━ [Hyunjin] ━

Di una última estocada y me corrí en el interior de Minho. Y al ver que el semen comenzaba a salir de su ano tan pronto saqué mi pene, no dudé en tomar un poco con mi dedo para meterlo de nuevo en el agujero de Minho que se contrajo al sentir de nuevo una intromisión. Me fascina demasiado tener sexo con el peligris porque la verdad es que me hace sentir tan jodidamente excitado y satisfecho.

Coloqué mis dos manos sobre las nalgas del peligris y procedí a abrirlas para acercar mi rostro y entonces, llevé mi boca al agujero y comencé a chupar hasta obtener la cantidad necesaria de semen en mi boca y luego giré el rostro de Minho hacia a mí, abrí su boca con mi mano libre, escupí mi semen en su interior y después de que se lo tragara, uní nuestros labios para dar un apasionado beso y me sentí tan jodidamente caliente.

—Me encantas demasiado— admití tan pronto finalicé con el beso.

—También me encantas.

Me recosté a su lado derecho y Minho no dudó en acercarse a mí para abrazarme. Tomé su mano entre la mía y dije—: Minho, ¿te quedarías a mi lado sin importar nada más que nosotros?

El peligris elevó la mirada hasta encontrarse con la mía y dijo—: ¿Pasa algo?

—No...

—Acaso, ¿no confías en mí?

—Es solo que no me gustaría involucrarte en mis problemas.

—Hyunjin, debemos involucrarnos en la vida del otro si deseamos que lo nuestro funcione en verdad...

—¿Estás diciendo que tendremos una relación de noviazgo? — me fue inevitable preguntarle.

—¿No estás de acuerdo con ello?

—Sí— respondí. —¿Y qué pasa con tu boda?

—¿No sería una excelente idea de que te robes al novio? — me preguntó con tono pícaro que me hizo sonreír.

—Es una excelente idea, cariño— admití.

—No me mires así— me pidió Minho tras esconder su rostro entre mi cuello y hombro.

—¿De qué hablas?

—Tu mirada seria me hace sentir tan atraído— confesó.

—En ese caso, ¿qué te parece si vamos por otra ronda?

—Me parece bien.

Sinceramente, no tengo el suficiente valor como para confesarle que he asesinado al hombre que estuvo abusando de mí durante muchos años. Sé que debo decirle, pero tengo miedo de que Minho me abandone porque he hecho algo terrífico e imperdonable ante la sociedad. La verdad es que no me importa lo que piense la gente sobre mí, pero si me importa demasiado lo que Minho piense.

Minho no dudó en sentarse sobre mí y eso me trajo al presente por lo que elevé la mirada hasta encontrarme con la de él y me sentí tan jodidamente bien. Ahora puedo disfrutar estar a su lado porque tengo la certeza de que Park no volverá a entrometerse en mi vida a causa de que ya le he dado el castigo que se merecía.

Llevé mis manos hacia las nalgas del peligris y las apretujé con fuerza mientras decía con tono serio—: Recuerda que eres y serás solamente mío, Lee Minho.

—Sabes perfectamente que no he estado con nadie más aparte de ti en la cama y espero que tu no hayas estad con nadie...

—No, solo he estado contigo— le aseguré.

Minho sonrió con satisfacción antes de tomar nuestros penes entre sus manos para dar inicio a suaves y lentos movimientos que me hicieron sentir tan excitado; poco a poco, fue aumentando el ritmo y me dejé abrazar por el placer que me genera el peligris y después de unos minutos, ambos nos corrimos y sonreímos con complicidad tan pronto nuestras brillantes miradas se encontraron.