Esa noche, Minho se masturbó otra vez pensando en su mejor amigo, sintiendo mucha culpa, pero no volvió a llorar. No sabía qué era peor, masturbarse o hacerlo mientras pensaba en Jisung. Todo se había vuelto demasiado confuso para él, pero no podía evitarlo, ¿eso lo hacía lo gay? Ojalá que no, porque no era gay, no podía ser gay

Pero, ¿realmente eso era tan malo?

No dudes ahora, se dijo a sí mismo. Se despojó de su ropa y se metió a bañar, otra vez con la esperanza de borrar lo que había hecho, como si eso fuera a funcionar, pero solo quería mantener latente esa posibilidad.

Regresó a su cama de nuevo ya con su ropa de dormir puesta, pensando en cómo haría para ver a Ryujin a la cara después de su confesión, estaba seguro de que muchos iban a hacer preguntas y sería muy vergonzoso que todos supieran que fue porque la engañó. Despejó su mente lo más que pudo y se permitió dormir las horas de sueño que le quedaban antes de que la alarma sonara.

A la mañana siguiente, se levantó con cansancio, deseando poder dormir un poco más para no hacerle frente a la realidad que inevitable lo golpeaba. Se miró en el espejo del baño, analizándose con detenimiento, él no era un mal chico, siempre fue obediente, con buenas calificaciones y respetuoso, es cierto que a veces ocultaba cosas y que lo que hacía con su cuerpo no era algo bien visto por su religión, es más, lo repudiaban, pero seguía siendo él mismo, justo como Jisung le había dicho, porque después de besarlo, no había cambiado en su forma de ser, seguía siendo Lee Minho.

Quería cambiar, quería hacer por una vez lo que él quisiera, la sensación de actuar como un adolescente de su edad era llamativa. No era revelarse del todo, pero estaba seguro de que no quería pasar el resto de su vida manteniendo una imagen, fingiendo ser feliz con eso.

Luego de arreglarse, bajó al comedor como siempre, encontrándose a su familia en sus mismos roles, no le gustaba que su madre fuera la única que hiciera todo en la casa, ¿era eso ser mal hijo? Y si era así, que lo perdone Dios entonces, porque ayudar a su madre no le parecía malo en lo absoluto.

Se acercó a la cocina y se dispuso a servir los platos de comida, ignorando la mirada sorpresiva de su madre.

ㅡMinho, ven a sentarte, tu madre se encargará de esoㅡhabló el señor Lee, pero el castaño hizo caso omiso, siguiendo en lo suyoㅡMinho, acabo de decirte algo.

ㅡHijo, hazle caso a tu padreㅡdijo su madre con voz suave.

ㅡNo veo por qué mamá tenga que encargarse siempre de todoㅡrespondió sin mirarlos, terminando de llenar los platos de comidaㅡTodos podemos ayudar.

ㅡ¿Acabas de responderme?

Minho se encogió de hombros, ignorándolo. Agarró los platos y empezó a posicionarlos sobre la mesa, dejando que su madre tomara asiento en su silla.

El señor Lee no apartó la vista de su hijo menor, molesto por haber pasado de él.

El desayuno fue en completo silencio, y al terminar, recogió los platos de la mesa y los puso en la cocina. Su madre seguía sin decir nada al respecto, atónita.

Minho estaba decidido a cambiar, empezando por cosas pequeñas que no le parecían justas, veía como su madre siempre se encargaba de todo, desde la comida, la limpieza, las compras hasta de lavar la ropa de todos, y no precisamente en lavadora.

ㅡVamos, iré a dejarlosㅡhabló el señor Lee con su expresión seria.

Soobin tomó sus cosas al igual que Minho luego de cepillarse los dientes, la señora Lee no los iba a acompañar esa vez, así que se quedó ordenando todo.

ㅡNo vuelvas a desobedecerㅡordenó el señor Lee sin mirar al castaño mientras manejabaㅡDebes saber tu rol en la familia y no es el de hacer limpieza, eso déjaselo a tu madre.

ㅡNoㅡrespondió seguroㅡLo haré cuando quiera porque solo estaba ayudándola, no veo lo malo en eso.

El señor Lee apretó con fuerza el volante sin saber por qué de repente, Minho estaba desafiándolo.

El resto del camino fue en silencio hasta que llegaron a la escuela, se despidió con respeto de su hermano y su padre antes de bajar, dirigiéndose hacia la entrada principal llena de estudiantes que también acababan de llegar.

Se percató de que el auto estuviera lo suficientemente lejos para sacar su celular y mandarle un mensaje a Jeongin, sabía que era el único en llegar temprano.

Si preguntan por mí, di que estoy enfermo.

Guardó su celular y a paso rápido se dirigió a la parada de buses en dirección a la escuela de Jisung. Estaba nervioso, nunca se había escapado ni había faltado a clases por cuenta propia, pero al mismo tiempo, se sentía emocionado.

Solo una vez quería sentirse libre.

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Jisung llegó por fin a su escuela arrastrando los pies con demasiada pereza y desánimo. Esa mañana, su madre lo regañó por no desayunar, ¿desde cuándo le importaba eso? Bufó molesto, mientras seguía caminando con la mirada gacha, pensando en que ya quería regresar a su hogar y perder el tiempo en su soledad, eso le gustaba.

ㅡHey.

Jisung levantó la mirada al casi chocar con alguien frente a él, y enorme fue su sorpresa al encontrarse con Minho. Lo miró unos segundos antes de reaccionar y sonreírle.

ㅡMinho, ¿qué haces aquí?ㅡmiró a su alrededor, verificando si sus padres estaban cerca, porque si así era, Minho estaría en problemas.

ㅡTranquilo, vine soloㅡle sonrió de esa manera tan única, sintiendo que ya estaba a sus pies solo con esoㅡMe escapé de la escuelaㅡrascó su nuca con nerviosismo, siendo tan diferente para él decir eso en voz alta, sonaba incluso más emocionante.

ㅡ¿Que hiciste qué?ㅡrió, viéndolo con sorpresaㅡ¿Y si tus padres se enteran? Van a matarte y a mi también. Tú no haces estas cosas.

ㅡLo sé, van a castigarmeㅡse encogió de hombros mientras reíaㅡNo sabía a donde ir así que vine aquí, tuve suerte de encontrarte antes de que entraras.

ㅡMuy bien, vamos entoncesㅡasintió, tomando la muñeca del castaño.

ㅡ¿A dónde vamos? Tienes clases.

ㅡTambién voy a escaparmeㅡcaminaron en dirección opuesta a la entrada de la escuela, algunos los miraban con curiosidad, en especial a Minho que llevaba el uniforme de esa prestigiosa escuela religiosa.

Minho sonrió emocionado, dejándose guiar por el más bajo sin despegar la mirada de él.

Jisung le escribió rápidamente a Hyunjin que no llegaría para que no lo esperaran. Caminaron hacia el centro comercial más cercano, se detuvieron en la entrada y miró el reloj en su muñeca, aún era muy temprano.

ㅡAún hay tiempo para que te arrepientas y vayas a la escuelaㅡdijo el peliazul, soltando su muñeca con suavidad.

Minho negó con la cabeza, estaba decidido a hacer algo diferente, aunque no fuera algo muy extremo, pero con algo se empieza.

ㅡ¿Qué pasó con mi mejor amigo super obediente que no rompe las reglas?

ㅡSe aburrió.

Se sonrieron con complicidad y entraron al enorme centro comercial, planeando una manera de perder el tiempo hasta que tuvieran que regresar a sus casas.

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ㅡ¿Han visto a Jisung?ㅡpreguntó, Chan cuando se acercó a la mesa en donde Félix platicaba cómodamente con Hyunjin.

ㅡDijo que no vendría hoy a clasesㅡrespondió el más alto, obteniendo un asentimiento por parte del peliblanco.

ㅡ¿Puedo hacerles una pregunta?

ㅡClaroㅡFélix lo miró con interés, apartando la vista de Hyunjin para prestarle atención a Chan.

ㅡ¿Desde cuándo Minho y Jisung son amigos?

La pregunta los desconcertó, pero recordaron los eventos del día anterior sin saber muy bien qué había pasado para que Chan tuviera que irse.

ㅡDesde que están pequeños, ¿por qué?ㅡrespondió el rubio.

ㅡ¿Saben si Minho está enamorado de Jisung o algo así?

Ambos se echaron a reír, Minho era la última persona que se enamoraría de Jisung, sabían que el único con sentimientos era su amigo y nunca sería diferente porque a Minho no le gustaban los chicos, según sabían, era imposible.

ㅡMinho es heterosexualㅡaclaró Hyunjin, terminando su juguito de caja, dejándola vacía en la mesa.

Chan soltó una risa corta, para él no parecía serlo.

ㅡEse chico estuvo un rato espiándonos a Jisung y a mí en la habitación, no parecía que fuera muy heterosexual, saben.

ㅡEspera, ¿hicieron algo?ㅡFélix se mostró asombrado, al final, su amigo si lo logró.

ㅡSu supuesta salida a la tienda fue obviaㅡrió.

ㅡ¿En serio Minho los estaba espiando?ㅡretomó el tema, Hyunjin.

Chan asintió lentamente, notándolos demasiado distantes. Por un momento pensó que no debió decirlo.

ㅡ¿Y qué pasó?ㅡel rubio estaba demasiado curioso ante el tema, Jisung no pudo decirle nada debido a que Minho estaba ahí.

ㅡPues, hizo ruido, los descubrimos y dijo que acababa de subir.

ㅡAh sí, ellos hacen eso de verse a escondidas porque la familia de Minho no deja que se acerque a él.

ㅡ¿Por qué?

ㅡPorque Jisung es gay, y la familia de Minho es homofóbica, pero a un nivel muy extremo. Son demasiado religiosos y según ellos, Jisung es el diablo queriendo tentar a su obediente hijoㅡdijo Félix, riendo un poco.

ㅡPues... Creo que si lo hizoㅡHyunjin y Félix lo miraron con más interés sin saber a qué se referíaㅡCuando me acerqué a ver qué pasaba en el balcón, Minho estaba excitado y muy nervioso.

Félix abrió los ojos con mucha sorpresa, ¿Jisung sabía eso? Su amigo necesitaba saberlo, tal vez eso cambiaba algo en su relación, tal vez podría significar algo importante.

ㅡEso quiere decir que...

ㅡMinho se siente de cierta forma atraídoㅡaseguró Chan.

Tenía sentido, porque, ¿por qué un heterosexual con creencias religiosas muy implantadas se sentiría excitado al ver a dos hombres de esa manera? Imaginaba que ese tipo de personas sentían asco, no excitación.

El timbre sonó, dándole inicio a la jornada escolar. Hyunjin se fue a su respectivo salón, dejando con una sensación de confusión a Félix, decir algo como eso era también invadir la privacidad de Minho, no lo conocía, apenas habían cruzado palabras, pero de alguna manera, sentía que había algo más atrás de todo eso, porque si Minho juraba que era heterosexual, pero estuvo espiando a Jisung con Chan, definitivamente había algo que estaba escondiendo.

Y Jisung debía saberlo.

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Minho perdió la cuenta de cuántas veces había estallado en risas ese día, pasar tiempo con Jisung en un lugar que no fuera una de la casa de los dos, era realmente agradable. Habían visitado diferentes establecimientos de ropa únicamente para probársela y salir sin comprar, también pasaron por varias tiendas de música, simplemente viendo camisetas con estampados de algunas bandas y algunos artículos. Terminaron su recorrido luego de muchas horas caminando, haciéndose bromas y hablando de ellos.

Estaba muy feliz, escaparse había sido una gran decisión, no estaba pensando en las consecuencias si llegaba a ser descubierto, se había olvidado por completo de que eso no era de un chico obediente y disciplinado.

ㅡEstoy muy cansado, me duelen los piesㅡse quejó el peliazul después de tomar asiento en una banca del centro comercial, mordiendo el cono de su helado mientras balanceaba sus pies que no alcanzaban totalmente el suelo.

ㅡ¿Ya casi debemos regresar, cierto?

Jisung hizo un sonido de aprobación, limpiando sus labios con la servilleta. Minho asintió, deseando que el tiempo se detuviera para poder seguir en ese lugar, recibiendo el cálido viento mientras hablaba con su mejor amigo, pero no podía, la vida no tenía esos planes para él, algo tan sencillo como eso no lo podía obtener.

ㅡSung, ¿crees que me vería bien con el cabello teñido de rojo?ㅡpreguntó de repente, obteniendo rápidamente la atención del menor.

ㅡUh, ¿piensas hacerlo?

ㅡAlgún día, posiblemente.

ㅡ¡Te verías genial!ㅡexclamó, tocando los cabellos que caían en su frente, haciéndose una imagen mental de cómo se vería.

ㅡ¿Y si me hago una perforación en la oreja?

ㅡ¿Acaso quieres revelarte?ㅡenarcó una ceja, viéndolo divertidoㅡ¿Quién es este Minho? No me di cuenta de cuando lo cambiaronㅡambos rieron.

ㅡDecidí que estoy cansado de vivir de esta manera... ¿Eso me hace ser un mal chico?

ㅡEh, no, supongo que no, mientras no dañes a alguien más está bien.

ㅡGenialㅡsonrió, terminando su heladoㅡEntonces quiero perforaciones como las tuyasㅡseñaló, haciéndolo reír.

Jisung rebuscó algo entre sus cosas de manera repentina hasta que encontró el envoltorio de una goma de mascar entre el montón de basura en su mochila, prometiendo limpiarlo al llegar a casa; encontró lo que buscaba, esbozando una enorme sonrisa.

ㅡDame tu brazoㅡMinho hizo caso sin preguntar, extendiéndolo.

Jisung sintió la perfecta y suave piel de Minho bajo sus dedos, encantado con solo tocarlo de esa manera. Regresó su atención al envoltorio de la goma de mascar y con sus dedos quitó el papel, dejando un pequeño plástico blanco con un dibujo en él. Minho ladeó la cabeza un poco confundido, pero estaba tan concentrado en verlo que no cuestionó nada. Jisung puso el plástico sobre la piel del castaño y lamió uno de sus dedos para pasarlo sobre éste.

ㅡ¡Que asco!ㅡhizo una mueca de disgusto, pero no se apartó.

ㅡShh, no seas llorónㅡsiguió pasando su dedo por la zona hasta que el plástico se pegó.

Esperó unos cuantos segundos y lo retiró, dejando a la vista el dibujo de un planeta rodeado de pequeñas estrellas, algunas un poco más grandes, haciendo contraste con la piel blanca del castaño.

ㅡAhora tienes un tatuaje, eres todo un chico rebeldeㅡrió Jisung, metiendo a su mochila el pequeño plástico.

Minho miró el dibujo por un rato, sonriendo de manera tonta. Se acercó a Jisung y lo abrazó sorpresivamente, sintiéndose agradecido, porque sin él, no habría tenido un día tan divertido y agradable. Jisung rió, respondiendo al abrazo con mucho gusto, feliz con esas muestras de cariño que tan naturalmente salían de su mejor amigo. Apartó cualquier señal de tristeza ante el remarcado título de mejor amigo, porque solo eran eso y no pasaría de ahí, disfrutar de ese momento era más importante que sentirse mal porque las cosas no eran como deseaba que fueran.

ㅡVámonos yaㅡdijo Minho, apartándose del peliazulㅡDebo estar en casa a la hora de siempre.

ㅡEsperaㅡsostuvo su muñeca, deteniéndoloㅡ¿Qué es lo que querías decirme?

ㅡTe lo diré en la noche.

Jisung asintió sin preguntar nada más, caminando junto a Minho hacia su vecindario.

Ambos con una enorme sonrisa en sus rostros, aprovechando cada momento antes de regresar a sus aburridas rutinas.

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Minho escondió su brazo tras él tan pronto su madre lo recibió en la entrada, le sonrió dulcemente y le dio un corto abrazo. Frunció el ceño ante el gesto tan repentino, pero no iba a decir nada, prefería cuando su madre estaba de buenas. Subió las escaleras hasta su habitación, dejando sus cosas en la cama, quitó los primeros botones de su camisa de uniforme y desvió la mirada hacia su antebrazo, causando que sonriera automáticamente.

ㅡHijo, tienes visitasㅡapareció su madre, asustándolo. Nunca se acostumbraría a que entren de esa manera a su habitación, lo odiaba.

Asintió, a lo mejor era Ryujin de nuevo, y no tenía ganas de amargar su único día en paz.

ㅡ¡Minho!ㅡapareció Changbin, seguido de Jeongin y Seungmin.

ㅡ¿Qué hacen aquí? ¿Por qué mi mamá los dejó pasar?ㅡpreguntó con el ceño fruncido, su madre solo dejó que llegaran una vez y luego de eso le dijo que no los invitara de nuevo.

ㅡQue gran manera de saludarnosㅡreprochó Seungmin, admirando la gran habitación de su amigo.

ㅡInnie dijo que faltaste porque estabas enfermo, así que decidimos venir a ver cómo estabasㅡexplicó el más bajo.

ㅡ¿Le dijeron a mi madre que vinieron por eso?

Asintieron con obviedad, mirándose entre ellos un poco confundidos.

ㅡ¡Mierda!ㅡsoltó sin pensarlo, revolviendo su cabello con desesperación e ignorando la palabrota que acababa de soltarㅡNo debieron decir nadaㅡsí, estaba asustado, ahora su madre sabía que se había escapado y estaba seguro que cuando sus amigos se fueran, sería fuertemente regañado.

ㅡ¿Qué pasa?ㅡpreguntó el menor de todos, sorprendido por la reacción del castaño.

ㅡNo estoy enfermo... Yo simplemente no entré a la escuelaㅡconfesó en voz baja, percatándose de que su madre no estuviera cercaㅡSalí con Jisung.

ㅡAh, ahora entiendoㅡrió ChangbinㅡPor eso traes eso en el brazo y dices palabrotas.

ㅡSe te está pegando lo ordinario, Minhoㅡcomentó Seungmin, viéndolo con seriedadㅡEse no eres túㅡsuspiró, acercándose a élㅡPor eso preguntaste lo de teñirse el cabello ¿cierto?

ㅡ¿Acaso conocen a Jisung para que digan eso?ㅡlos miró también con seriedad, molesto por sus comentarios.

ㅡSiempre hablas de él, sabemos que no se respeta a sí mismo, mucho menos a los otrosㅡhabló Jeongin, encogiéndose de hombros, no necesitaban verlo para saber cómo eraㅡAdemás él es...ㅡse detuvo, notando la seria expresión en su amigo, sintiendo que ya no debía seguir.

ㅡ¿Es qué, Innie? Dilo.

ㅡEs gay, Minho, ya lo hemos hablado antesㅡse cruzó de brazos ante la posición que estaba tomando al respecto.

ㅡEstá bienㅡasintió, no iba a discutirlo más, pero en su expresión se notaba la molestia y ellos lo sabíanㅡNo voy a discutir eso con ustedes porque claramente no se puede.

ㅡBien, ya silencio todos, no vinimos a eso ¿recuerdan?ㅡinterrumpió Changbin ante el tenso ambiente que se había creado.

ㅡSi, pero ya vimos que Minho es mentiroso.

ㅡSeungmin ya cállateㅡMinho se puso a la defensiva, también estaba harto de sus amigos, ¿por qué les costaba ponerse de su lado una vez en la vida? Si eran sus amigos, ¿por qué parecía que siempre estaban en su contra?ㅡUstedes no saben absolutamente nada, quieren vivir en su estúpida y aburrida rutina porque para ustedes es más fácil solo escuchar como hablan de los demás en lugar de dejarlos vivirㅡsilencio, nadie dijo nada ante el repentino comentario.

ㅡMe largo de aquíㅡel menor tomó sus cosas y salió de la habitación, negándose a seguir escuchándolo.

Todos estaban en silencio. Jeongin no quería hacer enojar a Minho, nunca lo había visto de esa manera y no le gustaba. Se sintió culpable por su comentario, debía entender que ese tal Jisung era importante para su amigo, ¿quién era él para criticar eso? Le habían enseñado que cada quién era responsable de sus acciones, no tenía por qué interferir. Suspiró, dándose cuenta de su error, había actuado mal.

ㅡLamento lo que dije sobre él, no es de mi incumbencia, solo ten cuidado, ¿si?

La expresión de Minho se suavizó y asintió, recibiendo una tímida sonrisa por parte del menor.

ㅡIré tras Seungmin, debe calmarse, ¿vienes Changbin o te quedas?

ㅡVoy contigoㅡse levantó de la cama, agarrando su mochila y acomodándola en su hombroㅡMin, nos vemos mañana, ¡no vuelvas a faltar!ㅡlo regañó y rió, saliendo y dejándolo con una terrible amargura.

Cuando escuchó la puerta principal cerrarse sintió una sensación de vacío en su estómago que reemplazó rápidamente al enojo, estaba asustado de lo que su madre podría decirle o hacerle. Toda la casa quedó en silencio, escuchándose únicamente el sonido del grifo cerrarse en la cocina. Caminó de un lado a otro, buscando una manera de huir, pero ya no podía, solo debía enfrentarlo y antes de que se diera cuenta, ya todo habrá pasado.

El sonido de las pisadas de los zapatos de su madre en las escaleras causó que se tensara, quedándose quieto en el medio de la habitación, simplemente a la espera. Quiso llorar, odiaba sentirse tan asustado, pensó en que tal vez, solo tal vez no sería tan grave, de todas formas, nadie lo había visto, su madre nunca sabría que salió con Jisung, jamás tenía que saberlo.

ㅡAhora me dirás por qué mentiste y no fuiste a la escuela, Lee Minhoㅡdijo su madre con seriedad y sin apartar la mirada, esa mirada llena de furia y frialdad que siempre le daba cuando sacaba una baja calificación y lo castigaba con cualquier objeto que encontraba cerca, marcando su piel para hacerlo entender.

Minho no supo responder, las lágrimas picando en sus ojos, el miedo apoderándose de él.

Debía ser fuerte, solo por esa vez en la que se permitió ser feliz.

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Si hay algún error de ortografía, lo siento :( a veces se me van palabras o hacen falta jsjsjsjs

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