Después de un rato, Lisa se despidió de Jennie, sabía que Irene la estaría esperando a su casa furiosa, pues eran las 12:30 a.m. y era tiempo suficiente para sospechar de ella.

Llegó a su casa, estaba parada en la puerta, sus manos le sudaban, pues temía recibir una bofetada de su esposa.
Se limpió las palmas de sus manos con ayuda de su pantalón y por fin, abrió la puerta.

Caminó despacio, tratando de no hacer ruido, pero cuando llegó a la sala, Irene la estaba esperando con la bata de dormir.

- ¡Vaya!, Es algo tarde para que llegues ¿No crees cielo?- Dijo irónica.

- Irene, no quiero discutir, es tarde y estoy cansada por el trabajo- Mintió, la verdad estaba cansada por tener muchas sesiones de sexo con Jennie.

- ¿A sí?, Que extraño, llamé a la empresa para la que trabajas y me dijeron que saliste a los diez minutos de que entraste- Se levantó del sofá, se cruzó de brazos y se acercó a Lisa, quién comenzaba a sudar.

- Amm... Yo salí porque no recordaba que la sesión de fotos era en otro lugar- Rascó su nuca con nerviosismo.

- ¡Dime la verdad Panpriya!, ¡¿Me estás engañando?!- Tomó del cuello de la camisa a Lisa.

- ¡¿Qué?!, ¡No!- Lisa se sentía fatal al estarle mintiendo a su esposa en su propia cara.

- Bueno- Soltó a Lisa- Solo te recuerdo que tenemos un hijo Lalisa, quiero que crezca en un ambiente familiar, no dudaré en divorciarme de ti si me eres infiel, asegurándome de que a penas y puedas verlo. No me retes Manoban- Señaló con su dedo índice a la mencionada, quién tragó en seco al escucharla.

No quería perder a su hijo, en estos momentos le importaba muy poco Irene, ya no la amaba pero si estar casada con ella era la única opción de estar con su hijo Bambam, lo haría sin pensarlo dos veces.

Pero por otro lado estaba Jennie, esa mujer que la volvía loca con tan solo oler su perfume, que le provocaba una erección con tan solo verla, todo en ella era perfecto, su cuerpo, su cara, su voz, su tacto, todo, absolutamente todo en ella era arte.

No podía arriesgarse a perder a su hijo, tenía que alejarse de Jennie y poder tener una familia con Irene, pero eso no era lo que quería.
Tenía que sacrificar su felicidad, por Bambam, el era lo importante ahora.

                             *****

Ya era de día, Jennie despertó con el mejor humor del mundo, Jisoo ya estaba ahí a primera hora, preparando el desayuno para su mejor amiga, ya que estaba viviendo sola ahora, debido a su separación con Kai, la prensa ya comenzaba a decir cosas y mover las piezas del rompecabezas, devolviéndolas todas, los rumores se esparcieron por la fiesta de cumpleaños de Kai, desde ahí no se a parado de hablar.

Pero a Jennie no le importa lo que digan de ella ahora, su mente y su cuerpo se sienten relajados porque al fin está con Lisa, no sabe que tipo de relación tienen pero está conforme con ese "algo".

Llevaba puesta su pijama negra de seda, bajó las escaleras hasta llegar a la cocina, le dolía un poco la entrepierna, Lisa la había dejado algo adolorida pero valió la pena, al fin se sentía viva y llena de felicidad.

Cuando se adentró a la cocina, vio a una Jisoo contenta cocinado.

- Buenos días Jisoo Unnie- Saludó, captando su atención.

- Buen día Jendeuk- Volvió su vista al sartén mientras Jennie se sentaba en un banco de madera que acompañaba la barra de la cocina.

- Ayer vine a ver cómo estabas, por las cámaras de seguridad de tu oficina pude ver qué Kai... Trató de hacerte daño pero cuando llegué, escuché... Ruidos, así que no quise interrumpir- Las mejillas de Jisoo se sonrojaron un poco, Jennie solo soltó una risita.

- Te agradezco tu preocupación Chichu- Sonrió dejando ver sus dientes, en eso, Jisoo apaga el fuego y comienza a servir los huevos fritos en un plato.

- Y bien, ¿Que tal es Lisa en la cama?- Pregunta entregándole el plato con comida a Jennie, quién lo recibe gustosa.

- Gracias Jisoo Unnie- Agradece- Es realmente buenas, lo que siempre quise y soñé, ella lo hace- Lamió sus labios al recordar todo lo que hicieron.

- ¡Oh dios!- Jisoo tapó su boca.

- ¿Qué pasa?, ¡Me asustas!- Reclamó.

- ¡Estás enamorada!- Señaló a la menor con su dedo, haciendo que está haga una mueca.

- No lo sé Unnie, lo más seguro es que sí- Jennie bajó la cabeza, le pasó por la mente la esposa de Lisa y su pequeño hijo.

- ¿Porque esa cara Jendeuk?, ¡Deberías estar feliz!, Al fin te enamoraste de alguien atractivo y carismático, no como el idiota de Kai- Rodó los ojos al recordad a ese bastardo violador.

- No Jisoo, no lo entiendes, Lisa... Este casada y tiene un hijo- Dijo con su voz pequeña, le dolía el echo de que Lisa ya tuviera una familia.

- ¡¿Qué?!- La quijada de Jisoo casi se desencaja- ¡¿De dónde sacaste eso?!-

- La escuché hablar con su esposa Jisoo, ella le dijo que tienen un hijo, al parecer ella se fue por dos años ocultándole esto a Lisa- Explicó, tratando de recordar todo lo que oyó.

- ¡No lo puedo creer!- Pasó una mano por su cabello, devolviéndolo un poco.

- Lo sé, es una locura- Dije suspirando.

- Bueno, si la perra esa se fue con el hijo de Lisa, por algo debió volver, dudo que solo haya vuelto para que Lisa conozca a su hijo, conozco a la gente de este mundo, todos siempre buscan recompensas- Puso un dedo en su barbilla, pensando.

- ¿A qué te refieres Unnie?- Preguntó, comenzaba a interesarle el tema.

- Digo que si esa mujer regresó, regresó con un propósito, tal vez, solo tal vez, regresó para quitarle dinero a Lisa- Miró a Jennie cómplice.

- Tenemos que investigarla Jisoo- Entrecerró los ojos, mirando a su mejor amiga.

- ¡Hagámoslo!- Alzó un puño al aire.

Capitulo corto pero con mucho amor, los quiero:)