Veintisiete
SONRÍO levemente cuando siento unos labios sobre los míos y abro los ojos pudiendo ver finalmente a mi novio.
Tiro de su camiseta provocando que cayera a mi lado en la cama, me abrazo a su torso y vuelvo a cerrar los ojos.
No quiero salir de aquí -me quejo con un pequeño mohín- ni volver a discutir contigo, aunque no sea verdad
Lo sé -responde Stefan colocando la manta sobre mi y envolviéndome como un burrito- pero si Katherine cree que hemos discutido pensará que está ganando y no seguirá adelante con sus amenazas
Lo sé -repito mientras me hago la idea de que no podré volver a conciliar el sueño- pero sigue sin gustarme, ni que Caroline esté de su lado contándole todo lo que hago
Tranquila, todo va a salir bien -trata de calmarme dejando un pequeño beso en mi frente- vamos a tener que seguir con este engaño algún tiempo más. Pero así evitaremos que Katherine haga daño a nadie, y menos a ti
Qué tierno -respondo con diversión enlazando sus manos con las mías- nada de estas discusiones falsas va a intervenir en nuestra relación, ¿verdad? Que ella se crea todo esto, pero que solo sea mentira y nunca nos pase a nosotros de verdad
¿Qué te parece esto? -comienza Stefan mientras me sienta sobre sus piernas para ganar toda mi atención- hoy, cuando discutamos, si te digo: “ya no lo aguanto más, Riley" en realidad te estaré diciendo que te quiero
Pues yo te diré: “está bien, Stefan. Hemos terminado" estaré diciendo que yo también te quiero -finalizo dejando un beso más largo en sus labios-
OTRA maldita fiesta de los Fundadores y la historia.
Me encantan las distintas celebraciones del pueblo, pero tantas sobre lo mismo me parecían aburridas.
Al menos la comida estaba rica y la música alegraba la fiesta.
La risa de mi prima hace que vuelva a la realidad viéndola en el borde del arroyo y a Summer pidiéndole que saliera porque en algún momento se caería.
Dejo la caja, la cual se supone que debo llevar a una mesa aparentando que estoy ayudando en algo, y hago el amago de ir a buscarla pero alguien se adelanta.
Damon aparece a su lado y con una leve patada en el agua consigue mojar parte de sus pantalones.
Sabrina comienza a quejarse tratando de hacer lo mismo con él pero el vampiro la toma de la cintura y la saca de allí.
Casi todo el mundo les mira pero ellos están en su cuento de hadas.
Una sonrisa se plata en mi cara mientras ruedo los ojos.
Después éramos nosotros dos los clichés y no ellos.
Y ahora, de repente, se ha propuesto ser la madre del año, justo cuando más la intento evitar -nos explica Caroline caminando a mi lado por el lugar- ¿alguna de vosotras me está prestando atención?
Claro que si, Caroline, perdona, ¿y qué ha pasado? -sigue la conversación Elena agachándose para pintar la columna de madera-
Pues me he puesto borde. Siempre acabamos igual -admite la rubia pintando por la parte del medio- estás muy callada, Riley. ¿Cómo van las cosas entre tú y Stefan? ¿Alguna novedad?
No, desde aquella pelea en el Grill intenta apartarme de su lado -miento mientras me subo a una escalera para pintar la parte de arriba- supongo que tiene miedo a que Katherine me haga daño. No tengo idea de cómo hacerle cambiar de opinión
Katherine es peligrosa -me recuerda Elena ajena a todo mi plan- tal vez solo te quiera tanto que intente protegerte de ella. Me parece bonito que lo haga, interpone tu vida por su amor
Qué poética te has puesto -me burlo soltando una pequeña risa- pero sigue sin gustarme que se rinda. Creía que nosotros dos podríamos contra ella pero ya veo que no
TAl vez debería hablar con él -sugiero con inocencia como si verdaderamente necesitase sus opiniones y no fuera a hacerlo igualmente-
¿Segura? -me pregunta Sabrina dejando la caja llena de flores en el suelo-
No me parece buena idea -le da la razón Elena-
En algún momento tendré que hacerlo -me encojo de hombros caminando hacia él. Stefan sigue cortando tablas de madera aparentando que no le importaba nada en absoluto- ¿te sigue importando ella?
No empieces, por favor -pide el vampiro poniéndose en pie para verme-
¿Es que no quieres hablar del tema? -me cruzo de brazos aparentando molestia-
No, Riley, lo que no quiero hablar del tema aquí y ahora porque nos están escuchando -responde él repitiendo mi acción. Miro hacia el puente donde dejé a mis amigas y me encuentro a Sabrina y Elena junto a los dos vampiros. Cuando se dan cuenta de que les estamos mirando, se giran hacia otro lado aparentando que no son unos cotillas-
Está bien, ¿entonces cuando lo hablaremos? -continuo volviendo a mirarle. Él solo se encoje de hombros- Stefan, sé que estuviste enamorada de ella y que volviera te puede afectar, pero debes elegir. Ella viene de tu pasado y yo de tu futuro
Estoy cansado de discutir por esto. Ya no lo aguanto más, Riley -contesta Stefan. Evito sonreír al recordar lo que me dijo esta mañana y asiento con la cabeza con resentimiento-
Está bien, hemos terminado. Así no tendrás que aguantarlo más, Stefan -finalizo marchándome. Agacho la cabeza y paso cerca de mis amigos para darme más drama. Necesito mi Grammy-
COMO era de esperar, poco después mis amigas aparecieron para apoyarme.
¿Estás bien? -Caroline es la primera en hablar-
No, la verdad -respondo haciendo un gesto con el pelo que me dió más dramatismo. Gracias películas malas de romance no correspondido por eso-
Puede que sea lo mejor -continua la rubia mientras mi prima abraza mis hombros pero mirándome fijamente. Mierda, me conocía bastante-
No es lo mejor, Caroline. Está pasando por una ruptura porque hay una loca que intenta matarla -replica Elena a mi otro lado junto a la vampira-
Gracias por venir, chicas, necesitaba apoyo -agradezco con una leve sonrisa- sois las mejores amigas que alguien podría tener
No es verdad -confiesa Caroline- no soy para nada una buena amiga
¿Por qué dices eso? -le pregunta Sabrina frunciendo el ceño confusa-
¿Adónde va mi madre? -cambia de tema la rubia levantándose del suelo para llegar al encuentro de la nombrada. Las tres restantes nos miramos y vamos tras ella lo más rápido que podemos-
¿Qué pasa? -le pregunta Elena preocupada-
No lo sé -niega la rubia siguiendo con la mirada a su madre- preparan algo
¿Adónde vamos? -continua mi prima siguiendo a Caroline por el bosque- ¿qué está pasando?
Desde aquí puedo oír mejor -explica la vampira mirando a su alrededor- aquí pasa algo, chicas
¿El qué? -pregunto impaciente segundos después. Su cara detona preocupación absoluta-
Stefan y Damon -responde Caroline comenzando a irse. Corro detrás de ella olvidando el plan y la mentira. Si Stefan estaba en peligro, no iba a fingir no estar preocupada por él-
¿QUÉ pasa? ¿Por qué paramos? -pregunta Elena unos segundos después-
Han estado aquí -anuncia Caroline tratando de rastrearlos. En sus dedos aparece sangre recibida de una hija dejándome aún más preocupada-
¿Qué estáis haciendo aquí? -nos asusta la voz de un hombre. Al dar la vuelta, Mason Lockwood se encuentra allí-
¿Has visto a Stefan o Damon? -le pregunta mi prima-
Sí, los he visto -afirma el hombre lobo caminando hacia nosotras-
¿Y dónde están? -continuo el interrogatorio moviendo mi pierna con nerviosismo-
Vuestra amiga puede olfatearlos -apunta Mason mirando a la nombrada- ¿Sabe tu madre lo que eres? Me encantaría decírselo
Caroline, no hagas nada -le advierto cuando veo que el ojiazul captura a Elena entre sus brazos-
Puedo con él -afirma la rubia lanzándose hacia el hombre lobo. Mi prima y yo tomamos a nuestra amiga antes de que cayera al suelo y vemos a los dos seres sobrenaturales peleando. Finalmente gana Caroline por lo que seguimos la búsqueda de los dos Salvatore-
UNOS minutos más tarde encontramos su paradero.
Lo malo es que la madre de Caroline estaba allí y se daría cuenta de lo que es su hija.
Lo bueno es que podríamos salvar a los dos vampiros.
Sabéis perfectamente lo que hice, ¿verdad?
Sabrina y Elena no tardan en seguirme ya que escucho sus pasos bajando por las escaleras.
Mi prima le da un fuerte golpe al guardia que va por nosotras y seguimos corriendo hasta dar con Liz.
¿Qué estáis haciendo? -pregunta la rubia apuntándonos con la pistola-
No puede matarlos -le pido negando con la cabeza. Otro guardia nos empuja y acto seguido la puerta se cierra sola-
¿Quién está con vosotras? -pregunta Liz viendo la sombra. En unos pocos segundos Caroline mata a los dos guardias y finalmente vuelve a la normalidad asustando a su madre-
Hola, mamá -saluda Caroline con los ojos cristalizados ante su reacción. El silencio más incómodo que pude presenciar fue ese-
ME siento junto a Stefan ayudándolo a despertarse.
Sabrina hace lo mismo con su hermano pero este bebe sangre de uno de los agente para recomponerse.
Necesitas beber sangre de agente -le recuerda Damon arrastrándose frente a él-
Se me pasará, pero tardaré un poco más -niega Stefan mientras acariciaba su espalda dándole apoyo-
Damon tiene razón. Si hay un momento para saltarte la dieta... -añade Caroline sentada en la otra punta del lugar-
No quiere, dejadlo, ¿vale? -les interrumpo sonando lo más amable posible- si supera cazar, ya te hubiera traído algo
Nos acabamos de complicar la vida -anuncia el ojiazul levantándose con la ayuda de mi prima- y tú. ¿Qué voy a hacer contigo?
No sé lo puedes decir a nadie -le dice Elena. Liz solo mira hacia otro lado sin decir nada- tienes que hacerlo o morirás.
Pues que me maten, no puedo ver esto -replica ella mirando a Damon. Este se acerca a la madre de Caroline y la sujeta con fuerza-
No lo hagas -niega Sabrina apoyando una mano en su brazo mientras los restantes le dábamos la razón-
Calma. Aquí nadie va a matar a nadie -finaliza Damon volviendo a mirar a la rubia- eres mi amiga. Tenemos que limpiar esto
Vale, vosotros dos descansad un poco -les pido levantándome con cuidado de no tirar a mi novio- venga, manos a la obra. Rápido
Que mandona... -murmura Sabrina riendo levemente. Le doy una mala mirada por lo que levanta sus manos inocentes y ayudamos a limpiar el desastre-
SABRINA y yo, técnicamente ella solo mira mientras yo hago todo, preparamos la cena.
Creemos que volver un poco a la normalidad formará la calma.
Ignorando el hecho de que Liz está en la celda esperando a que le borremos lo que ha visto.
Ignorando que Caroline estaba dolida porque su madre no quería verla.
Ignorando muchas cosas, en resumen.
Deja los platos en la mesa, iré a buscar a los demás -anuncio dejando la cocina atrás. Camino entre los mil pasillo y habitaciones hasta encontrar a Stefan. Se encuentra junto a una nevera llena de bolsas de sangre- ¿qué haces, Stef?
Katherine ha tomado verbena a diario y ya conseguido hacerse inmune -explica él mirándome- yo podría hacerlo con la sangre. Podría aprender a controlarme
No quiero ser negativa, pero la última vez que tomaste sangre humana no salió muy bien -le recuerdo con una mueca caminando hacia él- ¿crees estar preparado para esto otra vez?
No lo sé, pero esta noche casi no muero porque estaba débil -responde Stefan apoyando su mano sobre la mía en su brazo- te dije que averiguaría como parar a Katherine, y esta es la forma. Y si no hacemos nada, ni podré protegerte
¿No prefieres hablarlo más tarde? -le pregunto recordando que no era el último vampiro en la casa-
Puede oírnos desde cualquier lugar en el que estemos -alza la voz él haciendo que me separe de nuevo- porque él bebé esto. Esto es lo único que puede ayudarme
Creo que deberías calmarte un poco -le advierto caminando hacia la salida- no me parece buena idea, pero si crees que esto ayudará en algo, haz lo que quieras. Tampoco es que suelas escucharme mucho
ELENA, Sabrina y Caroline están en el sillón del salón.
Esta última parece estar llorando por lo que me acerco a ellas y me siento a su lado.
¿Qué pasa? -le pregunto confusa buscando la respuesta en algunas de mis amigas. Ninguna parece saber algo-
Tengo miedo de volver a casa -confiesa la vampiro sollozando- Katherine estará allí esperando a que le cuente lo que ha pasado hoy. Me dijo que tenía que espiar e informarle de todo
Ya lo sabía -admito ganando miradas sorprendidas- y al principio estaba enfadada, pero luego comprendí que no es tu culpa. Consigue sacar todo lo malo de los demás. ¿A quien amenazó para que hicieras esto, Caroline?
A Matt -responde la rubia rompiendo a llorar de nuevo- amenazó a Matt. Y me da mucho miedo
Y debes temerla. Todos debemos -le dice Elena-
¿Por qué hace esto? ¿Qué es lo que quiere? -pregunta Caroline dejándose abrazar por mi prima-
Aún no lo sabemos. Pero mientras te quedes aquí con nosotras, no dejaremos que te pase nada -promete Sabrina. Intercambiamos miradas cómplices y las dos restantes las rodeamos en un abrazo-
CAROLINE y Elena han conseguido dormirse.
Cada una está en un sillón continuo al otro rodeaba de mantas y cojines para su mayor comodidad.
Damon aparece allí por lo que nos apartamos de la sala de estar para no molestar a la rubia.
Damon, ¿te importaría si nos quedamos esta noche? -le pregunto en voz baja jugando nerviosa con mis manos-
No sería la primera vez -me recuerda él sacándonos una pequeña sonrisa a ambas- y estaré encantado de dejarle mi cama a Sabrina
Idiota -se burla mi prima dándole un pequeño empujón. Sé que los dos se miran porque me observan a la vez-
Stefan no la ha tomado -me explica Damon dejándome confusa- aún no lo ha hecho. Pero sabes que en algún momento lo necesitará, sé que lo sabes
He sido una idiota -admito dejándome caer sobre mis propios brazos en la encimera- es su propia naturaleza, claramente en algún momento tendrá que aceptarla y acostumbrarse
¿Y a qué esperas? -pregunta Sabrina con diversión. Miro a ambos, les doy un corto abrazo a la vez y me marcho en busca de Stefan. Tenemos que hablar como dos personas maduras y arreglar los problemas en el momento en el que pasan-
SIENTO haberte hablado así, estaba negando algo que en mi interior ya sabía -comienzo apoyada en el marco de la puerta de su habitación- si crees que puedes controlarlo poco a poco, no dudes en que estaré allí para ayudarte en lo que necesites. Y aquello que dije no es verdad, haces lo que crees conveniente porque llevas más tiempo en esto de los vampiros que yo. Lo entiendo
Ven aquí -me pide en voz baja. Correteo por su cuarto hasta llegar a su lado en el sofá y sentarme con preocupación mirándolo como Bambi inocente- yo tampoco tuve que ponerme así contigo. Y si te escucho, siempre. Pero tienes razón, sé que algunas cosas se arreglan de una forma distinta a lo que tú crees pero aprenderás pronto
¿Quieres empezar a intentarlo? -ofrezco sacando la pequeña navaja con cuidado de mi bolsillo- si crees que vale la pena intentarlo, te ayudaré en lo que pueda. Si tú sufres haciendo esto, yo también debería. Estamos juntos en esto, Stef. Recuérdalo
Gracias -susurra tomando levemente mi mano y tomando la sangre del pequeño corte. Beso sus labios levemente viendo cómo sus ojos volvían a la normalidad y le abrazo con fuerza demostrando mi apoyo. No era una vampiro, como ya sabéis, pero haría todo lo que estuviera en mi mano para ayudarle-
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro