Tres
ME parece bien que salgas con él, Riley, solo deberías ir un poco más despacio -me pide Bonnie saliendo del coche-
Oye, vosotras me dijisteis que siguiera adelante con todo esto. Ahora no me puedes decir lo contrario -respondo colocándome la mochila y caminando con ellas por el campus- ¿y por qué ese cambio ahora?
Es una estupidez -niega ella-
Venga, suéltalo -le pide Sabrina intrigada-
Toqué a Stefan sin querer y tuve una sensación extraña -confiesa Bonnie frente a nosotras- muy extraña. No quiero que te pase nada, solo estoy preocupada
Tranquila, Bonnie, todavía no ha pasado mi prueba para ser el novio de mi pequeña -replica mi prima con diversión-
Si tanto os preocupa, ¿por qué no cenamos todos juntos? -nos sugiere Elena-
Es una muy buena idea -celebro con una sonrisa- esta noche en mi casa. Ya veréis lo bueno que es...
Hola, Riley -me interrumpe el protagonista de nuestra conversación- hola, chicas
Vamos a por Caroline -señala Bonnie volviendo a marcharse con las demás-
No les caigo muy bien -niega Stefan. Formo un mohín con tristeza y tomo una de sus manos-
Son mis amigas, aún no te conocen y piensan que podrías hacerme daño -enumero abrazándome a su brazo para seguir caminando por el césped- pero podrías conocerlas pronto si cenamos juntos. ¿Qué dices? Por favor
Está bien -acepta él con una media sonrisa-
Perfecto. Cenaremos en mi casa a las ocho. Verán que eres bueno para mí y dejarán de huir cada vez que te acercas -anuncio apoyando mi cabeza en su brazo con emoción. Mi mandíbula está apunto de desencajarse de mi boca cuando una pelota se dirige hacia nosotros pero Stefan es rápido y la toma entre sus brazos para luego volver a lanzársela a Tyler casi empujándolo- y encima un héroe. Te amaran
No ha sido para tanto -le resta importancia volviendo a caminar cuando el timbre sonó-
Claro que sí -contesto siguiéndole a paso rápido- podrías apuntarte al equipo. Te gusta, ¿no?
Me encanta -me da la razón parando frente a mi taquilla- pero en este caso creo que el fútbol pasa de mí. Ya has visto como Tyler quiso arrancarme la cabeza y Matt no parece muy feliz con mi presencia
Es porque no te conocen. Si dejaras a la gente conocerte, tendrías muchos amigos -le animo tomando un par de libros-
¿Tú cómo hiciste amigos? Prefieres quedarte en casa que ir a las fiestas o leer antes que tan siquiera salir -me recuerda Stefan abriendo la puerta de mi taquilla para verme mejor. Yo solo la cierro un poco más haciendo que tuviera que repetir el gesto- ¿qué ocultas, Riley?
El hecho de ser una total cliché -admito con diversión tirando de la manga de su chaqueta para mostrarle el interior de mi taquilla. Fotos y notas de mis amigas-
Eres adorable, no sé si te lo habían dicho antes -responde él pasando un mechón de pelo tras mi oreja. Dejo un rápido beso en sus labios y luego cierro la taquilla para irnos a clases rozando la impuntualidad-
HE oído que el equipo es muy malo y necesitan a alguien nuevo -sugiero en voz baja sentada cerca de él mientras el profesor Tanner seguía hablando- casualmente tú eres bueno en el deporte
Soy un solitario -niega de nuevo él-
Señorita Stevenfort, Pearl Harbor -pregunta el profesor interrumpiendo nuestra conversación-
El siete de diciembre de 1941 -contesta Stefan haciéndome sonreír levemente-
Gracias, señorita Stevenfort -responde el señor Tanner con ironía haciéndonos reír- la caída del muro de Berlín
1989. Soy bueno con las flechas -se excusa Stefan-
¿Sí? ¿Seguro? -le resta el profesor- con el año basta. Ley de Derechos Civiles
1964 -responde él con rapidez-
John F. Kennedy, su asesinato -continua el mayor-
En 1963 -contesta Sabrina ágilmente- no eres el único bueno con las fechas, Salvatore
Martin Luther King -pide el profesor Tanner-
1968 -se adelanta Stefan-
Lincoln -sigue el profesor caminando por la clase creando más tención-
Fue en el 1985 -responde esta vez mi prima-
¿Roe contra Wade? -pregunta el señor Tanner-
1973 -le dice Stefan siguiéndole con la mirada-
¿Brown contra Board? -continua con el cuestionario el profesor-
1954 -contestan los dos rivales a la vez ganándose una guerra de miradas-
Guerra de Corea -pide el profesor Tanner finalmente cerca de la mesa de ambos-
De 1950 a 1953 -explica Stefan ganándose una risa por parte del supuesto mayor-
Acabó en el 52 -celebra él volviendo a su escritorio-
En realidad fue en el 53 -le corrige Stefan confundido-
Fue en 1953 -le da la razón uno de nuestros compañeros de clase tras comprobarlo en el teléfono formando aplausos para el ganador-
Deberías de cerrar la boca antes de que te comas una mosca -me pide Elena con diversión elevando mi mentón para sellar mis labios haciéndome reír mientras recogemos las cosas a la vez que suena el timbre-
Ha sido una de las cosas más impresionantes que he visto en el instituto -celebro con emoción caminando entre la gente para llegar a Stefan- a parte de deportista y un cliché en secreto eres un cerebrito
Tu prima también ha estado bien -responde Stefan mientras esta se acercaba por mi lado. Chico inteligente-
Gracias, ya lo sé. Te dejé ganar solo porque veía a Riley mirándote con adoración -se burla Sabrina. Abro la boca ofendida y la sigo solo para molestarla un rato-
SE me olvidó deciros que esta noche venís a cenar a nuestra casa -anuncio dejando mi bolsa de deporte para luego estirar junto a ellas- he invitado a Stefan. Veréis que os lleváis muy bien
Está bien -acepta Bonnie tras rodar los ojos- ¿Habéis visto a Caroline? Le he puesto como cien mensajes
No, lo siento -niega Elena a su lado- y está bien, iré a la cena. Solo por ti
Gracias, recordad que estoy en este equipo de animadoras solo porque me volvieron loca en apuntarme -les recuerdo con una sonrisa inocente- Y seguiremos llamando a Caroline. Es raro que no haya aparecido
Creo que ya la he encontrado -señala Sabrina. Las tres nos giramos y vemos a la rubia en un coche junto a Damon-
Ese debe ser el tipo misterioso del Grill -comprende Bonnie con una mueca-
Ese es el tío guapo del que os hablaba. El hermano de Stefan -les explica mi prima con una mueca-
Me he llevado al otro hermano. Espero que no te importe -nos interrumpe Caroline para luego comenzar a liderar el entrenamiento de animadoras-
ESTO sigue sin ser lo mío -me quejo entre risas tras tropezar perdiendo el ritmo del baile-
¿Estás bien? -pregunta Sabrina ayudando a levantarme del suelo-
Un día más siendo torpe -le resto importancia con una sonrisa divertida pero haciendo una mueca al apoyar el pie-
Vamos, iremos a por hielo -señala Elena acompañándome a un banco. Se va durante unos minutos y luego vuelve con una bolsa que coloca en mi tobillo- si te consuela, a mi tampoco se me da bien esto
Las cosas que hacemos por nuestras amigas -me encojo de hombros sujetando el hielo-
Haré como que creo tu dolor y no es una excusa para ver a tu novio jugar a fútbol -me advierte ella con una sonrisa pícara-
No está en el... -comienzo con el ceño fruncido girándome para ver al equipo y efectivamente a Stefan allí- me ha hecho caso
Las cosas que hace por su novia -repite Elena pinchando mi pecho con uno de sus dedos ante mis mejillas sonrojadas- tengo que volver antes de que Caroline me tire un hechizo por no entrenar...
HA sido la caída más patética del mundo -recuerdo entre quejas mientras preparo la mesa para la cena-
Si te sirve de consuelo, no es la primera vez que todos te ven comerte el césped -señala Sabrina dejándome bastante ofendida y más avergonzada-
Me gustaría decir que no tiene razón, pero la tiene -afirma Summer removiendo la comida en el caldero- hubiera faltado que tu chico perfecto te recogiera en sus brazos épicamente y...
Baja al mundo real, mamá -se burla mi prima dejando un plato en el medio- eso solo pasa en las películas.
Sí, la próxima intentaré caer dramáticamente justo a su lado a ver su reacción -me uno a las burlas justo cuando suena el timbre-
Hola, niñas. Pasad, vamos, la cena estará enseguida -les invita la tía Summer con una encantadora sonrisa-
Hemos traído esto -anuncia Bonnie dejando un plato en la nevera-
Huele muy bien, Summer -añade Elena dejando su abrigo en el colgador para venir a saludarnos- se nota que no son ellas la que cocinas
¿Mi estofado de carne quemado y con trozos de algo sin identificar no estaba bueno? -pregunta Sabrina con sarcasmo haciéndonos reír al recordar aquel almuerzo-
El dolor de barriga después de eso fue lo peor -le recuerdo dejando las últimas cosas en la mesa cuando el timbre vuelve a sonar- ¡Ya voy yo! ¿Estoy bien?
Preciosa -responde la mayor de todos en la casa levantando los pulgares. Doy un par de saltos hacia la puerta hasta abrirla-
LA cena había ido mejor de lo esperado.
Tía Summer había entablado una conversación con Stefan para averiguar más sobre él pero sin llegar a agobiarlo.
También había descubierto que todo lo bueno que le habíamos contado sobre él era verdad.
Bonnie, Elena y Sabrina habían dejado su faceta de ir en su contra y se habían relajado hasta el punto de bromear.
Mi plan iba exactamente como debía hasta que el timbre volvió a sonar.
¿Esperas a alguien más? -me pregunta Summer confusa haciendo el amago de levantarse-
Ya voy -le resta importancia Sabrina yendo hacia la puerta. Voy detrás de ella con curiosidad viendo a dos conocidos frente a nosotros-
Sorpresa -saluda Caroline- Bonnie me dijo que ibais a cenar, así que traemos el postre
Espero que no os importe -añade Damon detrás de ella-
La verdad es que si así que... -comienza Sabrina. Yo solo abrazo sus hombros y tapo su boca sonriendo con amabilidad-
¿Qué haces aquí? -pregunta Stefan. Su tono señalaba que estaba de acuerdo con mi prima-
Espero a que me inviten a pasar -le explica Damon dando un par de pasos-
Claro, adelante, entra -sugiero haciendo un ademán con mi mano colocándome en un lado-
No, no puede -replica Stefan dejándome confundida- no puede quedarse. ¿Verdad, Damon? Ya estábamos terminando
No pasa nada -le resto importancia- podemos compartir el postre, entra
Tenéis una casa preciosa -nos dice Damon tras dar un par de pasos mirando esta-
¿Por qué no acompañas a Damon al salón? -sugiero en voz baja. Sin dejarle responder, le doy un pequeño empujón a Sabrina dejándome sola con Stefan- ¿Todo bien?
No tenías porque invitarle si no querías -me recuerda él con seriedad-
Solo quería ser amable -respondo dando un par de pasos para acariciar sus brazos cruzados tratando de sacarle una sonrisa-
Lo sé -suspira Stefan dejando un beso en mi frente ahora más calmado-
Par de tortolitos, ¿podéis venir de una vez? No soporto más a este tío -nos pide Sabrina en voz alta-
No seas maleducada -replica su madre. Los dos nos miramos con diversión y volvemos al comedor antes de que quisieran tirarse de los pelos o algo parecido-
NO me puedo creer que Tanner te aceptara en el equipo -le dice Caroline sentada en el sillón junto a Damon- Tyler debe de estar flipando. Pepe bien por ti. Me alegro
Es lo que le digo siempre. Tienes que integrarte -le dice su hermano- no esperar que la vida venga a ti. Tienes que ir tú a por ella
Sí, Riley es algo torpe y le cuesta seguir el ritmo pero soy una amiga genial y quiero que siga en el equipo -continua la rubia. Las cuatro nos miramos incrédulas ante lo dicho-
Creo que te acabas de pasar demasiado -le responde Sabrina sentada a mi lado de brazos cruzados- Riley se ha esforzado para entrar en el equipo y estar con nosotras. ¿Cuántos amigos de verdad tienes tú que hagas lo mismo por ti?
Está bien, chicas, dejen esto -les pido reteniendo las ganas de abrazar a mi prima por defenderme y la cara que había puesto Caroline-
UNO más -advierte Damon con un vaso en la mano. Está a punto de resbalar de las manos de mi prima pero es capaz de tomarlo antes-
Gracias, ya te puedes ir -le pide Sabrina dándome el vaso para lavarlo-
No seas así -respondo con un pequeño mohín- ¿has disfrutado de la cena, Damon?
Sí, gracias, eres muy amable. Ya entiendo que vio Stefan en ti -me explica él apoyándose en la mesa- le haces sonreír bastante, no es algo que todo el mundo consiga.
Cada uno tiene sus dones -se encoge de hombros Sabrina- el suyo es la amabilidad y el carisma
Supongo que el tuyo la ironía y la molestia -se burla Damon cruzándose de brazos-
Y el tuyo ser un capullo y arrogante -señala ella con diversión-
Eres peor que una niña pequeña -me quejo dándole un pequeño golpe con un paño de cocina haciéndola reír y escapando de mis brazos-
NO recordaba verme tan ridícula con esto -rompe a reír Sabrina caminando a mi lado por el césped del instituto- ¿y por qué tú te ves injusta y absolutamente bien?
Eso no es verdad. Tú también estás muy guapa -respondo apretando en lazo de su peinado-
¿En serio? -pregunta incrédula dejándome confundida. ¿Me he perdido algo de la conversación?- mira el número de la camisa de tu novio y ahora mira el tuyo
Es todo del destino, Sabrina Stevenfort -estiro mis brazos para hacerlo más teatral haciéndolo reír-
Venga, sé que te mueres de ganas por decírselo, ve -dice ella rodando los ojos. Beso su mejilla y corro hacia Stefan viéndolo con una media sonrisa en la cara-
Estás muy guapa, Riley -me halaga él tomando mi mano para darme una pequeña vuelta. Yo solo sonrío y le abrazo-
Buena suerte en el partido, aunque no creo que la necesites -respondo levantando la cabeza para verle pero sin soltarle-
Tengo algo para ti -añade Stefan tomando una pequeña caja y abriéndola mostrando un colgante-
Es precioso -murmuro tomándolo con cuidado-
Es algo que he guardado mucho tiempo y nunca había querido dárselo a nadie hasta ahora. Me gustaría mucho que te lo pusieras por mi. Da buena suerte -me explica él. Doy la vuelta, aparto el pelo de mi cuello y espero que me lo ponga. Luego vuelvo a girarme para besar sus labios lenta y delicadamente-
Gracias, Stefan. Sé que es muy especial para ti, lo cuidaré -añado sin evitar sonreír sobre sus labios-
DESPUÉS de un discurso por el entrenador Tanner, donde se la pasaba vitoreando a Stefan, el partido estaba apunto de comenzar pero se vio interrumpido por Tyler y Jeremy peleando.
El menor de los Gilbert se levantó en busca de más solo causando que una botella de cristal acabase golpeando la mano de Stefan.
Camino entre la gente junto a Elena y cada uno va en busca de los chicos.
¿Estás bien? -pregunto tratando de mirar la mano de Stefan-
No es nada. Ha fallado, no es mi sangre -le resta importancia abriendo la mano sin mostrar ni un solo rasguño-
Pero... -comienzo confusa tomando su mano sin encontrarle ningún tipo de sentido-
Estoy bien -repite Stefan- es hora de empezar, ¿vale? Deberíamos de irnos
Sí -afirmo asintiendo con la cabeza y yendo con las demás al estadio-
¿Y esa cara? -me pregunta Sabrina tras pasar su brazo por mis hombros- tu noviecito está bien, no te preocupes
Lo contrario, he visto como le hacían daño pero después no tenía ni una sola herida -replico sin salir de mi confusión- Bonnie...cuando nos dijiste que te daba mal rollo Stefan al tocarlo, ¿qué viste o sentiste?
No era claro como una imagen -niega ella parando de caminar- como hoy, sigo viendo esos números que os conté: el ocho, el catorce y el veintidós. Cuando le toqué fue como una sensación. Una vibración que pasó por mi, era frío. Como la muerte...
EL partido no resultó ser buena idea.
Un animal salió de mitad de la nada y atacó al entrenador teniendo que llamar a emergencias y cancelarlo.
Los demás comenzamos a irnos a nuestras casas.
Qué extraño ha sido. ¿Cómo pudo salir del bosque y atacar a alguien aquí? -pregunto colocándome mi chaqueta con ayuda de Stefan-
No lo sé -niega él acariciando una de mis mejillas- todo irá bien, ¿vale? Estamos bien. Eso es lo que importa
¿Puedes acompañarme a casa? -le pido tras abrazarnos por unos segundos- no quiero ir sola
Claro, vamos, te compraré algo de comer si quieres -ofrece enlazando nuestros brazos para comenzar a caminar-
Tengo hambre -me doy la razón soltando una pequeña risa-
¿Hamburguesas, perritos calientes, nuggets...? -enumera él mientras apoyo mi cabeza en su hombro-
¿Me odiarías si te digo que no me gustan los perritos calientes? -pregunto con diversión viendo una falsa ofendida en su cara-
Sí, que odio tan fuerte, no te quiero ni cerca mío -se burla Stefan apartándome delicadamente haciéndome reír- no te odiaría por nada que hicieras, Riley
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro