Todo iba normal en la familia Lee-Han, Minho y Jisung trabajaban, Jeongin se quedaba a cuidado de sus abuelos o tíos. El embarazo de Jisung de igual forma iba muy bien, pequeños y comunes antojos, por ejemplo: Camarones con queso, helado de chocolate con Doritos, etc. Si, todo normal.

El dia de hoy, Jisung tuvo el día libre, por lo que se quedó en casa junto a su pequeño, quien al paso de los días comenzaba a ser más inquieto. Subía y bajaba del sofá como loco, hablaba mucho, aún sin poder pronunciar demasiadas palabras, hacia el intento y en ocasiones sus padres se cansaban de escucharlo. Agradecían que a Jeongin no le gustaba hacer berrinches, era un niño realmente tierno y educado, pero gustaba de mantenerse ocupado, ya sea jugando con sus juguetes o "hablando" con su familia.

En fin, Jisung comenzaba a tener antojo de pastel, pero no cualquier pastel, si no, uno hecho totalmente por el mismo. El pastel de tres leches sería bueno.

-Innie, amor- llamó el mayor a su pequeño que se encontraba recostado en el sofá jugando con su avioncito- ¿Te gustaría ayudarme a hornear un pastel?

-Di- el pequeño bajó con cuidado del sofá y se acercó a su padre que ya había entrado a la cocina- ¡Patel!

Han río por lo tierno que era su hijo. Comenzó a sacar los ingredientes necesarios y comenzó a preparar su tan ansiado pastel, con pequeñas ayudas de su pequeño pastelero, Jeongin.

[...]

Minho llegó a casa después de un agotador día de trabajo, al abrir la puerta principal le llegó un delicioso aroma a pastel, por lo que se apresuró a llegar a la cocina.

Al entrar por la puerta de la cocina, pudo ver una tierna escena de su novio e hijo, cubiertos de betún por todo el rostro y un poco del cabello, ambos miraron en su dirección con una tierna sonrisa. Lo que hacía aún más tierna la escena el ya notable, pero pequeño vientre de su pareja, al ya tener cuatro meses su pancita comenzaba a notarse cada vez más.

-¿Comieron pastel y no me invitaron?- Minho se llevó una mano al pecho y la otra a su frente, para expresar un poco de dramatismo.

-¡Hoo!- saludó el embarazado- Ven, si te guardamos. Innie no dejó de insistir en guardarte un poco.

El pequeño asintió enérgicamente, acercándose a su padre más alto y extendiendo los brazos hacia arriba para ser cargado y poder sentarse en sus piernas.

-Muchas gracias, peque- el mayor revolvió levemente los cabellos de su pequeño- Seguro que si no insistías no quedaría pastel para mi, tu papi se lo habría terminado todo- lo último lo susurro cerca del oído de su hijo para no ser escuchado por Jisung.

-Te escuché- el menor dio un leve golpe en el hombro al mayor mientras se limpiaba el betún de su rostro y procedió a limpiar el de su hijo.

Todos terminaron el pastel entre pequeñas platicas, sonrisas tiernas por cada acción que Jeongin hacía y con comentarios emocionados de parte de Minho, con respecto al embarazo, cosas sobre comprar más ropita de bebé con colores para ambos sexos, otra cuna, etc.

-Ed nino- Jeongin sin pensarlo, soltó aquellas palabras mientras jugaba con su conejito de peluche.

Los adultos no supieron a qué se refería, pero quisieron creer que se refería al "sexo" del peluche.