Isaac y Alberto caminaban tranquilamente hacia su destino en silencio absoluto asta que uno de ellos decide hablar.
— Oye is oí qué abra un nuevo empleado en el restaurante, ya y podríais ser amigos— dijo para así quedarse mirando asía su compañero de trabajo y amigo.

— ¿Lo dices enserió? — preguntó el rubio quien se encontraba un poco sorprendido.

— Si,me pidieron que lo entrevistara y creo que ambos serían muy buenos amigos.

—...No lose al..—el rubio pauso un momento antes de seguir hablando,para pesar en lo que diría— enserio crees que nos llevemos bien?.

— Pues claro que si!,Analizándolo a profundidad vi que le gustan casi las mimas cosas que a vos, enserio creo que se llevarán bien is— dijo con una característica sonrisa en el.

— Esta bien,si tú lo dices creo que enserio nos llevaremos bien..

— Cuando volvamos al trabajo te lo presentaré — dijo el de cabello castaño notablemente feliz.

Ambos al llegar ala parada, esperaron el autobús con algo de impaciencia, cuando llegó ambos subieron y se sentaron uno al lado de otro.

Unos minutos pasaron para llegar a su destino.

Usualmente llegaban ala casa de Alberto antes, comían, hablaban,etc, pero al este haberse mudado a un lugar un poco más lejos, la casa de Isaac era la más cercana.

Ambos bajaron del autobús y se dirigieron directo asia la entrada,
Isaac sacó sus llaves y abrió la puerta.

Los dos entraron y se sentaron en una pequeña mesa que adornaba la sala frente a frente, empezaron a hablar de cosas triviales, trabajo,escuela etc...

Isaac oyó un ruido proveniente de su habitación instintivamente miró hacia las escaleras las cuales se dirigían directo a su cuarto.

— ¿Que fue eso?— preguntó Alberto algo  Confundió.
—Iré a ver— dijo el rubio para levantarse de la silla eh ir directo a su cuarto.

Al entrar en el vio la pequeña caja de Jack en el suelo, la tomó y sintió algo detrás de él, volteo y se encontró con un Jack de colores apagados y mirada triste.
— Isaac por favor quédate—dijo tomando su mejilla.

El rubio suspiró para seguidamente extender sus brazos alrededor de el cuerpo de su amigo,después de unos minutos se separó de él, aunque el pelirrojo no quería soltarlo.

— Is ¿estas  bien?— pregunto Alberto desde abajo.

Jack sintió un escalofrío recorrer su espalda al oír esa vos.

— ¿Que hace el aquí?— pregunto algo molesto.

— Vinimos  a pasar el rato nada más..— dijo el rubio.

— is?—Pregunto Alberto mientras subía las escaleras.

— Jac— no pudo terminar pues  Alberto ya avía entrado.

El chico se quedó estático en su lugar al ver a su amigo con un payaso de colores apagados.

— is ¿quien es el?— pregunto aun sin poderse mover de su sitio.

— el es... Jack mi..¿primo? Eh si mi primo vino de visita jeje..—.

Alberto se acercó hacia pelirrojo y le extendió la mano.
— Hola! Soy Alberto amigo de is—dijo.

Jack solo se limitó a mirarlo sin emoción alguna al verlo y también lo dejo colgado.

Alberto bajo su mano  de inmediato y solo se le pudo quedar mirando, mientras un ambiente algo incómodo empezó a tornarse alrededor.

— Bueno chicos...em..¿quieren comer algo? — dijo cortando ese silencio incómodo.

—No—dijo Jack para irse del cuarto y dejar a Isaac con Alberto.

— is no es por ofenderte pero... tu primo es raro.. — dijo rascando su cuello.
Isaac solo se limitó a suspirar y formular un pequeño "lose"
Ambos bajaron y se sentaron el sillón no sin antes Alberto Haber sentido como Alguien lo asesinaba con la mirada.

— Al¿quieres ver una película?—pregunto sacando su celular para conectarlo a la televisión.

—No la verdad me tengo que ir...— dijo levantándose del sillón para seguidamente ir directo hacia la puerta.

Isaac oyó cómo la puerta era cerrada para de inmediato levantarse eh ir directo hacia Jack.
Una ves delante del susodicho sólo pudo mirarlo y formular una pregunta.
—¿Por que lo odias tanto?— pregunto,

— Estás con el..casi todo el tiempo todos los días..ya apenas hablamos... es que extraño tu compañía..— dijo bajando un poco la mirada.

—Pues estás de suerte... tengo el día libre— dijo sin ánimo alguno.

Jack no sabía que decir por un lado están muy feliz y por el otro no sabía que decir ni que hacer.
Había esperado este momento  por años
Pero nunca pensó en que podrían hacer

Continuará...