededor de él le daban un aura de grandeza. Incluso si tenía una máscara puesta, sería estúpido no saber quién era.

Quería correr y abrazarlo, y decirle cuánto lo había extrañado; sin embargo el cansancio no se lo permitió.

Y entonces, cuando por fin la máscara desapareció a través de nanomaquinas, vio algo que la dejo petrificada.

Desde su ceja derecha al pómulo, había una gran cicatriz, pero lo que más destacaba era que su ojo diestro ya no era verde, sinó más bien azul; un azul brillante.

Juntando todas sus fuerzas, se puso de pie, y comenzó a caminar con lágrimas en los ojos hacia el. Una mezcla de emociones la golpeó, pero la felicidad superaba en demasía a las demás.

Y entonces, el tiempo se detuvo nuevamente.

Izuku dio un cuarto de vuelta, mientras que la pelipurpura corría para abrazarlo.

Momo podía sentir la sed de sangre proveniente de sus ojos buscando enemigos.

Mientras el acariciaba su cabello, para  después bajar por su espalda y posteriormente volver a empezar, ella solo sollozaba mientras se aferraba al peliverde.

Cualquiera compararía la escena con un cuadro sacado de un manga shounen, dónde el protagonista llegaba a salvar en el último momento a la heroína principal; mientras qué ella miraba desde la distancia como la principal...

- Antagonista... - Murmuró Momo.

Y a decir verdad tenía sentido, ella sería la mejor amiga de la infancia del protagonista.

No, esa era la realidad.

Izuku le susurro algo y ella se separó casi al instante con un enorme rubor.

Un desagradable sentimiento se apoderó de ella, una inmensa necesidad de golpear a la pelipurpura recorrió su cuerpo desde las plantas de sus pies hasta sus puños, pero sus piernas no le respondían.

Y entonces, cuando sus ojos por fin se encontraron, la expresión del peliverde se distorsiono; rápidamente se acercó a ella y se puso a su altura; Momo ni siquiera se dio cuenta que había caído de rodillas nuevamente.

Puso su mano en la mejilla de la azabache para limpiar sus lágrimas - Estás... Bien...!? - la voz de Izuku se oía algo lejos, pero aún así podia entenderlo a la perfección.

- Sueltame - casi por inercia, la pelinegra aparto la mano del pecoso  de un golpe.

- Oye, que te pasa!?... El solo quiere ayudar - reclamo la pelipurpura.

- No, está bien - agrego Izuku - Puedes levantarte!? - pregunto con una clara preocupación.

El peliverde podía sentir claramente el odio venir de la dirección de Momo.

Ella trato de ponerse de pie, pero callo de rodillas casi al instante.

- Déjame ayudarte -

Izuku trato de ayudarla, pero Momo lo alejo de una cachetada - Dije que me sueltes - grito, estando a nada de romper en llanto.

- Esta bien, pero si necesitas... -

- Estoy bien, solo necesito un minuto para descansar - lo interrumpió de forma cortante.

Aunque en realidad no estaba segura si podría ponerse de pie en un minuto; el cansancio y el dolor le estaba pasando factura, y cada vez le costaba más mantener los ojos abiertos.

- Momo!!... - grito preocupado el pecoso cuando la azabache callo de espaldas.

Para este punto ya solo podía ver la silueta del peliverde, y su voz se oía bastante lejos, y, perdió la conciencia.













El canto de las aves la despertó, se sentía como nueva, llena de energía. Estaba en su habitacion, en pijama y con el cabello enredado, casi parecía como si su día anterior fuera un sueño, pero las curitas en su rostro y brazos lo contradecía.

Trato de levantarse pero la sábana opuso resistencia.

Justo al lado de ella, dormía sobre su propio antebrazo un peliverde, mientras aún permanecía sentado en una silla.

En ese instante, el pecoso alzó la vista en estado de alerta; tenía ojeras ligeramente visibles, una curita en su nariz y en su ceja había algunas puntadas, demás de que su brazo derecho estaba vendado y usaba un cabestrillo.

Izuku se lanzo a abrazarla, aún con su brazo lesionado - Momo... Que alivio - Murmuró.

Al principio ella también correspondió el abrazo con una sonrisa; pero entonces el recuerdo de Izuku abrazando a aquella chica de cabello morado llegó a su mente, e inmediatamente lo empujó.

- Sueltame... No te quiero ver... - grito enojada.

- Ugh - el pecoso gimió de dolor al ser empujado; esto preocupo a la azabache, pero al ver qué no paso a mayores, lo disimuló.

- P-Podemos hablar!?... - pregunto el pecoso.

P.O.V. Momo:

El está frente a mi... Por qué!?... Por qué ahora!?...

- Yo no quiero hablar contigo - Me mantuve firme, esta vez no pienso perdonarlo.

-

Está bien, entonces, solo escúchame - No... No pongas esa cara... Dios!!!...

- Está bien... Supongo... - Dije casi en susurro.

- Se que estás molesta, y lo siento mucho... Me lo merezco... - Así es idiota estoy muy molesta, así que más vale que lo compences... Aun que bueno, tal vez exagere un poco... Solo un poco.

- Yo... No tengo excusa, no quería decirte todo eso en el hospital... A pesar de que solo estabas preocupada por mi, te dije cosas horribles... Soy de lo peor - Oye oye, no estoy molesta por eso... aún que, que más da, creo que al fin se va a abrir a mi.

Creo que estoy poniendo una sonrisa estúpida.

- Yo, bueno, como decirlo!?... No lo sé, creo que todo esto pasó por qué no estoy acostumbrado a contar mis problemas... Bueno más bien, estoy acostumbrado a lidiar con mis problemas yo solo, y creo que por eso me comporte como un idiota - Dios!!... Se ve tan lindo cuando hace esa cara.

- Me perdonas!??... - Siiiii, por supuesto que sí... Espera, NO... Se más firme Momo.

- Quien era la chica del otro dia!?... La que te abrazo en UA. -

Esta pensativo... Cuantas chicas te abrazaron en UA idiota!?...

- Te refieres a Kyoka... Quiero decir, Jirou-san!?... - la acaba de llamar por su nombre!??... No, la llamó por su nombre.

- Ya veo, de dónde la conoces!?... - tranquilizate Momo, alcanza la iluminación.

- Bueno, es una larga historia... Un día yo canté en su lugar, y bueno, ella creyó que le iba a quitar su lugar, y me lanzo un vaso de agua encima, después de resolver el malentendido se disculpo conmigo y terminamos cantando juntos - Cantaron juntos!?... Nunca quisiste ir conmigo a un karaoke, además esa ni siquiera es una explicación buena, es muy vaga imbécil.

- Es todo, date por muerto - le lanze un puñetazo a la cara, pero el lo detuvo con su mano izquierda, esto solo me enfureció más.

Me lanze hacia él, pero cuando yo estaba en el aire, el ya se había movido a un lado, yo caí al piso.

- Puedo preguntar al menos el por qué estás tan molesta!?...  - Tu, en serio que eres sínico.

Le lancé una patada de hacha, pero la evadió con mucha facilidad; le lanze una finta hacia el rostro, pero no la esquivó, en cambio paro el rodillaso dirigido hacia su diafragma con la mano desnuda y esquivó un codazo. Aprovecho que su mano aún estaba en mi extremidad, y pasándola por detrás de la rodilla me quito mi punto de apoyo y me empujó.

Sabiendo que de cualquier forma iba a caer, lanze mi otro pie aún en el suelo hacia su rostro logrando una patada lateral, pero aún así... A mitad de camino soltó mi pierna derecha y salto hacia atrás, mientras que yo volví a caer al suelo.

Que es lo que está pasando aquí!?... El se mueve como si ya lo hubiera ensallado miles de veces, como si predijera todos mis movimientos.

Me volví a lanzar otra vez contra el, pero el se hecho a reír, y un segundo después me tropecé y caí al suelo.

Su ojo derecho brilla como un diamante, que es lo que está pasando aquí!?... será alguna clase de prótesis!?... Es obvio que perdió el ojo, pero... No!!... Eso no es lo importante...

El se acerca a mí y me extiende la mano - Hablemos, si!?... - ~Moooo~ tu y tu estúpida sonrisa...

- E-Está bien -

- Primero que nada, puedo saber por qué estás tan molesta!?... Tengo una idea pero quiero serciorarme - se puso serio

Es cierto, porque estoy tan molesta!?... El y yo solo somos amigos, pero...

- Me cambiaste... - no quiero verlo con otra - ... me cambiaste por ella - no quiero que le sonría a nadie más a parte de mi - ...y en solo unas semanas - no quiero que mire a nadie que no sea yo... Lo quiero solo para mí - Me hiciste a un lado... - es egoísta, lo se, pero es lo que quiero - ...y me dejaste sola -

El me abrazo nuevamente y yo no opuse resistencia, que patética soy, creo que estoy llorando de nuevo.

Sin embargo, se siente bien; la frustración está siendo remplazada por una sensación de revoloteo en mi estomago.

Mierda.

- Cambiarte!?... Yo jamas haria tal cosa - dijo mientras acariciaba mi cabello - deja de preocuparte, tu siempre serás mi mejor amiga, nadie te va a quitar ese lugar... -

Mejor amiga!?...

- ... lo recuerdas!? "Mejores amigos por siempre"... Lo prometimos cuando éramos niños... - mejores amigos!??... Por siempre!??... Solo eso!?...

Oh... Ya entiendo, perdió el interés.

Considere la posibilidad pero... Mierda como duele.

- Empecemos de nuevo, si!?... - No sonrías, por favor, voy a llorar...












































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