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Narrador omnisciente
Los chicos seguían mirando a Jungkook, ya habían pasado más de 3 minutos y Se-rin se dio cuenta
—Jungkook, mira disimuladamente la mesa que está atrás tuyo hacia tu izquierda —. Menciona la chica moviendo disimuladamente la boca
El chico movió lentamente la cabeza hasta dar con la mesa que hablaba su hermana
—Nos llevan mirando más de 3 minutos, creo que son fans —. Una mirada de pánico se instalo en la chic
—No creo, tal vez solo estén en un viaje astral ¿Verdad? —. Hablo el chico con nerviosismo —Dime cuántos son —
—Creo que son 13, no les puede ver bien las caras, tienen mascarillas y gorras —. Menciono la chica de pelo negro
—¿13? —Pregunto confundido Jungkook, mirando nuevamente a la mesa pero sin disimulo alguno, mirándolos detalladaente —¿Mingyu? —Se paro de su asiento y camino hacia la mesa
—Jungkook, ¿Que haces?, no vayas Jungkook, Jungkook —. Hablo en susurros desesperados Se-rin —Vuelve aqui Jeon Jungkook —. Susurro la chica con enojo
Jungkook, obviamente no la iba a escuchar así que siguió caminando en dirrección a la mesa donde se encontraban las 13 personas, en cambio las personas de la mesa al ver que Jungkook se acercaron, concordaron por el momento no hacer nada en contra del pobre conejo, hasta saber firmemente que relación tenían.
—¿Mingyu, eres tú? —. Pregunta el chico con dientes de conejo acercándose más a su probable amigo para comprobar si era o no
Narra Se—rin
aparentemente mi hermano los conocía, sentía el ardor de las marcas, eso solo podía significar una cosa, ellos eran mis almas gemelas, los tenía todos en un mismo lugar.
Definitivamente quería levantarse y abrazar a cada uno de ellos, pero no podía precipitarme, tenia que mantener la calma, aún que era un poco difícil considerando que literalmente estaban ahí a tan solo unos pasos y ya podía tocarlos, abrazarlos y finalmente besarlos, los habia soñado toda una vida.
Jungkook, me confirmó que si eran sus amigos.
—Se—rin, quiero que conozcas a mis amigos —. Así fue mencionando cada uno de sus nombres y apuntandolos, cuando pense que no podria avergonzarme, la cago —Son Seventeen, la banda que estábamos escuchando en el auto, el cual repito dijiste que Cheol era tu bias —.
Al terminar de decir eso, los jadeos de indignación de los miembros de Seventeen no se hicieron esperar, menos obviamente por Cheol, quien por cierto tenía una sonrisa triunfal, se podía ver claramente ya que al ser solamente ellos los que estaban dentro de aquel restaurante, se sacaron las gorras y las mascarills, demostrando así que eran mucho más hermosos que en las fotos.
Definitivamente había sido afortunada con sus almas gemelas, posiblemente había salvado la vida de alguien importante en su vida pasada o había ayudado a muchas personas, para que la vida la recompensara así, no podía dejar de pensar que se había ganado la lotería con ellos.
Saliendo de sus pensamientos, se dió cuenta que los miembros de Seventeen la miraban con adoración y un tanto de miedo, ya podría imaginar por qué, no es normal que tu alma gemela tenga 12 más, aparte de ti, entenda los pensamientos que rondaban por sus cabezas.
—Hola a todos, soy Se—rin, hermana menor de Jungkook, un placer conocerlos Seventeen —. Al decir esas palabras vi como en cada uno de sus rostros se mostraba una sonrisa gigantesca, Joshua que estaba al lado mío, me tomo de la mano y beso el dorso de esta mirándome fijamente a los ojos, sin querer romper el contacto visual.
Me puse un tanto nerviosa, pues quien no al ver a trece bellos hombres mirándote con fervor, quería conocerlos más, más allá de todas las canciones, de toda la fama, quería conocer a los auténticos Seventeen, no la superficie que muestran a los demás, queria conocerlos a profundidad.
No podía dejar de sonreír, sabía que tenía una gran sonrisa de felicidad, que obviamente no pasó desapercibido por los hombres en el restaurante, menos por Jungkook, sabía que después venía un largo interrogatorio.
—Jungkook, ¿Que te parece si invitamos a tus amigos a mi casa?, para poder estar más cómodos —. Mire sonriendo a mi precioso hermano, el asintió dudoso.
—En ese caso podríamos llevarlos, trajimos nuestros autos —. Menciona Cheol aún con su sonrsa triunfal mirando a Jungkook.
Jungkook rechaza amablemente la propuesta diciendo que también habíamos traído auto, pero que les mandaba la ubicación al teléfono de Mingyu por si se perdían, pero nos estarían siguiendo y nos encontrábamos en casa.
Vi a a los miembros separándose para ir con diferentes conductores, con Jungkook igual nos subimos al auto, conectandome a la radio del auto, puse Adore U, ya que queria escuchar toda la discografia.
Finalmente después de 7 minutos llegamos a la casa, me acerque instantáneamente al lado de los chicos, para poder caminar a la puerta, en lo que eso pasa, siento mi teléfono vibrar, indicando que me habia llegado una mensaje, era Jungkok.
Al terminar la conversación, miré en dirrección a Jungkook quien por cierto me miraba con los ojos entrecerrados mirándome con recelo, me había descubierto, en algún momento cuando estemos solos le contaré, pero ahora quiero hablar con ellos.
Ya llegamos a la puerta, encaje la llave en la cerradura y procedi a abrirla, para poder dejar pasar a mis invitados y almas gemelas.
—Sientanse como en su casa —. Menciono viendo más detalladamente sus caras a medida que pasan por la puerta en dirrección a la sala de estar, —¿Les gustaría algo, para comer o beber? — pregunto al ver que ya se sentaron todos, quedando un espacio disponible me parece que es entre Dokyeom y Jeonghan.
—Si no es mucha molestia, me gustaría un vaso con agua —. Habla Seungkwan, mostrándose un tanto nervioso, me sonrió cuando nuestras miradas se conectaron.
Asintiendo con una sonrisa, me encaminé en dirrección a la cocina, tomando el vaso y llenandolo de agua, alguien pasa sus brazos alrededor de mi cintura y apoya su cabeza en su hombro, moviendo sutilmente la cabeza me encuentro cara a cara con Mingyu.
Era moverme un poco más hacia delante y nuestros labios ya se unían, tenía unas inmensas ganas de hacer eso, quería probar sus labios, se veían tan suaves, que me gustaría— pero en que estas pensando Se—rin tiene que esperar un poco más.
—¿Qué haces aquí cariño? —. Hablo con la poca valentía que me quedaba, observé como en sus labios se formaba una gran sonrisa, se movió un tanto mas adelante, tanto cómo para que nuestras respiraciones chocarán entre si mismas.
Sentía que nuestros labios se iban acercando, quería que sucediera, quería que esté momento pasará, ya no me importa nada más, no me importa si apenas lo conozco, al fin y al cabo es amigo de Jungkook, tedre que confiar que tiene un buen criterio ¿No?.
Me moví para adelante, cortando la poca distancia que había entre nosotros dos, por fin chocando nuestros labios en el tan esperado beso, sus labios se sentían suaves, sabían super bien como a fresa o algo parecido, era como una adicción, Mingyu me tomo de la cintura y me giro, para que quedara en frente de el, acercando más nuestros cuerpos sin dejar ningún lado en dóde nuestros cuerpos no se tocaran entre si.
No quería que acabará, por mi hubiera estado todo el día besándome con él, pero tenía más invitados, que por cierto eran mi hermano y mis otras almas gemelas, ojala poder besarlos a cada uno de ellos ahora, escuchamos un carraspeo en dirrección de la puerta de la cocina, asi haciéndonos separarnos.
Seungkwan era el que estaba apoyado en el marco de la puerta, mirándonos fijamente a los dos, más en concreto, me parece que en dirección a mis labios que se habían puesto ligeramente más rojos de lo normal
—Vine porque se demoraron mucho, pero ahora que veo lo que están haciendo a mi también me gustaría participar —. Menciono el chico con una sonrisa coqueta, caminando hacia nuestra posición
Hola chikibeibes, los comento la meta para escribir el siguiente capítulo.
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Ojalá tengan una bonita semana ~^•^, nos vemos cuando cumplan la meta 💗
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