ㅤ

ㅤ

  A C L A R A C I O N E S 

𖦹 Omegaverse au¡!

𖦹 YOONKOOK ; jk bttm/omega.

𖦹 Alteración de edades, tengan muy presente esto para que no se confundan. JungKook será mayor que YoonGi.

𖦹 Pequeño contenido adulto, daddy kink, cero drama, fluff, mucha cosa soft acá.

ㅤ

ㅤ

ㅤ

ㅤ

Comenzamos diciendo que probablemente aquella sea la relación más rara y, a la vez, fascinante que alguna vez podrás tener la fortuna de escuchar de su existencia en tu vida.

Aunque, pensándolo bien, quizá no sea tan rara... o al menos no para todos.

En la escuela no es mentira que uno de los profesores que con su sola presencia logra que todos —sin importar jerarquía— estén a sus pies, ha sido marcado hace poco; lo cual, a algunos les decepcionó porque tenían intenciones de acercarse al bello omega —teniendo en claro las muy bajas probabilidades de que le correspondiera—, y a otros simplemente les llenó de sorpresa, ya que todos saben que aquel omega llamado Jeon Jung Kook es bastante reservado y que no parecía tener mucho interés en una relación formal —ya que eso daba a entender cuando rechazaba a todo aquel que se le acercaba—.

Claramente, verlo con una marca es algo que nunca hubieran esperado ver en él; igual se pusieron a pensar, y deducieron que quizá fue por eso que siempre rechazaba a todo mundo, porque ya tenía un alfa desde hace tiempo que dentro de nada lo marcaría.

Eso sí, nadie sospecha de quién se trata aquel alfa que logró conquistar a uno de los omegas más hermosos que hay; tampoco están muy interesados en saberlo.

Pero si lo supieran, uff... otra historia sería.

—Bien, esto es todo por la clase de hoy, chicos —dice Jung Kook, dejando el libro a un lado para mirar a sus alumnos—. Recuerden que dentro de poco comenzará la semana de exámenes ordinarios, así que lo mejor será que comiencen a estudiar desde ahora.

—Sí, profesor Jeon —se escucho a coro.

La clase que imparte Jung Kook es, probablemente, la favorita de todos la que la toman. Jung Kook es uno de los profesores que, no saben como, hacen que te aprendas todo sí o sí, pero sin llegar a verse estricto, sino todo lo contrario; cada que a sus alumnos les preguntan por cómo es él, la mayoría de veces contestan con que es un amor de persona —lo cual es muy cierto—, y que es de esos profesores buena onda que te caen tan bien, que te entristece saber que pronto terminará el semestre y muy probablemente ya no lo veas en el próximo.

Luego de un par de despedidas, Jung Kook se decide por borrar lo poco que escribió en el pizarrón, viendo a sus alumnos salir del aula.

Al escuchar que la puerta es cerrada, puede deducir por mera costumbre que el salón ha sido desalojado por todos los alumnos, así que suelta un suspiro y comienza a mover su cuello, tratando de quitar la tensión de su cuerpo. Últimamente está más cansado de lo normal, y eso puede ser porque ya están a final de semestre, donde para todos hay el doble de trabajo; es lo mismo siempre, y siempre termina igual. Claramente no puede mostrar esa actitud de querer morirse a sus alumnos en ese momento, debe ser un ejemplo para que ellos estén relajados en los finales... pero igual es difícil mantener siempre su postura de buena gente con todos y no lucir cansado por las horas sin dormir que tiene.

Suelta un respingo cuando siente unos brazos envolver su delgada cintura y unas manos acariciar su abdomen luego de haber sacado su camisa fajada al pantalón, acariciando con la punta de unos delgados dedos su estómago que ya conoce bastante.

—¿Qué te he dicho sobre quedarte después de clases, eh? —No puede evitar espetar Jung Kook, evitando jadear cuando suaves y calientes besos le son depositados en la curvatura de su cuello, haciéndole delirar.

—No podía aguantar un sólo segundo más, amor —murmura entre besos, subiendo hasta llegar a la oreja del omega, donde besa el lóbulo, sus traviesos dedos aún causando pequeñas cosquillas en el estómago del omega, notando algo raro en el lugar, que decide ignorar por el momento—. Te pusiste justamente esta camisa rosada que, te he dicho un montón de veces antes, te queda espectacular; me eres irresistible así —muerde el lóbulo, escuchando el esplendido jadeo que Jung Kook se dignó en soltar—. De haber sido por mí, me hubiera importado poco que mis compañeros estuvieran viendo y me habría acercado a ti para besarte y quitarte con los dientes esta camisa —ahora, Jung Kook ríe.

—Me hubiera encantado ver eso, Yoonie —se da la vuelta, quedando frente a su alumno que lo mira con esos ojos lujuriosos, oscuros y hambrientos que tanto hacen mojar su ropa interior—. Me vestí así justamente porque sé que te encanta esta camisa.

—Es mi favorita —suve las manos por las costillas de Jung Kook, acariciando la extensión de arriba a abajo en repetidas ocasiones, haciendo que el omega sintiera un escalofrío recorrer toda su espina dorsal y que sus piernas comenzaran a temblar—. Pero no me gusta que me provoques de esta manera tan cruel; aún más sabiendo que estamos en la escuela. Creo que te mereces un castigo por ser así de malo conmigo —mantiene sus manos a los costados de sus axilas y con el pulgar comienza a recorrer su pecho hasta lograr encontrar los pezones del omega, acariciándolos en círculos, ocasionando que Jung Kook arqueé su espalda, lo que hace que Yoon Gi aproveche y bese su expuesto cuello—. Papi está molesto con su omega —susurra, pasando su lengua por la manzana de adán.

—Nos podemos meter en problemas si nos descubren —jadea, poniendo sus manos sobre los hombros del alfa, apretándolos cada que una corriente de placer amenaza su cuerpo de pies a cabeza.

—Oh, cariño, sabes muy bien que a mí me encanta jugar con fuego; es lo que más disfruto en esta vida —lo mira directo a los ojos, sintiéndose orgulloso de ver lo dilatados que están los del omega, claramente afectado por todo lo que ha hecho—. Eres tan hermoso que podría morir ante tanta belleza —besa su labio inferior, notando que está temblando—. La obra de arte más bella que puedo tener para toda mi vida.

Comienza a besar sus labios, donde los chasquidos se escuchan a la perfección por toda el aula por lo húmedos y lentos que son. Quería degustar esos carnosos labios que tanto ama lo mejor que puede, porque sabe que probablemente los vuelva a tener hasta la noche; no puede esperar tanto tiempo.

Por su parte, Jung Kook trata de seguir su ritmo, aunque tiene que esperar cuando Yoon Gi se despega por mucho tiempo para ladear la cabeza y volver a besarlo. Siente como la lengua del alfa se abre paso por su cavidad bucal, quien le da la bienvenida, por lo que su lengua comienza a hacer una danza erótica con la otra a un ritmo bastante relajado que hace a ambos disfrutar con locura.

—Aún sigo molesto, eh —advierte, metiendo una de sus manos en la parte trasera del pantalón de Jung Kook hasta tocar la suavidad de sus nalgas y lograr amasarlas tanto como la tela pegada se lo permite.

—Pa-papi... no podemos hacer esto aquí —aparta la mirada, tratando de contener las horrorosas ganas de gemir a los cuatro vientos.

—Lo dices como si esta fuera la primera vez que lo hacemos en el salón —de un movimiento rápido, acerca al omega, ocasionando que sus pelvis queden cerca, aprovechando eso para comenzar a moverse, frotando inevitablemente sus intimidades.

—Pero la última casi nos descubren... ah~ —maldice interiormente, ya que lo último que quiere es hacer un escándalo.

—Me aseguré de ponerle el pestillo a la puerta esta vez —Yoon Gi hace a ambos girar, hasta lograr poner al mayor sobre el escritorio, metiéndose entre el espacio que sus piernas han dejado.

—Podríamos esperar a estar en casa —muerde su labio cuando el alfa comienza a simular embestidas, Jung Kook delirando en placer aunque no haya contacto directo.

—Lo divertido de esto es pensar que tú eres mi profesor —le dice—. Ahora quiero hacer el amor con mi profesor.

—Estando en casa sigo siendo tu profesor...

—Pero ahí no tenemos la misma vibra de escuela —besa su cuello, escuchando los jadeos de Jung Kook cerca de su oído.

—Qué fantasioso —no puede evitar soltar, riendo un poco.

Yoon Gi quita los botones de la camisa de Jung Kook con algo de cuidado de no ser un bruto y terminar por romperlos, como antes ha pasado. Cuando los primeros tres dejan al descubierto el pecho del omega, aprovecha para apartar la tela de uno de los hombros, justo donde está aquella marca que hizo a toda la escuela colapsar.

—Creo que la marca ya necesita ser marcada nuevamente, cariño —comenta mientras la besa—. No quiero que piensen que es una marca por error, quiero que sepan que ya no tienen oportunidad contigo.

—La hiciste hace poco más de dos meses...

—Me gusta ser precavido —sin pensarlo mucho, vuelve a clavar sus dientes en la marca, haciendo a Jung Kook soltar un chillido de sorpresa y algo de dolor que puede soportar, ya que no se parece en nada a cuando hizo la marca.

Luego de unos segundos, quita sus dientes y lame la sangre que sale, sacando feromonas tranquilizantes para que el mayor sintiera menos dolor del que debe.

—Te ves tan hermoso con la marca —le sonríe—, y me hace sentir bien que la muestres con tanto orgullo y no la ocultes como otros lo hacen —Jung Kook igual le sonríe.

—No tendría porqué ocultar que ahora estoy con alguien de todas las formas posibles —hace un pequeño puchero—. Además, no quiero que papi se enoje conmigo por querer ocultarlo —el menor lo mira con algo de diversión, y no puede evitar gruñirle un poco, haciendo reír al omega.

El alfa se acerca lo suficiente hasta lograr que sus labios vuelvan a encontrarse, solo que esta vez de una forma más salvaje y rápida, haciendo que el lugar se llene de los chasquidos y jadeos placenteros que ambos sueltan.

Sólo que, antes de que llegaran a más, Jung Kook aparta rápidamente a Yoon Gi, empujándolo por los hombros, confundiendo al alfa.

—¿Ocurre algo? —Le pregunta el menor, preocupado.

—No, nada, sólo... —trata de tranquilizarse mientras respira con lentitud—, me dieron náuseas de repente. Perdón, pensé que vomitaría.

—¿Náuseas? ¿Vomitar? Eso no es normal.

—Tranquilo, siempre me pasa en los finales; es por el estrés.

—No puedo tranquilizarme, deberías ir al doctor; podría ser una infección en el estómago o algo —Jung Kook niega con la cabeza mientras acaricia los hombros de su amado.

—Descuida, no es nada malo —ve el reloj que está en lo más alto de la pared—. Deberías ir a almorzar, el receso casi termina; no es bueno malpasarse.

—Ni siquiera recordaba la hora del almuerzo —bufa—. Bien, iré a comer; pero no vamos a dejar esto así —Jung Kook le sonríe y besa la punta de su nariz.

—Por supuesto que no, pero ahora no es el momento. Tengo junta con los maestros al terminar las clases y no puedo llegar siendo un desastre —Yoon Gi asiente.

—Entonces, ¿eso significa que llegarás tarde a casa? —El omega le da un asentimiento de cabeza—. No me gusta cuando llegas más tarde que yo... pero creo que eso me dará tiempo de avanzar con mis tareas para después terminar con esto, ¿cierto? —Besa sus labios mientras el omega sonríe de forma coqueta.

—Sí, papi —le responde, ocasionando que Yoon Gi atacara sus labios nuevamente con fuerza, chupando y delineando con su lengua el inferior hasta hacer que ambos labios estén hermosamente hinchados y rojizos.

—Te veré después —da un casto beso y toma las mejillas de su omega, acariciando los pómulos con los pulgares—. Te amo, mucho; nunca lo olvides —Jung Kook vuelve a sonreír, aunque esta vez con ilusión y cariño, mientras su interior se volvía una maraña de sensaciones nerviosas, como si fuera la primera vez que se lo dice.

—Igual te amo. Además, no podría olvidarlo, me lo dices a diario.

—Me gusta recordártelo, para que sepas que no mentía cuando te dije que te amaré por siempre —besa su nariz ahora—. Creo que deberíamos casarnos lo antes posible, en verdad muero por verte vestido de novio...

—Y yo te he dicho que tenemos que esperar a que termines tus estudios; eso es lo principal ahora, amor —hace que sus narices se acaricien, haciendo un tierno beso de esquimal que derrite el corazón de Yoon Gi—. Ya vete, no querrás que tus amigos se preocupen por saber a donde te metiste.

—Tienes razón —se aleja—. Nos vemos después, profesor Jeon —hace una reverencia, Jung Kook ríe con diversión—. Qué tenga un excelente día.

ㅤ

ㅤ

ㅤ

ㅤ

Quizá algunos se preguntan, ¿cómo es que esta pareja se conoció? Pues aquí un resumen.

Y no, no se conocieron en la escuela como muchos pensarían si le llegasen a contar su relación.

Se conocieron en una fiesta, un mes y medio antes de que las clases comenzaran para el primer semestre de la universidad. Jung Kook quería comenzar con toda la actitud, así que la mejor idea que tuvo fue ir a una de esas locas reuniones que hacen las personas comúnmente en los bares de la ciudad.

Lo que nunca llegó a pensar, fue en enamorarse a primera vista de un hermoso alfa de cabellos rubios que bailaba junto a su grupo de amigos en el centro de la pista. Le fue muy obvio que ese chico rubio era más joven que él, se notaba tanto en comportamiento como en apariencia, pero no le importó mucho cuando chocó su hombro "accidentalmente" cuando se armó de valor para ir a bailar. Cuando sus miradas se juntaron lo supo, fue ahí cuando se dijo a sí mismo que el chico le gustaba; más aún por la forma en que se disculpó y como le invitó un trago como disculpa por haberse atravesado en su camino.

Lo confirmó cuando se atrevió a preguntarle si quería bailar un poco, Yoon Gi aceptando la propuesta, para que ambos estuvieran en medio de toda la gente bailando y disfrutando de la música que el DJ ponía. A pesar de que tenían que estar algo pegadas debido a la multitud que los empujaba al bailar, el alfa en ningún momento le faltó al respeto ni se atrevió a tocarlo por lo mismo, y cuando parecía haber un roce íntimo, por mínimo que fuera, Yoon Gi lo empujaba un poco o se movía rápido, y eso simplemente... lo enamoró, sabe que así lo hizo; el que no pareciera querer sobrepasarse con él tan rápido como otros alfas habían intentado fue lo que dijo que ese chico es definitivamente lo que estaba buscando.

Fue entonces cuando se atrevió a darle una oportunidad a eso del amor e intercambió números con Yoon Gi para seguir en contacto por si alguna vez alguno de los dos se animaba en invitar a salir al otro; cosa que pasó a la semana, cuando Jung Kook lo llamó para preguntarle si quería dar un paseo por el parque, a lo que el alfa de inmediato aceptó porque él también sabía que ya estaba entre las redes de aquel precioso omega de sonrisa radiante y ojitos de ciervo.

Quien diría que mes y medio después, cuando las clases comenzaron, se volverían a encontrar por casualidad, aunque no de una forma que esperaban.

El omega fue quien entró después al aula cuando el timbre hizo eco en toda la escuela, acaparando la atención de todos ahí, pero en especial la de Yoon Gi, quien se quedó más que sorprendido en su asiento mientras que Jung Kook se presentaba como el maestro de Física. El omega de igual manera se sorprendió cuando lo encontró en los últimos lugares de la quinta fila, tanto así que incluso dejó de hablar como por medio minuto; pero se recuperó y siguió la clase como si nada.

Hablaron después, y se rieron por lo sucedido, ya que decían que era gracioso que al final Jung Kook terminara siendo su maestro, bromeando entre ellos sobre esa situación. Hasta que Yoon Gi dijo:

—Espero que, lo que sea que tengamos, no cambie por esto —y Jung Kook supo a lo que se refería; en todos sus encuentros anteriores, ambos habían estado dando indicios de que se gustaban mutuamente, y que al final Yoon Gi terminara siendo su alumno podría traer algunas consecuencias a futuro, tanto para él como para el alfa que le gustaba.

—Igual lo espero —fue lo que respondió.

Y de ahí vinieron más y más citas, unas más formales y románticas que otras, aunque en la escuela debían fingir no ser tan cercanos por lo mismo de que podría meterlos en problemas. Justamente cuatro meses después, fue Yoon Gi quien se armó de valor para pedirle a Jung Kook formalmente que fuera su novio, a lo que el chico por supuesto respondió que sí, porque más enamorado de alguien nunca pudo haberlo estado; simplemente Yoon Gi es todo lo que pudo haber deseado en la vida para su tipo de pareja ideal.

Han pasado ya tres años desde eso, y siguen más enamorados incluso que antes; obviamente pasaron por varias cosas, entre ellas que alguna vez casi los descubren mientras se besaban pasionalmente en el salón de Jung Kook, pero han llevado todo bien y con calma. Y por tantos años juntos, fue el omega quien le pidió a Yoon Gi que lo marcara, porque lo ama con toda su alma y no puede imaginar estar sin él en el futuro, algo que el alfa también pensaba, por lo que cedió ante la idea, y entre la lujuria que los abrazaba en ese entonces, lo marcó, dando paso así a que ambos dieran un gran paso en su relación, uno mucho más grande que cuando decidieron mudarse juntos.

¿Quién hubiera dicho que el amor de sus vidas sería para uno su profesor y para el otro su alumno?

ㅤ

ㅤ

ㅤ

ㅤ

Las clases ya han terminado, así que Jung Kook se dirige a la sala de maestros donde se llevará a cabo la junta, contestando algunos mensajes que le llegaron esa mañana. Tan distraído está, que no notó cuando uno de sus compañeros de trabajo se colocó a su lado.

—Profesor Jeon, qué agradable encontrarlo —aquello ocasiona que el omega suelte un respingo ante lo repentino que fue, volviendo su mirada hacia su lado, donde se encuentra el profesor de Biología Celular.

—Oh, profesor Kim —hace una rápida reverencia—, lo mismo digo.

—Hace tiempo que no hablamos, ¿cómo va tu vida? —El alfa hace una de esas sonrisas amigables que a todos les encanta.

—Bien, bastante bien; aunque ahora estoy algo estresado al estar en el final del semestre, pero todo va de maravilla. ¿Y la suya?

—Ya veo que va de maravilla —comenta viendo la marca en su cuello—. Igual me va bien, aunque he estado algo decaído últimamente, pero todo irá bien, estoy seguro.

—¿Por qué decaído?

—Por algo sin importancia. El gran Kim Seok Jin logrará superarlo con el tiempo —Jung Kook asiente—. ¿Te parece si nos sentamos juntos en la reunión? Usualmente siempre me toca a lado de la señora Yung, pero se duerme muy rápido, supongo que por la edad, y no me gusta escuchar sus ronquidos porque no me deja concentrarme en la reunión; ¿puedo? —El omega ríe.

—¡Claro! No veo porque no. Además, no me gusta sentarme junto al profesor Choi... siento que me mira de una forma no muy agradable, y me incomoda —hace una mueca.

—Oh, entiendo. Con mucha más razón me sentaré a tu lado —pasa su brazo por los hombros de Jung Kook—. No permitiré que te sientes junto a alguien que te incomoda, y si gustas, igual podemos reportarlo.

—No, no; estoy bien así por el momento. Si veo que en un futuro se sobrepasa conmigo, yo...

Ni siquiera puede acabar de hablar cuando Seok Jin es jalado repentinamente de su lado, asustándolo un poco.

—¿Qué...?

—¡Profesor Kim, qué bueno que lo veo! Justo lo estaba buscando, tengo un par de preguntas que hacerle sobre la tarea que dejó —aquel que lo había apartado bruscamente de su lado es su tan amado novio, Yoon Gi.

—¿Justo ahora, Min? Voy directo a una reunión, y estaba hablando con el profesor Jeon sobre...

—La reunión puede esperar unos minutos, en serio es algo urgente —habla entre dientes mientras lo mira con algo de molestia y amenaza, inflando un poco su pecho para mostrarse dominante—. No será por mucho tiempo, lo juro —sin poder evitarlo, aprieta su agarre en el brazo del mayor, haciendo que este se queje por el dolor.

—¡Está bien! Iré, pero suéltame que estás lastimándome —Yoon Gi, al reaccionar, suelta su brazo, mostrando ahora una sonrisa de agradecimiento.

—Podemos ir a la cafetería para que me explique lo de las células —le dice, Seok Jin asintiendo mientras comienza a caminar a su lado.

El alfa menor regresa su mirada al omega que se quedó parado en estado de confusión por lo que acaba de ver, y lo nota también por cómo lo mira. Se limita a dedicarle una mirada algo inexpresiva, para luego volver al maestro que lo acompaña.

ㅤ

ㅤ

ㅤ

ㅤ

El omega entra con un rostro casado a casa, lanzando sus zapatos tan lejos como su patada logró, sintiéndolos punzar. Suelta un suspiro mientras se recarga en la puerta por unos segundos, para luego comenzar a caminar hacia el interior de su hogar, viendo a su novio sentado en el sofá de la sala con la computadora portátil en su regazo.

—He llegado —anuncia, mientras toma asiento a lado del alfa, dándole un beso rápido en la mejilla.

—Lo he notado —dice, mientras sigue escribiendo en la laptop—. Tardaste más de lo normal.

—Estábamos resolviendo unos asuntos, quizá por eso es que tardó un poco más la junta —no puede evitar masajear un poco sus pies, quejándose en bajo—. No aguanto los pies. Últimamente me han estado doliendo con cualquier calzado que utilice y ahora hasta hinchados están por tener que subir las escaleras para llegar aquí... ¿por qué no arreglan el maldito elevador? —Yoon Gi ríe.

Hay un par de segundos en silencio, mientras que Jung Kook piensa en si preguntarle a su novio sobre el comportamiento que tuvo hace un par de horas o mejor dejarlo pasar como si nada.

—Amor —llama, el alfa sólo hace un pequeño sonido con la boca para indicarle que tiene parte de su atención mientras sigue con su ensayo—, quiero hablar contigo sobre lo que pasó hace rato... con Seok Jin —de tan solo escuchar el nombre, Yoon Gi deja de escribir y cambia un poco su rostro, al mismo indescifrable de hace unas horas—. ¿Qué fue lo que ocurrió?

El alfa piensa bien sus palabras ya que, la verdad, no sabe que responder ante la pregunta.

—Te seré sincero, ni siquiera yo sé qué ocurrió exactamente —suspira—. Solamente te vi con él, y en un inicio lo tomé con calma porque es muy normal que hables con otros maestros, pero cuando te abrazó... no fui yo quien se puso en modo alerta, sino mi lobo. Tomó total control sobre mí que hizo que interfiriera entre ustedes de esa manera tan brusca.

—Pero tú no eres así...

—Lo sé, sabes que no soy celoso ni posesivo a ese extremo, porque antes he visto que otros alfas igual te abracen y nunca lo vi mal, ni tampoco mi lobo... pero ahora no sé qué pasó que fue justamente él quien se salió de control —hace una mueca—. Tendré que hablar con él. Perdón por hacer eso, cariño; te prometo que no volverá a pasar —pasa su brazo por sobre sus hombros para atraerlo y darle un piquito en los labios que logra sonrojar un poco a Jung Kook.

—Disculpa aceptada —le muestra una sonrisa.

—Ahora, tengo que terminar este ensayo para tener el fin de semana libre, ya sabes... así tenemos más tiempo juntos —el omega muestra un rostro coqueto.

—Me parece excelente —la da un rápido beso en los labios—. Mientras iré a ducharme.

Se levanta del sofá y antes de que pudiera dar un paso, suelta un ligero respingo al sentir la nalgada que Yoon Gi le acaba de dar.

—Ni creas que se me ha olvidado lo que dejamos pendiente en el salón, profesor Jeon —le dice—. Acabaré lo antes posible para que podamos terminar al fin eso —Jung Kook ríe.

—Pero ya no tendré esta camisa...

—Puedes lavarla y ponerla en la secadora —el omega vuelve a reír mientras rueda los ojos.

—Ya me voy, mejor.

Luego de la ducha, y de cambiarse a algo que se pareciera a la camisa porque no quería ir a la lavandería en ese momento, sale de la habitación para estar otra vez con su novio; lo único parecido a la camisa que encontró entre su ropa fue un crop top de mangas largas rosado que solamente había utilizado una vez para San Valentín en un conjunto que compró con Yoon Gi, y de ahí nunca salió más de su armario, hasta el día de hoy. Lo ve bastante conveniente si es que su alfa quiere que utilice algo provocador.

—¿Aún no terminas? —Se queja Jung Kook, sentándose al lado del más joven y poniendo su cabeza recargada en el hombro del alfa.

—Estoy en la conclusión, ya casi —con una de sus manos acaricia su cabello, despeinándolo más de lo que ya estaba.

—Pensé que terminarías en lo que yo buscaba qué ponerme —hace un pequeño puchero, sintiendo algo feo en su pecho, como si estuviese a punto de llorar por una cosa tan mínima como esa, cosa que el alfa logra notar.

Yoon Gi ríe y pasa un brazo al rededor de la cintura de su novio, pegándolo otro poco a él y acariciando su abdomen, sintiendo la misma cosa extraña de hace un par de horas, que de nuevo decide ignorar olímpicamente.

—Y eso que soy yo quien más tiene ganas de hacerlo —comenta juguetón, Jung Kook solo se queja con un gruñido adorable—. Te ves precioso en rosa, amor —no puede evitar halagar, besando con dulzura su sien—. En realidad, te ves hermoso con cualquier color, pero el rosa, no lo sé... hace resaltar algo en ti que me encanta tanto; deberías comprar más ropa de ese color.

—Casi no me gusta...

—Pero te queda divino, y este crop top, uff... en serio quieres provocarme, dulzura —suspira algo decaído—. Primero debo terminar esto y después te arrancaré la ropa con los dientes.

—Eso no suena mal —sonríe, de esa forma tan bella que a Yoon Gi enamoró la primera vez que la vio—. Ugh, mira eso —suelta, mientras toca su cara, mirándose a lo lejos en el espejo de cuerpo completo que hay en la sala—, estoy demasiado hinchado... no hubiera comido tanto ramen ayer de haber sabido que quedaría así.

—A mí me gusta, te ves tierno, muy bonito —pellizca su mejilla.

—Supongo que tienes razón... ¿quedó ramen de ayer?

—Te estás quejando que estás hinchado por comer ramen y ¿quieres comer más? —Jung Kook se encoge de hombros.

—Estoy con muchos antojos últimamente, y con mucha hambre también... quizá mi celo ya está cerca, siempre me pongo así en mi celo, y ya estamos por esas fechas.

—Maravilloso... —dice, con algo de lujuria—. Creo que quedó un paquete, pero puedo ir a comprar más si quieres.

—Sólo quiero un poco, no quiero quedar más hinchado —se levanta y va directo a la cocina.

Después de hacer el paquete de ramen que hay, sale de la cocina con un tazón en mano para volver al lado de su novio, esperando que este ya haya terminado con su trabajo.

—Jung Kook, quédate quieto —el omega al escuchar eso hace caso, pensando que algo malo está ocurriendo como para que se lo diga en ese tono.

Es inspeccionado de pies a cabeza con una mirada calculadora y preocupada, para terminar siendo una sorprendida.

—Amor, ¿no crees que estás engordando un poco? —Debido al crop top, le es más fácil apreciar el estómago de Jung Kook, y desde la mañana que tiene dudas con él; al tocarlo, no sintió los abs marcados de su novio como antes, es más, casi ni se sentían. Ahora tiene algo de sentido, ni si quiera se ven como antes.

—¿De qué hablas?

—No lo tomes a mal, sabes que yo te seguiré amando estando gordito o no porque la apariencia es lo de menos, pero es algo... preocupante; más aún por la forma que está tomando tu estómago —Jung Kook frunce el ceño y se dirige al espejo que tienen en la sala, viendo su estómago que, efectivamente, está muy diferente a como usualmente es.

—Ni si quiera me había percatado del cambio, pero no he modificado mis hábitos alimenticios ni nada. He estado comiendo igual, e incluso menos por el trabajo que a veces tengo a montones y... —siente unos inmensos mareos de nuevo, iguales a los de la mañana, incluso peores.

Deja el tazón en el mueble más cercano y va corriendo directo al baño, hincándose frente a la taza del baño, vomitando después. Yoon Gi igual corrió detrás de él, pues siente que ahora es el más preocupado de los dos ante lo que puede ser que tenga Jung Kook.

—Debemos ir al doctor —dice el alfa, pero el mayor inmediatamente niega.

—Está bien así, me tomaré unas pastillas y...

—Jung Kook —toma su brazo, mirándolo con advertencia—, cariño, mi vida, mi cielo, amor mío... no creo que sea correcto que te automediques.

—Pero la última vez que vomité lo hice y me sentí excelente después.

—¿Me estás diciendo que antes ya habías vomitado? —Jung Kook baja la mirada, sintiéndose regañado de repente.

—Puede que sí... hace poco más de un mes... dos veces el mismo día —dice mientras juega con sus dedos, nervioso.

—¿Y por qué no me dijiste nada?

—No quería preocuparte, suficiente tienes con la escuela como para preocuparte por mí también.

—Mi amor, quiero que te pongas a pensar un poco las cosas —toma sus manos, logrando que el omega levante la mirada para conectarla con la suya, tal como lo quería—. En la mañana me dijiste que te dieron náuseas; hoy vomitaste al igual que hace un mes; tus pies y cara están hinchados, y no necesariamente por el ramen o por tus zapatos; has estado muy cansado, más de lo normal; te pusiste algo sentimental cuando viste que no terminé la tarea cuando tú no tienes tantas ganas de hacerlo; y, lo más notorio, tu estómago está creciendo.

Jung Kook tiene que procesar todo lo que le dice, poniendo una cara angustiada cuando lo entiende.

—¿T-tú crees que...? —El menor asiente—. Pe-pero... siempre hemos utilizado condón, es imposible.

—Bueno... cuando te puse la marca no estábamos utilizando condón, y no tomaste la pastilla tampoco...

—No, no, no... esto no puede ser... simplemente no lo creo... —pone las manos sobre su rostro, descubriendolo después con una sonrisa pequeña en sus labios—. ¿Estoy embarazado?

El alfa igual sonríe de solo escucharlo.

—Es lo más probable, dulzura —Jung Kook chilla de emoción con imaginarlo, pequeñas lágrimas juntándose en sus fanales.

—Pe-pero... se supone que tengo problemas con ello... los doctores con los que fui me dijeron que sería difícil para mí tener cachorros —Yoon Gi toma su rostro.

—Sin embargo, lo lograste, cariño. En verdad creo que estás embarazado, y eso igual explicaría mi comportamiento de cuando estabas con Seok Jin. Tal vez mi lobo ya sabe de tu embarazo al estar conectado con tu lobo, y por eso se puso a la defensiva cuando otro alfa estaba al rededor tuyo. Tiene mucho sentido.

El omega ríe, sin poder creer aún que muy probablemente un bebé está formándose en su vientre. Las lágrimas se resbalan por sus mejillas.

—Espera... ¿cuantos años tienes?

—Cumplí veinticinco el mes pasado —Jung Kook hace una mueca.

—Aún eres bastante joven...

—Y aún con eso, créeme, estoy muy emocionado —besa la punta de su nariz, mostrándole una gran sonrisa después—. Me hace el doble de feliz saber que tú eres quien me hará papá.

—¿No te será un problema con...?

—Claro que no, amor. Yo en verdad quiero a ese bebé, aunque haya llegado de repente, créeme que lo quiero mucho, tanto como a ti —Jung Kook le sonríe.

—Será raro, ¿sabes? Saber que estoy embarazado de un alumno, y también para ti que embarazaste a un maestro —Yoon Gi ríe.

—No me molesta eso, ya de por sí me era raro saber que mi profesor de Física es mi novio, y que lo marqué.

—¿Y tampoco crees que alguien comience a sospechar?

—No hay que preocuparnos por eso ahora, de todas maneras ya me falta poco para graduarme, así que no creo que alguien lo sepa hasta que ya no vaya en la escuela.

—Supongo que tienes razón —lo abraza con fuerza del torso y le muestra una sonrisa grande que logra ocultar sus preciosos ojos—. ¡Seremos papás! —Se mueve con emoción, por lo que Yoon Gi ríe con ternura y lo abraza también.

—Aún no lo sabemos con exactitud, pero sí es lo más probable —suspira—. En serio que te amo tanto; cada día me haces más feliz —Jung Kook siente sus mejillas calientes—. Pero no creas que por eso te has salvado —como puede, pasa uno de sus brazos por debajo de las piernas de su omega, sacándole un chillido de sorpresa cuando es cargado al estilo nupcial—. Aún debemos terminar lo que dejamos pendiente hace rato.

—Pero, amor...

—Así son las cosas, precioso —el omega ríe con timidez, sintiendo ahora su pecho caliente, pasando los brazos por encima de los hombros de su alfa para afianzarse a él—. Ten cuidado con la cabeza, pequeño —le dice al estómago poco formado de Jung Kook, ganándose un golpe en el pecho de éste, por lo que sólo ríe y se va a la habitación con su amado en brazos.

ㅤ

ㅤ

ㅤ

ㅤ

¡Gracias a las personas que llegaron hasta acá! Espero les haya gustado, y perdón por los posibles errores que tenga, aún medio editado puede haber uno que otro.

Los amito mucho, cuídense, coman bien y tomen agüita. ^^ ♡♡♡