Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

𝓟𝓲𝓬𝓸.

De vuelta en casa, se deja caer en el viejo sofá de cuero desgastado frente a su televisor. Esta cansado, apenas y ha alcanzado a echarse algo de agua con la manguera del jardín.

Parece ser un día ajetreado para ambos.

Cabecea, pero no es momento de descansar. Enciende el televisor con el viejo control remoto y busca el canal de noticias. Cuando lo encuentra, sube el volumen lo más que puede soportar.

No pasan mucho, se habla de algunos asaltos menores en la ciudad. Y luego lo que ha estado pasando todo este tiempo, hablando sobre los vanos intentos de comunicación con el exterior para negociar una convivencia mutua, entre estas criaturas y humanos.

Y como siempre, no se llega a nada.

Observa al rey y la reina siendo escoltados por algunos policías, escabulléndose de los pocos periodistas allí presentes. No hay señal de su hijo, el príncipe.

Prince.

No pudo hacerle frente a su rechazo otra vez, a pesar de que ya lo había pasado por alrededor de cinco veces. No quería mirarlo a los ojos y encontrar culpabilidad, no podía.

Como no había nada más que ver, apago el aparato y se dio la vuelta, dándole el rostro al respaldar del mueble.

El sueño se le ha ido, lo agobia la pena.

Su móvil vibra en su bolsillo, así que perezosamente lo toma y desbloquea. Algunas notificaciones de sus poquísimas redes sociales. Y mensajes.

No muchos, el problema es que casi todos son de una persona. Los otros tres le pertenecen a una compañía de pizza que le ofrece increíbles descuentos por cierre total.

Abre el chat, entrecierra los ojos para leer mejor.

¨Pico¨.

¨Lo siento tanto, Pico¨

¨Sé que la vida aquí es dura y buscas consuelo entre mis brazos. Sé que has sufrido mucho y que soy yo quien te da paz. Sé que sabes que te quiero y estimo, como a todos mis amigos, pero en eso queda. En amigos. No planeo ser cruel, no quiero ser cruel pero la verdad es esa. Sería una salvajada aceptar tu propuesta a ciegas y fingir que te amo. No mereces eso, Pico querido. Te lo he dicho muchas veces, mereces a alguien que te amé completa y exclusivamente. Y ese no soy yo, a mi pesar ¡A mi gran pesar!¨.

¨Eres un chico asombroso, maravilloso y de buen corazón. Si tuviera la obligación de salir con alguien, tú serias el primero de la inexistente lista¨.

¨Pero, entiéndelo. El sentimiento no está allí¨.

¨¡No quiere decir que no me agrades o haya algo malo en ti! Tú eres un ...¨

No quiso leer más, no podía leer más. No solo por el dolor que cada palabra provocaba en su ser, sino también por las lágrimas que se acumulaban en sus ojos.

Lo quería tanto, y sin embargo el otro no sentía lo mismo. No solo lo mismo, no sentía nada por él. Amigos y solo eso, nunca, ni por casualidad, escaparía un ¨Te amo¨ dirigido a él de sus labios.

Apago el móvil y lo dejo caer de sus helados dedos al suelo. Había varios mensajes más, pero probablemente era solo cháchara sobre lo asombroso que es y lo mucho que siente no amarlo. No necesitaba leer eso, no necesitaba su compasión.

Necesitaba su amor.

A menos de un mes para morir ¿Y ni siquiera podía regalarle un beso? Malvado, asesino, insensible, cruel. Tirano, dictador totalitario, intento de príncipe encantador.

No, no, no. No podía pensar así de él por más que le doliera. Se avergonzaba de siquiera formularlo en su cabeza. Lo amaba con pasión y con tanta fuerza, y a pesar de que odiaba a muerte todas esas palabras tenía que quererlas por pertenecerle a él.

Prince no era nada de esas cosas. Era perfecto, el ser más perfecto de toda esa asquerosa ciudad. Incluso del mundo de los humanos. Ninguno se comparaba a su belleza y sus dones. Nadie hablaba con más gentileza que él, nadie tenía unos ojos más sensibles que los de él; nadie tenía el porte señorial y noble que se cargaba él, ni siquiera los reyes de verdad.

Y siempre lo había tratado con gentileza y dulzura, a pesar de conocer a que se dedicaba. Nunca se creía por encima de su persona aun siendo claramente mucho mejor que él. Lo tomaba de las manos y cada gesto suyo era sumamente encantador.

No podía creer que aun con todas esas cosas se negaba a salir con él a un mes de su perdición. La de todos. Sabía que decía que no sería real, pero por lo menos la ilusión le duraría unos días. Un último beso antes de perecer, solo eso quería.

Débilmente, pateo el móvil y este se alejó patinando por la alfombra. En vez de pensar en Prince y lo horrible que era por no amarlo, prefirió pensar en lo de hoy ¿Qué avances ha hecho en su búsqueda? No muchos, en realidad. Es bonito para pasear, pero no hay salida alguna al mundo humano por la derecha. La izquierda y sus infinitos túneles oscuros de nada seguían siendo la mejor opción.

También pensó en el otro chico. El que él creía que era insultantemente guapo e interesante. Interesante porque nunca había visto a un humano volverse rosa, no sabía que podían hacerlo.

Hoy había visto mucho más de cerca su cara, como se curveaba hacia abajo de una manera tan linda. Ni tan larga ni tan corta, perfecta. Sus ojos de un azul intenso, como dos zafiros brillantes. Y su cabello, tan suave y de un color tan peculiar. Su expresión de desesperación total era sumamente risible para cualquiera que conociera su carácter, pero no para él. No le gusto, lo asusto.

No quería que un chico tan lindo, etéreo y bello como él sufriera.

Sus parpados empezaron a ceder, dejando como último recuerdo del día al chico rubio fresa con ojos azules en lugar del naranja de intensos ojos negros. Un cambio ¿Para bien? 

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro

Tags: #picopai