[𝐴𝑐𝑜𝑛𝑡𝑒𝑐𝑖𝑚𝑖𝑒𝑛𝑡𝑜𝑠]

La joven de cabellos rubios corría desesperada por la solitaria calle de Japón,todas las casas estaban apagadas y los pósters en la banqueta lograban iluminar un poco su empañada visión,estaba afónica de haber gritado y como quiera aunque estuviera sana de la garganta nadie saldría por una loca en la calle,la sangre saliendo por su costado derecho no se detenía y los golpes previamente dados después de haber sido abusada le cobraban
factura,sabía que no llegaría tan lejos y que sólo por salir una tarde con sus amigos del trabajo jamás volvería a ver a los seres que ama.

—<<No quiero morir,no quiero morir,no quiero morir,no quiero morir>> —Pensó desesperada,no tenía un tema claro en su mente para pensar.

Tenía la blusa arrancada totalmente y su brasier mal puesto,sujetaba su herida deseando que se detuviera a la vez que cada vez era más débil en cualquier momento su muerte sería inminente y no podría hacer nada para detener ese suceso tan injusto.

Sabía que aquel o aquellos hombres la seguían lentamente por diversió,jugaban con ella como un gato con un ratón antes de comerlo cruelmente.

Corría enfrente deseando que haya alguién enfrente,aunque finalmente no pudo más,sus piernas se tropezaron haciendo que ella cayera para enfrente cayendo al mojado piso ya que hace una hora estaba lloviendo,el impacto el cual intentó no raspara su cara poniendo sus brazos como escudo  provocó que sus codos tuvieran un feo color y lo peor es que su mejilla impactó contra la fría cera de la calle.

Ya no soportaría más mientras intentaba procesar unas últimas palabras cuando frente a ella logró ver a esos dos hombres frente a ella que la veían con una descarada sonrisa aún después de las atrocidades que hicieron,sus ojos se inundaron de lágrimas totalmente mientras elevaba la mierda y con sus últimas fuerzas procesaba sus últimas dolorosas palabras a la vez que tocia sangre.

—¿P-po-por qué? —pregunto con voz tremula con las lágrimas bajando por sus frías y lastimadas mejillas.

—Fácil linda —comentó el primero mientras ambos se ponían de cuclillas frente a ella y él elevaba él mentón de la joven para ver su última expresión de odio y rencor.

—Porque estabamos aburridos —contestó el segundo para después darle el golpe de gracia clavando un cuchillo en su espalda.

Así fue la muerte de aquella inocente mujer que solo pudo ver por última vez él rostro de sus asesinos viendo esos ojos brillantes bajo la máscara negra con esas escalofriantes sonrisas.

[...]

—¡Tienes suerte de que no fue más grave! —exclamó la doctora.

Había pasado una semana,estabas sentada mientras una doctora ahora si de un hospital te daba los medicamentos necesarios,al final resultó que los golpes de tu cuerpo ya eran mucha molestia.

Tenias que volver a la universidad para ir a clases,eran las nueve y media de la mañana,otra vez estaba nublado afuera,hacia algo de frío cosa que en cierta parte te ayudaba mucho a lidiar con todo,después de todo estaban en pleno otoño y en un mes en un frío invierno que tal vez en unos meses te habria ayudado más.

—Debió haber venido desde el principio,por suerte no tenía costillas rotas pero una caída tan fuerte de las escaleras es grave —La doctora te dió los medicamentos en una bolsa.

—Lose,gracias —te levantaste y sin despedirte te retiraste de allí.

Toda la semana había sido una tortura,el hecho de que estuvieras golpeada no quería decir que por eso te iban a dejar,las burlas de Ume y el resto no por eso pararon, tu único consuelo era que nomás acabará el año que ya sería por los seis meses te suicidarias y ya jamás volverías  a ver a nadie.

Saliste de allí de una vez,te habían también dado otro vendaje para todo tu torso,no estabas tan segura de querer ir a la universidad,te recomendaron guardar reposo pero los deberes y las responsabilidades no esperarían.

Ya afuera del consultorio no pudiste evitar suspirar profundamente y te recargaste en la pared del pasillo,se te había olvidado algo esta mañana,pusiste tu mochila frente a tí donde sacaste tu bolsa pequeña  de maquillaje para el día a día y extraiste tu labial color coral.

<<¡Claro que el labial le va a durar 6 meses si desea muchacha! Llevelo llevelo>>

Recordaste las palabras de la vendedora de tu tienda de maquillaje confiable.

Ya llevabas unos seis días con el,así que lo abriste poniendo un espejito frente a tus labios y lo empezaste a aplicar con una generosa cantidad esparciendolo con tu dedo,al menos pensabas que tu única cualidad era maquillar y tener cerebro,pero cada vez dudabas más de eso.

—¡¿Junko?! —exclamó esa voz masculina que menos esperabas ver.

Volteaste con miedo guardando los medicamentos dentro de tu mochila junto a tu maquillaje y pusiste una débil sonrisa.

—Hola papá —saludaste mientras se acercaba a ti y tu corazón poco a poco empezaba a calmarse.

—¿Qué mierda haces aquí? —preguntó en voz alta tomandote bruscamente del antebrazo acercandote a él— deberías de estar en la universidad.

La presión de más yemas de sus dedos en tu brazo eran doloroso,cerraste los ojos con fuerza intentando explicar sin tartamudear.

—Papá me estás lastimando —balbuceaste nerviosa procurando no tartamudear— vine a un chequeo,ya me iba a la universidad,le avise a mis maestros de esas horas.

—¿Un chequeo? —la explicación solo pareció alterarlo más provocando que presionará con más fuerza a tal punto que empezaste a dar varios quejidos— ¿Para que eh? ¿Un maldito ultrasonido o que?  Es que acaso ya quedaste embarazada —insinuó jaloneando tu brazo encerrandote más en el rincón.

—N-no papá —contradijiste a la vez que te estrellaba contra la pared cerraste los ojos deseando que alguien viera al menos y te salvará— vine por un jarabe para la garganta y el dolor de estómago,recuerda que estaba muy enferma.

El ceño de tu padre mínimamente se calmó,tus ojos estaban a nada de empezar a derramar las lágrimas,tu propio consuelo al menos servía de algo.

¿Por qué no te defendias y por qué nadie lo hacía a pesar de que la sala de espera estaba llena?

Fácil,tu padre era policía y no cualquiera,si no que prácticamente se ocupaba de su propia comisaría y estaba muy bien parado por toda la corrupción que hacía,encima con su aspecto nadie se atrevería a siquiera preguntarle el porque maltrata a su hija en plena luz de un hospital.

Era alto y a pesar de su edad tenía un cuerpo de un completo adicto al gym en sus plenos veinticinco años,era casi un gigante comparado contigo,su cabello azabache como la noche y su severa mirada con esos escalofriantes ojos azules. Con un carácter horrible y un fuerte alcoholismo pero todavía cortejado por muchas mujeres,en esas incluso estuvo Ume Shabana cuando un día te fue a recoger a la universidad.

Comparada con el tu no eras nada,te daba miedo el solo hecho de que te alzará la voz,hace tres años no te ponía una mano encima aparte de los jalones y repetidos empujones pero los recordabas como si fuera ayer,un recuerdo que no lograbas bloquear.

En tus adentros te preguntabas si el también contribuía en tu idea de querer acabar con tu vida,sabías la respuesta pero no querías aceptarlo,ahora en estos momentos que soltaba tu brazo y empezabas a calmarte solo deseabas que este momento acabará.

—Papá ya acabó mi consulta,me tengo que ir a la universidad —dijiste mientras retrocedía— por cierto...¿qué estas haciendo aquí?

Al escucharte empezó a tallar el centro de su entre cejó como si estuviera irritado.

—Está habiendo muchos asesinatos desde el último mes —explicó,estabas algo acostumbrada a eso desde que tienes conciencia— hoy a las cuatro de la mañana encontraron a una mujer muerta en plena calle,tiene signos de abuso sexual,no encontramos una sola muestras de ADN en ninguna parte y los mandos superiores me están volviendo loco.

—¿Ya hablaron con la familia de la víctima? Si es que ella tenía ya sabes,problemas con alguien —comentaste algo apenada,mientras te tomaba del brazo para empezar a guiarte fuera del pasillo,al parecer toda la atención se desvió a su trabajo,no era muy legal que te platicara los casos pero te usaba para sacar sus frustraciones.

—¿Me tomas de imbécil? Claro que fuimos a primera hora a interrogar  a los familiares,solo empezaron a llorar y a gritar que su hija era buena y no tenía problemas con nadie agh lo típico de siempre —continuó con molestia— es obvio que esto va a ser un caso serial,al menos eso sospecho, se parece mucho a un caso que apareció hace veinte años.

—Oh ya veo,me imagino que estaras muy agotado en estas fechas —apoyaste acomodando bien tu mochila—  espero no sea los mismo que hace veinte años aunque ¿por qué piensas que es lo mismo?

—Niña,lo se porque yo estuve también en ese caso —reprendió y cuando te ibas a ir por tu lado te tomó de la muñeca otra vez para que no te vayas— un idiota o varios mataban a diestra y siniestra,hubo una persecución pero lograron escapar con vida,aunque supongo que ya deben ser unos ancianos,decían que podrían tener unos treinta o cuarentena años,si no son ellos unos imbéciles deben de andar copiando la misma idiotez y hay un patrón y no te vayas todavía ocupó un café.

—¿Qué patrón papá? —sabías que tenías que seguir con el,quería que tomaran un café porque quería demostrar que tiene razón y la verdad es que quiere dar su opinión en algo que sabe que tiene razón.

—Siempre golpean a la víctima y la abusan apuñalan en el torso con cortes pequeños y muy rectos pero en algún  costado del torso hacen un corte especial en horizontal y profundo que perfora las entrañas y luego las dejan "escapar" las hacen creer que huyen pero no es así al final cuando ya están en el piso las apuñalan en la espalda, son una molestia para nosotros pero esta vez los atraparemos —sonrió y tomó un vaso de café cargado de la máquina.

—Ya veo entonces espero te vaya muy bien en este caso como en todos los anteriores papá —diste un sorbo a tu café caliente previamente endulzado por dos sobres de azúcar— creo que me tengo que ir,el camión va a pasar en cinco minutos.

—Te voy a llevar —sentenció.

—¿C-como? papá no es necesario yo llegare rápido a la un-.

—Que yo te llevo he dicho y se acabó —terminó con molestia— te conté algo importante y puedes correr riesgo yendo sola,aparte llegaras más rápido.

—Muchas gracias en serio —sonreiste débilmente.

—Ni creas que lo hago porque quiero mocosa es por cosas confidenciales así que ni te emociones  —advirtió y le arrojó las llaves de algo a su compañero quien los iba siguiendo— Kenzo ve a la morgue y asegúrate de entregarme el reporte completo para las doce del medio día.

—De acuerdo señor —dijo el muchacho tomando las llaves— gracias por darme este importante trabajo.

Sentiste algo de pena por el chico,los novatos o de otras estaciones creían que estar haciendo el papeleo del reporte era muy válido sin saber que prácticamente no era ni tomado en cuenta para un buen comportamiento.

[...]

Salias a lado de tu padre del hospital,afuera estaba más frío de lo que creías,pero en cierta parte te gustaba un poco el atuendo que tenías ya que era caliente para ti pero algo siempre faltaba para que logrará ser perfecto.

Lucias un suéter café  sencillo de manga larga,unos pantalones de mezclilla holgados para que no definieran tus piernas,unos tenis blancos algo desgastados y tu mochila amarilla celeste.

Tu cabello estaba sujetado en una pinza y cargabas con un maquillaje natural casual a prueba de agua por si acaso,traías también un paraguas negro por si llovía.

No se hablaron en todo el camino,estabas en el asiento del copiloto mientras el conducía de manera rápida,presentías que se arrepentía por llevarte pero no quería dejarte allí nomás en pleno centro de Japón.

[...]

—Adiós papá —te despediste apenas saliste de la patrulla— cuidate... —tus palabras se desvanecieron en el viento,ni siquiera dijo nada.

No le tomaste atención y empezaste a ingresar,había gente que apenas llegaba por sus horas o porque querían,faltaban diez minutos para ir a tu clase y sabias que tenías que apurarte.

<<Vamos Junko,solo es esta hora ya siguiente,luego nos vamos de aquí y podremos irnos a descansar tal vez un poco>> —intentaste animarte mínimamente.

Así que de manera pesada tomaste aire ingresaste a pasos grandes y rápidos,encima tendrías que hacer los trabajos de las dos horas en las que estuviste ausente y encima repasarlos por si ponían exámen.

Pero ya no quisiste pensar en eso,miraste a tu alrededor con pesadez,el problema no eran las instalaciones eran las cosas que pasaban dentro,era gigante la universidad y fue tu sueño por un año  enteró hace dos años que fue antes de que entrarás.

Había un gran estacionamiento, edificios enormes y bellos árboles dentro,todo parecía casi de plata a pesar de que dentro era un infierno si no contabas con el dinero suficiente y nadie podía hacer nada al ser ya mayores de edad.

Ibas pasando por la entrada principal que era algo grande y que era un pase directo a un edificio principal,solo deseabas acabar con tus cuatro años de carrera rápidamente.

Tallaste tus ojos para empezar a apurarte,era algo difícil caminar con unas vendas en todo tu torso, ya no te molestaba mucho por lo acostumbrada que estuviste al  maltrato físico especial en estos dos años.

Rápido empezaste a ir a tu edificio y a tu salón en especial,ya habías entrado y cruzabas los pasillos teniendo cuidado con cada movimiento mientras dabas pequeños sorbos a tu café todavía caliente.

Te faltaba doblar un pasillo cuando de manera repentina sin que siquiera pudieras darte cuenta un cuerpo claramente más fuerte que el tuyo te clavo contra la pared de manera que tu espalda se estampó y varias gotas de café se derramaran al piso.

Habías cerrado los ojos al momento aunque lograbas sentir a esa persona frente a ti por el calor que emanaba su cuerpo.

Abríste con lentitud los ojos viendo directamente a Sekido frente tus ojos,sus ojos rubis fueron un terror para tu corazón de un momento a otro aunque antes que siquiera pensaras escapar estampó su mano en la pared a lado de tu cabeza para que no huyeras,considerablemente eran más altos que tú y eso te hacia sentir más vulnerable de lo que ya eras,las palabras no salían de tu boca para reclamarle nada,era como si tuvieras al mismos diablo en frente.

—¿A donde es que ibas pequeña zorra y donde mierda estabas? —interrogó tomando bruscamente tu quijada y presionarla con la fuerza de su mano, te dolía demasiado aunque la quitó— me enteré de la visita de Karaku y Urogi a tu trabajó ¿Qué creíste? ¿Que no me enteraria?

—N-no —lograste explicar,cosa que era casi imposible ya que ahora procuraba presionarte con su cuerpo y encima procurabas no derramar tu café,su presencia te hacia tartamudear mucho.

—¿No? ¿No qué maldita tartamuda? —reprendió.

—Yo no sabía que Urogi y Karaku iban a ir a mi trabajo —iniciaste desviando la mirada— nunca creí que con esas intenciones,les recordé que habíamos terminado,no fue mi culpa,y yo solo estaba con mi papá,el me trajo.

—Te saltaste la maldita parte donde te empezaste a rendir ante ellos —una sonrisa casi de maldad pura se formó en su rostro— justo para evitar que suceda otra vez,tú y yo vamos a ajustar cuentas.

—¿Ajustar cuentas? —pasaste saliva con fuerza.

—Si y hablaremos ya jodida puta —exigió— ahora mismo y de paso hacer algo por tus celos hacia Karaku y la puta que lo acompañaba,ocupó demostrarle a ese estúpido frentón a quien mierda le perteneces.

No pudiste contraatacar cuando sus labios estamparon los tuyos de manera que tus pechos y el pecho de él estuviéran muy pegados a los tuyos,sabías que no sería la última vez en que te haría eso,frunciste el ceño en el momento que tomó tu vaso de café y lo lanzó al bote de basura a la vez que te clavaba y empotraba más contra la pared poniendo tus dos brazos por encima ahora de tu cabeza.

Su beso era brusco y brutal,nunca fue gentil en ese aspecto su lengua un poco más tocaba la campanilla de tu garganta mientras intentabas forcejear para que te soltara su húmeda lengua buscaba recorrer cada pequeño espacio de tu cavidad bucal procurando hacer que enrollaras tu pierna en su cadera,claro que era orgulloso pero no sabías porque no se llenaba con Ume.

No sentias nada de emoción con ese beso tu boca solo intentaba despegarse de la suya,solo los primeros horrible meses de novios te emocionaban mínimamente,el perfeccionismo de Sekido,sus maltratos físicos y psicológicos era imposible tener una conversación con él que no sea sobre si mismo o sus celos,eso fue una tortura aún más en la primera cita que organizaron.

Solo deseabas que se aburriera de una vez,no le seguías el beso por más brusco que fuera,hace una semana estabas obligada por estar con esos dos monstruos encerrada pero esta vez sí te golpeaba allí mismo incluso los maestros le llamaran la atención.

—Corresponde...Junko —exigió entre besos,quedaste algo sorprendida con eso,te daba más miedo que dijera tu nombre y que no te dijera "estúpida" por más humillante que fuera...ya estabas acostumbrada a eso.

Su mano libre se puso en tu cuello donde empezó a hacer presión,si la falta de aire ya era difícil,esto era peor,era su primera advertencia y lo sabías,si no correspondías de una jodida vez sería capaz de asfixiarte hasta que quedes morada.

Así que de manera forzosa empezaste a corresponder en lo que podías,sabías lo que quería y que los otros tres Hantengu's deseaban,eso era pasión puesta de tu parte,era lo que tanto les gustaba de Ume y de otras chicas,querían que tú te vieras como una necesitada de su mínima atención,su mano seguía poniendo un poco de presión,así que con tu pierna puesta en su cadera,lo pegaste más a tí y sus pechos estaban pegados totalmente,esto funcionó así que soltó tu cuello y la puso en tu espalda baja,decía que odiaba tu cuerpo pero te solía tocar algo seguido cuando estaban solos.

—¡¡HEY!! —vociferaron tras de ustedes— ¡¿QUÉ DIABLOS CREEN QUE HACEN?!

Era un maestro,tu salvación total,obviamente el beso se detuvo y ambos lo miraron mientras los regañaba entre gritos aunque pareció callarse al ver a Sekido,por un momento pareció quererse burlar.

Pues Sekido tenía los labios llenos de tu labial color coral en los labios tanto como fuera.

—LARGO DE AQUÍ —pareció reaccionar y allí viste que era tu maestro,el que te tocaba y que casí nunca veías— Y TU YASUSHIRO NO PASAS A MI CLASE.

Tu esperanza se esfumó rápidamente pero aprovechaste para bajar tu pierna de su cadera y te liberaste cuando bajo la intensidad de su agarré.

—YASUSHIRO DI ALGO —te llamó el maestro en un grito— MI MEJOR ALUMNA SE ESTA BESANDO CON SU NOVIO EN EL MALDITO PASILLO AL MENOS DI ALGO.

—Lo siento maestro —te disculpaste rápidamente haciendo pequeñas reverencias— lo siento mucho,con permiso ya me voy.

Pasaste bajo Sekido con cuidado y empezaste a irte rápidamente ocupabas algo frío en este momento,te sentias otra vez sucia y empezaste a correr de allí.

Bajaste las escaleras de manera veloz e irías a comprar algo a la cafetería aunque algo te volvió a detener.

—¡Estúpida regresa acá! —ordenó Sekido al inicio de las escaleras,en ese momento tu ibas a bajar más pero viste que no tenía los zapatos abrocados.

—Sekido cuida-AHHHHHH —gritaste aterrada cuando empezó a rodar por las escaleras hasta que se estampó contra el piso.

Cubriste tu boca con la palma de tu mano,en este momento no sabías si reírte,llorar,pedir ayuda o tomarle una foto en la posición que cayó parecía una cucaracha.

Pasaron los segundos y no se levantaba para nada así que solo sacaste tu celular y le tomaste una foto.

—Pff —no pudiste aguantarte un poco la risa,en serio que por más que no quisieras reirte esta era una de las pocas veces en las que el karma hacia de las suyas así que le tomaste unas dos fotos más.

Empezaste a escuchar pasos arriba así que de inmediato fuiste hacía abajo directo a la cafetería,tal vez más al rato retocarias tu labial,comprobaste si estabas manchada pero no.

[...]

El resto del día estuviste tranquila sin que siquiera Ume te molestara según los rumores ella y los demás estuvieron acompañando a Sekido.

Ya era salida,te habías pedido otro café habías soportado así que ibas con cuidado,él había desacomodado un poco tus vendajes pero ya por suerte en el baño lo habías solucionado.

Hoy planeabas en tu trabajo investigar un poco sobre el caso que tu padre tenía entre manos,siempre que podías le ayudabas un poco a investigar a fondo el caso,eras buena en recopilar información,de hecho tu padre siempre quiso que fueras policía pero la idea se le descartaba apenas y cumplías otro año de vida.

Ya ibas a llegar al portón de la salida principal cuando lograste ver a la mini pesadilla que cada que podía te mandaba mensajes he insistía sobre cuando se podrían ver.

—<<Pero-.con un coño que son las once de la mañana,ya tuve muchas sorpresas no puede ser,maldito cabezón le advertí que no viniera hacia acá ¿no le bastó con la semana en visto? Ahora que lo pienso ¿como sabía que yo estaría aquí? Nunca le dije mis horarios>>

—¡Junko Junko! —llamó felíz moviendo su manita de un lado a otro justo cuando planeabas darte media vuelta e irte por otro camino.

Así que casí corriendo te le acercaste con el ceño fruncido y los brazos cruzados,le habías prometido que no te matarias hasta los seis meses y lo esperabas cumplir,pero a fuerzas quería meter su cuchara en ese aspecto.

—Kamado,te advertí que no te quería volver a ver aquí —dijiste tratando de ser firmé en cierta parte con alguien tenias que desquitarte— lárgate,te dije que estaría ocupada toda la semana.

—Pero si ya pasó la semana,tu nos dijiste aparte de que te mande muchos mensajes pero no los contestaste ¿tenias mal internet?—replicó con una sonrisa— incluso es martes aparte ya deberias estar libre y esta vez Inosuke y Zenitsu se quedaron en el auto.

—Kamado ¿te puedo hacer una pregunta?

—¡Si! —contestó emocionado.

—¿Como mierda sabes mis horarios? Nunca te los dije —preguntaste seriamente preparando ya una ruta de escape.

—Ah —pareció medio congelarse con esa pregunta— l-lo diji-zhgs —de la nada empezó a decir cosas,estaba rarísimo era como si fuera a decir algo— ¡Yo le pregunte a uno de tus compañeros! —confesó en un grito que sinceramente te causó algo de vergüenza cuando los demás empezaron a verlos.

—Pero...

—Lo siento es que no contestabas,se que estuvo mal pero estuve pero los tres estuvimos preocupados por ti —dijo algo apenado.

—Bueno pues —te quedaste pensando en como decirlo— tengo que irme a trabajar.

—Agh no —su cara tomó una expresión triste,en cierta parte sabías sus intenciones pero a la vez no querias ceder— lo siento Junko.

—Espera —lo tomaste de algo antes de que se fuera,no soportaste que se fuera tan melancólico— ¿A donde vamos a ir?

Volteó y de inmediato sus ojos rojos brillaron más que nunca de inmediato se te abalanzó para abrazarte a pesar de que bueno le había preguntado a alguien random sobre tu horarios y estuvo como un friki de seguro checando cuando salias.

No te gustaba el contacto físico pero con algo de desagradó le diste varías palmadas en la espalda y lo alejaste un poco.

—IREMOS A...¡¡MAGIC GAMING!! —exclamó con una sonrisita de oreja a oreja.

[🌧Rumores de la era moderna🌧]

Tanjiro: ¡Hoy les vengo con dos  secretos sobre Junko que acabó de descubrir!

Junko: ¡¡USH!!  CÁLLATE MALDITO FRENTON CHISMOSO —la jalan para otra parte.

Tanjiro: Bueno bueno —😀— el primer secreto es que a Junko le fascina el café el caliente y cuando digo caliente es porque lo ama hirviendo,lo toma en cualquier situación y parece calmarla mucho.

Zenitsu: BUUU eso ya lo sabíamos Tanjiro se la paso tomando tres cafes en toda la mañana —lo sacan— AH

Tanjiro: 🙂💢 El segundo secreto —se acerca y susurra— Ella y Ume fueron amigas al parecer hace dos años,pero parece que es por los novios de Jun ☹️ que triste que una amistad se arruine por poco hombres como ellos,aunque todavía nose porque ahora Ume molesta a jun en fin ¡Descubranlo conmigo! en el siguiente capítulo "Un nuevo pasatiempo"

Junko: ¡¡SE SUPONE QUE YO TENÍA QUE DECIR ESO MALDITO FRENTÓN ENTROMETI-AHHH —se la vuelven a llevar.

Esperó les haya gustado el capítulo

La verdad no me gustó como quedó en la mañana así que lo volví a hacer para ustedes

Recuerden ayudarme con su voto,me ayudaría demasiado a crecer,muchas gracias por su apoyo,ya estamos llegando a los 730 seguidores.

Estoy intentando mejorar con todo en general.

Voy a ver si puedo subir los primeros caps de zoha y tomioka 😿 la verdad es que estuve algo estresada y ocupada,no me convencieron los últimos 3 caps corazones pero perdónenme,espero les guste

Bays