Jimin sentía un fuego que lo consumía, la necesidad de tener a su alfa dentro de él era cada vez más y más.

Y es por eso que a buena mañana estaba encima de su alfa moviendo sus caderas deliciosamente, Jungkook lo sostenía de sus caderas con ambas manos, disfrutando de los sútiles pero certeros movimientos de su omega.

Nunca imaginó amanecer así, con su omega pegado a él buscando de su atención. Pero ¿quien era el para negarle algo? Las súplicas y esos ojos llenos de deseo lo hacían no negarse. Además de, desear cada parte del cuerpo de su omega.

- Ahh alfa... ¿Te gusta?~...

Jimin movía sus caderas de adelante hacia atrás, sus manos posaban en los pectorales de Jungkook. Echó su cabeza hacia atrás ante lo bueno que estaba siendo el sexo mañanero.

- Me encanta omega, no pares.

Y el omega descarado no tenía pensado hacerlo. Esta vez empezó a dar pequeños saltos, Jungkook apretó sus caderas mientras saltaba sobre su pelvis. Su omega era demasiado bueno.

¿Acaso su omega era una mezcla de mimado y descarado en su celo? Porque no solo exigía mimos y atención, también buscaba su cuerpo, lo tocaba sin ninguna vergüenza, era una imagen nueva para Jungkook, pero así también le gustaba.

- Ohh~...Jungkookie... Alfa~-Gimió cuanto sintió su orgasmo, y dando unos cuatro saltos más se corrio manchando el abdomen del alfa.

Jungkook tomo sus caderas y le ayudo a seguir saltando para poder llegar el también a su orgasmo. Lo hizo luego de un rato, llenando a su omega con su esencia y nudo.

Jimin se dejó caer el pecho del alfa, este lo abrazo. Ambos cansados y sudorosos.

Cuando el nudo bajo tomaron una ducha por separado, porque Jungkook sabía que seguirían con su ronda de pasión si lo hacían juntos.

Primero fue Jungkook, luego Jimin.

Jungkook busco entre la ropa que había usado el día anterior, por la emoción y las confesiones que se habían hecho había olvidado darle algo muy importante a Jimin.

El omega salió ya vestido del baño, Jungkook se acercó a él para abrazarlo. Jimin quien secaba su cabello con una toalla lo miro para luego sonreirle.

Por el momento no sentía la necesidad de estar con su alfa, ni tampoco ese fuego abrazador qué le consumía. Por un momento creyó que tendría un celo fuerte, donde pasaría en la cama todo el día con su alfa y recibiendo el nudo de este muchas veces.

Pero las manos de Jungkook estaban en su vientre, dando leves caricias que lo estaban haciendo estremecer.

- Ayer iba a darte algo y se me olvido.

Jimin dejo la toalla y se giro completamente para estar frente a su alfa.

- ¿Que era? -Pregunto curioso.

Jungkook saco la cajita, Jimin miro el objeto y luego a Jungkook, sus ojos no podían creerlo, ¿acaso era...

- No son de matrimonio. -aclaro el alfa.

Pese a que en ese momento no se sentía listo para un matrimonio, esas palabras no evitaron causarle desánimo. Por un momento creyó que Jungkook le pediría matrimonio. Su omega había saltado de felicidad al ver la caja e imaginarse al alfa pidiéndole matrimonio.

Pero al igual que él, se desánimo un poquito.

- Más bien son de promesa, -Jungkook saco ambos anillos.
- algo que les dice a los demás que tú eres mi omega, y yo soy tú alfa. Que tu corazón me pertenece, así como el mío te pertenece a ti. - Jungkook tomo la mano de Jimin y deslizó el anillo en su dedo anular.

- Es hermoso alfa. Gracias por el detalle. -Jimin le dio un beso. Su corazón iba rápido por la felicidad y la emoción de las palabras de Jungkook.

- Y no solo eso ángel, también significa que algún día no muy lejano te pediré matrimonio. -entonces los ojitos de Jimin brillaron - Así que recuerda cada vez que mires el anillo, que tú, te casaras conmigo.

Jungkook levanto sus manitas y dejo varios besos en ellas.

- Nunca me cansaré de decirte que eres un alfa maravilloso y el mejor. - Jimin se abrazo al alfa, sus feromonas pegandose a su cuerpo. -Te amo alfa, gracias por todo.

- Yo también te amo cariño.

Se separaron solo un poco del abrazo para besarse. Un beso que empezó a ser diferente, sus lenguas llegandose a tocar, y de allí, ni Jimin ni Jungkook supieron como llegaron a la cama y volver a hacer el amor. Sin duda el celo de ambos empezaba, y el siguiente día, entonces si no saldrían de la cama.

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El primer día de celo de Jimin no fue tan intenso, pero el segundo día todo fue diferente.

Desde que el sol salió ya estaba pegado a Jungkook buscando de su atención. Jungkook lo miro como si fuera la cosita más linda del planeta (y sí que lo es) esos ojitos lo miraban como un cachorrito mientras le hacia mimos.

Pero de un momento a otro cambio, ya no busco esa clase de atención, sino otra atención. Y Jungkook no pudo resistirse a fundirse en el cuerpo de su omega; fuerte y placentero.

Y así habían pasado toda la mañana y tarde, eran momentos en los que el omega se calmaba y Jungkook lograba darle comida y agua.

Y para alimentarse el también.

Pero luego, volvían a hacerlo, y en la noche ya ni se diga.

El tercer día del celo fue igual, sus manos por todo el cuerpo de su omega y anudandolo muchas veces.

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Era el último día de celo de Jimin, habían sido cuatro días muy cansados y de mucho movimiento. Jungkook sentía que no podia, su celo había durado tres días, lo que normalmente le duraba, pero su omega seguía aún en celo, y estaba entre cuatro a cinco días de durarle.

Estaban en el cuarto día y Jungkook esperaba que fuera el último. Claro que le gustaba complacer a su omega y hacerle el amor. Pero aveces Jimin tenía hasta cuatro rondas seguidas, el omega parecía no cansarse nunca, porque en la tercera ronda se le montaba encima y hacia él el trabajo.

- ¡Oh si, alfa!~ Mas~...

El omega gimió alto. Jungkook daba estocadas fuertes. La cintura de Jimin era apricionada por las grandes manos de Jungkook.

Jungkook había ido a la cocina para preparale fruta picada, solo se había puesto unos pantalones y con su torso desnudo salió.

Había picado manzana, cuando partía por mitad unas fresas sintió las manos de su omega en su pecho. Este le abrazaba restregando su naricita en su espalda desnuda.

La erección del omega pegaba en su espalda baja, dejo lejos el cuchillo por precaución, realmente ya sabía lo que venía.

Iba a tratar de llegar a un acuerdo con su omega para que primero comiera la fruta, pero empezó a dejar besos húmedos en toda su espalda. Y mientras más avanzaba Jimin se restregaba contra él.

El deseo de tomar a su omega lo consumió, y Jimin terminó con su torso pegado a la encimera y con su alfa arremetiendo fuertemente contra su dilatada entrada.

- Ahhh diablos... Eres un omega descarado ángel. - dijo Jungkook, salió de él y volvió a entrar de una. Jimin arqueo su espalda y si no fuera por Jungkook qué lo sostenía, ya hubiese caído de rodillas.

- Sigue así... No te detengas alfa~...

Jungkook se deleito en la placentera imagen de como su miembro desaparecía entre el trasero de Jimin. Llevo una de sus manos al pene de su omega y empezó a masturbarlo.

Jimin gimió más. Esta vez pidiendo el nudo de su alfa.

- Ahh si~... Dame tu nudo alfa... Quiero tu nudo...

- Eres un buen omega cariño. Me recibes tan bien que mereces un premio. - Hablo Jungkook cerca de su oído.

Jimin tenía su boquita abierta con sus labios rojos de tanto morderlos.

- Alfa~... - Le gustaba la voz gruesa de Jungkook. Su cuerpo se erizo ante las palabras de su alfa.
-

- ¿Lo quieres mi ángel? ¿Serás buen omega y tomaras todo mi nudo?.

Jimin asintió repetidas veces.

- Lo quiero alfa. Dámelo por favor....

Jungkook llego a su orgasmo al mismo tiempo que Jimin, su mano se mancho de la esencia de su omega. Jimin gimió alto cuando el nudo empezó a formarse.

Jungkook se sento en una silla con su omega antes que el nudo los dejara completamente unidos.

Jungkook empezó a dejar suaves besos a Jimin en sus hombros, luego subiendo para besar sus labios.

- Eres un buen omega, precioso. Te amo. -Jimin tenía sus ojos cerrados, dejándose mimar por su alfa.

- Te amo. - Respondió Jimin.

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