Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Setenta y cuatro


DAMON trataba de ayudar a su hermano a recordar todo.
Lo único que me había dicho, por mensaje, es que “lo tengo controlado".
Yo me paseaba de un lado a otro por la casa Salvatore preocupada hablando con mi prima.
No es que no me fíe de tu novio, pero necesito que me digas que no ha sido una locura dejarle ayudar a Stefan -le pido cayendo derrotada en el sillón-
Si fueras una extraña, no confiaría en él. Pero ya le conoces, Riley, a pesar de que lo intente negar, quiere mucho a su hermano -me recuerda la pelirroja al otro lado de la línea- tranquila, Elena, Caroline y yo hemos estado estudiando amnesia y todo lo que conlleva esta. Se pondrá bien
Más le vale, cuando ha dicho que no me recordaba fue como si pisoteara mi corazón, le vomitara encima y luego volviera a ponerlo en su lugar -confieso soltando un suspiro-
No seas tan pesimista. Anímate, nos veremos pronto -finaliza mi prima para luego colgar. ¿Cómo que “pronto"?-




TODO el mundo celebraba la fiesta de las campanas para recordar a sus difuntos.
O, en el caso de muchos, una excusa más para beber.
Eso fue exactamente lo que vi al entrar a el Grill.
¿Por qué no me extraña que esta sea tu forma de recordarle su pasado? -anuncio mirando al pelinegro tomándose un chupito-
Eras...Riley, ¿verdad? -me señala Stefan con un aire pensativo- me ha contado muchas cosas sobre ti
Más le vale que sean buenas -advierto mirando a Damon. Él levanta las manos inocentes con una sonrisa divertida-
Han sido buenas, por ejemplo, me ha dicho que hemos estado en una relación un par de años -comienza el otro vampiro pero yo solo rio nerviosa rascando mi nuca-
Sí, nuestra forma de conocernos fue bastante graciosa... Te di un taquillazo en la cara -confieso con las mejillas sonrojadas. Tomo uno de los chupitos y no dudo ni dos segundos en beberlo-





DADO que Stefan había intentado clavarme los colmillos en el cuello, decidí sacarlo fuera para tratar de llevarlo a un sitio tranquilo.
El cementerio.
Iba delante de él caminando entre la gente hasta que habló.
¿Qué clase de nombre es Honoria Fell? -pregunta Stefan con una mueca. Yo tiro de su muñeca para apurar el paso negando con la cabeza-
La mataste tú -apunta su hermano entrando la cripta- el bar ha sido mala idea. Si él instinto de destripador es biológico, minimizamos el contacto con humanos hasta que deshagamos lo que te ha hecho esa bruja. Aquí la tienes
Así que esta es la cripta familiar, ¿eh? -pregunta Stefan mirando a su alrededor- ¿hay alguien a quien no haya matado yo?
Aparte de nuestro padre, que en el infierno descanse -anuncia su hermano moviendo la campanita- el tío Zach, culpa mía. Y nuestra madre que, al menos, murió de tisis.
No podemos dejarte solo, así que me quedaré -continuo tras encender un par de velas-
Pero eres humana -me recuerda Stefan-
No es la primera vez que tratas de morderme -me encojo de hombros colocándome junto a su hermano-
Me alegro de que seas tan valiente, porque tengo que irme -Damon golpea mi cabeza como si fuera un perrito y se marcha-
Bueno, pues aquí estamos...-murmuro sentándome a varios metros de él-
Ahora que lo pienso, ¿cómo pudiste darme con una taquilla? -me pregunta Stefan haciéndome reír-
Si te soy sincera, no lo sé muy bien. Desde que llegué al insti la puerta no se abría bien, tú pasaste por ahí y pues...¡pum! Adiós a tu cara bonita -resumo rápidamente. Al decir esto último, mis mejillas se tornan rojas suavemente-




ME había pasado un par de horas paseando por el bosque junto a Stefan contándole nuestra vida juntos.
Por ahora, no había intentado usarme como su merienda.
Además, nuestras manos estaban entrelazadas durante todo el camino.
No sé en qué momento ocurrió eso, tal vez después de recordarle la primera vez que le dije te quiero.
También cuando fuimos a la noria en mitad de la noche, sus bromas por mis pijamas de dibujitos, yo apoyándole en sus malas épocas, él ayudándome en todo lo posible...
Ahora estábamos junto al puente por el que habíamos caído.
Allí nos salvaste la vida, menos a Sabrina, mi prima. Ella eligió a nosotros por delante de su vida -le explico sentándome en la hierba- pero luego te pasaste cinco días en el hospital hasta que me encontré mejor.
Nos... queremos mucho, ¿no? -pregunta el vampiro a mi lado. Yo asiento con la cabeza ahora mirándole a él y sonrío nerviosa cuando sus ojos caen en mis labios. Estamos a punto de besarnos pero cierro los ojos y apoyo mi frente sobre la de él-
Lo siento, no puedo hacerlo, no si no me recuerdas cómo deberías -murmuro con pena. Cuando abro los ojos, él ya no se encuentra a mi lado. ¡Mierda!-




ESTUVE caminando por todo el cementerio en busca del vampiro pero a las únicas personas que reconocí fue a Caroline, Elena y Sabrina.
Después de abrazarnos entre saltos y gritos, nos pusimos modo espías y seguimos con su búsqueda.
Un rato más tarde, mi prima fue quien lo encontró mordiendo a uno de sus compañeros y quien le acompañó a casa.
Al entrar, Stefan estaba en el salón quemando sus diarios y Damon y Sabrina en su habitación.
Riley, perfecto, entra. Tenemos que hablar -pide el pelinegro haciéndome un hueco en la calma-
¿Es urgente? Tengo que seguir llamando a Bonnie para que nos ayude -le recuerdo acomodándome junto a mi prima-
No creo que pueda -replica Damon dejándonos bastante confusas- Bonnie... está muerta. Lo siento
Claro que no, ¿cómo va a estar muerta? No puede ser posible -niega la pelirroja pero su novio solo asiente con la cabeza. Nos rodea en un abrazo y las lágrimas comienzan a caer poco después-




HOLA, Stefan. No sé si quieres hablar conmigo, pero creo que debes saber esto -anuncio sentándome en un banco de piedra- Bonnie, nuestra amiga y la que tal vez podría ayudarte, está muerta
¿Qué ha pasado? -pregunta Stefan con la voz entrecortada-
Si no quieres que este lugar se inunde con mis lágrimas, preferiría no hablar de ello -le pido sintiendo mis ojos comenzar a picar de nuevo-
Lo siento. Ojalá pudiera acordarme de ella -responde el vampiro sentándose a mi lado guardando una distancia-
Pues deberíamos cambiarnos, si no tuviera tantos recuerdos con ella, no me dolería de esta forma -confieso bajando la cabeza y sorbiendo mi nariz- siento mucho lo que pasó ayer, Stefan. Y también lo de Bonnie, quería...quiero ayudarte
Tranquila, lo superaremos juntos -murmura él colocando su mano sobre la mía. Un par de lágrimas bajan por mis mejillas mientras me abrazo a su costado y noto uno de sus brazos rodearme- tranquila...estoy aquí





TODOS fuimos a un íntimo funeral para Bonnie.
Dejamos pertenencias que los recordaban a ella y entre llantos le dedicamos un par de palabras.
Ella era siempre nuestra solución, esa ayuda que te hacía sentir mejor.
Una amiga en la que confiar y que te daba el mejor de los consejos.
Incluso en el otro lado, me había mandando de nuevo a la universidad a seguir con mi vida.
Estaríamos completamente perdidos sin ella.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro