Hola corazones afligidos, aquí se me ocurrió escribir un especial de los protagonistas pero apenas me inspiré (Tarde pero llegó) x"D, espero lo disfruten como yo y hayan disfrutado el tiempo en familia este diciembre.

Preparense para año nuevo, agradezcamos a Dios :3

Misión feliz navidad.

Desde que tengo memoria, siempre he querido enfrentar enemigos fuertes.

Soy el puño y él es la espada, el vicecapitán de la tercera división Soshiro Hoshina, un espadachín experimentado. Somos el mejor dúo de la historia, capaz de vencer todo enemigo que se nos atraviese, ¡Y es por eso...!

Y es por eso...

Que estamos limpiando la casa de la humana, como los obedientes que somos.

"¿Qué tanto estás pensando zorro? ¡Ayúdame a colocar la estrella y todo esto arriba!", exclamó la frágil humana.

——¡Hazlo tú! Suficiente tenemos con limpiar tu casa —— rebatió Hoshina, cruzándose de brazos. Ambos teníamos delantales y objetos de limpieza; según la humana, así permaneceríamos limpios.

"¿Estás ciego o qué? ¡No llego!", respondió la humana, inclinándose sobre una silla.

Hoshina miró detenidamente la superficie donde estaba apoyada. ——No es mi problema, enana —— aseguró, colocando un jarrón en su lugar.

"Mira quién habla, niño maleducado", respondió, volteando hacia él y mirándolo con el ceño fruncido. Ese movimiento provocó que la silla tambaleara ligeramente. La humana no lo notó, a diferencia de mi compañero, que se sobresaltó al verlo.

——Te vas a caer, ¡Ya bájate de ahí! —— exclamó Hoshina, volando hacia ella con rapidez para evitar un accidente.

Al notar su presencia tan cercana, la humana sonrió ligeramente. "Entonces... ¿me vas a ayudar con la estrella verdad?" preguntó, con un tono desafiante pero divertido.

——¿Si lo hago te vas a bajar? —— cuestionó, con un tono rendido.

"No, falta más decoración acá arriba para el árbol", respondió, aún sin darse cuenta del esfuerzo de Hoshina.

——¡Ah! —— suspiró. ——Solo bájate... Yo me encargo de decorar arriba.

"Por fin sirves para algo", dijo victoriosa, suspirando aliviada.

——Silencio, antes de que me arrepienta —— murmuró a regañadientes. ——Eres muy descuidada... —— acusó, mientras le ofrecía su mano a la humana para ayudarla a bajar.

"Ay que exagerado eres, no es tan alto", dijo tomándolo de su mano, para saltar. Sin embargo, cuando bajó se quedó callada, observándolo perpleja como si acabará de descubrir algo.

Hoshina notó la confusión en los ojos de la humana y sintió curiosidad. ——¿Qué...? ——murmuró, abriendo un ojo.

"Es solo que... no pensé que existiera caballerosidad en tí", dijo la humana, aún sosteniendo su mano. "Gracias por ayudarme", añadió con una sonrisa.

Hoshina dejó de mover su cola, pero rápidamente disimuló su sorpresa. ——Bueno, ¿Qué importa? ¡A trabajar, todavía hay mucho por hacer! —— dijo, soltando su mano y rodeando su cuerpo para empujarla.

"¡Ay, ya voy!", respondió, recogiendo los adornos del suelo. Mientras Hoshina se ocupaba de decorar la parte superior del árbol, la humana y él intercambiaron miradas y sonrisas ocasionales. El ambiente se volvía más cálido y acogedor a medida que avanzaban en la decoración.

De repente, la humana se detuvo y miró a Hoshina con una expresión traviesa. "¿Sabes qué falta?", preguntó, chocando con el codo a mi compañero.

——¿Qué? —— respondió Hoshina, arqueando una ceja.

"¡Obviamente encender las luces!", dijo, encendiendo el interruptor que tenía entre sus manos. De repente, la habitación se iluminó con diferentes colores. La humana sonrió satisfecha y se acercó al árbol.

"¡Mira! ¡Ya está terminado!", dijo, abrazando el árbol de Navidad. Hoshina se detuvo un momento, admirando la decoración. Luego, sonrió ligeramente. ——No está mal —— dijo, intentando parecer indiferente.

La humana se rió y lo golpeó suavemente en el brazo. "¡Eres un mentiroso! ¡Sabes que está perfecto! ¡Somos los mejores!", aseguró con orgullo, mirándolo fijamente.

Hoshina se encogió de hombros, pero no pudo evitar sonreír también.

"¿Quieres un poco de café? Practiqué uno que sabe muy bien", preguntó la humana, acercándose a la cocina. Hoshina asintió con la cabeza, aún sonriendo. ——Sí, lo necesito —— respondió.

La humana sonrió y comenzó a preparar el café con una dedicación única. ——Oye fortachón, ¿tú cómo vas, no has hecho desastre? —— dijo Hoshina, acercándose a mí.

"No, claro que no", negué con la cabeza.

Él observó con sospecha cada rincón que limpié, como si me estuviera evaluando. ——Oye No. 10, pero dejaste estos cuadros torcidos —— mencionó, acomodando unas pinturas que estaban colgando en las paredes.

"Inclinado se veía mejor", dije con un puchero, tenían más sentido las figuras mirando hacia la izquierda.

——Ni que fuera arte abstracto —— respondió incrédulo.

"¿Arte qué?", pregunté, confundido.

——Nada, solo... —— articuló, pero no terminó por la interrupción de una tercera voz. "¿Alguien quiere galletas?", preguntó la humana, con un tono persuasivo.

"Galletas...", susurré conmovido; eran mi debilidad. La humana extendió una bolsa abierta llena de ellas, asegurando que todas eran para mí. "Gracias", añadí en un tono bajo, tomando una y saboreándola con evidente placer.

"Vamos, no te pongas sentimental", respondió la humana con una sonrisa satisfecha. "Zorro, toma tu café", dijo, extendiendo una taza para él, la cual le fue arrebatada rápidamente, ella lo observó incrédula por su acto.

——¿Qué? Es café —— preguntó tras el silencio incómodo de la humana.

"¿Qué haré con tus modales?", respondió disgustada, suspirando pesadamente.

——Oye sabe bien, gracias por esto —— agradeció, terminando la taza.

"Bueno, pero tengo una sorpresa más para ustedes", dijo la humana, mirándonos a ambos.

Hoshina levantó una ceja, ya anticipando algo desagradable. "¿Qué clase de sorpresa?", preguntó con desconfianza.

La humana buscó su bolso, la intriga nos invadió a ambos, ella sacó lentamente un par de trajes de Navidad. "¡Vamos a disfrazarnos!" exclamó, mostrando unos atuendos festivos rojos.

——Ni en tus sueños —— respondió Hoshina, cruzándose de brazos. ——No voy a ponerme eso.

"Vamos zorro, es solo por hoy. ¿Qué te cuesta?", insistió la humana, con un tono decepcionado.

——Prefiero enfrentarme a diez kaijus que a esto —— dijo, pero ante la mirada persistente de la humana, finalmente cedió. ——Está bien, pero solo porque es Navidad.

La humana sonrió triunfante y se dirigió a cambiarse. "Bien, esperenme, no tardo", dijo y tomó a Perla para subir a su habitación.

Hoshina y yo nos miramos antes de ponernos los trajes. ——Sé que no nos ven... Pero es raro cambiarse enfrente de tí —— dijo y se desvistió. Yo, por mi parte intenté ponerme ese traje, pero mi cuerpo redondo no me lo permitía, así que Hoshina tuvo que ayudarme.

Finalmente, después de varios intentos, logré ponerme el traje. Me miré en el espejo y no pude evitar reírme. El traje era demasiado ajustado y me hacía parecer un globo rojo.

Hoshina se rió al verme y me dió un golpe en la espalda. ——Te ves bien fortachón, pero... ¡Bien gordo! —— dijo entre carcajadas escandalosas. Me irrité por sus burlas; él también de veía ridículo. Me decidí a responderle, pero me contuve.

"Ay no puede ser, no. 10... ¡¡¡Que tierno te ves!!!", dijo una voz a nuestras espaldas.

La humana bajó las escaleras, vestida con un traje de Navidad rojo y blanco. Se veía muy llamativa, su cabello estaba suelto y sonreía de oreja a oreja. "Oigan pequeños, ¿Qué les parece?", preguntó la humana alegre, girando con gracia para mostrar su atuendo. Noté que Perla venía con un enorme moño en su oreja, que hacia juego con el traje de su dueña.

"Te ves bien, humana. Perla también", respondí, anonadado por la similitud de ambas.

"Ay lo sé. Espero que a mi mamá también le guste", aseguró con ilusión en sus ojos, "Esperen, ya les traigo algo", dijo para irse al otro extremo de la sala. Pero mi atención se detuvo en Hoshina, que estaba concentrado en los movimientos de la humana en completo silencio.

"¿Qué pasa Hoshina?", murmuré con sospecha.

——Nada... —— murmuró Hoshina, mirando a otro lado para distraerse.
Pero noté a través del reflejo del espejo que estaba diferente. Su rostro no estaba pálido como siempre, sino de un tono más rojizo. No tenía ni idea de la razón de ese efecto.

"¿¡Tienes fiebre Hoshina!?", pregunté alarmado, este cubrió su rostro y volteó lentamente hacia mí.

——No seas ingenuo, estoy bien —— aseguró dejándose ver finalmente, mientras el color de sus mejillas disminuía.

"Y entonces porqué estás colorado", pregunté, señalando su rostro, pero esto sobresaltó a Hoshina.

——¡Cállate! —— gritó, tapando mi boca. Sin embargo, sentimos una presencia detrás de nosotros.

"Es hora de los regalos", interrumpió la humana, interponiéndose entre nosotros. "Toma No. 10, ¡Rompe esta bolsa!", sugirió, entregándome una figura cuidadosamente empaquetada.

La tomé entre mis manos y la abrí; era un escudo. Lo probé y se sentía ligero, una sensación que me recordaba a mis días como kaiju en el mundo anterior; sin límites. "¡Gracias humana!", dije, aferrándome a su brazo a manera de agradecimiento, sentí que ella me acariciaba con cuidado.

"De nada, pequeño", murmuró, logrando tranquilizar mi emoción.

Ella dirigió su atención a Hoshina, que estaba ignorandonos por completo. "¿Tan mal me veo que me evitas?", preguntó la humana extrañada, captando su atención. "Honestamente, pensé que te burlarías", admitió, jugando con su cabello.

——Solo estoy viendo el reloj ¿Qué quieres de mí?.

"¡Te tengo un regalo, así que mírame!" exclamó la humana, feliz.

——No me digas que me darás dinamita —— cuestionó precavido, mirando cuidadosamente a la humana de pies a cabeza. La caja que tenía era más grande que la mía, así que resultaba sospechoso.

"Toma, ábrelo", ordenó, entregándole el objetivo misterioso dentro de ella. Hoshina dudo un poco, tomó vagamente el regalo entre sus manos y abrió el paquete.

Sin embargo, se encontró una espada hermosa y filosa. Tal como le gusta ——¿Y esto? —— dijo, abriendo sus ojos con sorpresa y sosteniendo firmemente Aquella espada.

"Descubrí que te gustan las espadas, es como cuando ves el café", explicó la humana. "Así que pensé que esta sería perfecta para ti", culminó con una sonrisa, expectante a la reacción de Hoshina.

——Gracias... Es realmente... No lo esperaba —— respondió, genuinamente conmovido. Noté que miró a la humana con timidez. Se rascó la cabeza, casi como si se estuviera decidiendo algo.

——Yo también tengo algo para ti —— aseguró Hoshina.

"¿Qué?", murmuró la humana, esa noticia realmente no la esperaba. Me pregunté que regalo le daría, así que los observé en silencio.

Hoshina le entregó una especie de joya, pero yo sabía que significaba mucho para él; contenía una figura como centro que él apreciaba cuando era vicecapitán, el único recuerdo que Hoshina conservaba del mundo al que pertenecíamos.

Una pequeña espada que representaba a su familia, en un collar elaborado.

"Wow... ¡Es hermoso!", dijo la humana, con evidente sorpresa y emoción. "¿No lo robaste?", preguntó con sospecha.

Hoshina se estremeció ligeramente y miró hacia otro lado. ——No, no lo robé, lo hice... Es tuyo —— dijo, extendiendo el collar en su mano.

La humana se rió y se acercó a él. "Gracias, zorro... ", murmuró en su oído, para luego bajar y plantar un beso en la mejilla de Hoshina.

"Jamás pensé que me regalarías una espada en un collar, y yo te regalaría una real", admitió con ironía, sin darse cuenta del color que se hacía visible en las mejillas de Hoshina. La humana se puso el collar y se miró en el espejo. "Me encanta...",  dijo por lo bajo, apreciando el reflejo.

Hoshina se sonrojó aún más y miró hacia otro lado. ——Bueno, ya es suficiente... —— dijo con timidez. Pero la humana se rió y se acercó a abrazarlo. "Feliz Navidad, zorro...", murmuró con un tono rosado en sus mejillas.

¿Qué les pasaba?

"Feliz Navidad", respondió Hoshina, sintiendo que, aunque sus personalidades chocaban a menudo, en este momento compartían un vínculo especial.

Y luego, la humana se dirigió a mí. "También a tí, feliz Navidad, No. 10... ", mencionó, acercándose para atraerme al abrazo grupal.

Me sentí feliz por la situación. ——Feliz Navidad, humanos... —— dije, dejándome llevar por el momento. La habitación se llenó con una atmósfera diferente, una que nos hacía sentir bienvenidos.

Me sentí como en casa.

Querido Cupido.
Producciones.

Especial de navidad dirigido por:  Susan_205.

Protagonistas: El zorro Cupido y la rayis.

Narrador: No. 10 (El monstruo come galletas)

Extra: Perla.

Camarógrafo: Mark y su novio, Nando.

Financiado por: Jenny (Madre de rayis)

Empezado: No me acuerdo.

Editado: Apenas me llegó la inspiración.

Actualización: 31/12/2024

Se les quiere, nunca pensé hacer un fic este año🎄

PDT: No he abandonado la historia :'3