¿ME he perdido algo? -pregunta Elena confusa viendo a Matt y Caroline tontear en mitad del pasillo a unos metros de nosotros-
Parece que están saliendo -le da la razón Bonnie- necesita un chico como él. No como el vampiro homicida Damon Salvatore
¿Cómo lleváis el tema? -les pregunta Sabrina con una mueca-
Es complicado. Pero os creemos, técnicamente lo hemos visto -responde Elena a mi lado-
¿Y cómo llevas tú el otro tema? -se gira para verme mi prima-
No, pero imagino que ya se habrá marchado -me encojo de hombros tratando de aparentar que no me importa- todo su rollo de protección y bla bla bla. No sólo quiero que me proteja de seres sobrenaturales, también le quiero a él. ¡Y lo sabe! No voy a insistirle más, si se quiere marchar...
Tal vez sea lo mejor -trata de animarme Bonnie haciéndome fruncir el ceño- no sé, ¿qué clase de futuro tendrías con él si se quedara?

HOLA -saluda Stefan sentado en una de las mesas del campus- tenemos que hablar. Han atacado a alguien. Creemos que hay un nuevo vampiro en el pueblo.
¿No tenéis en mente a nadie? -pregunto sentándome a su lado guardando una distancia-
No. Pero debe de ser alguien nuevo, porque dejar el cadáver así, o es un novato, o trata de mandar un mensaje -me explica él. Yo no digo nada pero sé que se da cuenta de que quiero decirlo- no me fío mucho de Damon, pero está intentando no llamar la atención, por eso no tendría sentido
¿Y qué haréis? -añado cruzándome de brazos-
Damon lo está buscando ahora mismo -responde Stefan levantándose- mira, te prometí la verdad, por eso quería contártelo. Quiero que tengas cuidado
Pensé que te ibas a marchar -confieso repitiendo su acción- te conozco al menos un poco como para saber que lo harías.
Aún no -niega él dándome una leve chispa de esperanza-

LOS alumnos iban de un lado a otro por el salón conociendo universidades para cada uno de nuestros futuros.
Me había quedado encantada con una escuela de Bellas Artes.
La mujer que me explicó cada uno de los detalles fue muy amable, me aconsejó y me dió consejos.
Cuando me despido de ella me encuentro con Stefan mirándome en el marco de la puerta.
Eso dio un poco de miedo, lo confieso.
Me imagino que no estarás aquí por Harvard -me acerco a él con una sonrisa divertida. Luego me doy cuenta de su presencia en el lugar- ¿Se supone que eres mi guardaespaldas?
Podemos llamarlo así -me da la razón caminando a mi lado- sabes, yo quería ser médico. Antes de todo esto. Pero ya no pude, por...
¿la sangre, la vejez, la multitud? -enumero tomando un folleto para leerlo con el mínimo de interés-
Sí -afirma Stefan- luego estuve probando cosas diferentes. Me gustaron muchas cosas, pero siempre tenía que irme antes de que alguien se diera cuenta de que no estaba envejeciendo
Debe de ser duro -murmuro levantando la cabeza para verle- pensé que la vida vampírica sería más fácil...
¿Cuáles son tus planes de futuro? -rompe el silencio parando en una mesa a mi lado-
No quiero que te lo tomes a mal, ¿pero qué te importa mi futuro si no vas a estar en él conmigo? -pregunto volviendo a bajar la mirada- tal vez suene egoísta, y sé que no puedes estar conmigo por protegerme y todo lo demás pero a mí también me duele verte aquí sabiendo que en algún momento te irás
¡Riley, Jenna y mamá se estaban riendo de mí futura profesión! Menos mal que el tal Logan ese de la tele ha venido y han tenido que hacer una fortaleza para esconder a Jenna -anuncia Sabrina con diversión tirando de mi brazo-
¿Logan Fell? -pregunta Stefan con un deje de preocupación. Yo asiento con la cabeza mientras le veo marcharse-
¿Por qué se ríen de que quieras ser veterinaria? -le pregunto confusa enlazando su brazo con el mío-
Dicen que no soy capaz tan si quiera de cuidar a un animal -explica ella. Yo no respondo sabiendo que hay un punto de razón para las mayores- ¡Lo de ese pájaro fue sin querer! ¡Y lo del hamster también!
Está bien -levanto mis manos con inocencia soltando una pequeña risa-
Adoptemos a un perro. Ya veréis que lo amaré y cuidaré -me pide Sabrina con un mohín-

SALIMOS del instituto encontrando a Stefan hablando por teléfono.
Sabrina es la primera en acercarse en busca de explicaciones.
Y fue sencillo, Logan Fell es el nuevo vampiro.
El verdadero miedo fue cuando Matt anunció que Logan se había llevado a Caroline.
Stefan nos había pedido que nos quedáramos en el instituto pero las dos caminábamos de un lado a otro con preocupación.
¿Sabes algo de Caroline? -pregunta Sabrina corriendo hacia Stefan-
Está bien. La he llevado a casa -responde él dejándonos más tranquila- estaba muy agitada, pero todo lo que sabe es que Logan la atacó, nada más
¿Y Logan? -añado preocupada-
Damon se ha encargado de él -confiesa Stefan dejándonos en un corto silencio- habéis visto lo que ha pasado esta noche, ¿verdad? Tenéis que comprender porque no podemos seguir viéndonos
Stefan, por mucho que no me guste admitirlo, sin ti hubiéramos muerto unas cien veces. Nos has salvado, y a nuestras amigas -le recuerda Sabrina adelantándose a nosotros yendo hacia los aparcamientos-
Deja que te llevemos a casa. Por favor -le pido en voz baja caminando tras ella escuchando sus pasos detrás mío-

QUIERO estudiar cualquier carrera de artes -confieso tras parar frente a su casa- diseñadora de ropa o interiores, pintora, incluso escritora... Me gusta la creatividad y en mi imaginación hay mil cosas que puedo mostrar al mundo.
Encaja contigo -me da la razón Stefan sentado a mi lado- no quiero irme para hacerte daño, Riley. Lo hago porque es lo mejor para ti, para protegerte
Eso es lo que piensas tú -contesto decidida a decir mi opinión de una vez- yo no te estoy pidiendo que te marches. Sé que es peligroso y todo lo que tú quieras, pero si vas también lo será. Todos los días hay peligros, Stefan, y quiero que sepas que contigo aquí me siento más a salvo de lo que he estado en toda mi vida. Te... te quiero, Stefan
Ven aquí -me pide en voz baja tomando mi cintura para juntar sus labios con los míos. No tuvo que decir nada, la desesperación y sentimientos que detonaba ese beso me lo dijo todo. Entramos a su casa entre beso y beso pero de un momento a otro él me da la espalda-
No tengo miedo. Esta relación conlleva ver todas tus partes. Y la vampírica no está nada mal. Date la vuelta, por favor -le pido con la voz más calmada posible. Lentamente se gira y me muestra sus ojos rojizos y negros. Yo solo sonrío y beso de nuevos sus labios demostrando que lo que decís era verdad. Lo le tenía a él ni a lo que era. Mis sentimientos hacia Stefan son mucho más fuertes que su naturaleza-

ME gusta tu habitación. Tiene un toque... rústico -confieso con diversión acomodando mi cabeza en su pecho mientras pasaba una pierna por su cadera- ¿Ha sido así durante todo el tiempo? ¿No te aburre?
No, me gusta así, contiene todos los recuerdos que me ha parecido importante conservar -responde él haciéndome sonreír y enterrar mi cabeza en su cuello para ocultar mis sonrojo al recordar el acto anterior-
Me gusta mucho que seas tan cursi, no me hace parecer que yo lo soy tanto -agradezco inclinándome para dejar un corto beso en sus labios-
¿Tienes sed o algo? -sugiere él acariciando un par de mechones de mi pelo-
La verdad es que tengo un poco de hambre -admito con una media sonrisa- ¿Tú no? Vale, claro que no, lo siento...
Estoy bien -niega Stefan tras reír levemente- iré a ver si encuentro algo para ti, ¿vale?
Está bien. -respondo acomodándome a un lado para dejarle marcharse. Me coloco su camiseta por encima de mi ropa interior y me levanto para investigar su habitación-
Stefan, me voy a desmayar del hambre como no vengas -me quejo en voz alta escuchando una leve risa desde el piso de abajo. Sigo paseándome por el cuarto hasta dar con una foto. Katherine 1864. ¡Es idéntica a Elena!- creo que tenemos que hablar de algo...