Narradora:

— ¿Sabes que Lilith? Aunque Dios nos haya hecho sin igualdad de condición, siento que seré mejor gobernado aquí en el mundo — expreso Adam a su primer esposa

— ¿Que dices Adam? — pregunto la mujer, pues era obvio que no se sometería a la voluntad del primer hombre

— Digo que yo sería mejor gobernado aquí y tú solo tendrás que preocuparte por darme a mis hijos — una sonrisa arrogante apareció en su rostro

— Adam te recuerdo que nuestro padre dijo que ambos gobernaremos en la tierra, sin que alguien tuviera más poder — le recordó, pues no sé dejaría manipular

— ¡Yo soy el hombre aquí! Así que harás lo que te diga, ¡¿Entiendes?! — la tomo fuertemente del antebrazo y este poco a poco se empezaba a poner rojo

El azabache miraba amenazante a la rubia y está no se dejó intimidar así lo amenazaba de la misma manera

— No lo haré Adam, no seré una marioneta facil de manipular para ti, prefiero ser desterrada a ser tu sumisa y madre de tus ¡Hijos! —

Rápidamente Lilith se deshizo del agarre de Adam y corrió, corrió lo más rápido que sus piernas le permitieron, ella no se dejará gobernar por el, ¡No lo hará!

Corrió un poco más y al darse cuenta que Adam no la seguía decidió descansar sobre una gran roca, suspiro por el cansancio, hazlo la mirada y observo el árbol del fruto prohibido

Obviamente no lo comería, no caería en la tentación, además su padre confío en ella para no cometer ese pecado, bajo la cabeza otra vez y pensó en como podría decirle a Dios que ya no quería estar con Adam

— Hola — una voz tranquila la llamo y Lilith levantó la cabeza — ¿Que tal? — al ver que Lilith de que estupefacta pues ella no había visto a otro ser que no fuera Adam decidió presentarse primero — me llamo Lucifer, ¿Y tú? —

Lilith sonrió, pues Adam siempre que le preguntaba algo más bien le ordenaba una respuesta

— Lilith —

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Adam se encontraba esperando a Lilith, no la iría a buscar, eso no, así que en cuanto vio que se venía de regreso se levantó, cruzo sus brazos y espero a que llegara a el, hasta que la rubia estubo al frente del azabache

— ¿Dónde estabas? — pregunto o más bien ordenó la respuesta

— No te importa Adam — trato de evitarlo pero este como anteriormente hizo la tomto del brazo

— Te pregunté ¿Dónde estabas... Lilith? —

Está irritada y con ganas de irse hablo

— En el centro del jardín, ¿Feliz? — preguntó sarcástica

— Te he dicho que no vallas allá, ahí está el fruto prohibido así que es la última vez que vaz para allá —

— Adam, tu no me puedes dar órdenes —

— Claro que puedo, ¿Sabes? Hace unos minutos hablé con Dios y me dijo que es momento de que tengamos nuestros hijos — dijo pícaro mientras la tomaba de la cintura y la acercaba al

Lilith en un rapido movimiento se quitó de encima y le dió una bofetada

— ¡Ya te lo dije Adam!, primero desterrada que tener hijos contigo —

Adam enfadado la tomo de los hombros y la tiró al césped verde asiendo que se hiciera leves raspones

— ¡Bien! Si eres tan inútil como para darme hijos le pediré otra mujer a Dios — contesto y se marchó furioso del lugar

Lucifer apareció en forma de serpiente para después volver a su forma normal y ayudar a ponerse de pie nuevamente a Lilith

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— Muy bien Adam, ella sera tu nueva esposa, Eva, la hice de tu costilla y carne, a semejanza tuya — explico una voz

Adam se encontraba mirando a Eva fijamente y ella hacía lo mismo, por otro lado Lilith suspiraba pues lo sentia por la nueva mujer de ese hombre

— Si padre, muchas gracias — agradeció Adam

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— ¡Eva! — llamo Adam — cocina este conejo —

Llevaba con su esposa unos meses y ya se avían acoplado por lo que ya tenían un pequeña casa de madera

— Si Adam, solo déjame acabar de hacer esta canasta para frutas — contesto Eva

— Te he dicho que lo hagas, ¡Ya! — le arrebato la canasta y la tiró

— Adam!, ¿Por qué hiciste eso? —

— ¡Porque te he ordenado que cocines el conejo! Tengo hambre así que hazlo ya — le trono los dedos

Eva solo bajo la cabeza con lágrimas en los ojos y empezó a cocinar el animal que le había traído su esposó

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— Eva — llamo Adam entrando a la choza — me prestas un momento a Caín —

Eva miro a su esposo, y asintió para seguir cosiendo su vestido de hojas, le encanba hacer su propia ropa, aunque a veces Adam se la hacía

Mientras que Adam fue a la sima de una montaña cargando cuidadosamente a su hijo quién dormía plasidamente, lo tomo de los brazos y alzó en dirección al cielo

— Padre!, te doy las gracias por permitirme un hijo varon, cuidare de él hasta que llegue a la madures y aprenderá a defenderse el mismo... Muchas gracias —

— No Adam, te doy las gracias a ti por siempre seguir mis órdenes, ahora ve y crea más vida, se el padre de la humanidad — contesto una voz

— Si padre —

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El tiempo siguió transcurriendo y Eva conoció a Lilith, a la primera le pareció muy amable y viceversa, aunque Adam odiaba que su nueva esposa estuviera con esa mujer así que se lo prohibía

Por otro lado Lilith tenia más visitas frecuentes con el ser de luz y poco a poco se iban enamorando

Un dia, mientras Lucifer estaba en una de sus tantas visitas con Lilith este le propuso algo

— ¿Quieres... Probar la manzana? — propuso

— ¿Que? — dijo desconcertada Lilith

— Si bueno, si la pruebas tu mentalidad se compara como la de Dios y serás tan fuerte como el — explico

Lilith se quedó pensando unos minutos pues no sabía que decir

— Pero Dios nos dijo que era la única regla, y tengo miedo de que algo malo llegue a pasar — dijo sin temor

— Vamos Lilith, si quieres le podremos decirle a la nueva esposa de Adam, Eva, ella tal vez acepte y verás que nada malo sucederá — extendió su mano y Lilith la tomo dando a entender que aceptaba

Lucifer tomo la manzana más cercana y camino junto con Lilith en busca de Eva hasta que lo encontraron

— ¡Eva! — llamo la rubia a su amiga y se empezó a acercar junto con su amor

— Hola — saludo

— Mira Eva el es Lucifer, Lucifer ella es Eva — los presento

Un "mucho gusto" salió de los labios de ambos

— Pensé que Adam era el único hombre aquí —

— Si, lo es linda, yo soy un ser de pura luz y vengo de allá arriba, del cielo — explico

Eva quedó maravillada por lo que dijo

— Wow, entonces tú estás con nuestro padre — empezó a acercar una valla silvestre a su boca

— Ah, ah, ah, ah — dijo Lucifer antes de que Eva comiera la valla

— ¿Que? —

— Bueno, creo que si gustas un gran dolor de cabeza y estómago querrás comerla —

Eva soltó la valla

— ¿Cómo lo sabes? — dijo curiosa pues ya había comido alimentos que le hacían daño

— Porque si, si gustas tener los mismos conocimientos que yo te puedo sugerir que pruebes la manzana, está te dará el mismo  conocimiento que Dios — sugirió

— ¿Pero... Ese no es el fruto prohibido? —

— Dios les dijo eso porque no quiere que sepan lo mismo que el, vamos una mordida y serás como un dios — Lucifer le extendió manzana — ya no serás más la sirvienta de Adam porque me imagino que es lo que quieres —

— Vamos Eva, serás mejor que Adam y ya no tendrás por qué seguir sus órdenes — dijo Lilith tratando de convencerla — podrás defender a tu hijo sola, sin depender de Adam — Lilith le ofreció la manzana a Eva, pero ella se mostró dubitativa —

— Pero Dios dijo que esto es la única regla que no podemos romper — expreso con cara de preocupación

— Es que el que te dijo eso, Dios, tiene celos — explico Lilith —, Dios está celoso de que existan seres como nosotras que estamos a su misma altura —

Eva dudosa tomo la manzana,pensó unos instantes recordando el como la trataba Adam a ella si que para acercó la manzana a su boca y morder la y no pasó nada durante los primeros segundos

— ¿Vez?, te dije que nada malo sucede... —

De repente el cielo se torno oscuro y Adam comprendió que no era una buena señal y corrió en busca de Eva, en cuanto la vio corrió más rápido hacia ella

— ¡Eva! — la llamo — ¡¿Que carajos hiciste?! — pregunto en cuanto estuvo en frente de ella y observo que tenía aquel fruto prohibido entre manos y enfurece — ¿Porque mierda lo hiciste?! —

— Lucifer me dijo que tendría el conocimiento de Dios y acepte — miro de arriba a abajo a Adam — ¿Por qué estás desnudo? — dirigió su mirada a Lilith  y de igual manera la escaneo — igual que Lilith, ¿Porque estás desnuda? —

No tuvieron tiempo de contestar pues una voz se hizo escuchar

— ¿Por qué dices eso Eva? —

Todos se quedaron callados ante la imponente voz

— ¿Lucifer que haces aquí? — pregunto

— Padre yo... — lo interrumpe

— No trates de mentirme Lucifer, se que le ofreciste el fruto prohibido a Eva y que ella lo probó, ¿Porque me desobedeciste Lucifer y Eva?, ¿Porque ayudaste a Lucifer Lilith? — les preguntaba enfadado pues habían roto la única regla que se les puso — Adam, ¿Porque no comiste tu igual del fruto? —

— Porque no padre, porque esa fue la única regla que le pusiste y la respeto — miro a Eva y Lilith enfadado

— Lucifer y Lilith han creado un vacío de desobediencia así que los destierro a ese horrible lugar — un grieta se empezó a abrir en el suelo

— Padre no por favor — pidió Lilith

Un gran viento hizo que ambos amantes cayeran en el abismo

— ¿Eva porque lo hiciste? —

— Padre solo quería ser como tu —

— Ahora serás desterrada del jardín del Edén, allá afuera tendrás que cultivar y buscar tu propio alimento y tendrás que subir una vez al mes la menstruación y el parir un hijo será el dolor más comparado a la muerte, ahora todas las mujeres serán manchadas al igual que tú así que ahora, ¡Fuera! — ordenó y sin remedio Eva se fue del jardín

— Padre — llamo Adam — ¿Que haré yo? —

— Espera un poco Adam, si gustas probar la manzana hazlo, no habrá consecuencias en ti, gracias por no desobedecer —

— Al contrario padre, gracias por dejar que me quedé y que pruebe el fruto —

Adam ya no tuvo respuesta pero supo que fue escuchado por lo que camino hacia el árbol de manzanas

No mentiría, tenía mucha curiosidad de saber que ocurría si comía esa fruta, en cuanto llego a el árbol tomo la manzana más cercana y la mordió

Su mente se iluminó y se lleno de sabiduría y de cosas que no sabía

Regreso a casa pero al entrar no vio a su hijo, lo busco por todos lados pero no lo encontro, tomo una lanza y la boto con todas sus fuerzas, quedando clavada en un tronco, Eva se abia llevado a su hijo...

[ ❦︎ ]

Ya habían pasado unos meses y Dios se encontraba pensando de que manera podía hacerle una mujer a Adam que obedeciera y que lo amara de manera grande para que no lo dejara

Después de un tiempo suspiro y camino un poco, ya tenía la solución de como crear a una mujer perfecta, no había servido hacerla del polvo ni de la costilla de Adam por lo que tomo una pequeña daga y respiro un como mientras desnudaba su abdomen

Dirigió la daga a su abdomen y empezó a cortar cerca de su corazón, el dolor se hacía insoportable pero siguió, poco tiempo después llegó a su corazón y tomo la parte que le parecía más pura de él y cortó soltando un grito desgarrador

Saco aquel trozo de órgano y rápidamente curo su pecho y ya no sentía dolor ni nada de eso por lo que empezó a moldear de la mejor manera posible,  haría que ella tuviera un corazón puro y noble, incapaz de hacer daño a alguien o algo

Su piel sería blanca como la nieve y la pureza, una pequeña boca con labios medianos algo rojos  de la cual saldrían cosas hermosas, unos ojos grandes morados para ver la belleza del mundo, entre sus dedos tomaba mechones de cabello lacios y los enrollaba asciendo que quedarán rizados, hizo su nariz pequeña y respingo un poco

Ahora solo faltaba darle vida e hizo apetecer un gran puñal de flores moradas hermosas que cubrieran todo su cuerpo y le dió vida, está abrió sus ojos de color morado, estaba algo desconcertada pero feliz, sin saber porque razón y se sentó haciendo que las flores cayeran quedando unas en su cabello negro, se sentó ya que sentía que no podía ponerse de pie y mas flores se cayeron dejando su cuerpo expuesto por lo que Dios sabiendo que Adam ya abia probado la manzana decidió crear una malla algo transparente del mismo color que sus ojos y se la coloco

— Gracias — fue lo primero que dijo

— De nada... ___ —

___... Ese sería su nombre

[ ❦︎ ]

Fue despertando poco a poco encima de las mismas flores que estuvieron presentes en cuanto tuvo vida

A lo lejos Adam la observaba, no otra más, ya se había acostumbrado a estar solo y no quería una molestia más así que camino a ella

— ¿Quien eres tu? — dijo mientras la apuntaba con un tronco delgado con una punta muy fina capaz de cortar

— Hola, soy ___, ¿Y tú? — pregunto entusiasmada al ver al hombre

— Adam, el primer hombre creado en la tierra — aclaro

— Mucho gusto Adam!, espero y nos llevemos muy bien — extendió su mano con intención de saludar

Adam pensó que en realidad quería que la ayudara a pararse por lo que no hizo nada y ___ bajo su mano apenada...

Apariencia de ___