12
Por fin había terminado de limpiar y acomodar. Orgullosa miro su cuarto perfectamente acomodado.
—Buenas~ —habló su amigo entrando a su nueva habitación y saltando a la cama, destendiendola en el proceso y tirando todos los peluches al piso.
Son sonrisa orgullosa se fue. Ya había durado mucho acomodada.
—¿Terminaste con tu habitación?—le preguntó acostándose a su lado rendida. Aceptando que el suyo no duraría limpio por culpa de su amigo.
—Me dormí apenas llegamos—confeso abriendo los ojos—Nuestras madres están como locas moviendo todo... Especialmente la tuya.
Recordó la manía de su madre.
—Créeme, veras constantemente todo en lugares diferentes—sonrió recordando como despertaba y los muebles estaban en diferentes lugares cada mañana o tarde.
—Lo se, las visitaba todo el tiempo.
—Ahora que vivimos juntos podemos hacer eso...
—¿Tan pronto? Apenas llegamos hacé unas horas Uki-chan—comentó levantando una ceja.
—Podemos invitar a los chicos y a Emma... Nuestras madres saldrán a comprar mandado y unas cosas que faltan en la casa.
—Nos tendran como conejillos de indias, pero tengo que confesar que es relajante y refrescante—murmuro tomando su barbilla pensando—Esta bien tu ganas, iré por ellos.
—Iré a la tienda por bocadillos entonces.
Salieron ambos a la enorme sala donde ambas mujeres se encontraban.
—Oyuki, podemos hablar...
Los más jóvenes se miraron confusos.
—Yo ahorita regreso—anuncio Baji saliendo de la casa.
—Siento que me van a decir algo malo, escupenlo—fruncio el ceño al ver a las mayores.
—Bueno...—murmuro la mamá de su amigo mirando sus zapatos—Es sobre tu cuerpo y el de Keisuke, ya no son niños y pues queremos decirle varias cosas que posiblemente ya comenzaron a presenciar.
Incómoda la menor prefirió sentarse en una de las sillas de la mesa, masajeo sus sienes haciéndoles un gesto con la mano para que la dejaran pensar un momento.
—Cambios físicos y hormonales—asintió varias veces—Los conozco gracias a papá que habló conmigo con mucha sinceridad y paciencia, prefiero evitar por el momento el tema ya que tengo conocimiento sobre ello.
—¿Nozel habló contigo sobre la menstruación?—pregunto extrañada la mujer—¿Que carajos te dijo ese hombre?
—Fue muy explícito y me dio algunos libros—agregó teniendo un escalofrío.
—De que edad estamos hablando.
—Nueve.
—Se me adelanto por mucho—susurro deprimente—Yo quería ser la que pasará por la incómoda explicación.
—Yo opinó que esta bien—levanto la mano la madre de Baji—Es extraño que un hombre hable del tema, o la mayoría no lo conoce del todo.
—Ve el lado bueno mamá, aun pueden hablar con Kei—ánimo aun incómoda. Es chico, posiblemente ya debe de conocer las cosas nuevas que suceden en él; pero no le quitaría la esperanza ha ambas mujeres.
—Ella tiene razón. Mientras ellos invitan a sus amigos a pasar un rato en la casa nosotras podemos salir y puedes pensar en que decirle—también alentó tomando el bolso y arrastrando a su amiga deprimente a la puerta—Nos vemos de rato Oyuki-chan, no hagan nada malo.
—Por fin—exclamó soltando el aire retenido.
Camino a su cuarto tomando una caja de plástico y tiro su contenido en el escritorio, salieron un montón de productos y los ordenó en la mesita por tamaño. Esa era la última caja que tenía que abrir.
Saco unos papeles de su mochila y fotografías, acomodando de igual forma y resaltando algunas cosas.
—¡Llegamos!—el grito de Baji la hizo girar en la silla—Pasen al limpio cuarto de Uki-chan.
—Trajimos comida—anuncio Mitsuya entrando con varias bolsas de botanas y refrescos.
—¡Oyuki!—exclamo emocionada la rubia, abrazando con mucha fuerza a su amiga. Hace días que no se miraban—Te extrañe mucho, Mikey no quería traerme.
—Que mal hermano eres, Mikey—le dijo siendo aplastada por el abrazo—Por eso prefiero a Shinichiro, el si me deja estar con Emma.
Ofendido se alejo. Él quería ser el primero en saludar a la albina, pero su hermana siempre la alejaba de el, por esa razón no quería traerla.
—Yo vengo a relajarme de los exámenes, no a escuchar el drama de los Sano con Udai—se quejó Kazutora empujando a todos de su camino y se tiro en la enorme alfombra de peluche—Quiero el mismo de la otra vez.
Se rieron pero siguieron su ejemplo.
Emma descubrió las mascarillas junto a Oyuki un día; aprovechando que todos los chicos en estaban en casa de los Sano pues les comentaron sobre ellas, fue difícil de convencerlos pero aceptaron al escuchar por boca de la albina todo los beneficios y propiedades que contenían. Aparte si eran relajantes y desestresantes.
—Ya que Touman esta iniciando quiero comentar sobre lo que podríamos hacer en un futuro no muy lejano—declaró Oyuki desde su escritorio—Me tome el tiempo para analizar nuestra situación.
—Como siempre pensando en todo, Udai—vocifero Draken negando molesto—No te sobre esfuerces.
—Seré directa. Somos un pequeño grupo de pre-adolescentes y nos toman a la ligera, necesitamos más personas y tenemos que hacer ruido para hacer notar nuestro grupo—explicó pasando unas hojas con fotografías—Busque personas confiables y fuertes que podrían unirse a nosotros.
—Ellos son de otros grupos—fruncio el ceño Kazutora—¿Te acercaste a ellos?
—Mierda, Oyuki, no vuelvas a hacer eso sola—regaño Mitsuya—Podría ser peligroso, no conocemos a estas personas.
—¿Apoco creen que la dejaría ir sola?—gruño Baji furioso—Yo estuve con ella en todo momento y solo los analizamos de lejos, no cruzamos palabra con ninguno de ellos.
—Son gemelos—murmuro Mikey mirando con atención una imagen—Los e visto antes.
—Tienes razón, son muy unidos y se apoyan entre ellos, aparte son buenos peleadores—asintió la cabellera albina—Algunos dejaron sus grupos por distintas cosas, la separación del grupo, diferentes ideales.... o están perdidos.
—No quisiera ser tu enemigo—comentó Pah chin aliviando el tenso ambiente.
—Yo aún no puedo creer que estés dentro de todo esto Uki-chan—negó preocupada la rubia.
—Alguien tiene que cuidarlos—levanto los hombros sin importancia—Para que ellos acepten necesitan conocer de nosotros; vamos a patear algunos traseros.
—¿De quien carajos aprendiste ese maldito vocabulario bulgar como para decir trasero?—cuestionó Baji—Para romperle la cara.
—Pues es claro que de tí no lo aprendí, tu nunca dirías esas palabras altisonantes—habló sarcastica.
—Regresando al tema chicos—exclamo Mitsuya—Si vamos a ir encerio... Quiero mostrarles algo.
Curiosos se acercaron al chico; saco una libreta buscando algo en especial.
—Son bocetos pero es una idea—dijo rascando su mejilla nervioso.
Mostrando tres ilustraciones de de trajes. Llamando la atención de Oyuki uno en específico, impactada e inoptisada por el boceto del traje que al parecer sería el suyo.
—Eres increíble Mitsuya.
«𝘕𝘶𝘦𝘴𝘵𝘳𝘢𝘴 𝘮𝘢𝘥𝘳𝘦𝘴 𝘴𝘰𝘯 𝘨𝘦𝘯𝘪𝘢𝘭𝘦𝘴.... 𝘔𝘦 𝘢𝘭𝘦𝘨𝘳𝘢 𝘲𝘶𝘦 𝘧𝘶𝘦𝘳𝘢𝘯 𝘢𝘮𝘪𝘨𝘢𝘴 𝘥𝘦𝘴𝘥𝘦 𝘩𝘢𝘤𝘦 𝘢ñ𝘰𝘴, 𝘱𝘢𝘴𝘢𝘯𝘥𝘰 𝘴𝘶 𝘢𝘮𝘪𝘴𝘵𝘢𝘥 𝘢 𝘯𝘰𝘴𝘰𝘵𝘳𝘰𝘴. 𝘍𝘶𝘦 𝘭𝘰 𝘮á𝘴 𝘣𝘰𝘯𝘪𝘵𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘩𝘪𝘤𝘪𝘦𝘳𝘰𝘯, 𝘺 𝘢ú𝘯 𝘲𝘶𝘦 𝘵𝘶 𝘮𝘢𝘥𝘳𝘦 𝘦𝘴𝘵𝘶𝘷𝘪𝘦𝘳𝘢 𝘶𝘯 𝘱𝘰𝘤𝘰 𝘢𝘶𝘴𝘦𝘯𝘵𝘦 𝘶𝘯 𝘵𝘪𝘦𝘮𝘱𝘰 𝘴𝘦 𝘳𝘦𝘤𝘶𝘱𝘦𝘳𝘰 𝘨𝘳𝘢𝘤𝘪𝘢 𝘢 𝘴𝘶 𝘮𝘦𝘫𝘰𝘳 𝘢𝘮𝘪𝘨𝘢 𝘥𝘦 𝘵𝘰𝘥𝘢 𝘭𝘢 𝘷𝘪𝘥𝘢.... 𝘠𝘰 𝘲𝘶𝘪𝘦𝘳𝘰 𝘩𝘢𝘤𝘦𝘳 𝘭𝘰 𝘮𝘪𝘴𝘮𝘰 𝘱𝘰𝘳 𝘵í»
Quisiera escribir historias de todos los personajes pero es imposible hacerlo al mismo tiempo. Tengo uno en borrador que es de Mikey y en estos días tengo pensado también hacer el de Chifuyu, en un futuro no lejano espero hacer de más personajes de Tokyo revengers.
Que alguien me confirme el color de ojos de Baji, por favor.
¡Gracias por leer!
Ayame🔥
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